Tras regresar de su pequeña salida, Chloé y Félix se quedaron en la habitación de la reencarnada, mientras el Graham De Vanily hablaba con los kwamis sobre posibles rutas las cuales podrían tomar en caso de que se acabarán separando, la Bourgeois se había encerrado dentro de su "laboratorio"/armario.

Un par de golpes se escucharon en la puerta, era un golpeteo rítmico, una contraseña que la reencarnada había inventado.

Feliz soltó un simple "Adelante" y siguió mostrándole a ambas kwamis rutas para llegar al Le Grand París o para llegar a una pequeña casa que estaba cerca del hotel, era la vivienda del mayordomo de Chloé.

Jean ingreso a la habitación luego de que se le diera permiso, el traía una charola con bocadillos, al ver la comida Pollen y Duusu volaron hacia el jefe de mayordomos, robando algunos bombones, si, aquel hombre sabía sobre los miraculous y los kwamis, Chloé se lo había dicho al mismo tiempo en el que Félix se lo decía a su madre.

—¡Muchas gracias, Senescal!— Agradece Pollen, que come con alegría el bombón de chocolate relleno de miel.

—De nada, señorita Pollen— Jean deja la charola sobre la mesa. —¿Y la señorita Chloé?—

—Ella está en su "laboratorio", ¿Cómo va lo del terrario para Clover?— Pregunto el rubio, que tomo una galleta y volteo a ver al reptil, que estaba cómodo durmiendo en una almohada de seda color dorada que estaba rellena de plumas de ganso, si, Chloé ya la estaba empezando a mimar.

—Lo traerán en un par de horas, fue encargado en la mejor serpentario de la ciudad, la señorita Chloé fue específica con...— Jean fue cortado a media oración debido a una explosión que provino del laboratorio (armario) donde estaba la Bourgeois.

La puerta se abrió y una sonriente Chloé salió de allí, estaba cubierta de pies a cabeza con lo que parecía ser polvo dorado, a pesar de la suciedad, ella parecía muy satisfecha.

—¡Lo logré!— Exclama la rubia, que nuestra con orgullo un brazalete de oro que tenía una abeja con alas y tórax hechos de diamantes.

—Es bonito, ¿Para que es?—

—Es un amuleto de quietud emocional, cuando quien lo porte tenga emociones muy fuertes el amuleto lo va a calmar, será como estar anestesiado emocionalmente— La rubia se acercó a Jean y le puso el brazalete en el brazo izquierdo. —Esto te ayudará a mantener la calma y va a evitar que Hawk Moth te pueda volver a akumatizar, no digo que sea 100% efectivo, pero estaré más tranquila si lo llevas—

Jean estaba conmovido, en solo pocos días Chloé, la señorita a la que había visto crecer por años y a la que quería como a una hija, había empezado a cambiar, y todo gracias a que encontró a aquella pequeña abeja mágica, no decía que ella fuera la personificación de la bondad, pero sin dudas era alguien más amable.

—Lo llevaré siempre, señorita Chloé— Dice el jefe de mayordomos.

Al día siguiente.

Esta era la primera vez que la reencarnada asistía al colegio siendo Chloé, la última semana había pasado volando y había tenido que venir a clases, aunque la verdad, lo único que quería era volver al Le Grand París y fingir que estaba enferma o algo, no tenía ganas de pasar tiempo en una habitación con personas que detestan a la hija del alcalde.

Caminó rápido hacia el interior de la institución, sabiendo que Félix (siendo Argos) la estaba cuidando desde un tejado cercano. 

Paso de largo a Dupain-Cheng y Césaire (que la miraron raro cuando no les dijo nada), luego ingreso al salón, sentándose en el lugar habitual del la Bourgeois, cuando se acomodo procedió a ignorar a todos sus compañeros de clase, poco después llegó Sabrina, que se sentó a su lado e intento hacerle plática, pero de la boca de la reencarnada no salió ni una palabra.

Pasados unos minutos llegó Adrien junto a Lahiffe, el modelo saludo a la Bourgeois, pero ella lo ignoro, no planeaba involucrarse con él.

