Capítulo 36
PERDÓN POR TARDAR TANTO! He estado teniendo muchísimos exámenes y estoy en el último curso antes de la Universidad y a parte de que he estado estudiando, no he sabido racionar bien el tiempo y no he podido subir en quince días. Lo siento muchísimo :(
Igualmente, me gustaría saber qué vais pensando mientras este capítulo se desarrolla, así que dejadlo en los comentarios :)
VALERIE
Se parecía a Harry. Solamente se parecía a él. Su carisma, su alegría se había marchado. Su mirada estaba apagada, sus ojos verdosos estaban ennegrecidos. Grisáceos, me atrevería a decir. Era como si le hubiesen encerrado, le hubiesen recriminado todo lo que había echo mal y él, les hubiese creído. Haciendo que Harry se derrumbase.
-Harry... -Murmuré, mientras notaba como me costaba mantener la mirada en sus ojos-. Te amo, todo cambiará te lo prometo.
-Yo también te amo, Valerie -Contestó. Su voz ronca sonó rota, casi en un susurro, sin embargo... nada impidió que mis oídos le escuchasen como si emplease un tono de voz normal.
-Encontraré la forma de sacarte de aquí, ya lo verás -Comencé a decir, sequé mis lágrimas con mis dedos, agachando la mirada para volver a levantarla y decir-. Contrataré al mejor abogado de Nueva York y...
-Escúchame bien, Valerie -Me interrumpió-. No hay ninguna manera de que me puedas sacar de aquí, lo que hice me va a pasar factura. Seamos realistas por un momento, cariño, iré a la cárcel y seguramente... con muchos años de condena, incluso con cadena perpetua. Lo que vas a hacer, es seguir adelante, seguir con tu vida. Ya sabes que las cuentas del banco están con un nombre falso y el tuyo, eres millonaria, Valerie. Lo preparé así, por si algo ocurría.
-Harry...
-Déjame acabar -Interrumpió de nuevo, podía ver el dolor en sus ojos, el dolor que le causaba torcer el cuchillo que se estaba clavando en mi corazón en aquel momento. Rompiéndome. Aquello era demasiado difícil de aceptar-. Busca alguien que te quiera, que te proteja, porque todos sabemos que yo, no podré hacerlo. No habrá forma alguna de sacarme de la cárcel, me tendrán vigilado hasta que muera o decida suicidarme.
Suicidarse... Aquello comenzaba a ir demasiado lejos. Quería que aquella pesadilla terminase de una jodida vez.
-Harry, por favor... ¿de verdad crees que soy capaz de enamorarme de alguien más?
-No lo sé, puede ser difícil, pero entiende algo, alguien te ama y eso quiere decir que alguien puede amarte de nuevo -Sus ojos verdes, fijados en los míos, hacían un esfuerzo por decirme que aquello debía pasar, que era lo mejor-. Debes hacer un esfuerzo por olvidarme, comienza de cero en algún lugar pero... prométeme que llevarás a Gemma contigo.
No podía seguir escuchando aquello. Era demasiado para mí.
-Cierra la boca, Styles -Espeté, haciendo que Harry me prestase toda su atención-. Te guste o no, encontraré la forma de sacarte de la cárcel, de hacer creer al mundo que estás muerto y huir de toda esta mierda. Créeme que lo haré.
-No es tan fácil -Murmuró.
-¿Crees que las cosas se consiguen chascando los dedos? -Pregunté, mientras entrelazaba mis dedos, poniéndolos encima de la mesa gris que había en la sala-. Obviamente no, pero lo haré. Cueste lo que cueste.
-¿Y si no lo consigues?
-En ese caso, te iré a ver cada día a la cárcel y me da igual que tú no quieras que lo haga, iré solamente para tocar los huevos un rato -Sonrió aunque sus ojos seguían tristes-. Harry, déjame ayudarte.
-Está bien -La pequeña sonrisa se volvió a mostrar en sus labios-. ¿Tienes pensado que hacer?
-No.
-Pues no malgastes el dinero en un abogado, ya sabes que el juicio está perdido.
-¿Aunque no haya empezado? -Pregunté alzando una ceja.
-Aunque no haya empezado -Afirmó Harry, asintiendo.
-¿Recuerdas aquello que mencionaste sobre Christian? -Su rostro pareció preguntarme a qué me refería-. Ya sabes... cuando mató a tus padres y... -Harry asintió, hablar de aquellos temas no era algo con lo que me sintiese cómoda-. Le pienso denunciar.
-Me parece buena idea -Comentó Harry-. Para ganar eso, págate un buen abogado. Lo necesitarás.
-No te preocupes, lo haré -Murmuré, nuestros ojos se miraron durante un rato. Examiné su rostro, el cansancio era notable-. Te echo de menos.
-Y yo, pensar que voy a tener que dormir en una mierda de cama a partir de ahora, es deprimente. Pero eso no es lo peor de todo, viviré sin sexo, qué mierda más grande.
-¿Ese es tu mayor problema?
-Sí, estoy pensando en cambiarme de acera, por lo menos tendré a hombres a mi alrededor. Es un problema considerable, Valerie.
-No seas tonto.
