Capitulo 11 La Duda
Sentir todas las cosas en un solo momento es tan posible como que el sol sale cada día.
Danny... ¿Por qué dices que no fue así?
Por última vez he girado la vista hasta la puerta que cerré para separarnos, escucharle gritar me hace creer que de verdad está muriendo de alguna forma con mi llegada.
¿Pero cómo iba a dejar de amarle?
Al subir al ascensor me he observado a los espejos, no podía ser, podía verle en los espejos. Cerré los ojos y los volví a abrir en el mismo segundo, en realidad sólo estaba llorando nuevamente.
-Ya no debes llorar más Jesse, recuerda que él nos hizo mal.
He limpiado las lágrimas con mis manos y he bajado del ascensor hacia el hall central, tenía una decoración muy hermosa, me hacía recordar a los bosques de bambú de china.
Tenuemente iluminada he pasado hasta la salida mientras miraba al suelo. Unos tacones oscuros han pasado a mi lado, le seguí con la mirada, era una mujer un poco más adulta.
Me ha llamado la atención porque se vestía muy bien, además llevaba muchas joyas costosas, parecía una mujer de la realeza.
Sin darle mayor importancia y preocupándome en mis propios asuntos he salido de este hermoso edificio.
Le he dado un vistazo a la dirección que se encontraba sujeta a la esquina y me he sorprendido.
-¿Enserio Danny?, ¿De verdad decidiste vivir con ella en nuestro lugar?
Sonreí levemente y he negado, de verdad si me podía sorprender cada vez más.
-¡Hey! ¡Jesse!
Me he volteado rápidamente hacia la voz familiar y he sonreído ampliamente, era Cris que venía atrasado en su Mini Cooper.
-¿Te llevo?
He vuelto a mirar al edificio, pasee la mirada hasta el departamento en el que estábamos, mis manos se convirtieron en puños, y con toda mi fuerza de voluntad asentí subiéndome al automóvil de Cris.
Cada calle que me alejaba de Danny me hacía sentir más prisionera de sus pensamientos, pensaba en sus palabras, en lo que sus ojos furiosos decían al verme.
Que rabia me da todo esto...
Sujeté mi cabeza en una de mis manos e intenté solo ver por la ventana.
Las nubes comenzaban a cubrir todo este lugar, el tiempo entendía exactamente como me sentía.
-¡Señorita!, ¿Qué le suceden a sus ojos?, parece que ha llorado más de una noche. –Cris me ha observado de reojo y yo a él.-
-Dime...Cris, ¿Alguna vez te has sentido muy decepcionado de alguien que tú quieres mucho?
-Si yo quiero a una persona podría sentir rabia. –Comentó él doblando en la costanera.- Pero para obtener decepción, ese alguien debe ser a quién amo. –Él ha reído de forma dulce por encima de uno de sus hombros.- ¿Soné muy cursi?
Negué y dejé caer mis manos a mis piernas con algo de cansancio.
-A veces me siento un alfil en la historia que tejí y no terminé nunca.
-¿Te refieres a ese baile del que me contaste?, ¿Al que no fuiste?
Cris se detuvo de golpe, el que iba delante se detuvo sin dar previo aviso y los dos quedamos pegados, él al volante y yo al tablero.
Aquel efímero momento me ha devuelto mis risas, las que siempre me han pertenecido por nacimiento.
-¡Bueno a veces sucede que me quedó pegado al cristal!, Así que esta vez fue menor. –Cris ha pasado su mano por su cabello y ha seguido avanzando por un costado.-
-Retomando un poco el tema, me refiero a que no entiendo porqué soy yo la culpable, siento que él cree que yo soy la peor por haberme marchado de aquí.
-Pero tienes que admitir que lo tuyo fue muy drástico. –él ha ladeado su cabeza y ha sentido.- Jesse, sabes algo, todo este tiempo lo he estado pensando detenidamente, tú historia es muy confusa. No entiendo porqué él no te buscó.
Lo he pensado un momento.
Era cierto. Danny tampoco había salido corriendo a buscarme. ¿Entonces realmente está jugando?, ¿O dice la verdad?
-La verdad no lo sé, ignoro el porqué.
-Pero no puedes ignorar el porqué, después de todo esa podría ser la respuesta del porqué él hizo eso esa noche.