El Agreste se sentó junto a Nino, pero cada poco tiempo volteaba a ver a Chloé, no entendía porque ella parecía estar molesta con él, ¿Se debía a qué le había dicho semanas atrás, que si no se comportaba ya no serían amigos? ¿Acaso ella pensaba que ya no eran amigos?.

—¿Qué sucede, viejo?— Pregunto Nino, que observó a su amigo.

—Es que Chloé parece molesta conmigo—

—Yo digo que parece molesta con todo el mundo, ni siquiera le está hablando a Sabrina, ya se le pasara—

—Si tú lo dices—

Pronto al salón de clases ingreso la señora Mendeleiev, la profesora de química. Al verla los ojos de la reencarnada brillaron, saco su cuaderno y un bolígrafo (todo obviamente cubierto de joyería), estaba ansiosa de aprender sobre la química, cualquier técnica le serviría para mejorar en la preparación de los distintos brebajes que estaban escritos en el libro de miraculous, hasta el momento había podido preparar pero había infusiones mucho más complejas y quería hacer todo se manera meticulosa, no había lugar para equivocaciones.

La señora Mendeleiev hablo sobre distintas plantas tóxicas con las cuales se debía tener extremo cuidado, la Bourgeois anotó cada una de sus palabras, luego de una breve explicación la mujer hizo una pregunta.

—Bien, ¿Alguien de aquí sabe lo que es la Belladona?— La mujer suspira cuando la primera en levantar la mano es Chloé, mientras sus compañeros de clase ríen de ella, pensando que va a responder alguna estupidez (como regularmente hacia). —¿Si, señorita Bourgeois?—

—La belladona (Atropa belladonna) es una especie de arbusto perenne, de la familia Solanaceae. Es nativa de Europa, África del Norte, y Asia Occidental, y se puede encontrar naturalizada en partes de Norteamérica. Tiene una tolerancia baja a la exposición directa al sol. Se encuentra en áreas normalmente sombreadas y con un suelo rico en limo... Es una de las plantas más venenosas...— Dice la rubia, sabia sobre dicha planta debido a que sus raíces, aunque altamente tóxicas, eran un ingrediente que se usaba para la reparación del miraculous del gato (lo leyó en su copia del libro). 

Todos en el salón se quedaron en silencio, observando a la hija del alcalde como si le hubiese salido otra cabeza.

—Su respuesta es correcta, señorita Bourgeois, parece que su cabeza no está de adorno después de todo— Dice la profesora, que empezó a explicar otro tema.

La reencarnada estaba feliz de haber respondido bien, sonreía mientras los ojos de todos sus compañeros estaban sobre ella, lo cual no le importo en absoluto.

👑🔸🐝🔸👑

Cuando su Reina dejo su bolso en un casillero (debido a que tenía clase de deportes), decidió salir, sabía que no era lo correcto, pero tenía que decirles a los kwamis de la destrucción y la creación que estaba bien, que su reina la estaba cuidando bien, claro que iba a omitir variadas cosas, solo les diría que estaba bien.

Salió del casillero con cuidado y voló hasta quedar cerca del techo, luego vio entrar a una chica de cabello azul con coletas, ella era quien observó a su reina con malos ojos durante las clases, frunció el ceño y dejo de prestarle atención, esa chica no se merecía su atención ni la de su bondadosa Reina.

Paso media hora y nada, ninguno de los kwamis aparecía, estaba por volver al bolso de su nueva portadora cuando un olor fuerte olor a queso le llegó a la nariz, solo había un kwami que comía queso. Empezó a buscar la fuente del olor y este provenía de un casillero, atravesó la puerta y vio al kwami de la destrucción engullendo un pedazo de camembert.

—Plagg— Dijo alegre.

—¿Uh?— El gato negro se volteó y vio a su amiga abeja. —¿Pollen?—

—¡Plagg!— La abeja estaba feliz de ver al kwami gato, también estaba aliviada. Voló hacia él y lo abrazo, este correspondió al abrazo del cual poco después se separaron.

