—Si bueno eso fue por qué intenté hacer un paso muy difícil en el último momento. —Justifica Luna.

—Como siempre. Me encanta que siempre quieres superarte. Esto es parte de tu encanto y lo que me atrajo de ti.

—Tú también eres muy talentoso patinando. Sabes hacer pasos increíbles y cada vez estoy asombrada por lo que sabes hacer. Y siempre lo haces perfecto. —Le sonríe la mexicana.

—Somos los mejores. Tú y yo somos los nuevos reyes de la pista. —Dice Matteo mirándola.

—Sí, tú eres mi rey.

La castaña se acurruca en sus brazos y el italiano deja un beso en su frente antes de poner el capítulo siguiente.

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Mónica pidió a Luna que no vaya a la pista.

Luna : Mamá por favor, me tienes que dejar ir a entrenar. No me puedes decir que no.

Mónica : Luna, no te estoy diciendo que no vas a ir a la competencia. Te estoy diciendo que hoy no vas a ir a entrenar.

Luna : Pero ¿por qué no? Necesito ir a entrenar porque si no, no me acuerdo de los pasos. Tengo que practicarlos por favor.

Mónica : Bueno, mañana si estás bien puedes ir a entrenar. Hoy no, hoy te quedas.

Luna : No pero mañana ya es muy tarde. Por favor, si no nos puede ir muy mal.

Mónica : No, te va a ir muy mal si no descansas Luna.

Luna : Pero mira, ya estoy bien con el hielo mira, ya me mejoré mira te voy a enseñar.

Mónica : No Luna, no, no, no, no. Escúchame, mírame. Tu cuerpo te está dando señales ¿si? Te está diciendo hasta donde son tus límites. Por favor, respétalos y respétame a mí que soy tu mamá.

—Hazle caso a tu mamá chica delivery.

Miguel : Mira mi amor, puede ser que tu mamá ahora tiene razón. Bueno, en muchos momentos pero ya mañana será otro día. Ahora a descansar.

Luna : No, es que yo no necesito descansar, necesito practicar. Estoy intentando una técnica que consiste mantener el equilibrio en una cuerda. Y la verdad es que nos está costando mucho trabajo a Simón y a mí. Pero, ay por favor, me tienen que dejar ir.

Mónica : Luna... Ay me recuerdas (mira a Miguel) a alguien que estoy viendo justo en este momento. (Luna se ríe)

Miguel : Ah, ahora resulta que el terco soy yo ¿no? Bueno, no sé. Yo conozco a una persona que cuando se le mete una idea en la cabeza, no hay quien se lo saque. ¿A quién se pareciera? (mira a Mónica)

Mónica : No sé, no sé porque aquí hay más de uno que cuando se le mete algo en la cabeza, va y la hace.

—Igual, te pareces a ellos en tu personalidad. Creciste con Mónica y Miguel y ellos te dieron tu fuerza de voluntad, tu terquedad, tu positivismo porque ellos te lo enseñaron. Y no necesitas tener ningún vínculo de sangre con ellos para que tengas estos valores. —Le dice el castaño acariciando su pelo sin dejar de abrazarla.

Miguel : ¿Ah sí?

Mónica : Si, bueno. Luna, yo creo que aunque no estás cansada estaría bueno que tomes una siesta. Descansa. (empieza a irse)

—Si, tienes mucha razón mi amor. Gracias. Te amo. —Lo besa.

Luna : No seas enojona mamá.

Mónica : No, no, no. (sale del cuarto)

Miguel : (se ríe con Luna) Descansa mi amor. (le da un beso) ¿Descansas eh?

Luna : Si.

Miguel sale del cuarto también.

***

Ámbar y Matteo se sueltan del beso mientras Sebastián los mira.

—¡No! No quería ver el beso. —Exclama ella.

—Perdón, lo había olvidado. —Ríe.

Ámbar : Sabía que ibas a venir.

Matteo : ¿Ah sí? Me parece que llegué en el momento justo.

Sebastián : No, no, no, no. ¿Que haces? Acaso no te das cuenta que estaba con ella.

Matteo : Me parece que acá el que sobra no soy yo.

Sebastián : No vas a decir algo ¿verdad? (Ámbar abraza a Matteo) Necesito que me expliques que está pasando. ¿Para eso me llamaste? Con Sebastián Villalobos no se juega.

