Jimin terminó de arreglarse y se detuvo frente al espejo de cuerpo completo.

Estaba nervioso.

Anoche no había tenido oportunidad de hablar con su padre después de que este llegara de la cena en la que conoció al alfa que lo desposaria, pues en cuanto se quedó solo en aquella habitación de hotel simplemente se puso a llorar viendo aquella vieja cadena que Yoongi le habia regalado antes de irse al ejército, era su forma de desahogarse pues sentía mucho dolor en su alma.

Se había quedado dormido después de tanto llorar luego de pedirle a la Luna que por favor lo dejará ser feliz.

La puerta de su habitación fue tocada un par de veces y por está entró su tía.

- Buenos días cariño...

- Buenos días tía...- el omega hizo una reverencia.

- Tú padre me envió a buscarte, el desayuno está servido y además hay alguien que quiere conocerte...

- .....- Jimin abrió los ojos en demasía y una expresión de miedo se formó en su pequeño rostro.

Minha lo notó de inmediato.

- Cariño... Si no estás listo para verlo puedo decirle que se vaya...

- Es que tengo miedo tía...

- Y te entiendo cariño, estás viviendo una situación realmente difícil en este momento pero estoy segura de que todo está valdrá la pena....

- Es que... No sé nada de ese alfa y...

- Jungkook, ese es su nombre... Él es diferente a todos los alfas que haz conocido, es especial en muchos sentidos y créeme cuándo te digo que te llevarás una gran sorpresa cuándo te des la oportunidad de conocerlo... Sé que en este momento sientes que esto es un error... Pero cariño...- Minha tomó las manos de su sobrino- Estoy segura de que con el tiempo lograrás enamorarte de él... Confía en mí...

El omega asintió no muy convencido. Jimin estaba seguro de que eso nunca pasaría. Él nunca podría enamorarse de ese alfa.

- ¿Vamos?

- Sí...

Los omegas salieron de la habitación juntos y caminaron por los pasillos de aquel hotel a paso lento, Jimin trató de tranquilizarse pero el miedo estaba invadiendo su cuerpo por completo.

En cuánto se detuvieron frente a la puerta que los guiaba a un comedor privado.

- ¿Jimin?- su tía lo llamó antes de entrar.

- S-si...

- Tranquilo... Todo saldrá bien...

La omega abrió la puerta minutos después y fueron recibidos por las fuertes feromonas de los alfas que los esperaban.

Jimin reconoció el aroma a pino de su padre de inmediato, pero un aroma diferente fue el que llamó su atención.

Menta.

Su vista se dirigió al alfa alto que se encontraba al lado de su padre y se llevó una gran sorpresa al ver a un chico jóven y bastante atractivo.

Nada comparado a lo que él se había imaginado.

Jungkook respiró profundamente aquel aroma delicioso a frambuesas, observó detenidamente al omega frente a él y su corazón volvió a acelerarse.

- Jeon Jungkook...- Hyungsik habló- Te presento a mi hijo Park Jimin...

El alfa hizo una reverencia y extendió su mano temblorosa, el omega la tomó enseguida.

- Un placer conocerte...

- Igualmente...

- Bueno, creo que lo mejor es darles un momento a solas...- Minha afirmó.

- ¿Qué?- Hyungsik no estaba de acuerdo con esa idea.

- Para que se conozcan mejor... Con nosotros aquí será incómodo para ellos hablar... Así que ven conmigo hermano, tenemos que hablar sobre algo importante...

- No, no creo que...- el alfa mayor iba a repelar pero Minha ya lo estaba jalando a la salida.

En cuanto alfa y omega se quedaron a solas. El silencio inundó aquella habitación privada.

- Señor Jeon...- Jimin se armó de valor.

- Jungkook, por favor...

- Jungkook... Ahora que tuvo la oportunidad de conocerme, de verme en persona... ¿Tiene alguna duda?

- No... ¿Y usted tiene alguna duda?

Jimin guardó silencio por algunos segundos. Ya no había marcha atrás, tenía que aceptar que esto era lo mejor si quería que su bebé naciera.

- No...

Otro largo silencio se presentó.

- ¿Cree que podrá aceptar a mi bebé?- el omega se aventuró a preguntar.

- Claro que sí...- el alfa respondió de inmediato- No tenga duda de eso... Cuidaré de usted y de ese cachorro cómo si fuera mío...

Los ojos de Jimin se llenaron de lágrimas. Sabía que era muy díficil que un alfa aceptara a un cachorro que no era suyo, pero que ese hombre frente a él dijera esas palabras lo habían hecho sentir bien por primera vez desde que todo comenzó.

- ¿Está bien?- el alfa preguntó.

- Si...- Jimin limpió sus lágrimas con el pequeño pañuelo que el pelinegro le ofreció.

- Es usted tan lindo que no entiendo cómo un alfa pudo dejarlo así... Pero le prometo que haré lo que sea necesario para hacerlo feliz...

Y con aquella promesa ambos supieron que no había marcha atrás.

⚜️⚜️⚜️⚜️⚜️

El día de la boda...

Jimin se observó de arriba abajo y sus ojos no pudieron evitar llenarse de lágrimas. Él había soñado con esto muchas veces.

En sus sueños se veía casándose y formando una familia con el alfa que amaba.

Y en efecto una parte de su sueño se iba a cumplir, aunque la realidad era muy diferente a lo que imaginó, se iba a casar, sí. Pero con un completo desconocido.

