Luna acaricia la mejilla de Matteo mientras él la mira sonriendo.

—Eres hermosa. ¿Ya te lo había dicho?

—Siempre me lo dices. Y tú eres el más guapo. Me encanta tu sonrisa, tus ojos y tus hoyuelos. —Sonríe la mexicana.

—Pues son todo tuyos mi amor.

—Te amo. —Dice la castaña. —Volvemos a la película pero vamos a verla abrazaditos así.

—Eso es una muy buena idea. —Susurra el italiano apretando más a Luna contra él y poniendo el capítulo.

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En la cafetería del Jam&Roller, Simón está trabajando cuando Luna llega.

Luna : ¿Cómo está la mejor pareja de patinaje?

Simón : Bien, bien, bien. ¿Tú qué onda?

Luna : ¿Tienes mucho trabajo o puedes ir a entrenar?

Simón : ¿Entrenar?

—Estaba perdido el Simón. —Ríe el castaño.

Luna : Si.

Simón : Pues... (Luna sonríe) ¿Qué tienes? ¿Por qué con esa actitud?

Luna : ¡Eso! Actitud tenemos que tener en cuanto empecemos a entrenar. Tenemos que soñar con la competencia. Pero tenemos que estar bien despiertos así que vamos a entrenar.

Simón : Luna... Luna, tú sabes que yo te quiero mucho pero ya supéralo porque estamos fuera de la competencia.

Luna : (se ríe) Ya no. Seguimos en la competencia.

Simón : (asombrado) ¿No? ¿Lo dices en serio?

Luna : Si, te estoy hablando en serio. Tenemos que dejarlo todo en la pista.

Simón : (sonríe) Cuenta conmigo. ¡Me encanta!

—Duraron muy poco sin estar en la competencia. —Comenta el chico fresa.

—Aún quedan muchos problemas.

Se abrazan felices.

***

En la cafetería del Jam&Roller, Delfina, Ámbar y Matteo hablan tomando licuados.

Ámbar : No puedo creer que por tu culpa haya clasificado Luna.

Delfina : ¿Eso es lo único que te importa?

Ámbar : No, también me importa rodearme de gente ganadora.

Delfina : Bueno, fue un error. Estaba muy enojada, no sabía que podía pasar algo así.

Matteo : (mira a Ámbar) ¿Por qué te molesta tanto que Luna haya clasificado?

—Mi amor, a ti te encantó la idea de que regresara a la competencia, ¿verdad? —Pregunta la chica delivery divertida.

—Me descubriste. —Ríe él abrazándola.

Ámbar : No me molesta mi amor. Me parece una injusticia nada más. Delfi y Gastón son mejores patinadores, está claro eso. Lo sabe todo el Roller. Ellos son los que se merecen seguir en la competencia.

Delfina : Es lo que digo yo. Es una injusticia, más que una injusticia es una vergüenza.

Ámbar : Totalmente. Luna no sabe hacer ni un giro. Baja el nivel general de la competencia. Para nosotros no es un estímulo competir contra ellos.

Matteo : Falta bastante para la próxima etapa de la competencia. Quizás nos sorprendan.

—Y si. ¡Les gané! —Menciona ella orgullosamente.

—La chica delivery me ganó. —Se lamenta haciendo un puchero.

—Ay bebé, ¿quieres un beso de consuelo? —Pregunta y Matteo asiente feliz. Lo besa con ternura.

Ámbar : ¿Sorprendernos? ¿Con qué van a sorprender? Si la vez pasada se cayó, la próxima ¿que hace? ¿Caída doble? No entiendo lo que decís. (Delfina y ella ríen pero Matteo la mira serio) Era un chiste Matteo. Me parece que alguien no se despertó de muy buen humor hoy.

Matteo : Puede ser.

Ámbar : Hablando en serio chicos. A ellos dos les falta mucho para alcanzarnos.

Matteo : Eso me parece exagerado.

Ámbar : Tienes razón, nunca nos van a alcanzar.

Matteo : (suspira) Nos vemos después.

—Como me cansaban sus celos. —Suspira el italiano. —Menos mal cambió eso ahora.