—La verdad, jugar con él de esa manera fue muy feo. —Comenta Luna.

—Si, me doy cuenta ahora que no me hubiera gustado estar en su lugar.

Ámbar : Perdóname si te hice alguna atrevía, yo justamente te estaba por decir que tengo un solo amor y ése es Matteo. Además nadie te obligó a venir.

Matteo : Yo te avisé Sebastián pero no me hiciste caso. Lastima campeón, game over.

Sebastián : Okey, okey. Y en cuanto a ti, refresca la página y elimínala. Sebastián Villalobos se fue. Olvídate de mí, bórrame de tu tablet, de tus externos. Y en cuanto a ustedes dos, olvídense de mi existencia. Si se los dice Sebastián Villalobos, agrégalo a tus favoritos. (empieza a irse) No sé por qué siempre me enamoró de rubias como tú.

—Y por eso después se fijó en morenas como tú. —Gruñe él y su prometida ríe.

Matteo : Ciao Sebastián. (Sebastián se va.) A mí no me vas a manejar como este aparato digital.

Ámbar : Obvio. Somos mucho mejor que él.

Matteo : Lo sé. Por eso te aclaro que no me gustó nada tu jueguito.

Ámbar : ¿Ah no? Entonces ¿por qué viniste? Ya sé, porque vos y yo estamos destinados a estar juntos. Somos la mejor pareja en la vida y en la pista.

—Por eso ahora es mi prometido. —replica la mexicana.

Matteo : Y cuando ganemos la competencia, nadie va a tener dudas sobre eso. Somos los reyes de la pista.

Matteo abraza a Ámbar.

***

Luna entra en una pista que no es la del Jam&Roller. Empieza a patinar sobre ella haciendo pasos increíbles sobre la música de Alas.

—¿Qué? ¿Soñaste con la pista dónde fuimos? —Dice Matteo con asombro. —¿Eres una bruja o qué?

—Creo que puedo ver el futuro a través de mis sueños.

Cuando se detiene, ve a un chico dando giros patinando detrás de ella.

Luna se acerca a él para verlo y se trata de Matteo.

—¡Soy yo! Soñaste conmigo.

Él se acerca a ella, toma su mano y se inclina hacia ella.

—¡Lo soñaste! ¡Soñaste que te besabas! —Señala el italiano. —Sabías que iba a pasar.

—No lo sabía, solo fue un sueño que ni siquiera entendí. —Suspira la castaña.

Luna está dormida en su cuarto, fue un sueño.

Su mamá la despierta con un desayuno y le da permiso para ir a la competencia. Simón toca a la puerta.

Simón : ¿Puedo pasar? Vengo a ver cómo está mi paciente en recuperación.

—Sueñas conmigo y aparece Simón al despertar. Eso sí es raro.

Mónica : Muy bien, mírala.

Luna : ¡Hola! Ya estoy mucho mejor.

Simón : ¿Si?

Luna : Si.

Simón : Te ves mucho mejor, te recuperaste un poco. ¿Vamos a participar o no?

Luna : Claro que vamos a participar. Mira, de hecho podemos practicar ahorita aquí. (se está por levantar)

—Eres una pila inagotable. —Dice el castaño pero se ríe cuanto la ve bostezar. —Bueno no ahorita. —Se ríe con ella.

Mónica : No, no, no, no, no. Señorita, primero a desayunar para tener energía.

Luna : Bueno, está bien.

Mónica : Simón, ¿quieres algo?

Simón : Gracias Mónica, acabó de desayunar. Gracias.

Mónica : ¿Seguro?

Simón : Si, si, si, seguro. Gracias.

Mónica : Sabes qué hice un pastel de chocolate anoche.

—Tocaste la debilidad de Simón querida suegra.

Simón : Bueno, bueno. Si insistes mucho, voy a tener que aceptar. Gracias Mónica.

Mónica : De nada. (sale)

Simón : Te ves mucho mejor.

Luna : Si, la verdad es que me hizo muy bien descansar. Ahora lo que quiero es seguir practicando. La verdad es que estoy súper preparada.

Simón : Luna, siempre que te propones algo lo cumples. Así que esta vez no va a ser la excepción.

Luna : ¿Tú crees? ¿Tú crees que pasemos a la siguiente ronda? Es que nada más de pensarlo, me pongo de nervios.

