Capítulo 2

Narra Tess

-Chicas... el Alpha Zeth vendrá a la manada.

Lo había dicho serias y ellas reaccionaron de la misma manera, pero de un segundo para el otro nos encontrábamos chillando y gritando como idiotas por la noticia, todas menos una.

-Locas -murmura Jimena.

-¡No puedo creerlo!

-¡Es increíble!

-¡Diosa! Como quisiera ser su Mate -sueña Esmeralda.

-Ser su Mate sería un sueño... -le sigue Jossie y luego todas nosotras suspirando mientras imaginábamos escenarios mentales de nosotras junto a él.

-Meh -miramos a Jime.

-Aún no entiendo, ¿cómo es posible que no te guste? -Dice Ceci.

-Pues, simplemente no es mi tipo.

Claro que entendemos que cada quien tiene su propio gusto en lo que sea, pero ¡Diosa! ¡Es Zeth! Es alguien increíblemente poderoso, famoso, guapo y amable de todos, ¡es perfecto!

-Veamos sus fotos, otra vez -sugiere Jossie agarrando su celular.

Nosotras nos amontonamos a su lado y ella entró a Instagram y luego a su perfil. Realmente pareviamos unas completas acosadoras u obsesionadas pero es que es hermosamente perfecto...
No podía evitar suspirar por cada foto que pasábamos de él. No había ni una en la que saliera mal. Además de la agilidad que tiene al tocar la guitarra y más la eléctrica... ¡Que buenos dedos tiene, joder!

-¡¿Cómo es que existe tanta perfección?! -chille.

-Ni idea -dijeron ellas sin prestar mucha atención.

Ellas seguían deslizando las fotos pero yo resoplé y me levanté, comenzaba a sentir ese revoltijo en el estómago de nuevo. Como cada vez que veo, leo o escucho algo de Zeth, supongo que son esas típicas "mariposas" que uno siente cuando le gusta alguien. Reaccionamos cuando escuchamos como alguien llamaba a la puerta, sin necesidad de verla u oírla supe, por su aroma, que se trataba de mi madre.

-Chicas -ella entra a la habitación -¿Otra vez? -cuestiona recargándose por el marco de la puerta de brazos cruzados y mirándonos con diversión.

-¡Tía, haz algo! -lloriquea Jime a lo que nosotras la miramos mal.

-Sí claro, y ya tengo una idea muy buena. Vayan a hacer un campamento en el bosque.

-Mm mejor no... pero gracias por la oferta -hablé sonriendo, ella arquea una ceja.

-No fue una oferta -responde sonriendo un poco más, suspiré profundo-. Pasan tanto tiempo pegadas a sus teléfonos, están peores que yo.

-Pero tía, en su época tenían dinosaurios.

Miramos con los ojos abiertos de par en par a Jessie, tragué grueso mientras volvía a ver a mi madre y noté la vena saltando en su cuello, mientras ella sonreía.

-Okey. Todas me darán sus teléfonos y cosas electrónicas, hasta los relojes. -nos extiende una caja.

-¡Mamá!

-¡Tía!

-Ahora.

Todas gruñimos frustradas y miramos a Jessie fulminantes antes de levantarnos y darle todas nuestras cosas, pero Jimena se da vuelta para vernos.

-Bueno, yo me iré a mi casa... -intenta pasar por un lado de mamá pero claro que no lo iba a permitir.

-Oh no, tú también, Jime -mi madre y le extiende la bolsa. Ella gruñe y deja sus cosas a regañadientes-. Ahora prepárense; mañana cuando despierten tienen que venir aquí, y antes de que vengan las visitas ¿sí?

-Está bien...

Narra Skylar

Cerré la puerta y escuché todas su quejas desde el otro lado. Amo ser madre. Y eso les pasa por creerme tan vieja.

-¿Qué hiciste? -Ryan aparece caminando hasta mí y riendo por las quejas que aún se escuchan de las chicas.

-Las obligue a irse de campamento para que dejen de usar sus teléfonos, aquí están -le mostré la caja con sus cosas.

-Bueno, entonces eso quiere decir que... tendremos la casa sola... -Ryan me toma por la cintura acercándome a su cuerpo.

-Baja tu calentura, lobito; yo quiero película, y recuerda que tenemos otro hijo -me separé y caminé escuchando su suspiro de disgusto.

Me reí en silencio pero bajé las escaleras y encontré a las chicas que me esperaban allí, les señalé la caja y ellas sonrieron ampliamente. En un momento las niñas bajaron con sus bolsos asesinándome con la mirada.

-Cuídense~ -canturreé moviendo una mano.

Ellas no dijeron nada y se fueron bufando.

-¡Las amamos! -gritamos todas antes de escuchar la puerta cerrarse, suspiramos y nos miramos entre nosotras -. Netflix -corrimos al sillón y nos acomodamos.

Pusimos la película y al rato vinieron los chicos con comida y se sentaron junto a nosotras.

Narra Tess

-Listo - mencioné separándome de mi carpa al terminar de armarla.

Las chicas también ya habían terminado de hacer sus carpas y se metieron dentro.

-No me despierten -dijo Jime.

-Yo tengo hambre, ¿y la comida? -pregunté.

-Mira en la mochila -dice Ceci apuntando a esta antes de meterse en su carpa.

Caminé hasta aquella mochila y la abrí, pero oh, sorpresa, no había nada.

-¿Cuál mochila? -pregunté por si me había equivocado.

-La que tienes en las manos - respondió Jossie.

-No hay nada.

-¡¿Qué?!

-Oh Mierda...

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top