Alguna vez te has preguntado cómo sería tu vida si no pudieras expresarte de manera adecuada, si por alguna razón estuvieras limitada a expresarte de una manera muy poco conocida...

Bueno eso era el día a día de una chica rubia bastante peculiar, ella era Liena loud la segunda hija de esa familia tan complicada, Liena era en rostro muy parecida a su madre, sin embargo su peso era completamente diferente al de su madre, nunca se sintió alguien hermosa y mucho menos bonita, siempre se sintió inferior a sus demás hermanas, sobre todo por sus dos más grandes defectos, uno era su peso y el otro que no podía hablar, ella usaba el lenguaje de señas para comunicarse, bueno algo cierto que ella había nacido sin voz así que solo podía comunicarse por señas de manos o escritura, tal vez vio a su padre como pareja, pero porque inventaba pretextos, simplemente lo hizo porque quería seguir a sus hermanas, aunque también sentía como le agradaba que su padre le dijera que era hermosa, cosa que obviamente se lo decía a cualquier mujer era obvio eso, pero ella se sentía especial así como las veces que ellos iban al centro comercial.

Inicia flashback...

Liena y Lincoln estaban en el supermercado ya apunto de pagar por los víveres, el albino se veía muy serio mientras veía a delante suyo, Liena solo estaba viendo a la derecha un poco triste.

-papi ¿te gusta pasar tiempo conmigo?- preguntaba liena que vio de reojo a su padre mientras usaba pocas señas de manos.

-se puede decir que no me gusta-

Lo dicho por Lincoln entristeció un poco a liena, haciendo que ella mirara hacia otro lado.

-yo diría que amo el pasar tiempo contigo-

la sonrisa que hizo Lincoln contribuyo a que liena se sonrojara y empezara a sonreír.

Fin de flash back...

Era patética, esas eran cosas que su padre siempre le decía a todas sus hermanas y mujeres con las que se acostaba, y ella lo sabia al igual que todas, aunque lo que siempre le decía su padre la hacia sentir bastante especial, sin embargo había alguien que siempre la observaba a lo lejos y siempre le sonreía era su hermanito, lemy siempre la observo mientras esta cocinaba, era su gusto y no solo eso a ella le encantaba cultivar plantas o cuidar las flores, sin embargo ella pudo ser la primera y ser la pareja de lemy sin embargo tuvo miedo, miedo a muchos factores entre ellos el ser infiel...

inicia flashback...

En la residencia loud había un típico desayuno entre hermanos, cada una hablaba con su hermana de al lado, sin embargo había dos personas que no hablaban con nadie, esta era liena y lemy, el castaño solo veía su plato de cereal sin decir ninguna palabra o hacer algún gesto.

-papi están hombre siempre puede enamorar a cualquier mujer con esa hermosa sonrisa- dijo leia mientras decía con añoranza.

-si lo es, no puedo esperar a ser su mujer- dijo Lacy

la mayoría solo asintió a lo dicho por Lacy.

- y cuando nos besa eso lo que hace con su lengua es... o por dios ya quiero ser tomada por el-

lo dicho por lyra provoco que lemy empezara a respirar de manera pesada mientras se veía demasiado enojado, cosa que liena noto, asi como cada vez que hablaban de su padre este se ponía mas y mas furioso, hasta que no pudo mas golpeando la mesa moviendo todos los platos cosa que sorprendio a sus hermanas.

-y a ese loco ¿Qué le pasa?- preguntaba leia que había sido mojada con el jugo de naranja.

las demás hermanas no sabían la razón de esto, liena se preocupo un poco muy pocas veces había visto a lemy de esa manera, decidió buscar a su hermanito castaño, busco por todos los lados, sin embargo no lo encontró, fue cuando la rubia se dio cuenta que no sabia nada de su hermanito, solo que le gustaba el rock, se sentía mal por no conocer a fondo a su hermano, esta camino por uno de los parques de royal Woods escuchando una voz muy conocida, vio a su hermanito siendo acompañado por las amigas de leia, eso era raro pero al verla muy pegada a lemy esta simplemente se empezó a molestar un poco, no sabia la razón sin embargo no le agradaba que esas chicas estuvieran muy cerca de su hermanito.