Simón : Si, yo creo que sí. Yo creo que tus sueños se van a hacer realidad.

—Interesante. —Sonríe él. —Y además es verdad.

Luna : ¿Mis sueños?

Simón : ¿Te acuerdas en Cancún? Soñaste que patinabas en una pista. ¿Te acuerdas no? Bueno esta pista es el Jam&Roller. Yo pensé que tenías mucha imaginación pero no, es porque tus sueños se hacen realidad Luna. (Luna se pone seria) ¿Qué estás pensando? Es que te pusiste muy seria. (Luna piensa en el sueño que tuvo) Tierra llamando a Luna. Hola hola. ¿A dónde te fuiste? ¿Te molestó?

—Antes de que preguntes, estaba intentando recordar mi sueño porque estaba confundida. —Se adelanta en explicar Luna.

Luna : No, no, no, no. Perdón perdón es que estaba en el sueño que tuve sobre la competencia.

Simón : (se ríe) Luna, no piensas en otra cosa que en esta competencia. Neta, todo el día competencia, competencia. Pero te digo una cosa, ¿ganábamos o no?

Luna : La verdad es que no me acuerdo. Mi mamá llegó y me despertó.

—No pero ganó un beso. —Agrega él.

Simón : ¡No! Es horrible eso.

Luna : Pero ¿qué crees? Hay algo súper importante que te quiero decir.

Simón : Dime.

Luna : Pero es que es un secreto. (le pide a Simón que se acerque) Tienes algo en la nariz. (le pone un poco de mermelada en la nariz)

—Amo hacer esa broma.

—Si lo sé muy bien amor. —Ríe Matteo.

Simón : ¡No!

Luna : (se ríe y le lanza una toalla) Toma.

Simón : Na, Luna.

Simón se limpia la nariz con la toalla mientras Luna se ríe.

***

Miguel está en la joyera de nuevo para tener informaciones sobre la medallita.

La mexicana bosteza una vez más y se acurruca mejor en los brazos de su prometido.

El joyero : (con la lupa) Mira acá, ¿ve todo el detalle de las puntas?

Miguel : Si pero ¿qué?

El joyero : Esto es una pieza única creada por un joyero argentino muy importante que trabajaba por encargo.

Miguel : ¿Un joyero argentino? (toma la medallita) Pero eso no puede ser, mi hija nació en México. ¿No será que fue falsificado?

El joyero : No, por lo que pude averiguar está hecha por él.

Miguel : Qué raro. Siempre pensé que los padres biológicos de mi hija eran mexicanos. Con todo esto de que me está diciendo, honestamente ya no sé qué pensar.

—Se ve que esta investigación es complicada. —Comenta el italiano acariciando el brazo de la castaña.

***

Luna y Simón ensayan su coreografía en la pista. Cuando terminan, celebran lo que hicieron. Patinan hacia la estrada.

Simón : Luna, estamos yendo muy bien. Porque aparte me estás tomando bien de la mano y eso nos ayuda ¿viste?

Luna : Si.

Simón : Yo creo que estemos logrando lo efectivo que es lo más importante.

Luna : La verdad es que estoy súper emocionada de que ya esta cosa nos salió de verdad.

Simón : (toman agua) Si.

Luna : Ahora tenemos que practicar mucho la coreografía y completa.

—Pila inagotable. —Ríe el castaño pero ve a Luna con su cara totalmente pegada a su pecho. —Mi amor, ¿estás bien?

—Si, es que estoy un poco cansada. —Dice y él la mira extrañado.

Simón : ¿Es neta?

Luna : Si, es neta.

Simón : No Luna, te tienes que tranquilizar. En serio porque ya lo ensayamos del derecho al revés y es más. Es más, tú vas a hacer la competencia con los ojos cerrados y te va a salir bien. (actúa) ¡Luna! ¿Dónde estás?

Luna : No, no, no. Estás bromeando ¿no? Tú sabes que estoy despistada y seguro mira aparezco en los lockers bailando y patinando.

Simón : Pero es que yo estoy cansado Luna. Neta, neta. (se sienta)

Luna : Ay Simón, de verdad que no podemos descansar. Tenemos que practicar muchísimo la coreografía, es lo que importa. (toma su mano) Ándale, ven.

