Cinco días habían pasado desde que Lolito y Mangel se habían ido y tres días desde que había mandado el mensaje.

Alexby acariciaba a su dragón sentado en el sillón. Ese día descansaba como oficial de policía. Desde que la maldición fue lanzada a Luzu y Auron las cosas se habían puesto tranquilas, o al menos para él.

A diferencia de sus amigos, él no era un tonto enamorado que no se daba cuenta de sus propios sentimientos. Notaba perfectamente como Rubius solo usaba de excusa a Luzu y Auron para estar más cercas de Vegetta y vivir con él temporalmente. Aun recordaba el día en que Rubius llevaba grandes mochilas para la casa de Vegetta. Esos dos eran unos tontos sin remedio, se tiraban indirectas entre ellos y ni aun así se daban cuenta que en realidad se querían más que amigos.

Willy y Fargan eran otros tontos sin remedio. Fargan le había confesado en una borrachera que amaba a Willy, pero no se atrevía a decirle sus sentimientos por culpa del mismo Willy. Con ellos dos admitía que el del problema era Willy. Al menos esperaba que con la maldición que cargaban se comenzara a abrir más hacia Fargan.

En cuanto a Luzu y Auron... Auron era el idiota, sus formas de disculparse nunca eran buenas y cuando se disculpaba sinceramente Luzu lo ignoraba o simplemente no quería oírlo. Antes ayudaba a Luzu con su pena distrayéndolo con diversas actividades. Ahora que eran unos bebés... Parecía que sus subconscientes aún seguían ahí, las pocas veces que los había visto Auron siempre intentaba acercarse a Luzu, pero este ultimo siempre lo agredía como respuesta.

- Son unos tontos ¿No lo crees Bat? – dijo Alexby al murciélago que reposaba en una rama de un pequeño árbol que Alexby había traído para él.

Ese era el murciélago que estaba en la cueva de la bruja, Alexby se había encariñado con él y se lo llevó a escondidas sin que nadie se diese cuenta, no quería escuchar "Eso es legalísimo" por parte de Vegetta.

- Todos aquí con sus parejitas, aunque estén en conflicto... - dijo Alexby para sí mismo. – Todos son unos idiotas... Si yo fuese ellos no desaprovecharía las oportunidades que me dan... No sabes cuando esa persona especial puede desaparecer para siempre y finalmente quedar completamente solo...

Alexby miraba el techo con tristeza y nostalgia. ¿Cuándo podría encontrar a esa persona especial? Él era el único que no tenía con quien estar... Se sentía solo y vacío, siempre era el mal tercio del grupo. Si se reunían todos al final cada quien se iba por su cuenta con su respectiva pareja, aunque no fuesen realmente pareja como tal, pero por favor... ¡Parecía que él era el único que se daba cuenta! ¡Y eso lo frustraba! Por lo menos Lolito y Mangel fueron los primeros en salir oficialmente.

¿Por qué esos tontos tenían la suerte de encontrar a su otra mitad y aun así no darse cuenta? Estaba maldito...

Jimmy y Bat se acercaron a Alexby frotando sus cabezas contra la suya provocando una leve sonrisa por parte de Alexby.

- Joder macho... Tienen razón ¡Los tengo a ustedes! ¡No puedo ponerme triste con algo como eso! ¿Les apetece salir a dar un paseo?

Jimmy movía la cola de un lado para otro y Bat revoloteaba alrededor de Alexby.

- ¡Pues no se diga más! – dijo Alexby levantándose y dirigirse a la puerta.

Mientras tanto en la casa de Vegetta se escuchaba un ruido proveniente de la sala... Eran los ronquidos de cierto albino con gorro de oso durmiendo en el sofá, encima de él se encontraba Vegetta durmiendo sobre su pecho formando muecas en su cara por los ronquidos de Rubius.

- Soy un imbécil, no supe apreciarte hasta el día en que te fuiste lejos de mí. No fue hasta entonces que también me di cuenta de algo... Amaba tus sonrisas, tu actitud, tus hermosos ojos, la dulce mirada en tu rostro eras el rayo de luz más hermoso que había visto en toda mi vida... Te quiero... Y ahora no podré tenerte.

Luzu despertaba atontado de su larga siesta aturdido escuchando una voz infantil extrañamente familiar. Había escuchado todo lo dicho por esa voz y mirando a todos lados no vio más que a sus "padres" dormir tranquilamente en el sofá.

Unos sollozos fueron escuchados al lado de él, miró a su lado derecho encontrándose con una división, una reja dividía la cuna y del otro lado se encontraba Auron mirando al suelo con un semblante triste.

- ... A... ¿Auron? – la voz infantil de Luzu hizo reaccionar a Auron volteando a verlo sorprendido.