-bueno que te vaya bien en tu junta, nos vemos gwen- dijo el castaño con una sonrisa.

-nos vemos lem- la castaña le dio un pequeño beso en la comisara de los labios haciendo que lemy se sonrojara.

liena veía a lo lejos haciendo que ella empezara a enojarse, ¿Por qué esa chica besaba a su hermanito? y aun mas no sabia porque se molestaba, la chica rubia se acerco a su hermanito de manera lenta, al acercarse la rubia toco el hombro de lemy haciendo que el castaño le prestara atención, el niño al verla se enojo un poco intentándose ir del lugar, cosa que impidió la rubia.

- ¿Qué te paso en el desayuno?-preguntaba liena con señas de manos haciendo que el castaño se quedara unos minutos en silencio.

-no me paso nada- el chico solo se quería ir de ese lugar, no tenia ganas de hablar con alguna de sus hermanas.

- por favor-

Lemy no podía negarle nada a sus hermanas, los dos caminaron a una de las bancas del parque, la rubia seguía viendo a su hermanito, este no solo veía al suelo con cierta cara de impotencia.

- ¿Por qué actuaste de esa manera en el desayuno?- la pregunta dejo que lemy solo se viera sus manos aun sentía enojo, sin embargo la cara de liena no lo permitía mentir-

- me molesta...-

- ¿te molesta?- la rubia se veía con clara cara de duda, cosa que lemy noto.

- no me gusta, liena, no me agrada que ustedes de esa manera vean a nuestro padre... yo no pienso que pudieran estar con alguien mejor... o conmigo- eso ultimo hizo que lemy se sonrojara mientras volteaba a otro lado, sin embargo eso ultimo no lo escucho liena.

- ¿Qué dijiste?, papá siempre nos dice lo bella que somos aunque mienta, yo soy demasiado gorda para gustarle a alguien, y papá me ve y me dice lo hermosa que soy, yo por eso quiero ser su mujer y tener esa felicidad- la rubia termino de decir con sus señas de manos haciendo que el chico viera nuevamente al suelo con cara de tristeza, haciendo que liena se sintiera mal y sin saber la razón.

- a mi me gustas liena- la rubia vio a su hermanito que este seguía demasiado apenado.

- ¿c-como dices?- liena escucho eso haciendo que su corazón diera un vuelco, su hermano lo decía enserio.

- liena tal vez muchos bastardos te digan que jamás serás hermosa por no parecerte a mamá leni, y que les importa tu eres hermosa, no importa que te parezcas a lyra en sus curvas o a loan en su pecho, y que, tu eres alguien hermosa, eres como una manatí a todo el mundo le encantan los manatíes y créeme cuando te digo que eres la chica mas hermosa que he conocido mas hermosa que nuestras hermanas o madres- la rubia estaba sorprendida y lemy se veía un poco indeciso sin embargo se armo de valor besando a su hermana en los labios, liena no sabia como responder, las palabras de su hermanito de verdad le habian gustado, en el pecho de la rubia apareció una pequeña sensación cálida y solo aumento cuando su hermanito la beso, sin que ella lo quisiera lágrimas empezaron a brotar de sus ojos esa sensación de verdad era única.

lemy se sentía dichoso, para el pre adolescente podía parase el tiempo y quedarse en ese beso, no importaba que las demás siguieran amando a su padre con que una de ellas aceptara sus sentimientos era feliz no le importaba otra cosa... esperaba que liena por fin hubiera aceptado sus sentimientos, lemy solo sabia que no quería separarse, sin embargo algo lo empujo liena termino el beso de manera abrupta, moviendo a lemy un poco, la rubia solo sostenía sus hombros mientras negaba con su cabeza.

