¡Hey! Hola, chicas y chicos, espero que la estén pasando muy bien y espero también que ya se encuentren listos para esta nueva actualización.

En esta ocasión le echaremos un vistazo a nuestros queridos villanos que ya se estaban sintiendo un poco olvidados, descubriremos cómo avanza la relación Tío-sobrino de Dipper y Stanford y por si fuera poco, tendremos una bonita escena dipcifica. Así que espero que les guste el capítulo de esta semana. Nos leemos abajo para notas finales.

PD. Cómo dije en otro de mis fics, algunas de las letras en el teclado de mi laptop ya no están funcionando correctamente. Sobre todo las letras "E" y "Q", así que si notan que en una palabra faltan alguna de ellas ya saben el motivo.

Gravity Falls Es una obra perteneciente a Disney. Todo lo escrito y expresado dentro de este Fanfic tiene como propósito principal el enriquecer al Fandom de la misma. Todos los personajes utilizados dentro de esta historia son una creación y propiedad original de la talentosísima y brillante mente e ingenio del animador estadounidense: Alex Hirsch. Nada será utilizado con fines lucrativos o comerciales. ¡Disfrútenlo!

Un Fanfic de Gravity Falls: "La Novia de Dipper"

Segunda Temporada

Capítulo 47: "Lazo Fraternal"

*Bóveda de la familia Northwest. Último lugar de reposo de los Weirdmasters*

El sonido que ocasionó el crujir de los huesos del hombre de la mascarilla se esparció a lo largo y ancho de la caverna, luego de que una apabullante e invisible fuerza se hiciera con el control de su cuerpo para estrellar su espalda en repetidas ocasiones en contra de una de las paredes hechas de roca sólida. Momentos más tarde, una vez que aquella opresión libró sus músculos y sus articulaciones, el sujeto cayó desde una altura considerable, estampándose contra el suelo para enseguida escuchar una carcajada que provino de aquél directamente responsable de haber ejercido dicha fuerza.

—¡Vaya! ¡Vaya! ¡Vaya! Con que el mejor y más letal cazarrecompensas de toda la galaxia, ¿No? Yo más bien diría, ¡El más grande, apestoso y estúpido saco de carne de toda la galaxia! —Dijo Bill Cipher, mirando al individuo frente a él con desprecio, mientras Gideon, Giffany y el Cambia-formas contemplaban la escena desde la retaguardia con cierto temor, puesto que sabían que un solo error de su parte que llegara a disgustara a Bill, aún por pequeño que fuera, y ellos serían torturados de la misma o incluso de una peor manera—. Y yo que pensaba que aquél dicho que dicta que hasta al mejor cazador se le va la liebre, solo aplicaba para los patéticos seres hechos de cartílagos de esta dimensión. Tenías un solo trabajo que hacer y solo te dedicaste a jugar y a alardear de tus habilidades. Te confiaste tanto que ese niño Pines y su grupo de perdedores se burlaron de nosotros. ¿Y te haces llamar a ti mismo Mr. Slay? Creo que de ahora en adelante deberías empezar a llamarte "Mr. Ingenuo".

—Lo... Lo lamento mucho, amo Bill. No hay excusa con la que pueda justificar la falla tan grande que he cometido en contra de sus deseos. Le pido su perdón de la manera más humilde, mi amo. —Se arrodilló una vez que logró incorporarse—. Le juro por el gran Axolotl, que nunca volveré a fallarle otra vez.

—¿El gran Axolotl? ¿Así que le juras al "Gran Axolotl"? ¡Quizá deberías recapitular y hacer una mejor elección de tus palabras! Medítalo bien y date cuenta de que yo soy el dios todopoderoso al cual debes encomendarte a partir de ahora. Pero dime, ¿Acaso crees que voy a perdonarte la vida luego de haber permitido que escaparan cuatro de los símbolos más importantes y necesarios para llevar a cabo mi más grande ambición, la cual por cierto, he estado planificando desde hace trillones de años? Debería destruirte de una vez por todas. —Fúrico, con los ojos fundidos en una tonalidad rojiza, Bill alzó el brazo derecho de Preston para volver a oprimir el cuello hombre, asfixiándolo. Acto seguido, lo hizo levitar con sus poderes telequinéticos, para finalmente lanzarle una poderosa descarga eléctrica, obligándolo a aullar de dolor. Sin embargo, cuando Bill estaba a punto de tomar su vida tras haber incrementado de golpe el voltaje de la descarga, consiguió controlar su furia, poniéndole un alto el severo castigo cuando una nueva y maquiavélica idea atravesó por su mente.

