MADDY

El domingo por la tarde, paso gran parte del día encerrada en casa y decido ir a correr por el vecindario en eso de las seis antes de que el sol se meta por completo, acción de gracias está por venir, si bien, haremos una celebración en Devyn's como es de costumbre y aunque faltan una semana para ello, Brandon me dijo que el martes iremos de compras para los preparativos.

Después de abrocharme bien las agujetas de mis zapatos de correr, comienzo a trotar por la vereda, desde el incidente del viernes por la noche, no sé más sobre Travis y su amigo, pero me enteré de que Matt se fue esta mañana, cuando paso por la casa de los Orman me pasa por la cabeza detenerme en ella, pero sigo trotando.

Desde la llamada con papá no dejo de pensar en él y por mucho que trate de evitarlo, Kyle acapara gran parte de mis pensamientos, es por eso que he optado por salir de casa y ejercitarme con la esperanza de olvidarme de él, continúo corriendo y consigo dar tres vueltas en total antes de regresar y encerrarme de nuevo, luego de una larga ducha.

En casa busco todo tipo de distracciones para no pensar en Kyle, pero es imposible sacarlo de mi cabeza y al final busco su nombre en internet para saber más sobre él, pero no tengo el valor suficiente de darle enter y comenzar a buscar. Una parte de mi tiene miedo de hacerlo y me rindo, apago la computadora y me voy a dormir, sin embargo, el sueño nunca llega a mí hasta hora más tarde para atormentarme con una pesadilla.

Mi cuerpo está sobre el escritorio de papá, los papeles y carpetas importantes en el suelo, tengo los ojos cerrados dejándome llevar por la nueva sensación que produce una onda de placer a mi cuerpo, Kyle deja un rastro de besos sobre mi cuerpo, me gusta la sensación que produce y una risita se me escapa, después, su mirada se encuentra con la mía, le sonrío, él hace lo mismo pero su sonrisa se desvanece y es cambiada por una sonrisa maliciosa, de pronto me ahorca y mi cuerpo se tensa, no puedo respirar, mis manos se cierran sobre su muñeca intentando que suelte mi cuello, presiona con más fuerza, forcejeo, intento hablar pero no formulo nada, mi boca está seca.

—Pagarás por lo que me hiciste, perra.

No puedo respirar e intento forcejear con el agarre de Kyle, sus ojos azules se ven enfurecidos y solo veo venganza en ellos, continúo luchando pero es imposible, él es mucho más fuerte que yo, lágrimas comienzan a salir de mí mientras lucho, Kyle siempre tuvo una doble intención, jamás fue sincero y por mucho que jurara ser una chica inteligente, resulté más ingenua de lo que creía al caer en sus juegos.

Me despierto de un brinco, me apresuro a prender la lámpara de noche que está en la mesita al lado de mi cama y reviso mi cuerpo debajo de las sabanas para ver que estoy vestida, segundos después me toco el cuello.

Solo ha sido una pesadilla, me repito con intención de calmar mi nerviosismo.

Salgo de la cama, encendiendo las luces mientras voy hacia la cocina en busca de agua, pues tengo la boca seca por culpa de mi pesadilla. Al estar en la cocina, siento una gran inseguridad en mí y comienzo a encender todas las luces de casa y revisar el lugar como si Kyle aparecerá en cualquier momento para cumplir su promesa.

Intento tranquilizarme y decirme que no pasa nada, que él no podrá encontrarme en un pueblo como Daxton Hollow, aquí es el único lugar donde estoy a salvo. Tomo asiento en uno de los bancos que hay junto a la barra y me paso las manos por el cabello, si no hubiese investigado un poco sobre mis padres, no hubiese tenido una pesadilla como esa, al menos, el viejo recuerdo de Kyle se había quedado oculto por un tiempo.

Decidida en que necesito un poco de aire fresco, salgo a la entrada de la casa no sin antes checar la hora, son las cuatro de la mañana, él sol comenzará a salir aproximadamente en una hora y si tengo suerte de volver a dormir, que dudo que así sea, descansaré un poco antes de ir a trabajar.

Respiro el aire fresco cuando por fin salgo a la entrada. Traigo puestos unos shorts cortos y un camisón largo que me cubre con suerte los muslos, aun así, sigue siendo un pijama corto.

Me agarro a la barandilla de la entrada, pienso en sentarme en los escalones cuando veo a Travis pasar por la casa, va trotando y no tengo duda de que es él porque sé que es el único hombre joven que pasa por aquí ejercitándose a las mañanas, él no se percata de mi presencia, va absorto en sus pensamientos y lo pierdo de vista porque pasa de largo.

Me pregunto qué es lo que lo tiene despierto a tan tempranas horas, sé que como militar, está acostumbrado a no dormir algunas veces, sin embargo, tiene una vida de civil ahora y parece que no puede acostumbrarse a ella.

