—Hey —Katsuki levanta la mano cuando ve a Izuku salir del aula. Este le saluda y anda hacia él tras salir de la clase.

—¿Esperaste mucho? —Izuku se pone de puntitas, el rubio le da un beso en la frente.

—Nah, me acaban de liberar.

—Estás muy guapo.

—Tengo una cita con un chico lindo.

—¿En serio?

—Sí, es el chico de mis sueños.

—¿Y se puede saber quién es?

—No seas tan presumido —el rubio atrapa sus mejillas—, me encantas, Midoriya.

—Nunca me llamas así, me siento enfermo —lloriquea Izuku, Katsuki rueda los ojos.

—Mira que estoy siendo romántico...

—Es como si yo te llamara Bakugō.

—Listo, me deprimiste.

—¡Pero Kacchan...!

—Estoy jugando, nerd. He pensado que quizás podamos llamarnos más por nuestros nombres, ¿no lo crees?

—¿No te gusta que te llame Kacchan?

—Claro que sí, pero siento que si te llamo Izuku me siento más íntimo contigo.

—Llámame otra vez así —el pecoso se cuelga de su cuello.

El rubio susurra contra su oído—. Izuku, Izuku, Izuku. Mi Izuku.

—Katsuki, Katsuki, Katsuki. Mi Katsuki.

***
Es una de la mañana
Tengo una crisis de la juventud
No creo actualizar hasta el 29 de enero, lo siento