Ethan: Me pregunto qué servirán de almuerzo hoy.

Aurore: No lo sé, pero vamos de una vez o nunca lo averiguaremos. Recuerda que los almuerzos se acaban rápido los jueves.

Ethan: Ya voy, déjame guardar mis cosas.

Narrador:

Vemos a Ethan junto con su compañera de clase saliendo de su salón con dirección al comedor para almorzar tranquilamente. De repente, al llegar, se encuentran con poca fila, lo cual los entusiasma ya que rara vez ocurre. Sin embargo, el problema surge después, al intentar encontrar un asiento.

Aurore: Bueno, creo que tal vez nos podamos sentar en--

??1: ¡Aurore! Te estábamos esperando, ven. ¡Te guardamos un espacio!

??2: Ven, chica. Tenemos que hablar sobre algunas cosas.

Aurore: Sí, ya voy. Oye, lo siento, pero voy a ir con ellas. ¿Nos vemos en la salida?

Ethan: Claro, no te preocupes. Te veo luego.

- Bueno, ahora a buscar dónde...

Alya: ¡Hey, Ethan! Ven con nosotros, hay espacio.

Ethan: Sí, gracias. (se sienta en la mesa compartida)

Alya: Bueno, ya que estamos, te presento a mis amigos. Ethan, ellos son Max, Rosita, Juleka y Alix.

Ethan: ¿Qué tal? Un gusto conocerlos, aunque a Rosita ya la conocía.

Rosita: Tiene razón . Por cierto, Ethan, gracias a tu ayuda, mi ensayo fue mucho más rápido de lo que hubiera sido si lo hubiera hecho sola. Logré sacar un 18, y resulta que la profesora había viajado a Milán recientemente, así que mi presentación le trajo recuerdos de su viaje.

Ethan: No hay de qué.

Alix: Así que tú eres el tal Ethan. Alya no deja de mencionarte y lo mucho que te gustan los superhéroes.

Ethan: Jaja, la verdad es que me gusta recolectar datos y hacer teorías, es todo.

Alix: Ya veo. Y dime, ¿practicas algún deporte?

Ethan: Me gusta mucho el baloncesto, aunque el fútbol también es de mi agrado.

Max: Disculpa que te interrumpa, Ethan, pero me comentaron que eres originario de Milán, ¿cierto?

Ethan: Así es. ¿Algo que te gustaría saber?

Max: ¡Sí! Verás, estoy muy interesado en los eventos tecnológicos que realizan en Milán cada año. Por lo general, los sigo a través de una aplicación en tiempo real, pero no se podría comparar a presenciarlo en persona. Dime, ¿has asistido a alguno de estos?

Ethan: Mm... Bueno, el año pasado acompañé a unos "amigos" a dos eventos de esos, al Codemotion Milan y al Futureland 2015.

Max: ¡No puede ser! ¿Estuviste en el Futureland? ¡Es increíble! Que yo sepa, se necesitan ciertos requisitos para poder entrar, sin contar con el dinero suficiente.

Alix: ¿Y qué tiene de "increíble" ese Futurolandia?

Max: El Futureland es un evento centrado en la innovación y las tecnologías del futuro. Abarcan temas como inteligencia artificial, Internet de las cosas , robótica y mucho más.

Alix: O sea, son un montón de nerds hablando de cosas de nerds.

Ethan: Te veo muy interesado en el tema tecnológico.

Max: Sí, bueno, estoy haciendo un proyecto interno sobre robótica e inteligencia artificial. Tengo la certeza de que una vez culminada su creación, podría estar a la altura de los más grandes.

Alya: Bueno... cambiando totalmente de tema, dime, Ethan, ¿te ha pasado algo interesante esta semana?

Ethan: Nada en particular, aunque unas de las palomas que estaban bajo el control de ese villano palomo se quedaron en mi balcón, así que ahora tengo nuevos vecinos. Ah, bueno, últimamente en el hotel han estado un poco inquietos, al parecer, un príncipe se va a hospedar allí, así que...

Juleka: Espera, ¿un príncipe, príncipe?