-Eso sí, asegúrate de sacarme de aquí, por favor -Pidió-. Sé como funciona todo esto, comenzarán a tratarme como una mierda, como si fuese un animal, como si no mereciese vivir y como si fuese un hijo de puta sin sentimientos.
-Lo sé, Harry. Un policía me ha preguntado de qué te conocía y cuando le he dicho que eras mi novio, me juzgaba con la mirada.
-Vaya mierda de sociedad.
-Has cambiado, quizá una buena conducta en la cárcel...
-Una buena conducta, en mi caso, no mejorará nada, está más que claro...
-Louis dice que te llevarán a Reino Unido.
-Louis tiene razón -Afirmó, pasando una de sus manos por su cabello-. Tienen que llevarme a mi país de origen. Cambiando de tema, ¿cómo están los chicos?
-Tristes, ¿cómo van a estar? Todos estamos destrozados, Harry -Murmuré-. ¿Sabes? Para mi ha sido un alivio saber que te había atrapado la policía, pensaba que estabas muerto.
-Oh, gracias -Interrumpió con una cierta ironía y una pequeña sonrisa-. Diles a los chicos y Gemma que estoy bien y que los quiero.
-Estás echo una mierda -Dije y él hizo una mueca.
-No les digas eso... Queda muy mal -Murmuró, encogiéndose de hombros y haciéndome sonreír-. Me encanta tu sonrisa.
-Siempre tendrás que mantener tu imagen, ¿verdad?
-Soy el más guapo, si hubiesen mujeres en la cárcel se enamorarían de mí -Bromeó, aunque ninguno de los dos sonreímos al respecto.
-Supongo que la próxima vez que nos veamos será en el juicio...
-¿Hay fecha?
-El treinta de Marzo.
-Si que tienen prisa -Bufó Harry.
-Te consideran muy peligroso, esa es la razón... -Comenté, recordando lo que habíamos hablado los minutos antes-. Aunque demos por perdido el juicio, llamaré un abogado, que vendrá a hablar contigo y... si te envían a la cárcel, me mudaré cerca de allí.
-Esto es una mierda. ¿Qué va a ser de nuestra relación, Valerie? Ya te he dicho antes lo que pienso y creo que lo mejor es...
-No lo digas -Interrumpí-. Sé lo que vas a decir y si lo haces, sería aún peor para ambos. Acabaríamos más destrozados de lo que estamos.
-Está bien, seguiremos así, pero que sepas que nuestra relación está jodida entonces.
-Pues está jodida y vale, pero estamos juntos en esto, ¿vale?
-Vale. ¿Cuánto rato tienes?
-El guardia me ha dicho que si necesitaba más tiempo, solamente lo tenía que poder, según él supuestamente nos íbamos a despedir.
-Oh, genial -Comentó-. Entonces será mejor que te diga lo que Christian me ha dicho. Aléjate de él, Valerie, de todo lo que tenga relación con él y yo seré feliz.
-¿Por qué? ¿Qué ha pasado?
-Me ha dicho que no te tiene a su lado y mierdas así, seguramente te quiere de vuelta, aunque ha sido una breve conversación y no hay mucho más para explicar. Cuando he entrado en su despacho estaba lleno de cuatro policías corruptos.
-¿No has pensado en que te pueden matar en la cárcel?
-No, claro que no. ¿Lo crees posible?
-Puede ser -Fruncí el ceño-. Ves con cuidado, Harry.
-Lo haré, no te preocupes.
La puerta se abrió de golpe, sorprendiendo a ambos. El policía que previamente me había conducido al lugar se asomó por la puerta. Le observé esperando a que hablase.
-¿Has acabado ya? -Preguntó. Negué con la cabeza instintivamente.
-No, ahora me despido -Contesté, cerró la puerta de nuevo, el silencio inundó la sala. Era la hora de la despedida. Mis ojos contra los de Harry, buscando no separarse jamás-. Creo que... he de irme. Te prometo que lo solucionaré todo, no te preocupes.
-No perderé la esperanza de hablar contigo mañana, Valerie -Comentó él.
-Mañana volveré -Confirmé-. Vendré cada día hasta el día del juicio.
-Entonces, hasta mañana -Harry se levantó-. No sabes las ganas que tengo de besarte.
-Yo también, me muero por besarte -Murmuré. Sus ojos no desconectaron en ningún momento de los míos. Sentí que en aquel momento solo estábamos nosotros, nadie más, solo él y yo, y nada nos separaría-. Nos vemos mañana, Harry, te quiero -Comencé a caminar hacia la puerta, firmemente, de la única forma que podía, intentando que mi corazón no se desmoronase en aquel mismo instante. Me despedí con la mano de él.
Abrí la puerta, el brazo del policía me cogió cerrando la puerta y comenzando a caminar de vuelta a donde nos encontrábamos inicialmente.
-Es muy guapo -Comentó el policía de repente. Sí, aunque Harry daba la sensación de estar agotado y su rostro se veía pálido, seguía siendo el chico más guapo que jamás había visto.
-Ya lo sé -Afirmé.
No dije nada más al respecto. No quería mantener ningún tipo de conversación con aquel hombre pues sabía que era capaz de decir algo de lo que arrepentirme al día siguiente.
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