Takemichi estaba en su cuarto cuando la puerta se abrió de golpe.

—Hinata— hablo el chico sentado en la cama —¿Te puedo ayudar en algo? — pregunto con una sonrisa

Hinata sintió repulsión —Alejate de Kisaki— le pidió

Takemichi la miro a los ojos, ladeó su cabeza como un pajarillo curioso de la petición —Lo siento Hinata no te puedo complacer en eso— respondió

La Tachibana lo miro furiosa —Puedes tener al que sea, porque quieres a Kisaki, yo lo ví primero — gruño

El Hanagaki se levantó de la cama y se acercó a la ventana —Esto no se trata de quién  lo vio primero— dijo con las mejillas sonrojadas —Quiero a  Kisaki, y se que le gusto— dijo apenado, días antes Kisaki había hablado con el sobre matrimonio

—Porque quieres tener al hombre que yo quiero— grito enojada Hinata —Porque siempre tomas lo que yo quiero.

Takemichi la miro sin entender —Yo no te he quitado nada, yo solo le dije mis sentimientos y el los acepto.

Hinata estaba furiosa rompió todo lo de la habitación, Takemichi dejo que sacará su frustración y enojo pero no espero sus palabras.

—Tu nunca serás de Kisaki, me encargaré de que tú y él nunca estén juntos — amenazó

Takemichi creyó que eran palabras de un corazón herido, que equivocado estaba.

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—Kisaki — llamo Takemichi acercándose a él con una sonrisa, el Tetta rehuyo a su tacto

—Hanagaki san— hablo causando un estrago en el corazón del pelinegro

—¿Pasa algo? — pregunto dolido por la forma de hablarle y la distancia que estaba poniendo

—He pensado mejor las cosas —dijo sin mirarlo, Kisaki sabía que si lo miraba sería débil ante el —No puedo corresponder a tus sentimientos— anuncio

Takemichi lo miro con sorpresa —Espera, ¿Porque?— pregunto de nuevo reteniendo las lágrimas que ya se formaban en sus ojos

—Eres bonita, no lo puedo negar, pero yo necesito más que una novia de escaparate — hirió con sus palabras al de ojos azules

Takemichi se abrazo a si mismo, el a diferencia de Hinata y Naoto no tenía un estudio mayor al de secundaria, y eso porque Nanami se había encargado de bloquear su crecimiento académico.

Las palabras de Kisaki le dolieron en el fondo, pegaron justo en su inseguridad.

—De acuerdo— la voz le tembló cuando lo dijo —Tetta San, no lo volvere a molestarlo —

Kisaki lo vio sus brillantes ojos estaban apagados no pudo retener más las lágrimas, se veía tan indefenso, lo vio dar la vuelta e irse, la mano de Kisaki lo traicionó y se estiró pero no pudo alcanzarlo y el tembló, había dañado al ser que más amaba.

Soltó un suspiro "No, eso es solo una farsa, de Takemichi, no voy a ceder"

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Hinata había visto a lo lejos a la pareja, sonreía satisfecha desde la ventana del cuarto de Takemichi, su plan había funcionado.

Por otro lado el pelinegro corría como si su vida dependiera de ello, hasta que chocó con alguien cayendo de sentón al suelo.

Mikey vio al Hanagaki en el suelo, su rostro estaba bañado en lágrimas y sus ojos se veían tristes, no pudo contenerse se arrodilló junto al pasando sus brazos por la espalda del joven.

Takemichi lloro con mayor fuerza, y se aferró al cuerpo de Mikey sus manos apretaron la camisa del joven rubio

—Sh, shh, ¿Que pasa?— intento consolar Mikey

Takemichi nego, no quería hablar de lo ocurrido con el Tetta, pero necesitaba desahogarse su corazón estaba herido.

Mikey acaricio torpemente los cabellos de Takemichi y lo dejo llorar.

Pasado un rato Takemichi se quedó dormido de tanto llorar, Mikey lo tomo en sus brazos con delicadeza y lo llevo a su habitación.

Con cuidado lo recostó en su cama, acaricio sus cabellos, Mikey no era conciente que de que cada segundo que pasaba Takemichi se adentraba más en su corazón.

Salió del cuarto, buscando la forma de enamorarlo, de hacer que se fije en el para poder destruirlo como el hizo con su hermano.

A lo lejos tres personas vieron eso, Kisaki a sus ojos Takemichi había encontrado un remplazo muy rápido.

Masato quien acepto de mala gana las palabras dichas por Hinata y Nanami, no podía creer que Takemichi tuviera tan frío el corazón para jugar con los sentimientos de las personas.

Y Naoto, su madre le había contado lo que pasó momentos antes y se negaba a creer hasta que lo vio con sus ojos.