Oh el bello Karmaland, niños jugando, adultos riendo y trabajando, los aldeanos se habían vuelto más proactivos en todos esos días llenos de tranquilidad y armonía, incluso los Dioses de Karmaland parecían estar relajados, pero ¿Por qué se sentía raro esa tranquilidad? ¿No es lo normal que todo sea tranquilo? ¿Entonces por qué se sentía anormal?... Ah cierto, era tranquilo porque los héroes de Karmaland se habían ido de viaje en busca de romper sus maldiciones, bueno disfrutarían sus días tranquilos otro poco más.

Entonces con los héroes de Karmaland...

- ¡Por fin! ¡Un pantano! – el gritó de Fargan emocionó a los demás ¿Acaso por fin habían llegado al destino después de tantos días?

- Es un pantano normal – y ahí se fue la emoción, Vegetta asentía ante lo dicho por Staxx, era solo un pantano normal, aún quedaba mucho por llegar, oh por lo menos eso se suponía al ser solo la segunda semana.

- ¡YA QUIERO LLEGAR! – gritó Rubius fastidiado.

- ¿Crees que nosotros no? – dijo Willy con molestia, tanto él como Fargan ya se habían acostumbrado a estar todo el tiempo juntos pero lo único que no era... Ir al baño.

- No hagas drama cerdo, que yo sigo siendo un niño – dijo Auron de aparentemente ocho años de edad, en esa semana él y Luzu habían obtenido la forma de un niño de ocho años.

- Pero si te vez adorable mi niño – habló Lolito con brillo en sus ojos y abrazando a Auron al tenerlo en su chocobo.

- ... Sigo sin acostumbrarme a que tú seas Lolito – dijo Alexby con un leve escalofrío recorriéndole. - ¡Regrésenme a Mangel!

- No es como si me hubiera muerto... - dijo Mangel en un suspiro. – Yo también ya no soporto estar en este cuerpo...

- ¡Pero mi niña! ¡Ese es el cuerpo más hermoso de todo Karmaland! Después del tuyo claro – dijo Lolito guiñándole el ojo, de fondo se podía escuchar un "Quisieras" de Vegetta. - ¿No lo crees mi niño? – Lolito volvió a abrazarlo, aprovecharía su pequeña y tierna estatura lo más que pudiera.

- Exijo hablar con la protección de menores – dijo Auron ya hartado de que lo tratase como muñeca apachurrable.

Luzu solo miraba a ambos con un gruñido interno, tenía muchas ganas de tomar su arco y clavarles una flecha a ambos, pero no, era niño bueno, las cosas con Auron se habían solucionado... Fuera impulsos de asesino... Pero un flechazo, rozando, aunque sea un poco... No, no, esos pensamientos fuera.

- Luzu, puedo sentir tu aura asesina – la voz de Vegetta lo había asustado, había olvidado que seguía en el chocobo de Vegetta.

- ¿Q-qué? Por supuesto que... Un poco... - susurró Luzu, Vegetta solo rio ante ello, el evil luzu no desaparecería, así como si nada, Auron deberá prepararse porque al parecer Luzu celoso es evil Luzu en su máximo esplendor.

- ¿Entonces seguimos? – habló Willy.

- Mmm... Sí, no es lo mejor quedarnos aquí por la noche, es incluso más peligroso que el bosque o las montañas – dijo Vegetta.

- Ah genial de nuevo debemos apresurarnos hasta encontrar otro bioma sin descansar – se quejó Rubius.

- Deja de quejarte Doblas – regañó Vegetta.

- ... Si mami...

- ¿No querrás decir papi? – se burló Auron.

- No, yo soy el papi – Rubius sonrió con superioridad, pero después se reincorporó al sentir la mirada asesina de Vegetta.

- No se necesita ser un genio para saber quién es el que tiene los pantalones puestos en la relación... Además de quien es el que tiene más dinero – dijo Auron.

- Cerdo... Ya van varias que me debes en cuanto recuperes tu cuerpo – Rubius miró furioso a Auron quien solo desvió su mirada, no se arrepentía de nada.

- Parecéis niños pequeños, de verdad, es hora de que os comportáis como los adultos que sois – habló Alexby.

- ¿Qué dices Alesby? Tú no eres diferente.

- ¡¿Quién dijo eso que le parto la cara con mi porra?! – Alexby miró a todas direcciones hasta que observó a Fargan que levantó su mano. – Ah... Te descontaré de tu salario.

- ¡¿Qué?! ¡Pero Alesby!

- Ah... Quiero volver a casa... - susurró Luzu con cansancio.

- Todos Luzu, todos... - suspiró Vegetta.