—Pobre Simón.

Simón : Mira Luna, escúchame una cosa por favor. Siéntate para explicarte. (la hace sentarse) No quiero que le da hecho polvo antes de la competencia, por fa. (Luna se queda mirando la pista con una cara seria) Ah, ¿qué es eso?

Luna : ¿Qué es? ¿Eso de qué o qué?

Simón : Tu sueño. Te conozco perfecto y hay algo que no me estás diciendo. Es más, es más. Te puedo leer mucho más que un libro.

Luna : Está bien Simón, me conoces mejor que nadie. Es que tengo mucho miedo de que me caiga como la última vez.

Simón : Uy Luna por favor Luna. Es de lo único que no te tienes que preocupar. Te lo juro. Lo estás haciendo súper bien, súper bien.

—Más que bien, vas a ganar.

Luna : ¿Tú crees?

Simón : (llama la gente) ¡Chavos! Perdón, ¿qué tal está patinando Luna?

Luna : (un poco avergonzada) Simón...

Simón : Perfecto ¿viste? No, es que es en serio. Lo estás haciendo hermoso Luna te lo juro. Vas súper bien, no eres la misma Luna que a la primera competencia.

Luna : Es que sabes, cuando patino y bailo siento que vuelvo a nacer. Como que el piso desaparece y a mis patines les salen como unas alas. (se ríen)

—¿Y de allí nació Alas no? —Pregunta Matteo pero no recibe respuesta. Baja la cabeza y ve a Luna un poco dormida. —Mi amor.

—¿Qué? —Dice abriendo sus ojos.

Simón : Okey.

Luna : Bueno ¡ya! Vamos a practicar porque tenemos que practicar y practicar la coreografía completa. Solo una vez lo prometo.

—Te dormiste un poco.

—Perdón, es que no me di cuenta.

Simón : Una y ya, y ya.

Se levantan y entran a la pista para practicar.

***

Matteo y Ámbar están en la pista y miran a Perla y Tomas entrenarse.

Matteo : Tienen muy buena técnica. No va a ser fácil ganarles.

Ámbar : Por eso mismo quiero agregarle un nuevo elemento a nuestra rutina.

Matteo : ¿Ahora? ¿Un nuevo elemento? No, es imposible. No tenemos tiempo para ensayar.

Ámbar : Esa palabra no existe para nosotros Matteo. Somos los mejores de la pista. No debes tener una duda de que nos va a salir impecable.

Matteo : A ver, ¿a dónde te gustaría agregarle este nuevo elemento en la coreografía?

Ámbar : Es así. Después de los tres giros que hacemos, nos separamos. Cuando nos volvemos a juntar que claramente lo vamos a hacer coordinados. Ahí, en ese momento, me levantas. ¿Qué te parece?

Matteo : No, no. Pienso que es un riesgo demasiado grande.

—Pensé que dijeras que sí. —Dice ella levantando su cabeza para verlo.

—No, ni ensayamos.

Ámbar : Es la idea Matteo, arriesgarnos. En la competencia pasada nos sacaron un nueve en riesgos, en ésta vamos por un diez.

Matteo : Okey, me encanta tu actitud, sabes que yo siempre voto para el primer lugar pero modificar la coreografía en el último minuto, no tiene sentido.

Ámbar : ¿Qué te pasa mi amor? ¿Tienes miedo?

Matteo : ¿Yo?

Ámbar : Me extraña de vos.

Matteo : No tengo miedo. Ya te dije, no tenemos tiempo para ensayar.

Ámbar : No necesitamos ensayar. La última vez le demostramos a todos que somos los mejores y esta vez no va a ser diferente. ¿Por qué dudas tanto? Te desconozco.

Támara : ¡Chicos! Es la hora. Vayan a cambiarse que tenemos que preparar la pista. (se va)

Matteo : ¿Escuchaste a Támara? Vamos con lo que tenemos preparado.

Ámbar : ¿Quieres ganar o no?

Matteo y Ámbar se miran con desafío.

—Contigo puedo decir que tengo nervios sin tener miedo a que me juzguen. Antes sólo lo ocultaba. —Se sincera Matteo.

—Lo sé. Eres un ser sensible mi amor. —Le sonríe ella.

***

Matteo y Ámbar se cambiaron para la competencia y caminan en la cafetería hablando.

