Capitulo 8

"Mente ociosa taller del diablo".
Frase muy usada en mi país.

Capítulo 8:"Ni tan libre".

Narrado por Lauren

Forcejeaba con la cerradura en mi pie, de tanto intentar quitármela ya tenia marcas en el.

Es que no podía rendirme, no debia hacerlo pero el dolor y las gotas de sudor bajando por mi frente me debilitaban mas.

— ¡Maldición!

Resignada abrazo mis piernas mientras deposito mi rostro sobre mis hombros cansados.

¿Cuanto tiempo a pasado?

Tal vez días, no lo sabia con exactitud.

Debí contarlos.

Ya era tarde para lamentos.

¿Que sucederá ahora?

No lo sé.

No sé

Sencillamente no se.

Mis lágrimas refrescan mi rostro y recuerdo que no me he bañado hace tiempo. En serio necesitaba un baño.

— ¿Que habrá pasado? ¿Las chicas estarán bien? ¿Mis compañeros también? — Invadían mi mente un sin números de preguntas y lo peor era que no sabia las respuestas.

La manija se escucha, levantó mi rostro al mismo tiempo con la puerta y una figura hace aparición.

— ¿Y tú quien eres?— La voz de una chica retumba en la recamara.

Me quedo en silencio.

— ¿Te corto la lengua el cuchillo?— Pregunta con altanería.

— Tal vez— Susurro y la veo levantar una ceja.

Se acerca a mi con unos pequeños botines y distingo sus ojos verdes.

— ¿Que hace una niña tan bonita y indefensa aquí?— Me interroga con una voz algo tonta. Como si fuera un bebé y ella mi madre.

— ¿Tú que crees?

— Creo muchas cosas. Una de ellas es que debes ser Lauren— Abro un poco mis ojos con asombro— Si, mi hermanito te menciona mucho.

¿Hermano?

Ya veo, una familia de locos.

— ¿Por que lo hacen? No se quienes son— La duda me calcomia.

— Es una larga historia. Solo conformate con saber que estas encerrada y que la policía te busca— Sonrió sin mostrar sus dientes— Aunque dudo que jamas encuentren esta casa y menos imaginar quienes somos.

Pero de que me valía su búsqueda si no tenían sospechosos. No debía mantener esperanzas en tales circunstancias.

— ¿Que quieren de mi?— Pregunto con algo de cansancio.

— Eso sabrán mis amigos— Pronuncia y se aleja cerrando la puerta de un solo portazo.

Daba igual si estaba cerrada o no, como quiera no podría escapar.

....

Desperté al oler un delicioso aroma de comida.

Mis ojos viajan al plato en la mesa. Mi cuerpo esta sobre una superficie acolchonada y noto ropa a mi lado junto con unas botellitas de agua.

— Pero como...— Mis labios resecos intentaban formular aunque sea una expresión de sorpresa.

— Come algo y ve a bañarte— Una voz me sobresaltó y me hizo darme cuenta de un intruso.

Intento levantarme y me soprendo de no encontrar ninguna atadura a mis pies.

Estaba en otro lugar y localice un baño por el rabillo del ojo. Entro y cierro la puerta con seguro.

— Después de que me cambie pensare en una forma de escapar— Me digo a mi misma al deshacerme de mi ropa sucia.

Abro la regadera, entro, libero mi cabello de un moño, masajeo mi piel con jabón y hago lo mismo con mi cabello pero con shampoo.

Diviso un peine en la tapa del retrete y desenredo mi cabello con delicadeza.

Tomo una toalla y rodeo mi cuerpo con ella. No había ningún espejo o algo filoso pero tome un martillo que casualmente se encontraba entre algunos papeles y agradecí aquello.

Gire la perilla al quitar el seguro y apreté fuertemente el objeto como si de eso dependiera mi vida.

Aunque en este momento no suena tan exagerado como parece.

— ¿Donde estas?— Mi voz es casi inaudible al entrar a la alcoba.

No lo veo por ningún rincón, al parecer se fue y no escuche nada.

Bajo mi arma despacio y siento como unos brazos me sostienen mientras una pistola es presionada contra mi espalda.

— Sueltalo— Me dice y los nervios recorren mi piel pero obedezco.

A mi manera pero lo hago.

Su grito me hace darme cuenta de que acerté y corro sin mirar atrás, bajo la escaleras después de atravesar un pasillo algo largo.

Veo la entrada y siento pasos detrás de mi. La puerta esta trabada lo que me hace dar golpes y ser sujetada por él.

— ¡No! ¡Sueltame!— Grito con desesperación.

Forcejeo tratando de que mis brazos logren que me deje ir.

— Calmate— Me exige y logro dar una patada a su entre pierna.

Sacudo la puerta y mis ojos se iluminan al verla abrirse y no me detengo a ver si recobro la compostura o no, solo corro.

Sin mirar atrás.

Es una especie de campo, jure que seria algún bosque pero no. Mis pies no se detendrán hasta estar segura.

El lugar se ve desolado a pesar de ver algunas casas a la distancia. Era un buen sitio para secuestrar a alguien.

Un carro aparece en mi visor y agito mis manos en el aire en señal de que se detenga.

No me he dado cuenta de que sigo en toalla hasta que el hombre que maneja aquella carcasa algo lenta me mira sin una pizca de pudor mi pequeño atuendo.

— ¿En que te podemos ayudar bonita?— Me pregunta con una sonrisa pícara y un acento de rufián.

— Yo...— No me inspiraba confianza— Pues, solo necesitaba transporte pero olvidelo— Cambio de opinión.

— Te ayudo, precisamente iba a la ciudad — Mire a los lados asustada— Confía en mi— Su cara de violador no ayudaba mucho.

La voz de un chico hace que gire aterrada. Esta en un convertible rojo y me hace señas.

— Su fuera tú no me fuera con él— Me aconseja el señor— Podría ser peligroso.

— ¿Acaso es menos peligroso subirme con usted? Es igual o peor de desconocido— Me alejo de ese señor tan extraño.

La puerta se abre de repente y revela a un joven de ojos café claros con una chaqueta de cuero azul oscuro.

— No te recomendaría subirte con ese señor, su hija desapareció misteriosamente te junto con una amiga hace 1 año— Abre la puerta del copiloto.

Me subo y el arranca.

— Pues, el me dijo lo mismo de usted— Me cruce de brazos.

Me mira alzando una ceja.

— Tal vez sea peligroso pero aun sabiendo que podría serlo te subiste conmigo— Tenía razón.

Ni siquiera sabia su nombre y me había ido con un desconocido a quien sabe donde.

— Hay cosas que ni yo misma se— Le respondo.

Me mira de reojo y el camino transcurre en silencio.

Hace mas de un mes no actualice y en serio lo lamento. Estaba tan ocupada pero en esta próxima semana estaré algo libre y actualizarse todas mis historias.

¿Quien sera ese chico?
¿Sera confiable?
¿Se subirían en un carro con un chico desconocido?

Un fuerte abrazo gatokornios.

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