-¿l-li-liena?-

-no podemos- la rubia vio a otro un poco apenada mientras terminaba de hablar con señas de manos.

- ¿p-por qué?- lemy se sentía frustrado, y ¿Quién lo culparía? cuando por fin tenia su sueño de estar con una de sus hermanas esta lo rechazo... de nuevo.

-No eres tu... soy yo- la rubia termino de decir eso mientras veía al suelo intentando no ver los ojos de su hermano.

- Es por el viejo ¿verdad? esa es la razón por la que terminaste el beso por Lincoln loud- el silencio de la rubia fue la clara respuesta a esto.

El castaño se levanto de la banca mientras corría con toda la velocidad que le proporcionaban sus piernas, era siempre lo mismo dejado de lado por Lincoln loud, si era enfermizo ver a sus hermanas de esa forma, sin embargo le dijo todo eso a liena porque era lo que sentía, esas palabras eran verdaderas no eran como las excusas que su padre usaba para acostarse con mujeres, se sentía impotente, inferior al bastardo albino ¿Por qué tenia que pasar por esto? esa era una de las tantas preguntas que se hacia mientras se iba siendo vista por liena que no sabia que hacer, tiempo después de que se calmara y llegara a su hogar escucho un sonido de guitarra, liena se acerco al garaje escuchando la platica.

-Gracias marla y lizy siempre están ahí para mi- decía lemy que aun se escuchaba un poco desanimado.

- No pasa nada lem siempre estare aquí para ti-

-yo también hermanito-la rubia solo escucho que lemy empezó a tocar de nuevo la canción.

fin de flashback...

Desde ese dia marla y lemy se volvieron mas cercanos y ahora eran como novios, eso les sorprendía a todas, y a la vez enojaba, ella debería haber tenido ese lugar, sin embargo su idiotez de creer que una relación con su padre tenia futuro fue lo que la orillo a rechazar a lemy, después se dio cuenta que su padre usaba las mismas frases con todas las mujeres cuando coqueteaba, eso si que le había dolido, liena no era una chica que deseara el mal a las personas, pero su padre se merecia un escarmiento, engañaba a las mujeres para acostarse con el, no sabia si era porque su padre de verdad amaba a sus madre y demás mujeres que se acostó, o simplemente era por un momento de placer.

cuanto mas pensaba la rubia mas dudas salían a la luz, la verdad es que su padre era débil a cualquier chica que se le acercara, ella lo sabia de antemano aunque algo que si bien no sabia era que si el se atrevería a tener sexo con ellas, ya que si se atrevía a tocarles el trasero cuando lo besaban pero no llegaba a mas, liena pensaba en sus hermanas eran hipócritas por pensar en eso, ella no participo en los planes de leia, ya que con un rechazo ella creía que era suficiente para que lemy ya no lo intentara, y asi sucedió con ella, después de ese dia lemy no intento otra cosa con ella el castaño siempre cuando la veía su mirada era de tristeza cosa que de verdad le dolía a la rubia, la verdad es que no se sentía segura, sentía miedo de que lemy le gritara por rechazarlo antes.

Ella fue la segunda de sus hermanas en saber sus verdaderos sentimientos por su hermano, la primera era leia, liena lo sabia, de un momento para el otro leia veía a lemy con distintos ojos...

inicia flashback...

liena estaba en la cocina de su casa aun no podía quitarse a su hermanito de la cabeza, ella lo hirió y eso no le gustaba, la rubia camino al comedor para recoger los platos y lavarlos, vio a leia que esta abrazaba de la cintura a Lincoln, la niña intentaba quitarle los pantalones a su padre mientras sonreía.

-vamos papi, ¿podemos ir a tu cuarto?- decía leia que se pegaba mucho a su padre, y este parecía que no le molestaba.