- ...Lu... ¿Luzu? ¿Me recuerdas Luzu? – dijo Auron acercándose a la reja.

- ¿Realmente eres Auron? ¿Por qué eres un bebé? – preguntó Luzu extrañado hasta que cayó en cuenta de algo. Si los dos tenían la misma altura solo significaba una cosa...

Luzu miró sus manos, se tocó la cara, sus pierdas y brazos, con el reflejo de la ventana observó su imagen, era la de un bebé. Abrió enormemente los ojos sorprendido.

- ¡¿WTF?! ¿What's happening? ¡¿Whats this shit?! – gritó Luzu sorprendido.

- Luzu por favor, tranquilízate, no te entiendo ni una mierda, no espiko english – dijo Auron intentando calmarlo. – Te explicaré así que tranquilízate.

- ... Está bien... ¿Qué sucede? ¿Por qué somos bebés? ¿Esos son Vegetta y Rubius? ¿Esta es la casa de Vegetta?

- Por partes... Te lo resumiré. ¿Recuerdas a la bruja? – dijo Auron recibiendo un asentimiento por parte de Luzu. – Bueno, esa desgraciada nos transformó en esto. Vegetta fue prácticamente obligado a ser nuestro tutor temporalmente hasta que volvamos a la normalidad, el calvo tóxico se ofreció a ayudar a Vegetta... Coff doble intensiones coff... Y ahora los dos son como nuestros padres cuidándonos las 24. Lolito y Mangel salieron en busca de un hechicero para revertir el efecto, Willy y Fargan terminaron afectados por otro hechizo y ahora parecen uña y mugre por que literalmente no pueden separarse por una cierta distancia por lo que oí. Y eso es todo.

- ... Creo entender un poco.

- Ahora mismo esos dos están profundamente dormidos, no se despertarán en un largo tiempo a menos que escuches un ruido muy alto.

- Ya veo...

Auron sonrió débilmente, se separó de la reja y se sentó a un lado y volteó hacia la ventana. Luzu por otro lado solo lo miraba a lo lejos, lo que había oído... Definitivamente había sido Auron... ¿Se refería a él? ¿O tal vez otra persona? Quería preguntar... Pero no sabía si debía hacerlo...

Luzu miró la espalda de Auron, tragó duro y decidió hablar.

- Auron...

- ¿Sucede algo Luzu? – dijo Auron sin voltearse.

- ¿Qué fue todo lo que dijiste antes?

- ... ¿De qué hablas?

- Ya sabes... Lo de que eres un imbécil.

Auron rápidamente se giró alarmado ¿Había escuchado todo eso?

- No sé de qué...

- No te hagas el tonto – dijo Luzu

- ...

Auron no dijo nada, ¿Tal vez era el momento? Luzu estaba dispuesto a escucharlo cuando anteriormente lo ignoraba o no dejándolo hablar... Era ahora o nunca.

- Luzu, escúchame con atención... - Auron se acercó nuevamente a la reja. – Lo siento, no pido que me perdones, se que lo que te hice fue algo horrible... Por mi culpa perdiste la alcaldía...

- ... No es la alcaldía lo que me destrozó, la alcaldía me daba igual si ganaba o perdía. Me destrozó tu traición, a pesar de que siempre te apoyé y ayudé... Confié en ti.

- Lo se... Lo se perfectamente, es por eso que lo siento... Fui un imbécil que no pensó las cosas correctamente. Yo realmente te aprecio y te quiero, no supe valorarte, no supe valorar nuestra relación. Yo fui quien echó todo a perder, soy el único culpable de tu desconfianza y cambio de personalidad. No fue hasta que sucedió todo eso que me di cuenta... Que en realidad te amo y te perdí, no sabes lo que daría para volver en el tiempo y darme un gran golpe por imbécil, quiero volver a ver tus sonrisas, tu amabilidad, tu sinceridad y solidaridad. Sin darme cuenta yo me enamoré de todo eso, incluso ahora te sigo amando y me duele seguir así... Luzu por favor... No quiero seguir así... No pido que me perdones, estás en todo tu derecho de odiarme... Pero por favor... Por lo menos empecemos desde cero. – lagrimas salían de los ojos de Auron mirando a Luzu con sinceridad.

Luzu había quedado pasmado, no pensó que sería tan sincero... ¿Eso era lo que quería decirle todo ese tiempo?

- Auron... - dijo Luzu con lagrimas en los ojos, estaba realmente conmovido y sonrió débilmente. – ¿Sabes que es lo gracioso? Nunca llegué a odiarte... Nunca pude hacerlo por más que quisiese... Te perdono, quiero empezar de nuevo contigo, pero será difícil volver a confiar en ti... Empecemos desde cero Auron. ¿Comenzamos desde ya?

