Capitulo 4
Joe estaba sentado en un tronco botado de forma horizontal, mientras jugueteaba con la luz de su linterna. Impaciente y bastante nervioso, esperaba que llegara la leña para hacer el fuego pues le preocupaba la tardanza de las chicas a esa hora de la noche. Peyton entre tanto jugueteaba con una varilla dibujando figuras abstractas en la tierra.
— ¿Por qué se demoran tanto? — Preguntó Peyton — tengo frío — añadió frotándose los brazos cubierto por un delgado chaleco de lana
— No lo sé — respondió Joe — pero me preocupan — él iluminó con su linterna hacia la dirección por donde Anna y Julie fueron a buscar leña, y en ese instante la morena llegaba con la carga de leña que recolectó sin demostrar cansancio pues para ella, no era ningún esfuerzo acarrear un montón de madera cortada por muy pesada o gruesas que estas sean. Joe se puso alerta a penas la vio llegar, pues notó algo extraño, por supuesto, era que ella llegó sola notando la ausencia de Anna.
— ¿Y Anna? — preguntó él poniéndose de pie de manera abrupta
— Se quedó en el sendero, dijo algo que no entendí ... sentimos una ventisca y ella se dirigió en dirección al claro y me pidió que volviera aquí
— ¿Y la dejaste sola? — respondió Joe cruzándose de brazos
— ¿Estando de noche? ¡Estás loca, Julie! — terció Peyton poniéndose de pie ella también. Peyton era una chica delgada de estatura mediana y piel color crema, su cabellera castaña y semi ondulado llegaba hasta la cintura y sus ojos eran de color miel
— ¡Pero, pero no estábamos tan lejos de aquí! — dijo Julie poniéndose un poco nerviosa— se detuvo un momento, y creí que venía de tras de mi
— ¿En qué parte del bosque estaban? — preguntó Joe con seriedad, como reprendiendo a la morena por la situación que estaban viviendo
— En el sendero de flores que está por allá — dijo Julie indicando con el dedo el oscuro camino por el que llegó
— Bien, iré por ella— dijo Joe— chicas, quédense aquí por si regresa
— Sí— dijeron ambas al unisonó.
El joven profesor comenzó a caminar sigilosamente, mientras iluminaba con su linterna el frondoso camino de árboles gruesos y espesos arbustos, hasta llegar a un lugar más despejado. Un sendero bordeado de flores, (el mismo en el que horas antes las chicas recolectaban leña) pero de pronto su luz comenzó a parpadear indicándole que necesitaba más baterías pues las que tenía ya se estaban agotando, por lo que tuvo que correr de vuelta al campamento, sin darse cuenta de que estaba caminando en círculos, sus pies lo llevaron de vuelta al sendero. Frustrado y desesperado comenzó a buscar un indicio, una piedra o algo que pudiera reconocer para no volver a perderse, pero nada le podía dar una referencia clara de cuál era el camino correcto, salvo una luz lejana como de fogata, que se encontraba muy cerca de lo que parecía un claro; fue lo que acaparó la atención del baterista. Él se preguntó de adonde había salido, pues no recordaba haberla visto antes. Entonces sacó la rápida conclusión de que quizás siempre estuvo ahí, pero Joe estaba muy ocupado buscando a Anna con la ayuda de una linterna que no le serbia de mucho en aquel momento obligándose a regresar al campamento.
Tentado, siguió aquel camino para averiguar de qué se trataba. Pudo ver a alguien mas adelante, una persona que se ocultaba tras un árbol grande
— ¿Anna? — Dijo para sí mismo — ¡Anna! — llamó al poder reconocer su delgada figura, pero ella no parecía escucharlo, se adelantó aun más cerca de la fogata y se escondió tras una roca lisa. Entonces Joe la siguió y se escondió tras el mismo árbol del cual Anna había salido momentos antes, pero él fue más astuto y con gran agilidad comenzó a treparlo hasta llegar a una rama cuya ubicación le permitía ver todo lo que sucedía desde una vista panorámica
Tanto Anna como Joe pudieron presenciar el ritual de iniciación. Una total locura, según su parecer, algo que debía detener, o en su defecto, una razón para intentar proteger a Anna y alejarla de Darien; dado a su escepticismo, no se permitía creer en cosas como la magia o los fantasmas, no, sin embargo él no ignoraba la existencia de algunas extrañas religiones, sectas y logias cuyas practicas él aborrecía profundamente.
