Tiempo actual. 

Una semana después de la lucha...

       YO

      Con Mel sentadas en una de las mesas de la cantina almorzando y tomadas de la manos ambas, festejamos dando saltitos de alegría sobre nuestros mismos lugares en las sillas.

- ¡Felicidades! – Chillo feliz al contarme las buenas nuevas.

- ¡Gracias! - Me dice emocionada.

- ¿Qué festejan? - Rodo hace su presencia, tomando asiento entre Mel y yo, con su bandeja de comida.

Lo miro sonriente.

- ¡Tu chica, acaba de ser promovida en su puesto en nuestro piso 17! - Digo orgullosa y dando un sorbo a mi super batido doble de cereza.

Jesús.

Nunca me canso de esta bebida.

- ¿No digas? ¿En serio? - Empieza su batalla como siempre y cada mediodía, contra su media res de carne vacuna que tiene en el plato cortándola con sus cubiertos. - ¿Cómo, que no me enteré? - Mira sospechoso y de lado a su novia y mejor amiga mía.

Se sonríe.

- ¿Qué tipo de rodilleras, utilizaste? - Bromea.

Y Mel le entre cierra los ojos.

- Idiota, fui notificada recién y por el jefe. - Le dice. - ¡El que resulta, que es tu mejor amigo y está internado! - Rodrigo hace que piensa.

Y Mel le rueda los ojos, tirando sus frondosos bucles hacia atrás.

- Áaron presentó su renuncia a su puesto de supervisor. - Le explica. - Debe volver a su pueblo natal por razones familiares. Abandona TINERCA y Herónimo desde el Hospital, dio las directivas hoy de ascenderme a su cargo. - Luego, ríe a carcajadas. - En todo caso, serían las mismas rodilleras que utilizaste tú, para chupárselas, ya que te promovió para que con ayuda de Collins, resuelvan los problemas del Holding en su ausencia, hasta que sea dado de alta...

Me atraganto de la risa con mi batido, en el momento que mi celular suena por veinteava vez, con la entrada de un mensaje de texto.

Rodo echa su cabeza hacia atrás, para reír a carcajadas.

- Touché, amor... -Dice divertido, mientras saco mi celular del bolsillo trasero de mis jeans con gran esfuerzo.

Los batidos, nachos y mis tres bebés me estaban aumentando de peso y mis pantalones me quedaban tan apretados que me asombraba que pudiera caber cualquier otra cosa ahí, además de mi trasero.

Entremedio de felicitaciones y arrumacos de Rodo a su novia, chequeo el texto.

Obviamente de Herónimo.

12:16h - "¿Por qué, no está tu culo aquí, nena?"

Blanqueo mis ojos, sonriendo.

Yo:

12:17h - "Te lo dije hace 9 minutos atrás. Como hace 15 y cada media hora desde que fui al Hospital a verte esta mañana temprano, antes de entrar al Holding. Estoy trabajando, Hero."

Rodo me mira cuando suena otro mensaje con su contestación.

- ¿Cómo está hoy? - Pregunta masticando.

- Con los modales de un crío de tres años... - Respondo.

- Ese es mi amigo. - Murmura con mucho orgullo, bebiendo su gaseosa mientras leo su respuesta.

Herónimo:

12:19h - "Esto es extraño, se supone que tengo una mujer. Y esta, no tiene que estar con el marido jodidamente convaleciente e internado, entonces?"

Sonrío, tecleando y aprieto enviar arqueando una ceja.

Yo:

12:21h - "¿Será porque, no soy tu...mujer?"

Ni me molesto en guardar el celular, ya que su mensaje llega al instante.

Lo sabía.

Herónimo:

12:22h - "Fácil, cásate conmigo >:"

Me reí y contesté su respuesta.

Era adorable mi jodido príncipe azul, cuando era terco como el infierno.

Yo:

12:23h - "No."

Herónimo:

12:24h - "Mierda..."

Río a carcajadas.

Y suspiro volviendo al teclado.

Yo:

12:26h - "En '34 salgo y voy para allá ;) "

Herónimo:

12:28h - "Que sea en '5 :) "

Yo:

12:29h - "No puedo, debo cumplir mi horario. Reglamento laboral de las T8P."