Auron se limpió las lágrimas, sonrió débilmente hasta ampliarla enormemente.

- Me parece perfecto... Te conquistaré, sin que te des cuenta.

- Auron... Por favor... Dime esto cuando volamos a nuestros cuerpos originales, esto es un poco...

- ¿Es re turbio no?

- Muy turbio, así que para.

Tanto Auron como Luzu rieron. Por fin después de tanto tiempo se sentían ligeros, la presión en el pecho que poco a poco los mataba por dentro se dispersaba lentamente abandonando sus cuerpos. Ambos estaban felices, podrían volver a sonreír y bromear juntos.

Ambos tenían algo claro, se querían y no precisamente como amigos, el primero que se había dado cuenta era Luzu, era por ello que la traición de Auron lo había roto por dentro, Auron se había percatado después de perderlo. Pero eso ya no importaba, comenzarían de cero y quien sabe tal vez en un futuro cercano podrían comenzar a salir como pareja.

Pero para ello primero necesitaban volver a ser adultos, era bastante incomodo tener esos pensamientos cuando estaban en cuerpos de bebés.

- Por cierto, Auron... ¿Desde cuándo obtuviste tus recuerdos?

- Ah, a partir del segundo día – contestó Auron recordando.

- ... ¡¿Qué?! ¡¿Recuerdas todo lo sucedido desde entonces?! – gritó Luzu sorprendido.

- ¡Recuerdo todo Luzu! Ah... de tan solo recordar las caras que Rubius y Vegetta ponen cada vez que los llamas papá y mamá – rio Auron recordando lo nerviosos que se ponen, además de sonrojarse hasta las orejas como acto siguiente no poder hablar correctamente mientras desviaban la mirada. – Es tan divertido.

Luzu se avergonzó ante este detalle ocultando su cara en sus pequeñas manos. ¡Qué vergüenza llamar a tus amigos papá y mamá! ¡Además de que se burlarían en un futuro!

- Se lo que estás pensando – habló Auron. – No se burlarán de ti, se burlarán de ellos dos.

- S-sí tienes razón... A todo esto... ¿Por qué nos divide esta reja?

- Oh, es cierto, no recuerdas lo vivido como bebé. La reja la colocaron porque cierto Evil Luzu bebé me agredía cada vez que podía.

- E-e ¿Enserio? – dijo Luzu apenado. – Lo siento Auron...

- Esta bien, me lo merezco.

- Pero aún así... ¿Les decimos que recordamos todo en cuanto despierten?

- ¿Por qué? Esos tortolos necesitan un empujoncito y tú con tus "papá" y "mamá" has ayudado bastante, ya hasta quiero hacer lo mismo.

A Luzu se le iluminó la cara por lo dicho. Él siempre había sabido el principal shippeador de esos dos y se desesperaba por lo tonto que llegaban a ser al no darse cuenta de sus sentimientos.

- ¡Eso es una gran idea! – gritó Luzu emocionado. – Auron ¿Quieres unirte a mi para incomodar a esos dos y hacer que terminen juntos de una vez por todas?

- Eso se escucha más divertido que seguir meándole en la cara a Rubius cada vez que me cambia el pañal ¡Yo me apunto!

- ... ¿Le meas a Rabis en la cara?

- Si bueno... Tengo que aprovechar el bug.

Luzu rio fuertemente, necesitaba ver eso.

- ¿Así que es por eso que nunca revelaste recordar todo? – preguntó Luzu.

- Es una castaña fingir llorar y que te cambien el pañal suele ser incomodo, además de sentir tus heces en el rabo...Ugh – dijo Auron asqueado. – Pero todo sea por incomodar al señorito de la mansión y del calvo tóxico. Oportunidades como estás no suelen suceder y no te podrán reclamar después.

- Jajaja me encanta como piensas.

- Comencemos a practicar tu llanto ¡Llora a todo pulmón!

- Me sienta mal... Se les ve cansados – dijo Luzu al mirar en dirección del sillón. Unas grandes ojeras eran visibles en los ojos de Vegetta y Rubius.

- Eso es básicamente tu culpa por ser un gran llorón – dijo Auron burlón. Luzu solo se avergonzó preguntándose que tanto había hecho pasar a sus pobres amigos. - ¡Vamos Luzu! ¡Llora! ¡Tú puedes!

Luzu suspiró y después sonrió, extrañaba ver los ánimos de Auron. Por ahora se dejaría llevar, después les pediría perdón a sus queridos amigos. Todo sea para juntarlos, unos pequeños sacrificios valían la pena.

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Espero les haya gustado, agradezco sus votos 💕