¿Acaso no podían llegar ya? ¿Tan lejos era? Claro se había dicho que mínimo cuatro semanas a cinco y apenas iban para la segunda semana de viaje, ya no sabían cuanto podrían soportar, preferirían estar en sus hogares gastando bromas entre sí y dormir en sus cómodas camas, pero no... Estaban ahí soportándose unos contra otros, durmiendo en un frio y duro suelo abecés pasando hambre... ¿Ese era su castigo por explotar una que otra cosa?

Las horas pasaban, se había hecho de noche, luchaban para no caer en los brazos de Morfeo, luchar contra zombis y esqueletos les ayudaba bastante. Dos días sin poder dormir habían pasado, ahora era de día y nuevamente comenzaba a oscurecer, no parecía que fuesen a encontrar otro bioma pronto.

- Y entonces me dice "¿Vos sos tonto o naciste así?" Y entonces yo le contesto "ci" – Rubius reia tontamente con un notable cansancio en sus ojos.

- Eso me recuerda que una vez Dulce me vio y me dijo "Eres un tonto, pero también eres gracioso", no sabía si era una ofensa o un cumplido – dijo Fargan con unas notables ojeras.

- Ah una vez conocí una chica muy hermosa, fue la primera chica que me hablaba y me trataba bien, pensé que nos volveríamos grandes amigos o tal vez algo más – habló Mangel con una sonrisa cansada. - ... Pero Lolito la mató...

- Oh, oh, yo tengo una mejor, un día Mónica me vio, pero me miró con asco ¿Cómo se atreve a mirarme así? ¿Qué no ve? ¿Es ciega esa mujer? Soy un papucho – Ahora Auron hablaba siguiéndoles el juego, él si había dormido en el viaje.

- Ya están delirando... - dijo Willy suspirando con cansancio.

- Este bioma es muy grande... - se quejó Luzu.

- No entiendo, el mapa está mal... Teóricamente esto debería ser... - Vegetta dudaba en lo que iba a decir.

- ¿Qué cosa? Tan solo dilo que ya no soporto a estos – Alexby parecía el más cansado de todos, no dormir, más el plus de sus amigos contando historias tontas para mantenerse despiertos además de su temperamento no ayudaban en nada.

- Debería ser desierto... - susurró Vegetta.

- ¡¿Qué?! ¡¿Nos perdimos?! – gritó Alexby.

Rubius, Mangel y Fargan al escuchar eso gritaron y comenzaron a llorar como si fuese el fin del mundo.

- Que extraño... Definitivamente fuimos por el camino correcto -Staxx se aceró a Vegetta para observar el mapa ignorando los llantos de fondo.

- Entonces ¿Estamos o no estamos perdidos? – Lolito habló, extrañamente se encontraba serio, probablemente la falta de sueño hizo que no se uniese al grupo dramático.

Vegetta se quedó unos segundos pensando, posteriormente todos lo observaban expectantes, como odiaba que siempre fuese él quien debía tener una solución...

- Frank, Alexby, vosotros me acompañareis – Vegetta les apuntó, los mencionados solo lo observaron confundidos. – Nosotros tres tomaremos a los únicos chocobos que vuelan y observaremos que tanto falta para llegar al próximo biomas, mientras tanto... Todos vosotros os quedáis aquí.

- Quiero ir también – dijo Rubius.

- No – respondió Vegetta.

- Pero...

- No.

- Pe...

- Dije NO

- ... Un...

- DOBLAS

Rubius hizo un puchero y cruzó los brazos, al cabo ni quería...

De fondo podía a escuchar a todos sus amigos aguantar sus risas, agradecidos con ver esas peleas maritales donde Rubius termina regañado o golpeado por Vegetta.

Todos acomodaron sus cosas en el suelo, Alexby, Vegetta y Staxx dejaron sus cosas y solo se llevaron a los chocobos que podían volar, los tres partieron dispersándose un poco después de dejar un punto de rencuentro de diez minutos.

Staxx fue al este, no encontró nada más que el pantano y ninguna anormalidad, por más que volaba por más altura que tomara, no veía nada más que un el pantano. Lo mismo sucedió con Alexby quien observaba el Oeste, solo pantano y más pantano. Con Vegetta no fue distinto, observaba el mapa una y otra vez, pero en ninguna parte decía que había un pantano grande.

Al ser el tiempo para reunirse los tres, suspiraron resignados. La mirada de todos los hizo comprender, no había ningún bioma cerca, deberían seguir recto si no querían perderse hasta encontrar otro bioma, así pasasen días.

- ¿Cómo creéis que reaccionen los demás cuando les contemos de esto? – preguntó Staxx. Vegetta y Alexby solo suspiraron.

