Alix se había sentado junto a Chloé, la Bourgeois le hablo sobre como es que "averiguo" que la Rossi era una mentirosa (inventó que su amigo, Félix, había sido quien descubrió todo y le había advertido sobre ella), la reencarnada le enseño las "pruebas" a la de cabello rosa, que se mantenía en silencio, su cerebro absorbía toda la información que podía.

Cuando Sabrina regreso, se quedó confundida de que la Kubdel se sentará con ellas, pero no dijo nada malo ni se opuso a que se quedará, de hecho, estaba feliz de que alguien más apreciará la presencia de la Bourgeois, que era alguien con un aura que solo la realeza tenía.

La Kubdel se sentó entre medio de Chloé y Sabrina, se sentía muy fuera de lugar allí, pero por ahora prefería quedarse junto a la Bourgeois, que era la única que podría hacerle frente a la Rossi actualmente.

Debido a las conexiones que poseía la Bourgeois al ser hija del actual alcalde de París, podría conseguir información verídica sobre quién era en realidad Lila Rossi, y así podrían mostrarles a los demás lo mitómana que era aquella chica.

Chloé sonrió con suficiencia, ahora tenía otra aliada, una que tenía un Miraculous, si, la Kubdel no tenía idea de que en sus manos tenía un objeto capaz de hacerla viajar en el tiempo, pero ella le diría tarde o temprano.

Alix tenía en sus manos el Miraculous del Conejo, estaba en su forma camuflada, pero lo seguía teniendo en sus manos.

Estaba pensando en si debía hacer salir al conejo de su comoda madriguera, ¿O el hacer tal cosa ya sería mucho?. Hasta el momento Bunnyx no había interferido, momento, ¿Y si la Vigía del Tiempo había desaparecido debido a los cambios que había causado? ¿Qué sucedería entonces?.

Se mordió la uña del pulgar, nerviosa.

No había pensado en la posibilidad de que Bunnyx desapareciera, posiblemente esa era la razón por la cual ella no había interferido. ¿Esto era bueno o malo? Por un lado parecía que la Kubdel no estaría condenada a ser quien se encargará de vigilar el pasado, presente y futuro... Pero por el otro lado, si no había un vigía, algo malo podría llegar a acontecer, como lo de Chat Blanc...

No, todo estaría bien, si algo malo llegará a suceder, simplemente podría "tomar prestado" el Miraculous del Conejo y arreglar las cosas, aunque, ¿No sería mejor tenerlo en sus propias manos en lugar de dejar que alguien más lo tenga?... No, no sería una buena idea, a largo plazo podría resultar perjudicial para ella, así que no tendría ese reloj mágico, se lo dejaría a Alix, esperando que su versión mayor no hubiese desaparecido debido a los cambios que había realizado.

—Alix, ¿Por qué estás... Ahí?— Pregunto una voz.

La Bourgeois sabía muy bien a quien le pertenecía aquella voz, ni siquiera tenía que voltear para comprobarlo, no era necesario malgastar sus energías moviendo su cabeza en dirección a la Dupain-Cheng.

Alix no quería mentirle a Marinette, pero tampoco es como si simplemente pudiese decir la verdad, así que la Bourgeois le susurró una excusa creíble que podría usar para justificar el que estuviese con ellas. —Estoy mal en la clase de la profesora Mendeleiev, Sabrina propuso que podría unirme a ellas para hacer el siguiente trabajo...—

—¿No habría sido mejor que formarás equipo con Alya y conmigo? ¿Con Nathaniel? ¿O tal vez incluso con Max y Kim?— La Dupain-Cheng tenía sus ojos puestos en la hija del alcalde, ella parecía ignorarla, como si no fuera más que aire.

—Está bien, Marinette, solo será por esta vez— Intento tranquilizar la de cabello rosa.

La Dupain-Cheng quería protestar, pero Alya la tomo por el brazo y la arrastró hacia su asiento, la clase iniciaría pronto y debían acomodarse en sus respectivos lugares.

Adrien ingreso al salón junto a Nino, el modelo mantuvo su mirada fija en la rubia por un par de segundos, antes de desviar la mirada y apretar los puños, sintiéndose impotente, Chloé lo había remplazado, ella ya no lo quería, sino que se había ido detrás de su primo, ¿Qué tenía Félix que él no?.

Alix pudo notar que la Bourgeois no le dirigió ni una mirada al Agreste, haciendo como si el no existiera.

Era extraño.

La de cabello rosa observó que la rubia tocó un par de veces el brazalete que tenía en su muñeca izquierda.

Pronto sus demás compañeros empezaron a ingresar al salón, todos miraban más de una vez al notar que la Kubdel estaba sentada con entre la Bourgeois y la Raincomprix, además, hablaba con ellas como si fueran viejas amigas que se reunían tras años de no verse.