En eso la puerta de la residencia loud se abrió, liena solo la escucho, sin embargo se dio cuenta que en cuanto la puerta se abrió leia perdió el interés por su padre soltándolo y acomodándose en el sillón mientras acomodaba su cabello, esto le pareció raro a liena, sin embargo al ver a lemy llegando con una caja de herramientas una duda apareció.

fin de flashback...

Liena observo a leia de distintas formas, se notaba que la rubia sentía cierto sentimiento por lemy, ya que cuando el castaño no la veía esta siempre miraba a lemy, al final la rubia llego a la conclusión que leia también quería a lemy solo que ella no se declaraba y no sabia la razón del porque lo hacia.

A lo mejor es que estaba confundida, no sabia ¿en lo que pensaba leia? pero aun asi ella quería hablar con su hermana menor, después de que pasara eso las demás le tiraron la culpa a leia que ella había sido la que las convenció, pero debían de ser sinceras, ellas ayudaron a leia, si no la hubieran ayudado el plan jamas hubiera funcionado sin la ayuda de ellas, liena no culpaba a leia de hecho ella entendía un poco, aunque también leia debería de entender que jamás debió de hacer eso.

Liena era poseedora de un pequeño auto azul celeste, ella tenia una incomodidad la cual era que siempre que sus madres estaban presentes lemy actuaba como si siempre les hablara y se llevara bien con todas ellas, y hasta cierto punto ninguna había de sus madres a sospechado, o lemy es buen actor o simplemente las madres lo saben y solo esperan.

la rubia mujer llego a lo que parecía una cafetería esta se estaciono esperando a alguien, mientras esperaba pensaba en lo que podía hacer, ella no era como sus hermanas, no querían "seducir" a su hermanito ella quería ser su novia, entablar una relación con lemy y poco a poco ir subiendo de nivel hasta por fin entregarle su virginidad, ella tenia cierto avance a comparación de sus hermanas, mínimo lemy le hablaba aunque no de manera animada, solo le hablaba cuando tenían que cocinar o ella ocupaba ayuda, eso era algo que las demás no sabían y hasta cierto punto era una pequeña ventaja.

Ella antes tenia miedo de engañar a su padre, por eso negó seguir el beso con lemy, ahora era diferente ella quería disculparse con su hermanito, estar con el y reparar el daño que le causaron ella y sus demás hermanas, a liena no le importaba compartir, después de todo sus madres compartieron a su padre y si ellas no se molestaban por tener a un hombre que está con varias mujeres y siendo débil a una falda, obvio ellas podían estar con lemy, después de todo lemy no era idéntico a su padre, era alguien hasta cierto punto mejor cuando se trataba de chicas.

Ellas también tenían la culpa, siempre le recalcaron que su padre era capaz de seducir a cualquier mujer, era curioso si lo pensaban antes le decían que lemy jamás conseguiría a tantas mujeres como su padre y ahora no quería que lemy estuviera con sus amiguitas que en verdad era molesto que muchas chicas se le trepaban, incluso muchas de sus compañeras en la florería lo veían y mordían sus labios, sabia lo que eso significaba y de verdad no le agradaba, lo bueno era que lemy en cierto punto era fiel a la familia, lemy solo se había acostado con sus otras hermanas, y con solo tres chicas que son conocidas de leia, pero eso no era el punto, ella tenia un pacto con loan y lyra para encontrar el perdón de su hermanito, aunque lo que ella sabia que loan y lyra aceptarían el compartirlo.

Liena conocía a todas y cada una de sus hermanas, muchas de ellas creían que era idéntica a su madre, ellas por eso mismo pensaron en no incluirla en el plan de leia aunque si le platicaron del plan esta actuó como su madre no siendo invitada a sus planes, eso era un punto a favor para ella, pero aun asi tenia miedo de que sus planes fracasaran y este se alejara mas de ellas, aunque liena tenia un pensamiento el cual era ayudar a leia, su hermana menor necesitaba ayuda, y no ayudo el hecho que todas la culparan de que lemy las dejara de lado, pero todas ellas tenían la misma culpa por molestar a lemy.

