Habían pasado dos años y medio, los soldados se mostraban impacientes por acabar con el trabajo para regresar a casa, resultaba estresante el tener que pasar mucho tiempo dentro de un vehículo espacial.

El comandante Marcos tenía claro que es lo que tenían que hacer una vez llegaran, si las negociaciones fallaban, tenía que empezar la ofensiva y acabar con lo que quedaba del Imperio.

Alateia creía que tal vez su pueblo la reconociera como la verdadera líder al ser descendiente de Felixio, le quedaba ese ápice de esperanza, esperaba que así fuera.

Los Ga'rack no sabían que los venían siguiendo hasta un mensaje fue recibido:
-"Pedimos mesa de diálogo con ustedes para pactar la paz, si no nos veremos en la necesidad de arreglar de otra forma"

-Veo que nos han seguido, les deseo suerte cuando vean la fuerza total de Ga'rack- decía Alix

En aquél gran telar negro llamado espacio se alzaron miles de puntos, la flota de la Alianza Terrestre se mostraba confundida, de repente esos objetos se acercaron como mosquitos a una luz.

Aquéllas cosas resultaban ser naves de asalto del Imperio, se acercaban a toda velocidad, aunque la Alianza tenía cierta idea de que sus rivales se habían expandido, no creían que aún tendrían suficientes recursos.

El combate comenzó, destellos volaban por todo el vacío, los proyectiles impactaban contra toda clase de vehículos voladores, explosiones adornaban el campo de batalla, ambos rivales estaban perdiendo fuerzas.

-Es hora de usar el cañón principal - dijo el actual líder de los Ga'rack

-Señor, ¿está seguro? El arma aún es experimental y... - habló un soldado cuando fue interrumpido

-Hazlo, dije- repitió Alix

Una gran estructura metálica de forma tubular se alzaba sobre la nave principal del Imperio, de ella salían arcos eléctricos, y en un momento, lanzó un gran haz de luz dirigido contra sus enemigos.

El ataque acabó con la mitad de la flota de la Alianza, Alateia ni siquiera tuvo la oportunidad de hacer notar su presencia ante los Ga'rack, así que sin más opciones, Marcos inició la contraofensiva.

Una gran ráfaga de proyectiles nucleares fue lanzada contra las naves de Alix, pero aquello apenas y había hecho daños, sin embargo, las reservas de combustible se agotaban por lo que decidieron usar el último disparo de aquél cañón.

Otra vez ese potente ataque daba un gran golpe contra la Alianza, esta vez erradicando dos tercios de lo que quedaba de ellos, tan pronto sucedió esto, los Ga'rack se retiraron a máxima velocidad.

Marcos estaba derrotado, aunque un mensaje llegaba:
-"Ahí esperen, creo que podremos ayudarles"