-¡Pero no es posible!
Cris se estacionó y apagó el motor antes de verme y tomar una de mis manos.
-Te aseguro que en este mundo hay más personas dispuestas a hacer el mal que para hacer el bien.
-¿Y tú, que prefieres?
Cris me ha observado fijamente. El silencio se hizo presente entre ambos, y poco a poco la tensión me invadió.
Él se ha acercado a mi rostro lentamente, absorbiéndome en sus ojos verdes como quién roba un país.
-Yo prefiero...
-S...¿Sí? –Estaba un poco avergonzada con este contacto, sentía que mis piernas estaban temblando.-
-¡Prefiero hacer el amor!, ¡Ah! ¡Eso sí que es lo mejor de todo!, ¿O no? –Se ha reído a carcajadas mientras se bajaba del Mini.-
-¿Hola? –Me dije a mí misma, de pronto me sentí totalmente sacada de onda.-
-Anda, baja y vamos, creo que te extrañare cuando te vayas niña, ya sólo te quedan dos días aquí y los pasillos volverán a ser grises y aburridos. –Cris ha tendido su mano, la he sujetado para bajar.-
-¿Por qué no fuiste humorista? –Reí mientras pasaba delante de él para pasar al ascensor.-
-Ah... Animo las mañanas de todo el país en el matinal, con eso me siento ya pagado Jesse, ahora, promete que pensarás en lo que te dije, no te dejes llevar por nada que no sepas. –Cris me ha guiñado mientras bajaba del ascensor.- Piénsalo.
Las puertas del ascensor se han vuelto a cerrar y seguí avanzando sin darme cuenta, he llegado al piso en el que Danny trabaja, por supuesto él no está aquí.
Me he bajado en este piso con la esperanza de encontrar a cynthia, no le he visto y necesitaba de su apoyo en este momento.
Pasé por su escritorio, ella estaba allí tecleando en su celular un mensaje para su jefe, tenía el ceño fruncido, parecía que no estaba de humor.
-¡Cara de jurel! –Le dije con la esperanza de que su rostro cambiase, pero al contrario, se ha volteado igual de enojada.-
-¿Cómo?, sabes, aquí no es el lugar para llamarnos así Jesse, el jefe podría enfadarse por nuestras estupideces.
-Cynthia...¿Qué sucede contigo? –Me he sentado frente a ella y la he visto confundida.-
-¡Nada!, es que... Luis...Bueno, el jefe, me ha dicho que no estaba feliz con el desempeño de Danny, no lo ha visto llegar esta mañana y quiere mandarlo a paseo, quiere despedirlo.
De pronto me he sentido un poco culpable, Danny saldría de este lugar por mí, todo por mi jugarreta de esta mañana.
-¿Estás segura?, Pero...bueno... de pronto quizá él ya tenga a alguien para ocupar su lugar.
-¿Qué dices? –Ella me ha observado aun más enojada que antes.-
Sí, es oficial, las neuronas se me fundieron. ¿cómo fue a decir semejante estupidez?, ¿y ahora?, ¿Danny aun estaría allí?
-Tengo que irme. –Dije levantándome.-
-¿No sabes dónde está Danny?
Un temblor me ha recorrido la espalda, la mirada de cynthia estaba cargada de rabia, si ya estaba colmada yo la terminé por hacer desbordarse, se ha levantado y me ha visto a los ojos.
-Escucha Jesse...
-Dime –Dije con algo de temor, después de todo la culpa me estaba comiendo.-
-No es buena tu presencia para Danny... pensé que él ya lo había olvidado...pero ya ves, está quizás dónde y su trabajo está pendiendo de un hilo. Jesse él tiene una familia que sostener, por favor...ya no hay tiempo para los juegos de la adolescencia.
Como un espejo me he roto de pié, ¿Una familia?, no, eso no podía ser. Danny no lo hubiese ocultado... ¿O sí?
-Nose de que hablas, jamás he sido la razón de nada para Danny. Lo sabes bien, tú sabes que él estuvo bien siempre consigo mismo.
-¿Enserio? –Cynthia posó sus manos en la cintura y me miró incrédula.- sabes que a Danny le ha costado llegar hasta donde está ahora, o quizás no lo sabes, ya que no estuviste aquí, no sabes lo que le costó obtener su título profesional para ser periodista. Te aseguro que el costo lo sigue pagando aun.