En eso la puerta del copiloto se abrió, liena observo a una chica albina esta tenia un gorro de lana negro, la albina tenia en su espalda un estuche de guitarra, estaba vestida de una camisa anaranjada sin mangas, con unos jeans azules y una camisa de cuadros amarrada a su cintura, y lo que mas resaltaba era un tatuaje en su brazo izquierdo el cual era la de un búfalo muy parecido a la de cierto castaño.

-Hola sis gracias por recogerme, hoy estuve un poco ocupada y no me pude traer mi patineta- dijo la albina sentándose en el lugar del copiloto mientras dejaba su guitarra en los asientos de atrás, aunque después de sentarse esta dio un suspiro pesado mientras una cara triste aparecía en su rostro.

- ¿Qué pasa lina?- liena se dio cuenta de su ceño fruncido y su expresión de tristeza.

- ¿Ya lograron algún avance?- la albina se veía esperanzada de que sus hermanas hayan logrado algo con su hermanito, sin embargo su expresión de tristeza se agrando ante la negación de liena.

- no hemos logrado nada, este dia lemy llego tarde a la casa, ya sabes lo que pasa cuando lemy va a esos lugares-

la albina se vio un poco molesta al recordar el aspecto de lemy, todo desarreglado y con varias marcas de labial, fue ayudado por marla a subir a su cuarto aunque no sabían que habian hecho después de eso, ya que la castaña bajo mas feliz que de costumbre, cosa que claramente enojo a las hermanas que vieron la escena sin embargo no dijeron nada porque marla no tenia la culpa de nada, liena observo a lina, la chica solo había intentado una cosa y eso era el tatuaje de su brazo, copio el mismo diseño el de lemy pero el castaño no le hizo ni el mas mínimo caso, pero aun asi la albina no tenia ningún pacto con nadie, ella quería a lemy solo para ella y bueno no podía culparla pero aun asi no estaban seguras que ellas podrían ganar el perdón de lemy.

Las dos llegaron a la residencia loud, era tiempo de que todas sus hermanas ya estuvieran en la casa, o bueno la mayoría, ya que las demás vivían con su respectiva madre, fueron las amigas de la familia las cuales eran las vecinas de toda la avenida harem, liena estaciono su automóvil al frente de la casa, vio que ninguno de los adultos había regresado, las dos salieron del vehículo, al entrar a su hogar vieron una escena que no les agrado, lemy estaba sentado en medio del sillón mientras era besado en los labios por lizy, el castaño tenia cierta expresión de sorpresa aunque esto cambio cuando cerro los ojos aceptando el beso, lina al ver esto simplemente se fue al piso de arriba con una clara cara de tristeza, liena se sintió celosa aunque a ella no le gustaba tener una discusión esta solo se fue a la cocina a preparar la comida de la familia.

- Liena ¿Qué vas a preparar?- ella conocía esa voz perfectamente era de lemy, la rubia vio lentamente a su espalda viendo a su hermanito con una sonrisa.

- Pa-pastel de ca-carne- la rubia estaba un poco nerviosa y más al ver su sonría era algo hipnotizante ya que no era la sonrisa loud que su padre usaba, lemy siempre había tenido una sonrisa de manera infantil cosa que la hizo que su corazón latiera con bastante repidez.

-o ya veo le dire a mi pequeña lizard lo que habrá para la comida- ahí fue cuando liena lo entendió, lemy no quería hablar con ella lizy le pidió que fuera a preguntar que habría para comer y este por eso sonreía por estarle haciendo un favor a la rubia, eso no le gustaba pero que podía hacer incluso lizy se pudiera considerar mas hermosa que ella aunque aun fuera un poco pequeña.

