MADDY

—¿Te das cuenta que Travis tiene puros amigos guapos? —inquiere Brandon mientras limpiamos las mesas antes de cerrar el local—. Si no es con él, podría presentarte a uno de sus amigos.

Rio por lo bajo.

—Pero ¿Qué dices?

—Digo que creo que deberías de salir con alguien, no sé, Travis es muy lento para invitarte a salir y creo que se les va el tiempo a los dos.

—No estoy buscando pareja.

—Sé que no mi cielo, estás reservándote para el lindo soldadito —me guiña un ojo en mi dirección y niego, no decimos más, continuamos limpiando las mesas en silencio hasta terminar—. ¿Quieres que te lleve a casa?

Dice mientras cierra el local.

—¿Puedes dejarme en casa de Charlotte? Le prometí que le echaría una mano en el bar esta noche.

—Vaya, siento que a veces Charlotte se aprovecha de tu bondad, no entiendo por qué la ayudas.

—Porque es mi amiga al igual que tú.

—Sí, pero tú y yo trabajamos juntos desde un principio y Charlotte te pide que le ayudes en el trabajo cada vez que quiere holgazanear.

Bromea con esto último. Nos subimos a su auto y conduce hacia la casa de nuestra amiga, como es sábado por la noche, Brandon tiene la costumbre de ir a la ciudad por lo que se despide luego de nosotras.

—¿Qué te ha dicho? Seguro se ha burlado de mí diciendo que te cargo la mano con mi trabajo.

Dice mientras se coloca uno de sus aretes, hoy luce bastante guapa que otras noches, trae puesta una falda blanca y una blusa negra manga larga, su cabello castaño cae en ondas sobre sus hombros y sus ojos marrones resaltan con su maquillaje.

—¿Por qué estás tan arreglada? ¿Acaso me has ocultado algo?

Inquiero y ella me ignora, yendo a su habitación para mirarse en el espejo, la sigo y me siento sobre la cama.

—Tengo una cita.

—¿En horas de trabajo?

Enarco una ceja y se voltea a verme.

—Vamos, esperaba que pudieras cubrirme esta noche...

Dice con cierta inquietud, una mueca se dibuja en mí, ha sido un día pesado y estoy algo cansada, pero son pocas las veces en las que ayudo a Charlotte a cubrir su turno en el bar y sinceramente, no tengo humor para irme encerrar a casa. Trabajar por ella no suena tan malo.

Como cada fin de semana, el bar esta infestado por los habitantes del pueblo, la música que sale por los altavoces anima el ambiente y ha provocado que el cansancio desaparezca y este de mejor ánimo mientras sirvo en la barra. Wesley hace su entrada llamando la atención de un par de chicas, lo observo llegar hacia mi dónde me ofrece una sonrisa.

—Maddy.

—Wesley.

—¿Qué tal va tu noche? ¿No esta Charlotte por aquí?

—Ha tenido asuntos personales, ¿Qué puedo servirte?

—Whiskey, por favor.

Dice, le traigo su bebida y también le tomo la orden a sus amigos para traerles lo mismo que a él, no toma mucho tiempo para que encarguen más bebidas. Las primeras dos horas se pasan rápido, sirvo en la barra y también en las mesas, de pronto, cuando regreso a la barra veo a Travis acercarse junto a su amigo Matt, quien observa el lugar curioso. Puedo ver que es un chico de ciudad porque tiene esa mirada que yo tenía la primera vez que vine a Daxton.

—Hola —saluda Travis cuando llega a mi lado, le ofrezco una sonrisa tímida.

—¿Puedo servirles algo? —pregunto mientras los observo tomar asiento junto a la barra.

—Dos cervezas, por favor —inquiere Matt, Travis asiente y me voy a servirles las cervezas, cuando regreso, sirvo un par de ordenes más antes de volver a limpiar con el trapo la barra—. Oye, ¿también trabajas aquí?

Pregunta Matt en mi dirección, niego al tiempo en que una risita se me escapa.

—Estoy cubriendo a una amiga —le digo, Travis murmura algo que no es audible para mí y su amigo asiente. Me concentro en lo que hago y por mucho que trato, no puedo dejar de darle miraditas fugaces a Travis, que también lo hace.

—¡Oye! ¡Maddy! ¡Otra ronda de cervezas, por favor! —grita Sam, uno de los tantos chicos que está sentado junto a Wesley, llevo una orden de seis cervezas a su mesa, continúo haciendo mi trabajo por una hora más.

