3 años

—bien, tranquila pequeña T/N— dijo Goku poniéndola sobre el pasto. Era su primera prueba para medir su ki.

Anteriormente solo había visto disparar su poder cuando llegaba a explotar por alguna rabieta, su pelo chino se levantaba y se revolvió más de lo normal dándole una apariencia alocada, aunque aún no sabían bien que poderes tenían, pues en esas veces había logrado lanzar pequeñas llamas por sus dedos, y en otra habían escuchado algo parecido al aullar de un lobo, así que era todo un misterio.

—concentrate pequeña— continúo Goku sentandola en el pasto y asegurándose de que no se sintiera incómoda.

—¿Cómo lo hago papá?— dijo t/n algo nerviosa, ella quería ser como su papá y el tío Vegeta.

—inhala profundamente y no pienses en nada— dijo sentándose frente a ella.

T/N se concentro, exhaló profundamente y cerro los ojos. Su mente estaba en blanco total, así que lo único que le preocupaba era sentir ese calor en la palma de sus manos, algo cálido como le había dicho su padre en unas cuantas ocasiones. Pasados unos minutos no sintió ningún cambio más que algo de cansancio, así que abrió los ojos lentamente sintiéndose abrumada.

—espera T/N— dijo de repente su padre.—¿En verdad no sientes algo?

Confundida intento mover sus manos sintiendo fascinada como algo caliente la obligaba a permanecer con las Palmas abiertas. Abriendo los ojos finalmente pudo ver su primer esfera de ki. Era algo pequeña y de un color amarillo como las de sus hermanos.

—lo logré papá— susurró sintiendo un calor en las mejillas, algún día sería como su padre.

6 años

—¡T/N ven a desayunar!— dijo su madre desde un extremo de la cocina.

Con dificultad se levantó y miro su mochila 'escuela' pensó. Algo alegre pero cansada se paró y se lavo la cara para después ir donde su madre, le dio un beso en la mejilla y se sentó en la mesa mientras tomaba un poco de jugo.

Un par de manos en sus hombros la tomaron de repente, por lo que dio un pequeño grito. Goten a veces no parecía que fuera a cumplir 15 años.

—creo que aún no lo controlas bien — empezó a reírse a carcajadas el idiota de su hermano.

Confusa miro sus manos, solo que ya no eran manos, en su lugar había dos pequeñas patas peludas de color negro con almohadillas cafés. Otra vez le pasó.

Con enojo intento gritarle a Goten, aunque solo salieron ladridos bastante agudos pues claro, seguía siendo un cachorro. Se giro, y con impulso subió a su silla donde anteriormente estaba y se sentó, no sabía cómo volver a la normalidad hasta pasadas unas horas, por lo que probablemente no iría a la Escuela.

—vamos a ver— dijo Bulma examinandola. Seguía en forma de cachorro y ya le estaba cansando, sentía mucho calor con todo el pelo.

Lanzo un gruñido al sentir como arrancaba un pelo de su lomo y lo ponía bajo un microscopio.

—esto es interesante — dijo Bulma quitándose las gafas de trabajo.—tu cuerpo libera esta forma cuando sientes que estás en peligro, al igual que las llamas que antes has visto.— T/N asintió intentando comprender, por lo que prosiguió — esto significa que cada vez que sientas que tú vida está en peligro o parecido, estos poderes se van a activar. No se cómo ayudarte a controlarlos—dijo avergonzada, no estaba especializada en esas cosas.— pero puedo diseñar un dispositivo que te avise cuando vaya a suceder. El controlarlo dependerá de ti.

T/N asintió alegre y suspiro sintiendo como por fin su cuerpo regresaba a la normalidad. Aprender sería mucho más duro.

12 años

—¿Bulma que has descubierto?— dijo Piccolo llegando con T/N detrás de él.

Después de ese descubrimiento sobre sus poderes, los guerreros Z se habían turnado para enseñarle a controlar sus poderes por distintos métodos, como la técnica de meditación de Piccolo y la cámara de gravedad de Vegeta.

Todo esto había transcurrido en la habitación del tiempo, por lo que ella había crecido más rápido de lo esperado en solo unos días, llegando a la edad de 10 años, y el tiempo restante se concentro en descubrir de dónde venía esos dones tan peligrosos e increíbles a la vez.

—durante este tiempo— dijo quitándose sus anteojos— y con el crecimiento tan rápido al que te expusiste, al fin pude determinar que tú no naciste así, si no que te dieron estos dones—. Tomo unos papeles y se los entrego a T/N, tomo algo de aire y suspiro— en cuanto naciste te sometieron a pruebas de resistencia y usaron ADN que recolectaron de experimentos anteriores a ti, pero que fallaron, y cuando por fin lograron dar contigo, se dieron cuenta de lo peligroso que era y te desecharon esperando que murieras.— dijo esto último con dificultad.— no se más.

Los tres se quedaron en silencio unos cuantos minutos hasta que vieron a Vegeta entrar con seriedad. Se acercó a T/N y le arrebato los papeles para leerlos. El ya estaba enterado de los resultados de la chica, pero Bulma no les menciono algo.

—Bulma, diles a qué personas te refieres— y se cruzó de brazos esperando que su esposa tomara fuerzas.

Bulma suspiro y solo se quitó los anteojos mientras daba unas cuantas vueltas alrededor del escritorio, sentía un vuelco en su estómago. T/N no se sentiría afectada por la revelación pero los demás si, tomando en cuenta que Vegeta había reaccionado con furia al escuchar el nombre, que habían olvidado hacia algún tiempo pero que al parecer aún buscaba recobrar su antigua gloria.

—personas de la patrulla roja— dijo por fin sintiendo como se estrujaba su pecho. Vegeta la tomo por las hombros y le dio un ligero masaje intentando que su esposa se relajará mientras observaba la reacción de enojo de Piccolo y de confusión de T/N.

Después de reunir a todos, empezaron a contarle como Goku y Bulma desde pequeños habían tenido que lidiar con los proyectos creados por esa compañía, y el como una de sus creaciones casi destruía la civilización, refiriéndose a número 17 y 18, aunque lo habían detenido, al menos en esa línea del tiempo.

Habiendo aclarado eso, solo se necesito a Goku y Vegeta para poder ir a las instalaciones que creían abandonadas y hacerla explotar para eliminar cualquier proyecto indeseable que hubiera ahí adentro.

Todo estaría mejor por el momento.