Rosita: ¡Ah! Vi una noticia acerca de eso. (Estaba a punto de sacar su teléfono, pero el timbre sonó).

Ya al final de las clases, en la puerta principal:

Ethan: ¡Qué bueno que ya se terminó! Creo que podría comprar un-

Rosita: ¡Ah, Ethan! ¡Ethan! Disculpa que te moleste, pero ¿podrías entregarle esta carta al príncipe Alí?

Ethan: Wow, mm... está bien, veré qué puedo hacer. No sé si me permitirán acercarme a él, pero te prometo que haré todo lo posible por entregarle tu carta.

Rosita: Muchas gracias, en serio. (Se va muy feliz).

Ethan: Ok, ahora sí, directo a la panadería... mm, ¿qué es eso?

Ethan se acerca cautelosamente a la pequeña cosa roja que parecía moverse. Recoge el objeto sutilmente, simulando amarrarse los zapatos, y se retira del lugar. Luego, mira de reojo al objeto, confirmando con cierto temor sus sospechas. Rápidamente busca un lugar con poca gente.

Mientras tanto, en la entrada de la escuela:

Alya: Y como te estaba diciendo... eh, Marinette, ¿qué estás buscando?

Marinette: Hm... nada, nada. Ah, Alya, acabo de recordar que le prometí a mis padres que los ayudaría en la panadería.

Alya: Ah, entiendo. Pero avísame si los planes del sábado se cancelan. (Se aleja por otro camino).

Una vez que su "mejor" amiga se retira de la escena, Marinette regresa al lugar donde se tropezó, buscando desesperadamente a su pequeña amiga por todos lados.

En un callejón cerca de la escuela :

Ethan: Está bien, no te preocupes. Puedes dejar de fingir. Sé que eres un kwami.

Tikki: ¡¿Qué?! ¿Cómo es que tú...? ¡Achu!

Plagg: ¡Hey, terroncito! Es inusual verte por ahí. (Sale del bolsillo a toda velocidad).

Tikki: Plagg, ¡espera! Eso significa que tú...

Ethan: Sí, soy Shadow, y preferiría que mi identidad se mantenga en secreto. Ahora dime, por favor, que no eres el kwami de Ladybug.

Tikki: Mm... jeje, bueno.

Ethan: Hay... hablaré seriamente con ella luego. Por ahora, tengo muchas preguntas, pero para mi desgracia, no podrás responder a ninguna. Por el bien de nuestras identidades, solo dime si Ladybug se encuentra bien o cómo es que apareciste cerca del lugar.

Tikki: No te preocupes, ella está bien. En cuanto a lo otro, bueno... ¡Achu!

Ethan: Ahora que me doy cuenta, no has dejado de temblar más esos estornudos frecuentes... Es tonto preguntar, pero igual lo haré. ¿Estás resfriada?

Tikki: Algo así. ¡ACHU!... Hag.

Ethan: Bueno, es cierto que nuestro último enfrentamiento fue en una tormenta, pero Plagg ha estado de lo más normal.

Plagg: Los kwamis somos diferentes, cada uno tiene sus cualidades y defectos. Terroncito siempre ha sido un poco enfermiza.

Ethan: Mmm... entonces, ¿cómo podemos curarte? No creo que el Panadol para niños te haga efecto, ¿o sí?.

Tikki: No, ningún remedio humano me haría efecto. Tenemos que ir con alguien que pueda curarme. Te diré dónde está... ¡Achu!

Ethan: Está bien, no perdamos tiempo. Guíame.

Nuestro protagonista sigue el camino indicado por el kwami hasta llegar a una pequeña bodega con una escalera al segundo piso en el exterior. Sobre el marco, hay un letrero que dice: "Masajesfu". Ethan le pregunta nuevamente al kwami si esa era la dirección correcta, a lo que este asiente.

Ethan: Ok, confiaré en ti. (Sube las escaleras y cruza un pasillo hasta llegar a una puerta).

Ethan: Disculpe, me gustaría hablar con Fu. (Toca la puerta).

???: Adelante. (Suena detrás de la puerta).

Ethan: Buenas tardes, señor. ¿Es usted Fu?