Cuando regresa trotando por la vereda, su paso se ralentiza a pocos metros de distancia de mi casa, su ceño se frunce cuando me ve y camina hacia la entrada inseguro de que realmente esté afuera a estas horas.

—¿Maddy?

Dice más para sí mismo, trago con fuerza el nudo que hay en mi garganta y me veo bajando uno de los escalones. Travis se acerca inseguro para confirmar que realmente soy yo y de un momento a otro lo veo en la entrada de mi casa.

—¿Qué haces despierta a esta hora? —cuestiona con intriga en su voz, mi boca se abre y se cierra, le desvió la mirada insegura de qué decirle.

—No puedo dormir —termino confesando solo para él, una mueca se dibuja en sus labios y me da una mirada de arriba abajo, lo que me pone nerviosa por mi vestimenta, cuando su mirada se posa en mis ojos, no es aquella habitual mirada que posee todo el tiempo, es una menos cálida, distingo una pizca de deseo en ella y me gusta. La Maddison que solía ser antes, estuviera orgullosa de despertar interés en un chico como él.

Mientras le sostengo la mirada, recuerdo en el beso que nos dimos, en el agradable calor de su boca y lo bien que besa.

—No deberías estar afuera a estas horas —murmura en un tono mandón, algo típico suyo. Mi boca se abre y cierra sin saber qué responder. Travis se acerca más a mí, contengo la respiración, quisiera abrazarlo y sentirme a salvo entre sus brazos, su ceño se frunce y estira una mano para acariciar mi brazo, no sé en qué momento acortó demasiado la distancia entre los dos—. ¿Está todo bien?

Inquiere con curiosidad y no tengo forma de responder a ello, mis recuerdos me atormentan y mis ojos se humedecen, en cualquier otro momento saldría corriendo y huiría de mis problemas tal y como lo hice.

Eres una cobarde, Maddy...

Me digo a mi misma y trago con fuerza, era de esperarse que tarde o temprano los recuerdos comenzaran a atormentarme de nuevo. Cierro los ojos y cuento del uno al diez en mi cabeza para controlar mi repentina ansiedad, segundos después me aparto de Travis en busca de mi espacio.

—Maddy... —insiste de una forma que encuentro tierna y quisiera aferrarme a la ternura que presenta en estos momentos. Gran parte de mi vida me he críe en un ambiente bastante frío que venir a Daxton Hollow fue difícil, me costó bastante aceptar la calidez que todos aquí ofrecen.

Incluso aunque Travis no se sienta parte de Daxton y allá formado su vida en el ejército, tiene esa vibra cálida que la mayoría aquí posee.

—¿Quieres entrar?

Le pregunto deseando que su respuesta sea un sí, siento un alivio cuando lo veo asentir.

Camino hacia la puerta sintiendo a Travis a mis espaldas seguirme los pasos, una vez que estamos dentro de casa, escucho la puerta cerrarse y me volteo a verlo, su cuerpo no luce cansado del ejercicio, diría que no parece que ha salido a correr como otras veces, quizás porque recién comenzaba a correr y se detuvo antes de lo esperado.

Su mirada está fija en mí, mantiene su cuerpo en la puerta, de pronto el ambiente a nuestro alrededor se siente tenso, mi corazón comienza a latir con gran fuerza y doy un par de pasos hacia él, su mirada se desvía para observar mi cuerpo con la claridad de la luz, distingo cierta pizca de deseo en ellos, lo que incrementa los latidos de mi corazón a medida que avanzo hacia él, me muerdo el labio con fuerza, es evidente que no soy la única que desea acortar la distancia entre los dos porque Travis se aleja de la puerta, su mirada se posa en mi boca por unos segundos y después vuelve a mirarme a los ojos, de nuevo veo esa mirada suya que me cuesta descifrar combinada con el deseo y algo más como inseguridad, por primera vez desde que lo conozco atisbo una pizca de nerviosismo en él y por primera vez desde que llegue a Daxton Hollow dejo de ser la chica tímida y vuelvo a recobrar un viejo hábito de la Maddison que solía ser en casa.

Acorto la distancia entre Travis y yo y lo beso, no transcurre mucho tiempo para que Travis me responda el beso, no es un beso cálido o tierno, es un beso intenso que me hace perder la cordura y perderme entre su ardiente boca.

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¡Holaaa! ¿Cómo están? Quizá no es un capítulo muy largo pero les revela algunas cosas del pasado de Maddy! ¿Qué tal les pareció?

Tambien comento que el siguiente por cierto, capítulo es seguro que esté subidito de tono!! ¿Será que por fin Maddy y Travis tendrán algo? 

Quiero darles las gracias por las 4k lecturas!! Espero que la historia poco a poco vaya creciendo y muchas gracias a quienes la leen, espero que continúen disfrutando de la trama, muchas gracias❤️