- No quiero ni imaginármelo... - dijo Vegetta.

- Me los imagino y ya me duele la cabeza – dijo Alexby.

- ¿Realmente es un pantano normal? – Vegetta preguntó dudoso.

- ¿Por qué lo preguntas? – dijo Alexby.

- Desde que llegamos, no he dejado de sentir que alguien nos sigue...

- Ah... Pensé que era el único.

Alexby y Vegetta se miran recorriéndoles un escalofrió entonces miran a Staxx quien ríe nervioso, él también sentía eso.

El sentimiento que compartían era el mismo, era como si sintiesen que alguien los vigilaba en todo momento, un par de ojos que solo les hacía sentir un escalofrió horrible.

En ese momento, ese sentimiento se había intensificado haciéndoles temblar, se pusieron en guardia por si algo les atacaba, pero ese no parecía el caso.

Sin previo aviso una niebla se comenzó a esparcir asustándolos, era de un color morado pálido. Del agua, de los árboles y del suelo, la niebla surgía de ahí, aparentemente se esparcía lentamente.

- Esto... - habló Vegetta seriamente. - ¡Es tan bonito! – finalmente gritó con un brillo en sus ojos. - ¡Es morado!

- ¡Es veneno! – gritó Staxx haciendo que Vegetta saliese de su ilusión.

- ¡Ay que nos morimos aquí! ¡Noooo Jimmy! ¡Bat! ¡Os quiero mis bebés! – chilló Alexby.

- No, no, no es esa clase de veneno – habló Staxx, en ese momento pareciese que Vegetta había recordado algo.

- Ilusiones – susurró Vegetta. – Debemos salir de aquí rápido si no queremos terminar con pesadillas.

- Pero ¿Cómo salimos si no parece tener un fin? – dijo Alexby.

- ... Buena pregunta, yo también quisiera saber la respuesta – dijo Vegetta.

- Por lo pronto... Solo avancemos, no parece que avance rápido, si evitamos la niebla no nos pasará nada – dijo Staxx.

- ¡Espera! ¡Ya lo tengo! ¡Si! ¡Es eso! – el repentino grito de Vegetta los sorprendió. - ¡Este es el pantano antes de llegar al bosque encantado! ¡No estamos perdidos!

- ¿Cómo? – preguntaron confundidos.

- Sí, sí, sí, En letras pequeñas en el mapa aparece "Pantano mágico, peligro, bestias, ilusiones entre otros", Y justo estamos teniendo niebla de ilusiones.

- ¿No se supone que mínimo tardaríamos cuatro semanas? – dijo Alexby.

- Aparentemente no... Es algo bueno, pero también algo malo, no nos preparamos para enfrentar a los peligros de este pantano tan pronto. Probablemente este pantano es lo suficientemente grande como para tardarnos dos semanas en llegar al bosque – dijo Staxx.

- Volemos mas alto, busquemos un camino evitando la niebla – ordenó Vegetta.

Ante la orden de Vegetta los tres subieron lo más alto que podían, la niebla comenzaba a esparcirse en distintos puntos, no parecía haber nada más que pantano y la niebla les impedía observar bien los peligros que podría haber en tierra y agua. Con una señal los tres se separaron quedando en volverse a reunir, debían buscar alguna pista del bosque encantado, así como los caminos más seguros.

Mientras tanto, de vuelta con los demás, ajenos con lo que sucedía alrededor, esperaban aburridos por Vegetta, Alexby y Staxx. Se encontraban totalmente despreocupados, no les importaba nada en ese momento.

- M m m m nu nu nu~

- No a las drogas si al alcohol~

- No a las drogas si al alcohol~

- Si al vinito barato de Luzu~

Demasiado despreocupados... Fargan y Rubius cantaban a todo pulmón sentados mientras tomaban agua.

- Alta canción eh – dijo Auron prestándoles atención. - ¿Cuándo volvamos a nuestra forma original nos darás vinito barato para celebrar Luzu?

- La fabrica del vinito barato de Luzu cerró – contestó Luzu.

- NOOOOOO ¡¿POR QUÉEEEEEE?! – gritó Rubius.

- ¡¿Ahora quien nos hará ver todo dando vueltas?! – gritó Fargan.

- Coman hongos alucinógenos – dijo Luzu.

- Luzu mi niño, estás muy agresivo – comentó Auron.

- ¿Qué? Claro que no, solo digo la verdad – contestó Luzu. Rubius y Fargan lo miraban sorprendidos y ofendidos.

- Bueno, ahora cantemos otra – dijo Rubius. – SI HAY QUE SER MINERO~

- ROMPER EL PICO EN EL HIERRO~ - le siguió Fargan.

