CAPÍTULO 6: BASTIÁN
Logré llegar al lugar y vi a Bastián, agarrándose a puñetazos con una cantidad inmensa de hombres.
¿Qué diablos estaba sucediendo?
Una flecha me hiere el brazo, carajo
Procedo a sacar la flecha de mi hombro y veo como me sangra, no es cierto me han hecho enfurecer.
Y veo a Bastián, empoderado como una bestia imparable masacrando a toda esa gente.
Ruedan cabezas, tras cabezas.
Miro al suelo y veo un arsenal de cadáveres
De pronto una cantidad de hombres se me acercan para atacarme y Bastián con un movimiento super rápido, que ni lo vi venir me agarra y tira para un lado.
El solo se enfrentaría a ellos, veo como los va derribando uno a uno.
Luego procede a acercarse y me levanta
- Bastián: "¿Me vas a ayudar o te vas a quedar hay mirando el show?, como siempre haces".
- Estoy herida.
- Bastián: "¿Es enserio?" <<vira los ojos>>
Procedo a mirarlo y veo que esta con sudor en la frente y todo en sangrentado, pero dudo que sea su sangre.
- Bastián: "Necesito que vayas al castillo y no dejes que salgan los hermanos de la Reina Gabriela".
- ¿Por qué?
- Bastián: "¡Maldita sea! Solo haz lo que te digo"
- No vas a poder con todos ellos solo
- Bastián: "¡jajaja!, hay hermanita... queras decir que tú no podrás con ellos sola. Tranquila solo estoy calentado".
Procedo a irme, pero volteo brevemente y veo a Bastián, confiado, preparándose para el siguiente ataque. Los demás tiemblan, no saben si atacarlo o huir. Yo ellos huyo mejor, no saben lo que les espera.
Si tan solo Bastián, fuera un marcado, fuera imparable, él es el mejor, incluso siempre me gana en combate, aunque es raro que les hayan enviados a muchos hombre si se sabe que él los acabaría.
Bastián no tenía arma y no dudo en arrebatar las armas de sus enemigos caídos. Cada movimiento que ejecutaba era una obra de arte mortal, una danza letal de acero que dejaba a sus oponentes atónitos.
Los hombres que lo rodeaban, aunque eran numerosos, se encontraron impotentes ante la maestría de Bastián.
Lo último que ví antes de correr hacia el castillo fue que los enemigos caían ante su implacable avance. Bastián no tenía miedo; en su corazón.
Iba corriendo tan rápido como pude y llegué al castillo.
El castillo está en silencio, que raro.
Procedo a caminar y mientras camino veo a alguien con prisa salir del gran salón, me acercó y abro la puerta.
No es posible lo que ven mis ojos.....
- Como pasó esto que hicimos mal, no logro entender.
Caigo de rodilla y me acerco al cadáver de.....
Atrás mío llega Bastián y ...
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