Pese a lo que vio , Joe se negaba a creer en la magia porque a que fue testigo ocular y oculto de un acto mágico realmente increíble; se convenció de todo lo que presenció, no era más que alucinaciones producto de la falta de sueño o de alguna hierva alucinógena que tocó sin querer.
Una vez terminado aquel extraño ritual mágico, él esperó un rato hasta asegurarse de que no hubiese nadie cuando saltara del árbol. Desde su lugar vio como Anna salía corriendo de vuelta al sendero y él sin prestar atención a la conversación de Darien con su hermana Molly, saltó del árbol aterrizando con los pies y manos para ir tras de su amiga, pero al incorporarse por completo se encontró con la sorpresa de que Darien se cruzó en su camino impidiéndole ir por Anna
— Sabia que eras raro, sabía que ella no merece a alguien como tú — dijo Joe acercándose amenazante a Darien. Él no dijo nada, simplemente lo miraba a los ojos fijamente
— ¿Qué? ¿Qué haces? Sal de mi camino, tengo que ir por Anna
— Ella estará bien — dijo por fin Darien en un tono serio sin quitar sus ojos imponente de la vista del ojisverde
— ¿Estando contigo? No lo creo — replicó Joe dispuesto a empujar a Darien para sacarlo de su camino, pero éste se interpuso una vez más bloqueándole la pasada
— ¿Qué fue lo que viste? — preguntó Darien en un tono imperativo
— ¿A caso importa?
— ¿Que- fue- lo - que- viste, Joe? — insistió Darien apretando la mandíbula
— Todo, todas tus rarezas de secta satánica, y Anna también, por fin se dio cuenta de lo tocado que estas
— Bien, me encargaré de eso luego
— No te vas a volver acercar a ella
— ¿Es una amenaza? — preguntó Darien con ironía
— Es una advertencia, si te acercas a ella lo pagarás — contestó Joe con fiereza
— Ya lo veremos — dijo Darien agarrando a Joe por la cabeza y obligándolo a mirarlo a los ojos, Joe intentó forcejear y resistirse, pero las manos de Darien apretaba con fuerza su nuca impidiéndole moverse mas.
— Escúchame — dijo mientras sentía como sus poderes fluía en su cuerpo como electricidad — olvídate de lo que viste y de este momentáneo encuentro. Tú no has visto nada, ni siquiera a Anna — Darien hablaba en un tono suave, tranquilizador, pero a la vez imperativo mostrando con claridad su don de control mental sobre otras personas— y ahora volverás al campamento y dirás que no la encontraste
— Debo volver al campamento — repitió Joe como un robot
— Exacto... ahora vete de aquí.
Una hora más tarde, Joe volvió al campamento y rápidamente se acercó al fuego que las chicas habían hecho en su ausencia.
— Nada, ninguna pista de ella — dijo el baterista resoplando de cansancio, en su rostro las gotas de sudor perlaban su frente y se deslizaban por su sien y mejilla; su camiseta musculosa estaba empapada en la parte del cuello y el pecho como sí hubiese corrido kilómetros. El sweater gris de lana que traía puesto momentos atrás se lo tuvo que quitar y amarrárselo a la cintura
— ¿Seguro que buscaste bien? — Preguntó Peyton — tal vez se adentró más allá del claro ¿buscaste en el claro?
— Busqué en el claro pero no vi nada, eso sí, vi rastros de una fogata recién apagada, pero nada de Anna, y en todo caso , tuve que regresar... corriendo por mas batería porque, a mi linterna se le está agotando la que tiene.
Darien borró todo rastro de su memoria original implantándole la idea de que lo que vio en realidad fueron restos de una presencia, pero que ya no estaba cuando él llegó al claro.
— Eso significa que está con alguien — dijo Julie en un tono tranquilizador— ¿volverás? — preguntó ella de manera indiferente sin embargo por dentro estaba llorando de angustia y desesperación, sólo que no lo demostraba. Joe la miró y frunció el ceño, él estaba bastante molesto por haber dejado sola a Anna en el bosque y lo que más le molestaba era, que la morena no pareciera estar consciente de su error.
