Dolor y promesa.

DANTE

Maldición, que extraña forma de encontrar a mi luna, mi mujer predestinada. La deje en una habitación con algunas mujeres de la manada, veía el miedo en sus ojos cuando me aparte, sus ojos rojos por el llanto, y su forma de mirar a los lados nerviosa movieron cada fibra en mi. 

Entre en la sala principal de reuniones, ahí mis betas estaban reunidos-Encontré a una humana cruzando nuestros limites-Fue lo primero que dije, notando sus miradas-Su nombre es Oivia, estaba huyendo de Liam-Se miraron entre si, con dudas-No menciono mucho, pero fue suficiente. Liam asesino a uno de los nuestros.

La atención de todos se endureció-¿Sabes quien es ese joven?

No quería decirlo, me pesaba en alma con solo pensar en esa posibilidad-Puede ser Rafael.

Todos mi miraron con sorpresa, como queriendo decir algo mas, se miraron entre si, Luego Daniel dio un paso al frente-No hemos sabido de el desde su ultima patrulla....cerca de los limites.

-El iba con Valeria, pero ella tampoco regreso aún.

Y era peor, oír eso-Espera Alfa, aun...aun podemos confirmarlo, dejame hablar ccon la humana-Pidió uno de los betas, mas negué.

-Yo lo hare.

Sin mas salí de la sala, Olivia era la única que podía darme información. Subí las escaleras hasta la habitación en donde la deje, abrí suavemente, Olivia se sobresalto. Estaba en la cama con ropa diferente, el tobillo vendado. Entre dejando la puerta abierta y con un  gesto todas las mujeres salieron sin rechistar, cerré la puerta.

Me acerque manteniendo una distancia, y me senté en una silla.

Los ojo de Olivia no se apartaron de mi-Como te sientes?-Pregunte suavemente, demasiado para ser yo.

-Mejor...creo...muchas gracias-Susurro débilmente. 

-Necesito que me hables sobre el chico que viste, es importante. Se que es difícil, pero eres la única que puede sacarme de dudas.

Pedí intentando no presionarla, no ser brusco. 

Su expresión paso de miedo a tristeza, se quedo en silencio un momento-Era joven, quizás unos quince años. Pálido....y te nombro, dijo tu nombre.

-¿Recuerdas lo que dijo?

-Algo como..."Dante los matara si me hacen daño"

-Y...-Me contuve para controlarme, temía lo que oiría-¿Qué paso después?

-Ellos...-Sus ojos se llenaron de lagrimas, sollozo una vez cubriéndose la boca, pero luego me miro con firmeza-Lo atacaron, el....el chico se convirtió en...en...

-Un lobo-Aclare suavemente.

Asintió-Pero no podía sostenerse en pie y cayó...entonces Liam y los demás lo atacaron...-Sus palabras fueron como dagas a mi pecho, el peso de no haber estado ahí para mi hermano era demoledor. Aún así la mire firme.

-Gracias por decirme-Me levanté-Puedes quedarte, estarás segura. En la mañana te explicare todo cuando estés mas calmada.

Olivia asintió lentamente, deje la habitación cerrándola tras de mi. Me apoye en la puerta y solté un suspiro tembloroso, la rabia llenaba mi cuerpo, quería gritar pero no podía, debía mantener mi compostura. Regrese a la sala donde los betas me esperaban, apenas entre todos se pusieron de pie con respeto.

-Era el.

La mirada de todos se ensombreció, se miraron entre si.

-Liam lo atrapo, lo ejecuto frente a todos-Aprete los puños, pero la ira se reflejo en mi rostro-Esto es una guerra definitiva.

-¿lo haremos hoy?

-No, eso espera el. Mañana temprano lo haremos. Por ahora todos vuelvan a sus puestos y estén atentos-Ordene. Cada uno asintió y empezaron a salir uno a uno de la sala.

Daniel fue quien se quedo, se acerco a mi-De verdad lo siento mucho.

-No sabes cuando me duele  no haber estado ahí...Ella dijo que el me nombro, que sus últimos gritos fueron mi nombre-Conte apretando las manos en cada punta de la mesa-Le falle a mi padre.

-No era algo que pudieras saber, no es tu culpa.

-Un alfa cuida a los suyos, y le falte a la persona que más confiaba en mi.

-Vamos a vengarlo, lo sabes, lo prometo.

-Nunca volveré a oír su voz...-Susurre. Daniel apoyo su mano en mi espalda-¿Qué saben de Valeria?

-La están buscando, la encontraran.

Daniel se retiró dejándome solo en la sala. Aún apretando la mesa hasta que mis nudillos quedaron blancos, me senté en la silla, soltando el aire para evitar llorar....Rafael...el tenia solo dieciséis años, era un niño aun. Su energía jamás volvería a llenar esta casa, nada sería lo mismo sin el, jamás volvería a serlo.

Golpe la mesa lleno de frustración-Juro que te matare, Liam, lo juro...

Por cada lagrima de mi hermano, por cada gota de su sangre...incluso por las lagrimas de Olivia, lo juraba.