Matteo se va.

***

En el parque, Luna y Simón entrenan con diversión y risas. Se abrazan al final. Simón termina acostado en el suelo y Luna lo levanta.

Luna : Ay ahora sí me cansé. (se sientan) Bueno, ¿estás listo para regresar a entrenar? (Simón ríe) Simón, ¿de qué te ríes? Tenemos que mejorar muchísimo. Mira, tenemos que mejorar la coreografía, deslizamientos para adelante y para atrás, en realidad todo.

—Dijiste que estabas cansada pero quieres regresar a entrenar. Nadie te entiende chica delivery. —Comenta el italiano.

—Para mí estar cansada no es un motivo para no entrenar.

—Si, me di cuenta. —Se ríe.

Simón : ¿Neta nos falta todo?

Luna : Por lo menos hasta que nos salga perfecto los pasos. Ya después descansamos.

Simón : Perfecto. Es que mira Luna, cuando se te mete una idea en la cabeza no hay quien se la quite. Como ¿te acuerdas una vez que fuimos en una fiesta en Cancún, que perdiste la dirección? Por favor. (se ríen)

Luna : Claro, ya me acordé pero ya sabes que estoy muy despistada y... se me olvidó cuál era.

—Solo falta que olvides tu nombre. —Bromea el chico fresa antes de besar a Luna quien se ha cruzado de los brazos por su comentario. La mexicana sonríe feliz por el beso.

Simón : Neta te pasas, pero me gusta que nunca te rindes.

Luna : Si pero mira esto es mucho mejor que una fiesta, es mi sueño. Nada ni nadie nos puede detener. De verdad que tenemos que volar en esa pista. Mira sé que suena un poco difícil pero de verdad es súper fácil. Solo, solo confía en mí.

Simón : Confío en ti Luna por eso es que estoy aquí. Así que vamos a entrenar porque nos tiene que salir perfecto.

Luna : Perfecto. ¡Vamos!

***

En su cuarto, Luna está ensayando. Su celular suena y contesta.

—Pero ¡nunca paras! Por eso nos ganaste, ensayaste día y noche.

—¿Qué crees? ¿Que por arte de magia había mejorado tan repentinamente ? —Pregunta la castaña divertida.

—Eres la mejor definitivamente.

—Tú también eres el mejor patinando.

Luna : Amigo, a ver dime qué te parece. (se sienta en su cama y lee en su computadora) Estoy cerca de alcanzar mi cielo, desafiando la gravedad. Nada puede detener este sueño que es tan real. ¿Qué te pareció? Se me ocurrió ahorita que estaba practicando un paso.

—Es Alas.

Simón : Me gusta. Me gusta, sigue escribiendo. Luego pensamos una melodía ¿va?

Luna : ¿Qué? ¿Ya estás pensando hacer la canción o cómo? (se ríe)

Simón : ¿Por qué no? Yo te ayudo.

Luna : Está bien. Mira, ahorita te mando la letra y te mando el vídeo con todos los pasos. Yo sé que se puede mejorar. Ahorita te los paso ¿si? No, sabes que, mejor no te los paso. Mejor voy para allá y te los enseño.

Simón : A ver espérate Luna tranquila. Lo vemos mañana, ahorita mejor descansa.

—No conoce esta palabra Simón. No sirve de nada.

Luna : ¿Qué? ¿Descansar? (se levanta) No, no, no, no. Simón, yo no puedo descansar. Además te prometo que no voy a tardar nada. No creo que me encuentra nadie a esta hora.

Simón : No, no, no, no. No nos arriesguemos porque es peligroso. Imagínate que te vieran haciendo el menor ruido. Mira, a parte ya es tarde, hazme caso Luna. Tienes que reponer energías para que mañana puedas continuar con más fuerzas.

Luna : Está bien. Tal vez tienes razón. Pero mañana saliendo del Blake, me voy corriendo hacia el Jam&Roller y te paso todos los pasos ¿si? No, sabes que no puedo perder tiempo mejor te mando el vídeo y me dices qué te parecen.

Simón : (se ríe) Es que Luna no paras un segundo, claro. Mándame todo lo que quieras.