—Oye Maddy, ¿Quieres darme otra cerveza? —pregunta Wesley, recargando sus brazos sobre la barra. Doy un asentimiento para rellenar su vaso y cuando regreso, veo que está observando a Travis y a su amigo.

—Aquí tienes.

Digo para llamar su atención, pero es imposible porque luce atento hacia Travis.

—Oye, Orman, ¿has traído a uno de tus amiguitos del ejercito? —Inquiere con intriga y burla en su voz. Mi agarre al vaso de cerveza se vuelve más firme. Al ver que Travis lo ignora, Wesley deja escapar un chasquido—. ¿Qué? ¿También ha decidido aparecer aquí para lavar culpas?

La mirada de Travis se vuelve seria y veo que Matt tiene las cejas enarcadas con curiosidad, comparte una mirada con su amigo y se levanta de su asiento seguido de Travis para pararse frente a Wesley, quien sonríe maliciosa mente.

—¿Disculpa? ¿qué has dicho?

Matt tiene la misma estatura que Wesley, su cabello castaño es un poco más largo que el de Travis, pero me da la impresión de que ambos suelen hacerse el mismo corte militar.

—Solo ignóralo, Brightly.

Inquiere Travis hacia su amigo, quien le sostiene la mirada desafiante a Wesley por unos intensos segundos.

—Oye, ¿este es el idiota del que alguna vez me hablaste? —pregunta Matt hacia Travis, quien asiente cabizbajo, no buscando problemas.

—Vaya, ¿debería sentirme halagado de que Travis Orman hablará de mí fuera de Daxton? —dice Wesley con gran ironía en su voz. Travis niega.

—Solo déjalo, vámonos, Matt.

—Vaya, me sorprende que ahora estés evadiendo las cosas, Travis, ¿A qué se deberá?

—Vamos Wesley, ya déjalo.

Mascullo con irritación hacia Wesley, quien me ha escuchado y me gano una mirada de su parte, una risita seca sale de su boca.

—Ya veo, ahora tienes quién te defienda —me señala con el pulgar, Travis rueda los ojos. Wesley solo busca provocarlo y sacar provecho al hecho de que Shane le advirtió sobre tener peleas en el bar.

Travis se acerca hacia Wesley.

—No necesito a alguien que me defienda.

—Pues no lo parece.

—¿Qué es lo que quieres, Reef? —pregunta, su paciencia yéndose a la borda.

—Solo tengo curiosidad por tu amigo, dime, ¿también conoció a Elena?

El cuerpo de Travis se tensa ante la mención de ella, la boca de Matt se abre como si fuese a decir algo, pero se cierra, traga el repentino nudo que se le ha formado en la garganta.

—No estoy buscando problemas, ¿por qué no te vas a tu mesa?

Wesley sonríe.

—Tranquilo, tampoco los estoy buscando. Solo tengo curiosidad.

—Me importa una mierda tu curiosidad.

Travis se acerca más a Wesley, los dos sosteniéndose la mirada, la voz de Wesley baja y le susurra algo que solo ellos dos pueden escuchar, el cuerpo de Travis se tensa más y sus manos de pronto se vuelven puños, Matt lo nota y se acerca a él para colocar una mano en su pecho e intentar apartarle.

—Vámonos de aquí —le dice, pero Travis lo ignora y decide continuar con el tenso juego de miradas, hasta que se aparta y da media vuelta para seguir a su amigo, sin embargo, una sonrisa maliciosa se forma en la boca de Wesley.

—No sé cómo sigues defendiéndola si era lateramente una zorra.

Le grita a Travis, quien detiene su paso, alza su mirada, la cual es fría y acorta de un segundo a otro la distancia entre él y Wesley sin importarle lo que Shane le había dicho cuando llegó aquí por primera vez en años, pues golpea a Wesley, quien no se inmuta y le responde el golpe, de pronto los dos hombres inician una pelea bastante tensa, cayendo sobre una mesa, provocando un gran desorden, Matt intenta intervenir junto a otros hombres que están en el bar pero resulta casi imposible separar a Travis de Wesley porque están insultándose y diciéndose quién sabe qué cosas pues es imposible oírlos por los gritos de todos en el bar mientras los intentan separar.