Liena observo a lemy, el castaño sólo se fue al sillón de la sala sentándose al lado de la rubia, lizy solo lo abrazo con una enorme sonrisa, lemy acaricio la cabellera rubia de la niña mientras la acercaba mas a el, esta decidio dejar de ver esa escena y enfocarse a la comida.

-liena ya tengo el plan perfecto- esa voz la hizo ver a su espalda observando a lyra.

- ¿Qué tienes en mente?- liena aunque lo negara en muchas ocasiones de verdad le interesaba.

- si te soy sincera, solo nos quedan dos cosas por hacer, una es lo último de nuestro plan si eso ya no funciona... creo que rogarle seria lo mejor, aunque loan me dijo que podríamos preguntarles a nuestras madres sobre lemy pero creo que sospecharan-

-te has quedado sin ideas-

-si, todas nosotras ya no tenemos una idea nueva, ya le he preguntado a las demás y están en las mismas, ya no sabemos que podemos hacer, la única que no le voy a preguntar es a leia, y si te soy sincera me da igual lo que ella haya planeado-

-lyra, leia solo es una niña- liena le recordó a su hermana menor que leia solo era una niña y no debería de tratarla asi.

-pero esa niña es una diabla por su culpa estamos en esta situación-

-ustedes la siguieron, tienen la misma cantidad de culpa que leia, asi que no deberían de culparla de todo-

- bueno eso es cierto pero ella hizo el plan y nos convenció- recalco lyra observando a liena con cierto enojo.

- ella solo les dijo que si querían unir, no les dijo otra cosa, solo que con esto lemy las dejaría de seguir y ustedes aceptaron asi que tienen la misma culpa que leia-

-sabes no quiero pelear contigo después te diré el plan de loan y mío para nuestro hermanito- fue lo ultimo que dijo la violinista antes de irse al segundo piso.

liena solo dio un suspiro pesado, eso había sido de verdad duro, no le agradaba el pelear con sus hermanas pero aun asi no tenían derecho de hablar de leia de esa manera, liena termino de preparar el pastel de carne, dejo que se cocinara en el horno mientras pensaba que podía hacer.

En eso vio a lemy entrar nuevamente a la cocina, este agarro una soda del refrigerador, y cuando iba a salir de la cocina fue cuando liena se puso enfrente.

-¿sucede algo?-

- quiero hablar contigo- liena se veía decidida de hablar con su hermanito.

- ok, ¿Qué quieres?- lemy se veía serio al tener a su hermana mayor.

-lemy yo lo siento, se que no soy la mas indicada para decírtelo, pero quiero pedirte perdón, perdón por mi estupidez, perdón por haberte rechazado esa vez de verdad tenia tantas cosas en la cabeza y no sabia que escoger, se que te lastime y lo lamento, lamento que tu estúpida hermana mayor no haya aceptado tus sentimientos soy patética pero créeme cuando te digo que voy a pelear Lemuel limpbiscuit loud, voy a pelear para que veas lo mucho que te amo y no descansare hasta lograrlo, seré tu novia Lemuel aunque sea lo último que haga- liena se veía decidida mientras veía a su hermanito este solo veía a la rubia sin ninguna expresión para después empezar a reír.

-Creo que deberías de descansar liena estas inventando cosas, y mas que el anciano no te escuche o podría ponerse celoso por que una de sus chicas este diciendo eso- el chico camino fuera de la cocina siendo visto por la rubia.

-no me voy a rendir hermanito, conseguiré tu perdón cueste lo que me cueste eso es lo que hare no me interesa que tenga que ganarme primero tu amistad no me importa con tal de que ganarme tu perdón hare lo que sea-

Liena estaba decidida ella tal vez no podría cambiar el pasado pero veria por su futuro, costara lo que le costara conseguiría estar con su hermanito incluso si tuviera que pelear con sus demás hermanas no importaba con tal de conseguir el amor de su hermanito...