—No lo entiendo... ¿Por qué se detuvo, amo...? —Dijo Mr. Slay, convaleciente sobre el suelo, severamente lastimado y presentando dificultades para poder articular sus palabras.

—Debes considerarte un hombre afortunado. Es gracias a tu verdadero nombre que aún te mantienes respirando. Estuve a punto de cometer un grave error. Y es que... —Colocó sus manos por detrás de su espalda—. Si te mato ahora, nuestro chivo expiatorio no podrá enterarse de la verdad más adelante y no podremos utilizarlo para chantajearlo y obligarlo a que coopere con nosotros. Es vital para la operación. Además, el simple hecho de haberme tomado la molestia de salvar tu vida hace unos momentos durante el asalto, hubiera resultado en una total pérdida de tiempo. Por lo tanto, pienso darte una oportunidad más. Después de todo, gracias a ese fantasma que capturaste con el Transgresor Dimensional, tus habilidades se han incrementado. Sin mencionar que pudiste traerme a la Estrella Fugaz y al Corazón Roto. —Giró la vita hacia su retaguardia, lugar en dónde se encontraba la colosal roca de punzantes y rojizas protuberancias que albergaba en su interior a aquellos entes tan terribles mejor conocidos como los Weirdmasters. A sí mismo, Bill enfocó su vista hacia las tres esferas de energía que se mecían y danzaban armoniosamente alrededor de ella, cada una conservando cautivas dentro de ellas a Stanley, a Mabel y a Robbie respectivamente—. Tengo entendido que ese viejo loco logró escapar en el último minuto. Debió de haber huido al bosque para ocultarse. ¡Encuéntralo y tráelo ante mí junto con los otros cinco símbolos restantes!

—Le agradezco de corazón que aún confíe en mis habilidades, amo Bill. —Volvió a arrodillarse. En esta ocasión, agachando la cabeza para realizar una reverencia—. No lo defraudaré. Traeré ante su presencia a los símbolos restantes.

—No trates de alimentar tu ego. Simplemente no tengo demasiadas alternativas para escoger. Y para asegurarme de que esta vez cumplas con tu cometido, mis subordinados aquí presentes te acompañarán en esta travesía.

—Pero... Bill-sama... —Giffany intercedió.

—¿Qué sucede, encanto?

—Si nosotros vamos con él... ¿Quién además de nosotros liderará a los ejércitos de Impuros, Drones y el resto de las razas alienígenas que se han unido a nuestra causa? Le recuerdo que usted no puede abandonar este recinto sino hasta que el ritual sea completado.

—No te preocupes, querida. —Se aproximó hacia la inteligencia artificial para acariciar su barbilla—. La escasa resistencia que se ha opuesto a nuestro avance está casi aniquilada. Les pediré a los líderes y generales de cada sector que mantengan sus posiciones hasta que todos los símbolos hayan vuelto a nosotros. Después de eso, no existirá nada, ni tampoco nadie que se oponga a nuestro deseo de convertir a este universo y a todas sus dimensiones en nuestro propio parque de diversiones personalizado. El Consejo de los Octillizos se someterá a nuestras órdenes y a esos entrometidos del Tribunal Mágico me encargaré de borrarlos de la existencia yo mismo. ¡Habrá música, sangre, baile, juegos y arena cósmica adulterada! Con el poder de los Weirdmasters de nuestro lado, nosotros cuatro seremos los nuevos reyes por toda la eternidad y tú, mi pequeña flor de muchos pixeles, estarás sentada junto a mí en la cima de todo.

—Como usted diga, Bill-sama... Haré todo lo que usted diga. —Giffany suspiró, dejando escapar pequeños corazones, estrellas y gatitos pixelados desde sus ojos, causando repelús en Gideon y en el Cambia-formas, quienes se miraron incómodos el uno al otro.

—Muy bien, es hora de que partan al Almacén 88 2/3 y me traigan a esos tontos. Pero antes... —Bill se dirigió una vez más hacia Mr. Slay, colocando su mano derecha sobre la frente del confundido hombre. En ese momento, el cuerpo de Preston Northwest comenzó a fundirse en un aura brillante de color amarillo junto con el de Mr. Slay, brillo que se expandió por toda la caverna, provocando que el resto de los presentes tuvieran que cubrirse los ojos, si es que no querían sufrir de profundas quemaduras en las retinas—. Me gustaría que me hicieras el favor de darles un saludo más personal. Veamos lo que el libro negro de Hein es capaz de hacer.