Herónimo:

12:30h - Ese jefe tuyo, apesta ;) "

Suelto una risita y tecleo, mordiendo mi labio.

Yo:

12:31h - "Pero es tan sexy y caliente, grrrrr... :P "

Herónimo:

12:32h - "Jesús rayo no hables así, estoy duro como una piedra...dame un respiro, si? Ven...:( "

Río a carcajada.

Yo:

12:34h - "Saliendo ^^ <3"

Cruzo mi cartera sobre mi pecho y corriendo mi silla, para ponerme de pie tomando el vaso de mi batido a medio terminar.

- Chicos, me voy. - Los abrazo a ambos. - ¡Los veo luego!

- Dile a la perra llorona del jefe, que por la tarde paso y que llevo papeleríos para que firme. - Murmura Rodo, sin dejar de comer.

- ¡Ok! - Digo, guiñando un ojo.

Me encamino saliendo de la cantina con Grands a mi lado.

Se incorporó de sus vacaciones por paternidad, dos días después de la lucha en el Super Domo de Herónimo contra Gaspar.

Muchas cosas sucedieron esa noche y entre lo nefasto de la pelea, algo muy bueno.

Pulgarcito y Lorna, luego de ser detenidos por la policía del lugar por agresión contra el hombre de seguridad, a las pocas horas fueron liberados por Millers el abogado de Herónimo de la jefatura.

Y con ella, otra libertad.

Esa tristeza de su pasado por la pérdida de su hijo Octavio, dándose una oportunidad a ambos de volver a empezar.

Algo que los había separado por años por ser difícil de superar, hoy lo volvía unir, porque siempre hubo amor entre ellos y más fuerte que nunca.

Herónimo al enterarse de ello, entre gemidos de dolor por sus heridas y sedantes, pero muy feliz, les regaló a ambos una segunda luna de miel en las islas Hawaianas.

Ocho días habían pasado desde la pelea y que Herónimo permanecía internado en el Hospital central con el 60% de su cuerpo con contusiones, quebradura de dos costillas, lesión importante en un ojo y corte de un lado frontal con rotura del radio de su brazo izquierdo.

Internado y bajo sedantes con dosis como para una manada de elefantes y no tanto, por su dolores que eran muchos.

Sino.

Para calmar su temperamento y lo poco que lo seducía la idea de estar hospitalizado por varios días por consejo médico.

Ochos días en la que una tarde en el horario de visita en el Hospital, sentada en su cama y a su lado mientras le hacía una trencita a ese rulo que vive enamorado de su frente a Herónimo y bajo la risita de Marcello en el sillón de al lado, mirando los tres la novela centroamericana del horario de la tarde.

Con unos golpecitos de puerta, se presentó la Jueza Beluchy con un par de oficiales para tomarnos declaración.

Detallando como llegaron sus sospechas y llevando a cabo su investigación.

Sea con Amanda Adams y su detención con paso a encarcelamiento, hasta la fecha próxima a su juicio por mi ataque y el delito de intento de homicidio.

Tras varios días de estar limpia de algún tipo de narcótico farmacológico como estupefacientes y bajo un programa de rehabilitación penal de ellos, declaró su culpabilidad y estar arrepentida de ello, como también, su confesión de su estrecha relación con Gaspar Mendoza y ser cómplice como testigo de los planes de él contra Herónimo.

Este, tras el último golpe que dio fin a la pelea, fue llevado de urgencia y como Hero, también fue hospitalizado.

Pero trasladado a una cárcel de máxima seguridad.

En una habitación aislada y lejos del contacto de otros presos y con supervisión médica, pero bajo custodia policial.

Suelto un suspiro de alivio, mientras subo a la parte trasera del BMW gris, agradeciendo a Grands por abrirme la puerta.

Y sonrío feliz.

Ya que, por fin gran parte de los demonios del pasado de Hero, fueron destruidos.

La liberación de su cruz.

Su biblia y su calefón.

Acaricio mi abdomen apenas visible de mi embarazo, dando el último sorbo a mi delicioso batido de cereza.

- Hora de ir a ver al papi cabrón, bebés... - Les susurro con felicidad.