Luna : (Ámbar la ve desde el pasillo) Ahorita que regresamos a la competencia. Nada ni nadie nos puede detener, nada. Bye (cuelga)

Ámbar sigue mirándola desde el pasillo con una idea en mente.

—Siento que Ámbar es la que va a describir que Simón vive en la mansión. —Dice él.

***

En los pasillos del Blake, Matteo se encuentra con Luna.

Matteo : Por fin te encuentro chica delivery. Te busqué por todo el Blake.

—Ay una escena juntos. —Exclama la castaña feliz antes de abrazarse más a Matteo.

Luna : Perdón estaba pensando en unos pasos y no te vi.

Matteo : Tranquila sé que estás acostumbrada a tirar agua sobre la gente (ella suspira) pero no te voy a dar este gusto. Solo quería felicitarte (ella sonríe) porque me enteré que vamos a seguir siendo rivales en la pista.

—Estabas re contento. —Sonríe la chica delivery.

Luna : Si pero deberías tener mucho miedo porque nosotros vamos muy preparados. (Matteo finge tener miedo) No sé cómo nos vaya a ir pero yo que tú no me confiaría tanto.

Matteo : (finge) Uy si tengo mucho miedo de verdad.

—Y al final sí tuviste miedo.

—Yo no tengo miedo de nada. —Mantiene su orgullo el italiano.

Luna : (se ríe) Deberías tener miedo. Te vas a impresionar cuando nos ves en la pista.

Matteo : No veo la hora de que llegue este momento. Porque de verdad me encanta verte patinar, sobre todo por tu estilo (lo mira divertida) para caer al piso.

Luna : ¿ah si? ¿Tú nunca te has caído?

Matteo : Nunca. Y menos en una competencia. Lo tuyo fue increíble, un aterrizaje perfecto. (Luna suspira) No me alcanzan las palabras para describir este momento.

—Qué mentiroso. Seguro te caiste cuando aprendiste a patinar. —Replica ella.

—Eso nunca lo sabrás.

Luna : Qué raro porque a ti te encanta hablar. Pero yo prefiero que mis patines hablen por mí.

Matteo : Mis patines no hacen solo eso. Si quieres te puedo dar una pequeña demostración o unas clases particulares en conversación sobre ruedas.

Luna : Claro mira yo te llamo por si quiero alguna clase para hacerme pasar por la chica más perfecta del mundo.

Matteo : No, no, eso pondría celoso a tu amiguito Simón. ¿Es tu amigo o tu novio? Todavía no entiendo.

—Que celoso eres.

Luna : (molesta) Bueno, Bueno ¡ya¡ ¿ya acabaste? Si no no puedo terminar mi agua. (abre la botella)

Matteo : Seguí tomando tu agua, no quiero que mojes a alguien más.

Luna : Qué chistoso. (Él se ríe) Yo nunca tiro las cosas. (Él asiente con ironía y Luna finge derramar el agua sobre él) Para que tengas un poco de miedo. Nos vemos en la pista chico fresa. (sonríe y se va)

—Y cada vez que me desafías yo caí cada vez más rendido a tus pies. —Admite el castaño y ella lo besa con amor escuchando eso.

—Te amo tanto.

Matteo sonríe viéndola irse y Gastón llega detrás de él.

Gastón : No aprendes más. Pensé que ella era un tema superado.

Matteo : No te preocupes, solo me estaba divirtiendo.

Gastón : Bueno, si terminaste con eso, tenemos cosas más importantes de que hablar. ¿Viste el nuevo anuncio de la web del Roller?

Matteo : No.

Gastón : (saca su celular) Próximo Open chicas por un lado y chicos por el otro. (le enseña)

Matteo : Eso quiere decir que vamos a tener que cantar con el amiguito de Luna.

—Eso será divertido. —Comenta Luna.

***

En el parque, Luna y Simón caminan mientras hablan.

Luna : Simón, estuve viendo en internet algunos pasos y la verdad es que están increíbles.

—No cambiaste en eso. Cuando hay una competencia o algo hablas de él durante días sin parar. —Ríe el chico fresa.