-o-

—¿Al Axolotl? ¿Piensan contactar al Axolotl? Pero... Eso es algo imposible. Intentar hablar con el creador del universo mismo en persona es una locura. Ni siquiera sé si eso es algo factible. —Declaró Stanford, manteniéndose escéptico.

—No es imposible. —Blendin lo contradijo—. Yo fui un importante miembro del Escuadrón de Remoción de Anomalías del Tiempo, eso significa que trabajé bajo las órdenes directas del Bebe del Tiempo y sé que él conservaba algo dentro de su bóveda personal con lo cual era capaz de comunicarse con el Axolotl de forma directa en caso de alguna emergencia. No sé exactamente de qué se trate, pero sé que se encuentra ahí junto con todo su arsenal personal de armas. Por tal motivo, nos dirigiremos al Almacén 88 2/3, accederemos a su bóveda y recuperaremos aquello que nos permitirá hablar con el dios supremo. Solo así podremos saber en dónde encontrar un Transgresor Dimensional.

—Utilizar un Transgresor Dimensional para extraer a Bill del cuerpo de ese hombre y después utilizar la Rueda del Zodiaco para devolver a Bill a su propia dimensión. —El anciano se llevó los dedos índice y pulgar de su mano derecha hacia su barbilla para analizar la situación—. Eso suena como el plan más arriesgado, loco y peligroso que jamás se haya hecho en toda la historia del universo. Pero parece ser que es la única opción que tenemos. Aunque todavía hay un problema, ¿Cómo vamos a sobrepasar la seguridad del Almacén? Les recuerdo que este cuenta con una inteligencia artificial increíblemente avanzada. No pude hacer nada para irrumpir en su sistema.

—No necesitamos irrumpir en el sistema, ya que por fortuna, al ser parte del Escuadrón de Remoción de Anomalías del Tiempo, yo poseo una llave con la cual obtendremos acceso directo a la bóveda del Bebe del Tiempo. ¡Y la tengo justo aquí! —El viajero metió la mano en uno de los compartimientos traseros de su propio atuendo. Sin embargo, al no hacer contacto con el artefacto, este comenzó desesperadamente a hurgarse el resto de los bolsillos—. Esperen un segundo... Sé que la tengo aquí... En algún lugar...

—No tienes la llave, ¿Cierto? —Pacifica le clavó una mirada poco amistosa.

—No puede ser... Sé que debe estar aquí... En algún lugar... —Su inquietud, fue transformándose poco a poco en pánico—. ¡Es imposible que la haya perdido! Está hecha a base de Cretar: Una especie de aleación metálica extraída del planeta Krón. Es alargada y tiene bordes triangulares. Quizá se cayó por aquí... ¡Maldición! Si tan solo tuviera una fotografía o algo que pudiera mostrarles para que puedan identificarla y así ayudarme a buscarla.

—¡Un momento! —Dipper exclamó, cuando aquella vaga descripción ofrecida por Blendin le fuera más que suficiente para hacerle recordar la travesía que tuvo que vivir dentro de algunos de los rincones más inhóspitos y secretos que la mansión Northwest tenía para ofrecer. Eventualmente, a Dipper se le vino la imagen de aquél objeto extraño con el cual tuvo acceso a la habitación secreta que contenía en su interior al libro negro, el cual poseía una descripción exactamente igual a la de la llave que Blendin había descrito—. ¡La llave de la bóveda de los Northwest! ¡Eso es! —Ante las miradas de perplejidad del resto del equipo, Dipper busco entre sus ropas el objeto que le había logrado arrebatar a Preston, lo cual resultó inútil cuando se percató de que este lo había ocultado en su antiguo cambio de ropa—. ¡Oh no! ¡La llave! ¡La llave estaba en mis otros pantalones! ¡Mía! ¿Qué le hiciste a mi otra ropa?

—La quemé. —Admitió la mujer sin sentir culpa alguna.

—¿Qué hiciste qué? —Preguntó el niño, alterado y asustado.

—¡La quemé! —Reafirmó Mía—. Su olor era insoportable. Deberías considerar bañarte, lavar tu ropa con más frecuencia y conseguir un desodorante.

—¡No estoy hablando de eso! —Su cara enrojeció a causa de vergüenza que le produjeron las declaraciones de Mía. En especial cuando estaba plenamente consciente de que Pacifica estaba escuchando todo lo que se estaba hablando durante la reunión—. Me refiero a que si no verificaste que hubiera algo en los bolsillos de mis pantalones cortos.