Justo en ese momento al verse frente al espejo con aquel bonito traje azúl cielo que su tía le había regalado para su boda, sentía que aquel deseo que le pidió a la Luna todas aquellas noches de desvelo, nunca se iba a cumplir y que este era su castigo por no cumplir con las órdenes de su padre.

- ¿Jimin? ¿Estás listo?- su tía entró a la habitación.

El omega se recompuso y escondió bajo la camisa de su traje aquella cadenita de oro.

- Sí tía....

Minha lo observó con detenimiento. Se veía tan hermoso, Jimin le recordaba mucho a su madre, su carácter, su personalidad, de todos sus sobrinos, el omega siempre demostró ser alguien especial en muchos aspectos, alguien de buen corazón, perseverante e inteligente. Y ella haría lo que fuera por verlo feliz.

- Te vez tan bonito cariño...

- Gracias tía...- el omega se sonrojó, se ponía muy tímido cuándo le decían ese tipo de halagos- ¿Mi padre?

- Está revisando algunos detalles con respecto al papeleo y todo eso, organizar una boda de un día para otro no es nada fácil...

- ¿Todo está bien?

- Si, no te preocupes... Ya me encargué personalmente de que todo salga perfecto, pero tu padre quiere hacerse el importante....

- Entiendo...- Jimin bajó la mirada a sus manos temblorosas.

Minha rápidamente notó el nerviosismo de su sobrino. Sabía que esto era difícil para él.

- Debo pedirte una disculpa por no poder organizarte una boda grande y bonita como me hubiera gustado para tí...

- No se preocupe tía, no era necesaria una boda grande... No hay nada que celebrar...

- Claro que sí... Estamos celebrando tu matrimonio con un alfa bueno, amoroso y comprensivo...

El omega no pensaba igual, para él esto era un castigo, aún no terminaba de aceptarlo y aunque la conversación con él había sido diferente a lo que imaginó, él seguía negándose a abandonar sus sentimientos.

- ¿Necesitas algo más antes de la ceremonía?- la omega preguntó minutos después.

El omega negó.

- Estoy listo...

- Entonces andando... En el pequeño salón para fiestas nos espera el juez y el cura...

Jimin asintió y tomó el pequeño arreglo de flores que su tía le ofreció.

Salieron de la habitación juntos y caminaron hasta la recepción para encontrarse con su padre quién se veía demasiado tenso.

Y es que Hyungsik podía hacerse el duro y todo, pero en el fondo le estaba costando mucho trabajo dejar ir a su cachorro, le dolía verlo así de triste pero entendía qur esto era lo mejor para él.

Loa tres subieron al auto que los llevó al pequeño salón de fiestas dónde Jungkook junto a su hermano y su cuñado los esperaban.

El alfa pelinegro estaba demasiado nervioso. Y no entendía porqué, él nunca se había sentido de está manera, parecía un pequeño cachorro temeroso, pero es que ese omega tenía algo que lo hacía querer protegerlo siempre.

Cuándo vió a su madrina entrar por la puerta supo que el momento había llegado, así que acomodó su traje y espero pacientemente a que Jimin entrará junto a su padre.

Y cuando lo vió caminar hacía él se quedó completamente en blanco.

El omega se veía realmente hermoso, su cabello rubio, sus ojos verdes, ese traje azul que hacía dejaba ver su pequeña y perfecta figura.

No tenía palabras para explicar lo que estaba sintiendo.

En cuánto Jimin llegó a su lado, el sacerdote comenzó con la ceremonia.

- Jungkook, ¿Aceptas a Park Jimin cómo tu esposo, para amarlo, respetarlo y cuidarlo por el resto de tu vida?

- Acepto...

- Jimin, ¿Aceptas a Jeon Jungkook cómo tu esposo, para amarlo, respetarlo y cuidarlo por el resto de tu vida?

El omega tardó un momento en responder pero al final lo hizo.

- Acepto...

- ¿Los anillos?- el cura preguntó.

Jungkook comenzó a buscarlos en los bolsillos de su pantalón y por todo su traje pero al parecer había sido tan tonto cómo para olvidarlos.

Minha de inmediato notó los nervios de su ahijado.

- Dame tu anillo...- le dijo a su esposo.

- ¿Qué?- Han no entendía lo que su esposa decía.

- Que me des tu maldito anillo de bodas!!- susurró entre gritos la omega.

El alfa se lo quitó y se lo entregó a la omega, esta junto su anillo y el de esposo y se levantó para entregárselos a Jungkook.

- Aquí están cariño.... Me los diste a mí...- la omega le guiñó un ojo.

- Gracias madrina...

Jungkook le puso el anillo a Jimin y le entregó el otro para que el omega hiciera lo mismo.

- Eran nuestros anillos de boda y son una reliquia familiar...- Han le dijo a Minha segundos después.

- ¿Y?- la omega le restó importancia.

- Con estos votos sagrados la Luna los acoge bajo su techo en su nueva vida juntos, para darse esperanza cuando haya tristeza, fuerza cuándo haya debilidad, fe y entendimiento cuándo haya confusión y dudas, pero sobretodo amor...

Jungkook asintió escuchando atentamente aquellas palabras.

- Ahora los declaro esposos... Puede besar a su omega señor Jeon...

El alfa volteó a ver a Jimin quién tenía los ojos muy abiertos, iba a decirle al sacerdote que no era necesario pero el omega lo tomó del brazo y se acercó a él.

- Está bien...

Entonces Jungkook se inclinó un poco y rozó sus labios con los de Jimin en un tierno y pequeño beso.

Su primer beso.

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Ya se casaron mis papis 🤎

Jungkookie es el hombre de mis sueños 🥰