VISENYA II

AERION CAMINABA DESCALZO POR ROCADRAGÓN, Harwin se sorprendió al ver al príncipe borracho. Supuestamente había tenido una salida padre-hijo con Daemon, y no veía al Príncipe Canalla por ningún lado.

Recién dejaba a Joffrey en sus aposentos, le había leído historias para dormir, con mucho esfuerzo consiguió un librito con hermosas historias pintadas donde aparecían dragones, caballeros y princesas. De niño su padre le leía y él quería hacer lo mismo con su hijo aunque el resto del mundo le negaran los derechos. No quería estar ausente y deseaba profundamente cuidar a los niños de todo mal.

No se esperaba esto de ninguna manera. Visenya enloquecería al ver a uno de sus hijos borrachos, amaba a esos muchachitos con todo su corazón y no permitiría que nada les hiciera daño, es decir, salir al mundo en estado de ebriedad donde alguien podría hacerle daño le destruiría la cordura. Porque no podría defenderlos.

—¿Príncipe? ¿Y vuestro padre?

—¡Tío, Harwin! —Aerion tambaleó mientras daba un paso tras el otro y se agarró del cuello del hombre—. Sinceramente debo admitir que lo mate... —Sonrió malvadamente—. Bueno, no, lo emborrache.. le dí Sueñodulce en la segunda copa de vino y cayó dormido sobre la mesa del par... Del bar. Sí, y bueno, lo deje , ahí... allí. Pague para que lo dejarán en una habitación así no tendré que convivir con él.

—Aerion no puedes negarte a pasar tiempo con él, es tu padre aunque se equivoque... —Harwin lo ayudó a sostenerse y limpió suavemente la cara del rubio que sudaba y se llenaba de tierra.

—Yo solo fui un error, ya tenía a Margaery y a Vys, ¿Para qué me... Me necesitaría él? Vys es su favorito, Margaery es la favorita de la tía Rhaenyra y Aegon el favorito de mamá. Yo soy el del medio y sobro. —Aerion intentó beber de la botella que traía en la mano pero Harwin se la quitó y él lloriqueo—. ¡Y no quiero hablar al respecto! Solo quiero que me dejen en paz. Quiero ir a Bravos o a Pentos, un sitio donde no se me juzgue por cómo soy.

—Lo mejor, quizás es que descanséis, príncipe mío. —Harwin con un simple ademán se lo echó al hombro como un saco y decidió llevarlo a sus aposentos.

Aerion se quejó entre dientes hasta que vió un capa blanca y empezó a gritar.

—¡Ayuda, ser Lorent! ¡El tío Harwin me secuestra!

Lorent Marbrand negó y una sonrisa escapó de sus labios al ver la comica escena. Al final Aerion terminó arropado bajo suaves pieles como un niño de cinco años. Harwin lo trató como a su propio hijo, incluso con más amor.

«Si yo fuera su padre lo amaría más de lo que ya lo hago, es como hijo, y Daemon no se lo merece. Aerion es parte de Visenya y eso ya lo hace especial y único a su manera» Pensó Harwin tarareando una nana.

—Hubiera preferido que fueras mis padre.

—Aerion. —Advirtió, a Daemon no le gustaría escuchar eso.

—Es así. La tía Rhaenyra y Daemon se hubieran casado desde el principio. Madre y tu serían esposos y Margaery no sufriría por ser castaña. Solo seríamos una rama cadete de la casa Targaryen y no tendríamos que luchar contra los Verdes por el Trono de hierro, tendríamos Harrenhal y Altojardin y un hogar de verdad.

El Strong suspiró y le dió un abrazo al joven príncipe dragon. No podía negar que él tenía razón. Lastimosamente Visenya eligió a Daemon sin pensarlo dos veces, y él luego intentó encontrar alguna paz junto a Rhaenyra.

Todo estuvo bien hasta que tanto Rhaenyra como Daemon decidieron que su prioridad era el Trono de hierro.

—Mi tía Nyra está bebiendo también. —Aerion notificó antes de que él supiera—. Creo que también está triste por todo. Se casó con papá peor... Pe... Pero... te ama a ti.

HARWIN ENCONTRÓ A RHAENYRA EN EL SUELO DE SUS APOSENTOS, bebía de la boca de una botella de vino del Rejo y sollozaba. Por suerte todos estaban dormidos y ninguno de los niños la encontró en ese estado.

—Nyra. —Susurró él acomodándose sobre ella sin contacto más que el roce de sus alientos.

Hubiera intentando dialogar con ella pero Rhaenyra estrelló sus labios contra los de él y perdió cualquier sentido de la lógica. Anhelaba la refrescante locura de Nyra, su sarcasmo y en oposición, sus gestos y palabras dulces... Estar unido a ella, poder rodearla con sus brazos sin problemas y compartir el nacimiento de sus hijos...

De la misma forma que sabía que debió casarse con Visenya sabía que pudo haber sido feliz junto a Rhaenyra y sus cachorros. Los defendería incluso en medio de una guerra, incluso si debía enfrentar a dragones.

Visenya...

ViSeNyA...

VISENYA....

Rhaenyra quedó embarazada esa noche y la llamaría como la prima que una vez adoro con todo su corazón y que Harwin amo con locura y fidelidad.

NOTA: Si aman como yo a Harwin en mi perfil hay una historia con él y la oc ya está en trabajo de parto. Os imaginareis.

Seguiré publicado extras que no irrespeten el canon del libro. Leeré los libros de ASOIAF y veré que saco.

Hum y si tenéis ideas están en la libertad de dejarlas por aquí.

Los leo! ✨