Caminaba de un lado a otro, la frustración se hacía presente en sus rasgos mientras repiqueteaba con su bastón el suelo.

Llevaba ya mucho tiempo en la piel de quien atemorizada París, cuatro años para ser exactos y  en esos años se había encargado de hacerle la vida imposible a su enemiga eterna, poniendo en contra a algunos ciudadanos en contra de la heroína moteada.

—¡Agh! ¿Qué sucede con ese estúpido? — se quejó por lo alto.—Tiene horas que deberían estar aquí. 

Hoy era el día  que por fin tendría en sus manos a Ladybug, hoy por fin después de tanto tiempo le haría pagar por todo lo que le hizo en el pasado. Al fin se desharía de ella, su muerte sería tan dolorosa, la torturarla lentamente, le haría  ver su suerte antes de aniquilarla de este mundo.

Por eso, recurrió al antiguo enamorado de Marinette, ese que a pesar del tiempo aún seguía amándola con total intensidad pero que hace mucho tiempo rechazó.  Haciéndole la labor mucho más fácil para envenenar envenenarlo en su contra y poco a poco construir una red de odio hacia ella.

—¿Dónde estás?— quiso saber con ímpetu hablando a través del intercomunicador que tenía en su bastón.—Quedamos en algo.

Del otro lado de la línea se escuchó una pequeña risa.

—Por favor Ladydoptera, deberías controlar tu ira.—aconsejó fingidamente preocupado.—Mi amada chica y yo nos la estamos pasando realmente bien ¿No es así mi amor?

Algo parecido a un quejido se dejó escuchar haciendo que la morena sonriera.

—Ya veo cuánto se están divirtiendo, pero recuerda  Félix; traela de inmediato cuando acabes de satisfacerte.—Aún le queda mucho por disfrutar a la pequeña mariquita.

—Lo sé… perfectamente. —le costaba hablar por el arduo placer que sentía al entrar y salir de ella.— Ahora déjame disfrutar, my lady no puede esperar, ahora que mi hermano ya no es un estorbo no puedo dejar de tomar lo que siempre debió pertenecerme. Lo que hagas con ella después, realmente me da igual.

La llamada terminó, dejando a Lila con un gran sabor de boca, vaya que todo su esfuerzo estaba valiendo realmente la pena. Lo que comenzó como una tregua entre el antiguo Hawkmoth y ella se convirtió en el principio básico para apoderarse absolutamente de su miraculous. 

Ella jamás fue como los demás ciegos de París,  desde un principio se había dado cuenta perfectamente sobre la identidad que se ocultaba tras la máscara de Hawkmoth. 

Lo que le permitió que poco a poco se inmiscuyera más en los oscuros pensamientos de Gabriel Agreste, jugando con su mente y su debilidad por su esposa; asegurándole que había una forma más fácil de volver a verla.

Provocando que el mismo diseñador renunciara a todos, quitándose la vida.

Aprovecharse de la vulnerabilidad de Félix ante el gran compromiso de su hermano con quien fuera el más grande amor de su vida; solo fue otro peldaño más que superar, pero todo se volvió más fácil confesandole a su "Mejor amigo" su identidad secreta días antes de que le aconsejara que se le declarara a Marinette, asegurando que ella lo iba aceptar.

Cosa que en realidad no sucedió así y dando como resultado la catástrofe transformación de Tigris, segundo compañero de batallas del dúo y quien poseía  a Roarr, en Chat Blank.

Una copia inversa de quien sería su esposo en unos meses.

Prometiéndole que tendría la oportunidad de hacerle ver su suerte a quien le destrozó el corazón. 

Al final; todo resultó como ella esperaba y en cuestión de nada tendría en sus manos la cabeza de Ladybug. 

¡Hola! Aquí con un drabble dedicado a ℍ𝕒𝕨𝕜𝕞𝕠𝕥𝕙, y ¿Quién mejor para ser la sucesora de tal villano?, realmente pienso que ella es un gran potencial para derrotar a nuestro héroes favoritos 🙊🙊.

En fin, ahora si corto rollo por que me iré a seguir escribiendo para traer más actualizaciones de mis otras historias ♡.

  Kisses.