No sé cómo lo hace, pero al final, Matt es quien consigue separar a Travis de Wesley con un buen golpe en la cara hacia Travis, quien le da una mirada atemorizante cuando los dos se apartan. Al estar separados, Shane hace su aparición y como es de imaginarse, es a Travis a quien culpa de toda esta situación.

—Creí que había sido claro la primera vez que llegaste —le dice, Travis escupe a un lado la sangre de su boca, Shane hace sus esfuerzos por no sentirse intimidado por la mirada de Travis, quien tiene el rostro con un par de rasguños y el labio cortado—. Y contigo también, Wesley, te he dicho que no busques pleitos.

—No los estaba buscando. Solo estábamos hablando un par de verdades, ¿no es así?

Inquiere con odio hacia Travis quien, de nuevo, se abalanza hacia él, pero es controlado por un par de hombres y Matt.

—Suficiente. Los quiero a los dos fuera de aquí —grita Shane con enojo para que ambos puedan escucharlo—. Ya han alterado el lugar, ahora lárguense de una vez.

Travis se zafa del agarre de los hombres y continúa mirando a Wesley por unos largos e intensos segundos antes de salirse junto a Matt, transcurren unos minutos para que Wesley y sus amigos también se vayan. Shane niega con disgusto al ver los vasos rotos que hay en el suelo y la mesa que habían tirado.

—Limpia este desorden, por favor.

Murmura en mi dirección y doy un asentimiento.

Me toma gran parte del turno limpiar el desorden y para cuando termino la jornada en el bar, estoy agotada y lo primero que hago al llegar a casa es tomar mi pijama y beberme una cerveza, ¿Qué le habrá dicho Wesley para que Travis se enojara? Pienso en que es algo referente a Elena porque sus ojos poseían aquella sombra que poseen cada vez que se menciona su nombre.

Pensar en la forma en que Travis actúa al mencionarla, me recuerda a mi padre y de un momento a otro me veo tomando la laptop y escribiendo en la barra de búsqueda el nombre de mis padres, las únicas noticias que encuentro son sobre los negocios de papá como siempre y también sobre los cotillones a los que mamá suele ir con sus amigas, me leo cada uno de los artículos que encuentro como si fueran a contarme alguna novedad.

Tomo mi celular entre las manos y busco el número de mis padres, cuando llegué a Daxton Hollow, cambié mi número para que mis padres no me pudieran contactar, aunque era obvio que ellos jamás me llamarían de nuevo, quise conservar sus teléfonos. Por un momento me cruza por la mente llamar solo para escuchar su voz.

—¿Hola?

Escucho la voz de mi padre mucho antes de que pueda colgar la llamada, mi cuerpo se tensa y no digo nada, solo escucho su respiración chocar contra la bocina, seguramente no se ha ido a acostar, debe estar en su despacho trabajando, pues es un adicto al trabajo.

—¿Hola? ¿Hay alguien allí? —insiste con cierta irritación. Detesta no tener una respuesta inmediata, suelta un bufido—. Escuchen si esta es una de sus otras absurdas bromas que sepan que puedo demandarlos, dejen de molestar, no quiero que vuelvan a llamar, no les daré ninguna información al respecto. Púdranse.

Cuelga la llamada de inmediato, la irritación en su voz fue evidente. Una risita seca se me escapa, no me sorprende que piense que todas las llamadas solo sean por trabajo, seguro que no le pasa por la cabeza que podría llamarle. Me quedo pensando en lo que ha dicho antes de colgar, lo que provoca que mi curiosidad aumente, según todas las noticias de internet, la empresa de papá está en problemas legales con otro de sus socios y esto me hace pensar en Kyle.

Todos alguna vez cometemos errores, algunos resultan insignificantes al final del día y de cierta forma nos ayudan a crecer, sin embargo, mi mayor error fue con Kyle. Los sucesos de aquel día vienen a mi mente, la oficina de mi padre, la mirada de Kyle en la que me perdí un sinfín de ocasiones, su cálida y engañosa sonrisa, es casi ridículo que nunca pude darme cuenta que la persona que más tenía qué perder no era mamá o papá sino yo y no sé si algún día podría perdonarme lo que hice.

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¡Holaaa! ¿Qué tal? No había tenido tiempo de actualizar la historia pero ya estoy de vuelta!! Además, le he cambiado la portada, ¿Qué opinan? ¿Les gusta?

Bien, no tengo mucho que decir, solo espero que hayan disfrutado del capítulo :D