Simón : ¿Algunos? Luna, te conozco perfecto. ¿Cuántos viste?

Luna : Como cinco o seis... decenas. (se ríen) No es cierto, menos de cien sí.

Simón : Bueno ¿y crees que eso nos ayude?

Luna : Mira, tenemos que mejorar muchísimo con nuestros puntos débiles. Los separé y mira tenemos que mejorar el equilibrio, estabilidad y coordinación.

Simón : Claro, es que hay que platicar si queremos ser mejores ¿no?

Luna : Si. Estuve pensando que no solo podemos ensayar los días de semana sino también el fin de semana.

Simón : (se ríe) No Luna, ¿es neta? No, no es muchísimo.

Luna : Simón, ¿cómo que no? Mira, estaba pensando en decirle a Támara que si podemos practicar después del horario normal pero ¿tú crees que quiera? No quiero que luego se enoja. ¿Qué dices?

Simón : No, no sé, no sé.

Luna : A ver Simón, desde rato que venimos caminando te veo raro. ¿Qué tienes?

Simón : No sé.

Luna : Sabes que puedes confiar en mí para lo que quieras ¿verdad?

Simón : Si. Si yo sé que eres incondicional y neta gracias por eso.

Luna : Bueno entonces ¿qué tienes? ¿En qué piensas o qué?

Simón : En ti.

Matteo queda sorprendido por lo que Simón dice en la pantalla.

Luna : ¿En mí?

Simón : (nervioso) Si, si en ti por el Open, obvio. Como viene el Open y yo soy el encargado quería ver si tú te querías inscribir. Va a estar padrísimo.

—Se arrepintió y tú no entendiste nada. —Niega él.

—Ya sé, soy mala con las indirectas.

Luna : La verdad es que me encantaría estar en el grupo de las chicas pero creo que à Ámbar no le va a parecer mucho la idea.

Simón : Si...

Luna : Bueno, ¿seguimos? (vuelvan a caminar) Bueno y te digo, estos pasos son increíbles de verdad, me encanta. Tenemos que practicar muchísimo por cierto.

Simón : Si si me dijiste.

Ámbar sale de su escondite detrás del árbol y los sigue.

—¿No tiene vida o qué? —Bromea Matteo.

***

Luna y Simón entran en la mansión. Se miran raro los dos.

Luna : Bueno pues nos vemos mañana.

Simón : Hasta mañana. (se dan un beso)

Luna : ¿Seguro que estás bien?

Simón : Si.

—Eso fue seco.

—Si, estaba muy confundida. —Dice la mexicana.

Simón se va al depósito. Luna regresa pero Ámbar la espera cerca de la fuente.

Ámbar : ¿Qué haces Lunita? Ya estamos grandes para jugar a las escondidas ¿no te parece?

Luna : (nerviosa) Ah, no estoy jugando a nada.

Ámbar : ¿Ah no? ¿Y qué hacías cerca del depósito? ¿Se te perdió algo por casualidad? (Luna niega) Si, creo que vas a necesitar mi ayuda en esto.

—¡Que astuta! —Exclama el italiano. —Digo, que mala... —Rectifia mientras la castaña se ríe.

Luna : ¿De qué estás hablando?

Ámbar : De Simón. Sé perfectamente que está viviendo en el depósito. Lo acabo de ver. ¿O ahora me vas a decir que veo mal?

—Todo esto solo para conseguir que te bajes de la competencia. De verdad te tenía miedo. —Comenta el castaño.

—Pues no entiendo por qué, si su nivel era imposible de superar.

—Es por tu fuerza de voluntad. Quizás eras mala patinando cuando empezaste lo que es normal. Pero lo más importante en la vida es aprender y superarse cada vez más. Y tú tienes tantas ganas de aprender y de superarte que puede dar miedo. Porque sabemos que el esfuerzo nunca es en vano. —Expresa el chico fresa.

—Que sabio eres mi amor. No conocía ese lado de ti. —Ríe acariciando su mejilla.

—Pues, aún me queda muchas sorpresas para mostrarte. —Dice él con orgullo.

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Matteo el Fresa Sabio Balsano 😂
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