— Obvio, no dejaré que esté por ahí sola en un bosque, menos si está de noche
— De seguro está con alguien — insistió la morena de ojos miel
— ¿Como estas tan segura de eso? — preguntó Joe al tiempo que entraba a su carpa y buscaba su mochila
— Acabas de decir que viste rastros de una fogata en el claro y ademas ahora que lo mencionas, recuerdo que de pronto una ventisca sopló y pude oír un susurro
— ¿Un susurro? — Quiso saber Peyton — ¿de quién?
— No lo sé, se escuchaba un poco lejano, creí que era el viento, pero cuando ella se alejó y me pidió que volviera aquí sola, creí que iría a ver de quien trataba, que tal vez reconoció a la persona que oímos
— ¡Eres una inconsciente, Julie! — Le reprendió Joe a la morena saliendo de la carpa — ¡debiste haberla seguido u obligado a que vuelva contigo!
— No pude— dijo ella en un tono sumiso
— ¿¡Que no pudiste!? ¿Qué excusa tienes? ¿ y sí se trata de un loco psicópata? ¿Y sí la secuestraron? — le gritó Joe;
Julie alzó la mirada y se la clavó con fiereza al ojisverde de cejas curva que en aquel momento la tenía casi vertical de tan fruncidas que la tenia, se acercó a él y lo enfrentó — ¡no, no pude! ¿De acuerdo? ¡Ella fue muy rápida, a demás, no es una niña y es bastante auto Valente como para que alguien esté de tras de ella cuidándola!
— Usa el sentido común, estamos en un bosque en medio de la nada donde seguramente hay animales salvajes o locos dementes— dijo él pensando lo peor.
Muy pronto se preguntó por qué Anna actuaria de manera tan impulsiva alejándose de sus amigos de esa forma, él sabía que ella era algo alocada y un tanto chispeante en su forma de ser, pero también sabía que ella no sería capaz de cometer un acto tan irresponsable como ese.
— Bien, cálmense los dos — interfirió Peyton parándose en medio de ambos como si estuviera separando una pelea de callejeros — esto no nos sirve de nada, no llegaremos a ninguna parte sí continúan discutiendo y buscando responsable
— ¿Qué sugieres entonces? — cuestionó Joe, Peyto suspiró y continuó hablando. De aquel grupo de amigos, ella era la más centrada
— Si está con alguien, en otro campamento, de seguro está bien, propongo esperar a que amanezca y sí para entonces no aparece vamos todos en su búsqueda
— Eso no me cómbense — replicó Joe cortante, por alguna razón que no se explicaba él sentía que algo no le calzaba en este asunto, como si debiera recordar algo, pero en su mente tenia pequeñas lagunas mentales.
— Julie no puede estar mintiendo, sí ambas escucharon la misma voz y Anna no volvió es porque está con alguien mas, quizá alguien de la escuela que también está acampando en este bosque. Debemos esperar
— No lo sé, esto no me consta... — insistió testarudamente Joe intentando aclarar sus ideas sin éxito alguno
— Joseph, por favor —le reprendió Peyton — no seas tan necio y date cuenta de que es lo más sensato que podemos hacer ahora ¿sí?
— Bien — dijo él suspirando de malas ganas — pero apenas salga el sol iremos por ella — sentenció.
Al día siguiente Anna llegó al campamento acompañada de Darien. Él se encargó de utilizar su poder de persuasión sobre Joe una vez mas. Enseguida hizo lo mismo con Peyton y Julie, convenciéndolos de que esa noche no ocurrió nada malo; de que lo pasaron muy bien al rededor de la fogata, y Anna estuvo ahí todo el tiempo. Ellos ni siquiera recordaron que estaban frente a la fogata sin dormir esperando a que amaneciera para ir por su desaparecida amiga, o que Joe estuvo una hora o dos buscándola dando vueltas en círculo entre el claro y el campamento aquella noche. Éste último también fue forzado a olvidar lo que vio, olvidó también que vio a Anna, porque Darien tuvo que redoblar sus poderes sobre él, ya que estando en el bosque él no pudo borrarle toda la memoria en realidad por el apuro de la situación.
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