—¡Claro que no! ¿Acaso crees que soy tu madre para hacer tal cosa? —Su respuesta ocasionó que Dipper estuviera al borde del colapso. Sin embargo, la expresión del chico cambió radicalmente a una de completo alivio en cuanto Mía, ahogada en risas, extrajo el artilugio desde dentro de su guardapolvo para enseguida arrojárselo—. ¡Solo bromeaba, niño! ¡Aquí está la llave que buscas! ¿Sabes? Desde que la vi supuse que tendría un gran valor monetario en el mercado de baratijas interdimensionales. Así que quise guardarla hasta que llegara el momento en el que pudiera venderla en uno de los puestos de intercambio desperdigados por la galaxia. Es una lástima, apuesto a que me hubieran dado una buena cantidad de créditos por ella.

—¡Aguarden un minuto! —Blendin irrumpió—. ¿Cómo y dónde consiguieron esa llave? Se supone que solo los activos del escuadrón de remoción de anomalías del tiempo tienen acceso a ese tipo de llaves.

—No tengo idea... —Dipper contestó—. Lo único que sé, es que esta estaba en posesión de Preston Northwest. No estoy seguro de cómo la consiguió o de cómo llegó hasta él, pero eso no importa ahora. Gracias a esto ahora podremos accesar a la bóveda del Bebe del Tiempo sin complicaciones.

—De acuerdo... —Stanford retomó la palabra, poniéndose de pie—. El plan está listo. En cuanto salga el sol, nos dirigiremos hacia el Almacén. Aún restan aproximadamente unas cuatro horas antes de que amanezca, así que procuren dormir un poco. Mía, Vulkan, Jynz y yo nos turnaremos cada hora para vigilar la entrada y advertir al resto sobre posibles amenazas. Sería desafortunado que más Areneros poseídos por Impuros de segunda categoría o superior, supieran en dónde nos escondemos.

—¿A qué se refiere exactamente con "Impuros de segunda categoría"? —Preguntó Wendy, intrigada—. ¿Qué incluso ya se tomaron la molestia de clasificar a esos monstruos?

—Esa clasificación ha existido desde siempre, jovencita. —Explicó el hombre, ajustándose los anteojos—.Los Impuros, o Exilium; como se les conoce en otras dimensiones alternas, son la raza más peligrosa y voraz que ha existido desde que el hermano gemelo de Axolotl: Tloloxa, aquél al que ustedes conocen mejor cómo Vórtice, se reveló contra él. Se dividen en cinco categorías: Tenebris, Cranium, Avium, Mortem y Phaedra. Cada una más mortal y poderosa que la anterior. Todo estaba en perfecto orden, hasta que Bill los invocó en nuestra dimensión por medio del libro de Hein. Tan solo espero que en el Almacén encontremos aquello que buscamos para ponerle un fin a esto.

—Yo también... Yo también... —Murmuró Dipper, agachando la cabeza y dejando escapar un largo suspiro.

Luego de la breve charla, cada uno de los miembros del equipo, con la excepción de Stanford, se recostó alrededor de la única fuente de luz para intentar descansar antes de comenzar su gran travesía en el interior del Almacén. Por su parte, el anciano se dirigió hacia la entrada de la cueva dentro de la formación de roca, para así montar una pequeña guardia, manteniendo desenfundado su propio rifle de plasma y vigilando constantemente el área próxima por medio de un par de binoculares. Fue así, como Mía, Wendy, Vulkan, Blendin, Jynz y Pacifica cayeron rendidos casi inmediatamente, sobre todo la joven de cabellos rubios, quién había optado por acurrucarse sobre el pecho de su novio, para así ser arrullada por medio de su profunda respiración. Dipper, quien se encontraba experimentando por primera vez la sensación de dormir al lado de una chica, a pesar de los normales, pero repentinos e involuntarios cambios en su propio cuerpo, rodeó a Pacifica con sus brazos, procurando tenerla lo más cómoda que le fuera posible. No obstante, no transcurrieron ni veinte minutos, cuando Dipper, al no poder conciliar el sueño a causa de las preocupaciones que lo acongojaban, decidió levantarse, teniendo especial cuidado de no despertar a Pacifica, para dirigirse hacia dónde se encontraba su tío al margen del peligro.

—¡Dipper! ¿Qué estás haciendo aquí? Deberías tratar de descansar.

—Lo sé, tío Ford... Es solo que, todo este asunto de salvar al universo me mantiene un poco intranquilo. Tú sabes... No puedo dejar de pensar en lo que nos pasará si fallamos.