Ámbar : Tranquilízate un poco mi amor.

Matteo : No practícamos lo suficiente el truco. No deberíamos agregarlo.

Ámbar : Un ganador no duda. Deberías saberlo.

Jazmin : (llega para grabarlo) ¡Ay Ámbar allí estás! Con ustedes, el rey y la reina del Jam&Roller en exclusiva para el Fab&Chic.

Ámbar : Un beso enorme para todos nuestros fans y no se olviden de votarnos.

Jazmin : La gente quiere saber chicos. ¿Cómo se preparan para la semi final? Por favor, cuéntennos.

—Se preparan discutiendo porque son la mejor pareja en la vida real y en la pista. —Dice Luna riendo.

—Mi celosita.

Ámbar : Nos vemos en la final.

***

En los lockers están Matteo, Ámbar, Perla, Tomás, Muna y Simón. Tamara llega para dar el orden de salida.

Támara : Perla y Tomás, ¿están listos? Siguen ustedes. Después van Luna y Simón y por último Ámbar y Matteo ¿si? Por favor, estén todos listos. Y a disfrutarlo. ¡Vamos!

Luna : ¡Si, gracias Támara!

Perla y Tomás se van.

Ámbar : Me parece bien que vayan primero los que están nerviosos. Los mejores siempre cierran. (se acerca a Luna) Tranquila Lunita, no dejes que los nervios te perjudiquen. Cuando uno está nervioso, es mucho más fácil equivocarse. Ya viste lo que te pasó en la competencia pasada.

—En ese momento realmente me ha cansado. —Suspira la mexicana rodando sus ojos.

Matteo y Simón escuchan su conversación.

Luna : No te preocupes, estoy bien.

Ámbar : Que bueno. Yo en tu lugar estaría muy preocupada. Tienes motivos. Digo, no es fácil competir con tal profesionales. (se señala a ella misma)

Luna : Si... Pero sabes que, prefiero no pensar en la competencia y solo en patinar. De verdad que éste es el chiste ¿no? Disfrutarlo.

Ámbar : Si, mejor piensa en patinar. No quiero que te frustres. Además no puedes pedir a tus pies más de lo que puedan dar. Y te los digo yo que soy una ganadora y esta vez no va a ser la excepción. La competencia internacional es mía. (la desafía)

—Eso fue una advertencia. —Dice el italiano recordando la actividad de Ámbar antes.

Luna : Mira Ámbar, la neta es que yo no sé si voy a ganar pero le voy a echar muchísimas ganas. No sabes lo importante que es para mí esta competencia. Que sé que puedo superar mis límites y he entrenado muchísimo para llegar hasta aquí.

Simón la abraza un poco.

Ámbar : Qué bueno que lo tengas tan claro. Yo solamente me preocupo por vos. No quiero que te choques contra la pared o mucho peor contra el piso como de hecho ya te pasó. La verdad Luna es que a mí me dolió mucho trastrabillar.

Luna : (toma sus manos) No te preocupes por mí. Yo voy a estar bien. Entrené mucho para esto.

Ámbar : A veces no alcanza con entrenar.

Luna : Si sabes que Ámbar, tienes mucha razón. Pero te voy a decir una cosa, no solo patinas con los pies, sino también con el corazón.

Simón la abraza otra vez.

—Yo también te quería abrazar. —Se queja el castaño antes de abrazar a su prometida. La mexicana ríe y apoya otra vez su cabeza en su pecho sintiéndose otra vez muy cansada de repente.

Ámbar : Claro. Bueno, suerte Lunita. Te veo en la pista.

Luna : Si. (a Matteo) Por cierto, también suerte para ti, para los dos. Sé lo importante que es para ustedes la competencia y les va a ir increíble. Son muy talentosos.

Ámbar : (le impide irse) Gracias. Tenés razón. Ojalá algún día ustedes también puedan llegar a patinar tan bien.

Luna : Ojalá.

Luna y Simón se van.

—Verlos ganar fue un golpe muy bajo para ella.

***

Matteo y Ámbar ven a Perla y Tomás bailar en la pantalla de los lockers.

Matteo : Lo están haciendo demasiado bien.

Ámbar : Nosotros lo vamos a hacer mejor. El truco de alto que agregamos va a ser el broche de oro. No te preocupes, no son competencia.