Cuando la señorita Bustier ingreso al salón, noto al peculiar trio, pedo no dijo nada, simplemente sonrió, feliz de que Chloé empezará a abrirse con sus compañeros y entablara una amistad con ellos, que la primera fuera Alix resultó sorpresivo, pero no algo malo.

La mujer empezó a dar su clase, sonriendo más al percatarse de que la Bourgeois escribía sus apuntes por si misma y prestaba genuina atención.

Félix estaba de nuevo sobre un techo que tenía vista hacia el salón de clases de Chloé, sin dudas laa cosas habían avanzado demasiado en un intervalo de tiempo realmente corto.

Desde su infancia tenía sentimientos por la Bourgeois, no sabía cuándo es que aquellos sentimientos florecieron en su corazón, tampoco sabía cuándo es que Chloé lo empezó a querer como más que a un simple amigo, pero estaba feliz de que el corazón de ella lo eligiera a él de todas las personas.

El brazalete que el joven tenía en su muñeca derecha empezó a vibrar y parpadear con una tenue luz dorada, dejándole en claro que su Reina lo echaba de menos.

¿Dónde debería llevarla como primera cita? ¿Quizás un restaurante? ¿Al teatro? ¿Quizás una película? ¿O sería mejor solo llevarla a por un helado?.

A Chloé le gustaba mucho el helado, se podría decir que era casi una adicta, así que si, definitivamente podría llevarla a por helado, la cuestión era ¿A qué heladería sería buena llevarla? ¿O debería llevarla con ese hombre que va en su carrito de helados, André, el heladero de los enamorados? Según decían, ese hombre hacia helados mágicos, que unían a una pareja de por vida... ¿Tal vez sería muy pronto para llevarla ahí?.

El cuerpo de Félix se estremeció debido a un repentino escalofrío, que erizo cada bello de su cuerpo.

Alguien estaba pensando en él de manera extraña, y esa persona no era Chloé.

👑🔸🐝🔸👑

Lila soltó un gritó, parecido al de una Banshee.

¡No podía ser posible! ¡No podía ser malditamente posible!.

¡¿Había sido suspendida del colegio Françoise Dupont?!.

¿Por qué había pasado esto? Fue meticulosa desde el inicio, aunque tenía muchas inasistencias, siempre cumplía con lo que los profesores le pedían, iba cuando "regresaba de sua viajes", también tenía una buena relación con sus compañeros y profesores, así que no llegaba a comprender cual era el motivo por el que había sido suspendida, si sus inasistencias tenían "justificantes médicos", no tenía sentido.

A menos que...

Ladybug hubiera abierto el pico.

La heroína moteada estaba celosa de ella desde el inicio, porque era más popular y querida, también porque era la novia de Adrien Agreste, los celos y la envidia carcomian a la heroína, quien jamás podría tener todo lo que ella tenía.

Inhaló y exhaló, tratando de calmarse, todo estaría bien, podría arreglar esto, solo debía de inventar algo que le quitará el prestigio a Ladybug, que la dejara mal parada.

Su oportunidad llegó con la aparición de una nueva pareja de héroes, que se habían hecho muy populares en solo unas pocas horas, incluso ya habían hecho mercancía acerca de ellos e iban a ponerlos en el desfile que se haría en un par de semanas en honor a los héroes de París, el alcalde Bourgeois lo había creado, llamándolo "Día de los Héroes" (lo cual no era creativo en absoluto, según su parecer).

Este nuevo duo heróico eran muy eficaces en su trabajo, haciendo en poco tiempo lo que a Ladybug y Chat Noir le llevaba varias horas. La Rossi noto algo respecto a estos héroes, parecía que no tenían nada que ver con Ladybug, así que... ¿Quizás podría ponerlos de su lado? Solo tenía que ser paciente hasta que llegara una buena oportunidad y lanzarse a ellos, hablarle sobre que era descendiente de una heroína y que quería formar parte de su equipo, no sería ten difícil el convencerlos, si eran tan ingenuos como lo fue Chat Noir en su momento, podría tener a los nuevos héroes en la palma de su mano.

Además, el chico pavo real era atractivo, totalmente su tipo

Tal vez podría conseguirlo para si misma, la chica abeja sería un problema. Había visto el vídeo en el que ambos aparecían, vio como el héroe, "Argos", la tomaba de manera posesiva por la cintura, seguro eran pareja bajo las máscaras.

Tendría que ponerlos uno en contra del otro, así, cuando Argos estuviese triste por la ruptura, ella aparecería y le daría el consuelo que iba a necesitar, él vería lo amable que era y se enamoraría de ella en muy poco tiempo.

La Rossi observó la imagen amplificada del rostro de Argos y la acaricio con la yema de sus dedos.

—Te haré mío—