???: Depende de quién pregunte. ¿Qué es lo que te trajo hasta aquí, joven?

Ethan: Mire, no daré muchas explicaciones. Necesito que la cure. (Le muestra al kwami).

Mtro. Fu: Qué inusual criatura, ¿de qué se trata esto?

Ethan: No haré preguntas, solo cúrelo, por favor. Sé que tiene las habilidades para ello. Su dueña está muy preocupada.

Mtro. Fu: Mmm... entiendo. (Muestra una ligera sonrisa).

El maestro procede a realizar un tratamiento basado en sonidos, movimientos de manos y conjuros verbales en un lenguaje irreconocible. Todo esto frente al chico, quien observa expectante el ritual de purificación.

Mtro. Fu: Ya estaría, este ser está como nuevo.

Ethan: ¿Te sientes mejor?

Tikki: (Asiente con la cabeza mientras sonríe).

Ethan: ¿Cuánto sería por el tratamiento? (Saca su billetera).

Mtro. Fu: ¿No dijiste que no harías preguntas?

Ethan: Bueno, en ese caso... (Deja 20 euros en el tapete y se levanta del suelo).

Ethan: Me tengo que ir, muchas gracias, señor.

Mtro. Fu: ¿En serio no tienes ni un poco de curiosidad respecto a lo que acaba de pasar?

Ethan: Como no tiene idea, tengo un montón de preguntas, pero su dueña realmente la necesita y tengo algunas cosas más que hacer. Espero poder volver a verlo pronto.

Mtro. Fu: Mis puertas siempre estarán abiertas .

Ethan: Muchas gracias. (Cierra la puerta del cuarto, recorre el pasillo y baja las escaleras).

Plagg: Oye, era tu oportunidad para hablar con él. ¿No dijiste que tenías muchas preguntas que hacerle?

Ethan: En serio me gustaría quedarme, pero Ladybug necesita a su Kwami en caso de que ocurra otro ataque.

Ya en el callejón cerca del colegio:

Ethan: ¿Crees que sea posible que vuelvas con tu portadora desde aquí?

Tikki: Sí, no te preocupes. Ya está oscureciendo, así que puedo escabullirme hasta llegar a mi portadora.

Ethan: Perfecto, ten cuidado y recuerda no comentar nada sobre nuestro encuentro. No quiero que Ladybug sospeche que ando por aquí. Si es posible, omite toda información respecto a lo que pasó. Solo di que alguien te encontró y que te dejaron cerca del curandero.

Tikki: Entiendo, muchas gracias por cuidar de mí.

Ethan: Tranquila, ya hablaré con Ladybug en nuestra siguiente patrulla.

Tikki: No seas tan rudo con ella, por favor. ( se va volando toda velocidad )

Plagg: Oye no quería interrumpir el momento y todo , pero esta carta que metiste en tu chaqueta esta que se hecha a perder y mira que amo los olores fuertes.

Ethan: Sí, tranquilo Plagg, no me olvidé de la promesa con Rosita. El príncipe estará en el hotel por unos 3 días, así que se lo daré después. Ahora vamos al hotel, estoy muy cansado.

Plagg: Y eso que no tuvimos que pelear con nadie en la tarde .

En la panadería :

Marinette estaba llorando en su alcoba, abrazando su peluche, repitiendo una y otra vez que no era digna de poseer el Miraculous.

Marinette: Lo siento mucho, Tikki. Soy una pésima amiga. Lo más probable es que se haya ido porque no le hice caso. No merezco llevar esta responsabilidad. (Tocando sus aretes mientras susurraba entre lágrimas).

En ese momento, una criatura roja atravesó las paredes hasta llegar con la chica que se encontraba en pleno llanto.

Tikki: No llores, Marinette, ya estoy aquí.

Marinette: ¡Tikki! ¡Lo siento tanto! No debí descuidarte tanto, en serio lo siento mucho, Tikki.

Tikki: Ya, ya, Marinette. No pasa nada, lo importante es que ya estoy aquí.

Marinette: Sí, tienes razón. Pero aún así, no cometeré el mismo error. Ahora mismo vamos a que te revisen.

Tikki: Respecto a eso...

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