—Sé cómo te sientes, Dipper. El miedo es algo normal. A decir verdad, yo también estoy un poco asustado por lo que pueda pasar. Pero, ¿Sabes algo? Las emociones como el miedo, son las que nos hace seres humanos y las que nos diferencian de sujetos como Bill que lo único que buscan es el beneficio propio.

—Aún sigo sin poder creer que Bill fue capaz de manipularte a ti. A la persona más increíble que haya podido conocer en mi vida.

—Gracias, sobrino, pero para serte franco, no soy alguien que pueda ser objeto de alabanzas. Cometí muchos errores durante mi juventud, y a pesar de que he tratado de redimirme haciendo buenas obras a lo largo y ancho de la galaxia, tengo la sensación de que mientras no haya acabado con Bill para siempre, mi conciencia nunca estará tranquila. Él ha sido el responsable de la desaparición de dimensiones y realidades enteras. Millones de vidas han sido aniquiladas a causa de él. No puedo permitir que esto siga así cuando fui yo quien construyó ese portal en primer lugar y estuvo a punto de causar el apocalipsis en nuestro mundo.

—Sí, pero fui yo quien lo dejó apoderarse de ese libro. En ese caso yo soy el culpable de que nuestro universo se encuentre en peligro de desaparecer.

—¡Oye! No te desanimes, Dipper. Yo tenía el triple de tu edad cuando me di cuenta de ello. Ahora que he podido conocerte mejor, me doy cuenta de que tú y yo tenemos más cosas en común de lo que parece. Es como hablar con una versión más joven de mí mismo. Con la excepción de que yo nunca tuve suerte con las mujeres. Doce años y ya tienes a una linda chica que a juzgar por la forma en la que te mira, estoy seguro de que ella daría su vida por ti.

—Nuestra historia es complicada. Y es que sus padres no son precisamente las personas más flexibles con las que puedas mantener una conversación. Pero a pesar de ello, Pacifica resultó ser una buena persona que se desvió hacia el mal por culpa del modo de ver la vida de ellos. Es una fortuna que haya retomado el buen camino. —Desvió sus ojos hacia lo montículos de arena a sus pies, como si quisiera evitar tener un contacto visual directo con su tío. Acto seguido, sus mejillas comenzaron a tornarse de color rojo—. Me gusta su compañía, es agradable tenerla cerca de mí. Cada vez que escucho su voz y huelo su cabello, siento como mis preocupaciones se disuelven en el aire. La quiero mucho... Podría decir incluso que yo... La amo...

—Esas son palabras mayores, sobrino. Pero es reconfortante encontrar esa clase de sentimientos en un lugar tan hostil como este. Oye, te propongo algo, te contaré todo acerca de mis viajes y te enseñaré a cómo convertirte en un investigador profesional, pero a cambio, tú tendrás que enseñarme a ser menos tímido con las chicas. Verás, hay una bella asturiana con la cual me gustaría tener un acercamiento para conversar y conocernos mejor. ¿Qué dices?

—Tío Ford, tenemos un trato.

Dipper y Stanford estrecharon las manos en medio de una risa fraternal, mientas Pacifica los miraba desde la oscuridad y salvedad de la cueva, con una sonrisa en el rostro provocada por las palabras que Dipper había dicho conforme a ella, pero a la vez sintiendo un enorme hueco a la atura del pecho, a causa de jamás haber experimentado una sola muestra de amor paternal, tal y como la que Dipper y su tío habían desarrollado en tan solo un breve periodo de tiempo.

Continuará....

Ese Dip ya está pensando en la boda, bueno no tan así, pero tal parece que gracias a todo lo que ha vivido junto a su llama ahora se han vuelto inseparables. Bueno, ahora sí, basta ya de capítulos llenos de explicaciones. En el próximo finalmente nos adentraremos en el Almacén 88 2/3. Las personas que estén leyendo "Ojos de Demonio" sabrán más o menos qué es lo que les aguarda a nuestros protagonistas. Les recuerdo que este fic y Ojos de Demonio se encuentran en el mismo universo, pero en dimensiones distintas y con una diferencia de cuatro años.

Bien, espero de corazón que les haya gustado y nos leemos hasta el próximo capítulo. Muchas gracias por todos sus comentarios, los cuales a veces no puedo responder, pero que leo y aprecio mucho. Pasen un buen fin de semana. La próxima actualización será el día 25 de Agosto. ¡Chao!