-¿De qué rayos me hablas cynthia?, ¡De pronto te desconozco tanto! –Me he volteado.- no es necesario que sigas diciendo nada. Yo no deseo estar con él.
-Qué bueno que te comportes como una adulta Jesse, ahora entiendo que de verdad le quieres.
La he observado de reojo con indiferencia, ella había bajado sus manos y su mirada ahora era más compasiva.
-Si no le quisieras...seguirías interfiriendo en su vida, valoro que le cuides así, enserio, y perdóname si fui una tonta al callarme lo que Danny escondía, de una u otra forma no los quería ver sufrir a ninguno de los dos. Solo espero que puedas perdonarme algún día por eso.
¿Cómo iba a responder a eso?, yo sabía que ella no lo decía con una mala intención pero se ha comportado tan diferente que nose muy bien que pensar.
He bajado hasta mi lugar de trabajo y comenzado a tomar fotos a los de nuevo ingreso.
Estaba tomando fotos sí. Pero también estaba pensando en Danny, ¿Dónde está?, no ha vuelto en toda la tarde.
-¿Jesse? –Cris ha abierto la puerta oscura y la luz del atardecer me ha iluminado de lleno en los ojos.-
-¡Auch, cris!
-Perdona –Río y se sentó a un lado de mí.- No te vi en el almuerzo.
-Es que he traído algunas barras de cereal y la verdad no tenía ganas de comer.
-Mmm... supongo que esa cara se debe a Danny, ¿No? –Él sonríe y me abraza por los hombros.- ¡Ánimo!
Aquella sonrisa y palabra me han hecho imaginar una grieta en el suelo con un parche adhesivo encima, no repara nada pero al menos une un poquito.
-Estoy...cansada, de todo esto... -He mirado a un lado casi con nostalgia.-
Cris me alzado una ceja y me ha tomado por los hombros para poner distancia entre los dos.
-¡Oye! –Ha demandado con fuerza.-
Le he observado con las mismas ganas que tenía antes y me he limitado a encogerme.
-¿Tú de verdad crees que él no te pensó en todos estos años?
Negué.
-Él me olvidó... y se llevó todo con él. –Mis ojos comenzaban a llenarse nuevamente, pensaba en lo peor, en que quizá le había sucedido algo horrible después de marcharme.-
-¿Sabes por qué lloras?, Jesse... te contaré algo, pero es un secreto entre los dos.
Asentí levantando la mirada de la cuál escurrían unas gotas que rodaban por mis mejillas, Cris las ha borrado con sus pulgares y ha comenzado a decir.
-Cuando Danny llegó a este lugar, pensé que venía a arrebatarme mi lugar. Siempre estaba cumpliendo las metas, subiendo el rating y llegando puntual. El jefe estaba tan feliz por su desempeño que después de unos meses lo ascendió al sector de prensas, allí comenzó haciendo un reportaje, aquel reportaje trataba sobre las personas que migran a España por razones económicas, para mejorarla, me refiero.
-¿Qué? –Sorprendida le he pedido que me siguiese contando, entonces él asintió y prosiguió.-
-Danny viajó a España buscando a las supuestas personas que migraron tres años después de que ustedes se graduaron.
-Pero...Yo...
-¿Nunca supiste de esto?, por supuesto que no, ya que después de un tiempo el canal dejó de financiar el viaje de Danny por el bajo rating que recibió de la audiencia y terminaron por ponerlo de presentador en las noticias.
-¿Por qué viajó allí?, no entiendo...Danny no sabía de mi paradero. –He mirado al techo.- no, no es posible.
-Bueno yo nose por qué eligió ese país, no sé si fue por ti, o solo fue casualidad, lo que si es cierto es que Danny hizo algo, y yo... -Hizo una pausa en su relato y me miró fijamente, de pronto su mirada compasiva me llenó de mucha paz.- sinceramente pienso que fue en busca de ti y que no descansó nunca hasta que volvió.
El amor no lo comprende, como dos personas tan diferentes se han enamorado, Danny es un deportista que podría viajar a cualquier lugar del mundo, que quiere ser el rey de todo lo que existe, dueño de su destino. Y yo, Jesse, soy la fantasía y prefiero quedarme en casa. El amor no entiende esta ironía.
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