- NO IMPORTA EL CREEPER QUE VENGA PA QUE SEPAS QUE TE QUIERO~

- ¡Callaos de una vez! – gritó Willy.

Los demás que no decían nada lo voltearon a ver, no era su tono normal de voz, parecía realmente enfadado, Fargan rápidamente lo entendió y se quedó en silencio, pero había un bobo que no parecía comprender eso...

- ¿Algún problema con mi hermosa canción? – Rubius se levantó de su lugar hasta llegar con Willy. Fargan intentaba detenerlo con señales, pero parecía no entenderlas.

- Sí, es un asco – Willy lo miraba fijamente, estaba irritable, solo quería dormir un poco o por lo menos tener paz mental pero no, sus amigos no ayudaban.

A todos ya les afectaba la falta de sueño, era urgente por lo menos una siesta de treinta minutos. Los demás intentaban ignorarlos, estaban muy cansados como para meterse o alentar al contrario, a excepción de Auron y Luzu que observaban la escena como si fuese su telenovela favorita.

No comprendían como sucedió, solo notaron como Rubius y Willy habían terminado gritándose y tomándose de sus camisas forcejeándose. Rubius junto a Willy rodaron hasta chochar con las mochilas tirándolas quedando de lado y otras bocas bajo. Algunas cosas terminaron esparciéndose por el suelo y de una mochila morada salió rodando un frasco de vidrio con una rosa blanca que emanaba un gran brillo.

El frasco rodó hasta llegar al agua del pantano siendo llevado lentamente por la poca corriente. Un pez grande se tragó el frasco, después un pez mas grande se tragó al otro pez y después apareció un ave extraña y se tragó ese pez, posteriormente el ave comenzó a volar.

- ...

- ...

- ¡EL FRASCO IDIOTAS! -gritó Mangel asustando a todos.

Como si su vida dependiera de ello, Mangel corrió a por un arco y apuntó al ave, afortunadamente le dio y cayó al agua, corrió para alcanzarla, pero... Un remolino se formó tragándola frente a las caras incrédulas de todos ¿Era enserio?

- ¡LA ROSA! ¡SOIS TODOS UN PAR DE DESEREBRADOS! – ahora el que gritaba era un muy furioso y pequeño Luzu.

Willy y Rubius temían por sus vidas ante los furiosos Mangel y Luzu... Y de Vegetta en cuanto llegase.

Y como si lo hubiesen invocado... Habían llegado Alexby, Staxx y Vegetta. Todos se pusieron pálidos, especialmente Willy y Rubis.

- Chicos tenemos buenas y malas noticias, la buena es que parece ser que este realmente es el pantano antes de entrar al bosque encantando – dijo Staxx.

- La mala es que es una semana de pantano y unos dos del bosque encantado aproximadamente, es realmente extenso – dijo Alexby.

- ¿Por qué os veis pálidos? – preguntó Vegetta, haciendo que solo se pusieran nerviosos. - ¿Por qué tengo un mal presentimiento? ¿Rubius?

Rubius en cuanto escuchó su nombre se tornó pálido a más no poder evitando la mirada de Vegetta, por experiencia... Sabía que no era nada bueno, si fuese algo malo rápidamente inventaría una excusa, pero ese no es el caso... Ahora tenía miedo.

- Rubius y Willy tiraron el frasco de la rosa y ahora está perdida – Luzu habló con una voz super tierna, tan tierna que parecía que lo decía un demonio...

Un silencio enorme se formó, Alexby casi se desmaya, Staxx retrocedió unos pasos, Lolito se llevó a Mangel lejos tratando de que su enojo se bajase, Auron reía internamente, Luzu sonreía, Fargan se alejó lo más lejos que podía de Willy y finalmente Rubius y Willy se abrazaban inconscientemente.

- ¡PERO SOIS TONTOS!

El grito de Vegetta sonó como eco asustando a los pájaroscercanos, ¿Era acaso el fin de esos dos héroes de Karmaland? Bueno todos yaparecían tener una mejor relación, tal vez alguien los ayudaría un poco con susufrimiento en la búsqueda del frasco... Solo tal vez... También disfrutaba detodos esos dramas entre ellos después de todo.

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¡HEY! Lamento la tardanza, últimamente no he tenido inspiración y no logro con que inspirarme ( ͡ಥ ͜ʖ ͡ಥ) Tengo el final pero el problema es llegar a el jajajaja

Espero les haya gustado, agradezco todo voto y comentario <3 ¿Qué pasará ahora? ( ͡ʘ ͜ʖ ͡ʘ)