Simón y Luna los ven también patinar por la pantalla.

Luna : No, no, no Simón es que patinan súper bien. De verdad, espero no caerme.

Simón : Luna tranquila que no te vas a caer, no te vas a caer para nada. Y si te caes, te levantas como siempre lo has hecho.

Luna : Si. Si sabes que, tienes razón. Solo puedo pensar en la pista, en la competencia, nosotros. Si no puedo pensar en los demás competidores.

Simón : Luna, Luna, Luna, Luna. Tranquila, no pasa nada. Vamos a disfrutarlo.

Luna : Si, vamos a disfrutarlo y no puedo tener nervios. No nervios, no nervios. Vamos a darlo todo en esta pista ¿okey? Chócalas. (se chocan las manos)

—Amo como pasas de ser nerviosa a ser muy emocionada. —Dice y baja una vez más la cabeza para verla pero ve que aún está cansada. —Mi amor te estás perdiendo de todo.

—Quiero dormir, no aguanto. Estoy muy cansada.

—Pero si no hicimos nada.

Simón : Me gusta tu actitud.

Luna y Simón se van.

Ámbar : Pobres, son tan ilusos. Me da una lástima que piensan que pueden ganar.

—Golpe muy muy bajo. —repite él acordándose cómo se había puesto Ámbar después de aquella competencia mientras acaricia el pelo de su prometida quien empieza a dormirse en sus brazos.

***

En la cocina de la mansión, Mónica pregunta a Miguel sobre la medallita.

Mónica : ¿Y qué te dijeron a la joyería?

Miguel : Ah. (saca la medallita de sol) Efectivamente, para ser que la firma que tiene la medallita es de un joyero argentino. Mira.

Mónica : (toma la medallita) ¿Y si se la regaló alguien de argentina? Digo si lleva una joya con una firma echa en argentina no quiere decir que ella nació aquí. ¿Cómo va a ser posible?

Miguel : Pues no, no, no. Pero a mí me parece demasiada coincidencia. Esa medallita llegó a manos de Amanda por Tino y Cato. Cato la recibió del tal Roberto que era argentino. Lo que quiero decir es que si esta medallita coincide con la de Luna, entonces fueron echas en el mismo lugar. ¿Se te ocurre otra cosa?

Matteo toma la medallita de su prometida para mirarla y mira cada faceta de ella.

—¿Qué haces amor? —Pregunta ella tallándose un poco los ojos después de sentir algo mover sobre su cuello.

—Nada, solo me dio curiosidad ver estas puntas sobre el sol.

Mónica : No, ¿qué quieres decir?

Miguel : Que probablemente, Luna recibió esta medallita en argentina. Quizás ella nació aquí.

Mónica : Pero ¿qué relación podría tener Luna con el hombre de la medallita?

Miguel : Bueno, no sé se me ocurre pensar que el tal Roberto sea el padre biológico de Luna.

—Tú también pensaste eso, ¿verdad?—Pregunta Matteo pero otra vez no recibe respuesta. Luna está bien acurrucada y dormida en los brazos de Matteo.

***

En la pista, Perla y Tomas acaban de recibir su puntaje y salen de la pista.

Támara : ¡Y llegó el momento de presentar a la pareja de Luna y Simón!

Luna y Simón entran en la pista y se ponen al centro. Ella toca su medallita y él la mira. Se abrazan felices y se toman de la mano antes de empezar.

—Bueno, el capítulo acabó mi amor. —Dice el italiano intentando despertar a la mexicana. — Mi amor. —La sacude un poco.

—Amor, ¿puedo dormir un ratito antes de poner el próximo capítulo? Es que de verdad estoy cansada pero no quiero perderme los capítulos. —Pregunta la castaña con una voz muy cansada.

—Claro mi amor. ¿Quieres ir a la cama?

—No no, aquí en tus brazos estoy perfecta. —Le sonríe. —Pero, puedes cantarme un poco para dormirme.

El castaño asiente con mucho gusto y besa su mano. Su prometida cierra sus ojos mientras él empieza a cantar Princesa acariciando su pelo. Poco a poco Luna se queda dormida.

—No es normal verte tan cansada de repente. Espero estás bien mi vida. —Dice Matteo por sí mismo sin dejar de mimarla.

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Pero qué le pasa a Luna ? 🤫
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