—¿Cómo es que estás aquí?... Espera, cierto, tu miraculous se perdió, ¡Espera aquí! ¡No te muevas ni un milímetro!, Iré a buscar a Tikki—

El gato salió apresurado del casillero y la abeja quedó sola, de nuevo, se sentó sobre la mochila que había allí y espero, la verdad no sabía cuál sería la reacción del guardián cuando la portadora de Tikki le dijera que no iba a volver porque tenía a una Reina que la necesitaba, además, no podía dejar tampoco a Duusu.

Pocos minutos después aparecieron Tikki y Plagg, la mariquita se veía aliviada de verla allí, entendía que estuviera preocupada, seguro todos en la caja lo estaban, pero aún si ellos estaban preocupados, no podía dejar a su Reina, ella era alguien que no podía expresarse adecuadamente y era hasta ahora que parecía abrirse a los demás, sabía que posiblemente su Reina había hecho cosas nada gratas en el pasado, de ahí el que todos parecieran odiarla con vehemencia, pero sabía que ella estaba intentando cambiar y tenía el presentimiento de que lo lograría, que algún día sería amada por todos y vista como la mejor Reina.

—Es un alivio que estés bien Pollen, ¿Dónde está tu miraculous? Debo dárselo a mi portadora para que ella pueda devolvérselo al guardián—

—Lo lamento, Tikki, pero no puedo dejar que me alejes de mí Reina, ella me necesita y por eso me quedaré a su lado el tiempo que sea necesario—

Los ojos de la catarina se abrieron de par en par, Pollen jamás había actuado así, la abeja sabía que no podía estar fuera de la caja, debía estar en un lugar donde el maestro pudiera cuidarla y no con alguien que nunca fue elegida para portada el prodigio de la abeja.

—Se que tú portadora te cae bien, pero no por eso puedes quedarte con ella. Pollen, por favor, comprende que si Hawk Moth se entera de que hay un Miraculous por ahí lo buscará, ¿Y qué te dice que tú nueva portadora no sea alguien mala?—

El rostro se la abeja se puso rojo y vio a la kwami de la creación con enojo. —¡No tienes derecho a decir cosas sobre mi Reina! ¡El que tú portadora sea una inútil no es culpa de la mía! ¡Fue TU portadora quien perdió ni miraculous y fue mi Reina quien me salvo! ¡ELLA ES DULCE! ¡Y ME HA TRATADO COMO A UNA PRECIADA AMIGA! ¡NO TIENES DERECHO A DECIR QUE ELLA ES MALA! ¡NO LA CONOCES!—

El que Pollen dijera cosas tan malas sobre Marinette hizo enojar a la kwami catarina, pero sabía que su portadora había sido imprudente y por eso perdió el miraculous de la abeja. —¡TU TAMPOCO CONOCES A TU PORTADORA! Solo has estado con ella unos cuántos días, ¿Qué te dirá que en el futuro no hará cosas negativas? ¿Y si usa mal tu poder? Podrías quedar como prisionera de una mala portadora, como Nooroo... No quiero que eso suceda...—

—Ella no es como Hawk Moth y yo no acabaré como Nooroo— Dice la kwami. —Mi Reina será una gran heroína, ¡Y será miles de veces mejor que Ladybug!—

Plagg decidió intervenir, no quería que las kwamis siguieran discutiendo. —¿Y por qué no llevas a tu portadora con el guardián? Él podría juzgar la actitud de tu nueva dueña y decirte si puedes quedarte o no con ella— El felino dio una idea.

—¡Si! ¡Es una excelente idea!— Concuerda Tikki.

—¿Ustedes realmente creen que soy una crédula tonta? El ir con el Guardián solo expondría a mi Reina, no la llevaré con él—

—Pero...— Dice Tikki.

—¡¡DIJE QUE NO!!—

Tras decir aquello abandono el casillero donde estaban y voló fuera del salón donde estaban los casilleros, yendo directamente hacia donde estaba Argos, que al verla tan irritada, saco de una pequeña bolsa un turrón, el cual le tendió a la kwami, que empezó a comerlo, enojada.

Brazalete/pulsera de Jean: 

Terrario de Clover (imaginen que es de serpiente):