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"Cosas de mujeres"

―¡Waaaaaaa! -Gritaban el shin soukoku preocupados-

―¡Kyaaaaaaaaa! -Las chicas gritaban aterradas-

―¡Como odio a los rinocerontes! -Se quejo Tachihara alarmado-

―¡Naomi perdóname! -Chillo Tanizaki-

La estampida de rinocerontes perseguía a los chicos con furia, destruían todo a su paso sin dejar sin dejar nada ni nadie alrededor...

O eso es lo que creían ellos, una vez que los rinocerontes pasaran al lado de unas pequeñas ruinas de rocas, no notaron a los chicos que se encontraban amuñuñados dentro de estas

―Pffff... JAJJAJAJAJJAJAJAJAJJAJAJAJAJJAJAJ -Rieron todos por el susto que se llevaron, a excepción deAkutagawa-

―¡Que espantoso! -Dijeron Tachihara y Atsuni muriendo de la risa-

―N-No quiero pasar por algo así de nuevo -Dijo Tanizaki-

―¿Se habrán ido? -Pregunto Atsushi-

―Si -Afirmo Akutagawa- Pero ¿Como saldremos? -Pregunto realmente incomodo-

Y no era el único ¿La razón? Al fondo de las ruinas Akutagawa y Atsushi eran los únicos que estaban demasiado cerca, frente con frente, mientras que Gin estaba de piernas abiertas con Atsuni en medio, y finalmente Tachihara estaba MUY pegado a un Tanizaki dándole la espalda, los pelirrojos con dificultad lograron salir primero, las chicas le siguieron pero en un mal movimiento, Atsuni empujo(apropósito) al azabache haciendo que sus labios rosaran con los del albino, apenas un leve roce que sonrojo mucho a ambos

―Ah... Yo, lo si-siento -Dijo Atsushi nervioso-

Akutagawa solo fingió toser para cubrir su sonrojo, y luego ambos lograron salir de las ruinas, Atsushi volteo su rostro aun nervioso mientras Akutagwa le miraba de reojo, notando el sonrojo que aun traía, incluso llego a pensar que el albino se veía realmente adorable...

―¡Oigan ¿Piensan quedarse ahí?! -Dijo Tachihara-

―N-No, ya vamos -Respondió Atsushi comenzando a seguir a los pelirrojos y a las chicas- Akutagawa ¿No vienes? -Agrego confundido al ver al azabache inmóvil-

―¿Ah? -Akutagawa salió de su pequeño trance- Claro -Afirmo comenzando a seguirlos-

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―No... No puedo más Akutagawa... -Jadeaba el albino tumbado en el pasto, sudando y respirando agitado-

―No exageres Jinko, ni que fuera tu primera vez -Se quejo el azabache-

―Cl-Claro que es mi primera vez... 

―¿Y en nuestra ultima misión juntos, que? -Dijo molesto-

―¡Fu-Fue diferente! -Se quejo el albino mirando al azabache avergonzado-

―¿En que sentido?

―En que nosotros perseguíamos al enemigo en un simple vagón, pero esta vez... ¡Nos perseguían unos rinocerontes! ¡Nunca había corrido así! Y te recuerdo que perseguíamos aves

―Tu las perseguías, yo solo te dije que alcanzaras a las chicas -El azabache sonrió- Pero veo que eres más débil de lo que creí, mira a tu hermana, esta fresca como una lechuga

Atsushi volteo buscando a su gemela con la mirada y ahí la encontró, a unos metros lejos de él y el azabache, Atsuni estaba haciendo dios sabe que para impresionar o sacarle risas a Gin, Tanizaki y Tachihara se habían ido una vez que cayo la noche, ya eran como las 11pm

―Corrimos por todo el santo bosque para salvarnos de los rinocerontes, no se como ella está así -Se quejo Atsushi-

―Ten Jinko -Akutagawa le ofreció una botella de agua- 

―¿Eh? -El albino iba a tomarla pero el azabache se la echo encima- ¡OY-OYE! ¡¿PORQUE?!

―Te refresco -Menciono burlón-

―¡Pe-Pero así no! Ahora pescare un resfriado por tu culpa

―No chilles, el tigre te curara

―No puedo depender del tigre todo el tiempo -Suspiro rendido y miro a las chicas- Se la pasan bien...

―Mujeres -Dijo el azabache fastidiado-

―Oye Akutagawa... ¿Te molesta esto?

―¿Que cosa?

―Esto, es la segunda vez que salimos todo el día con nuestras hermanas, como si fuésemos cuatro chicos normales que salen a divertirse...

―No, la verdad no -Cubrió su boca para toser- Aunque si me parece... Extraño -Pensó mirando de reojo al albino-

―A mi me preocupa...

―¿Porque?

―¿Como que porque? -Atsushi bajo la mirada- Somos agentes y mafiosos, sabes el porque no debemos estar juntos, además... Conozco a Atsuni, solo... Solo mírala -Akutagawa giro la mirada hacia las chicas y en efecto las palabras de Atsushi eran ciertas, con un leve sonrojo Atsuni tenía una mirada diferente, una muy iluminada y no era por el brillo de las estrellas, una mucho más intensa de las que el albino recordaba cuando la albina se las dedicaba en momentos de sufrimiento y terror en el orfanato- Es la primera vez que la veo tan encantada con alguien más, que no sea yo...

―Eso veo -Akutagawa le miro- ¿Estas celoso o preocupado?

―Hmmmm... Ambas sinceramente 

―Vaya, y creí que era el único Jinko

―¿Eh?

―También me molesta y me preocupa que tu hermana me quite la atención de la mía -Menciono serio pero burlón, provocando que Atsushi riera-

―Pero...

―Pero si a ellas no les interesa convivir, a pesar de pertenecer en mundos diferentes -Menciono el azabache sentándose al lado del albino- ¿Porque a nosotros si Jinko?

Atsushi dejo salir un suspiro―Porque es lo correcto...―

―¿Tu mentor otra vez?

―No pero... Esta vez lo digo por mi mismo, no digo que Gin-San sea una mala influencia pero, si las descubren, si nos descubren...

―Traería al mismo infierno para evitar que alguien lastime a mi hermana -Dijo Akutagawa afilando su grisácea mirada hacia Atsushi- Y tu deberías hacer lo mismo por la tuya, así que, hasta el momento, dejémoslas tranquilas Jinko, aun si tengo que aguantar a un cobarde como tu para poder cuidarla

―En-Entiendo -Dijo Atsushi tragando saliva-

El agente observo a Atsuni y a Gin una última vez, ahora ambas se encontraban recostadas en el pasto señalando al cielo estrellado, posiblemente contando estrellas o buscando constelaciones, luego recordó las palabras del mafioso "Gin parece divertirse mucho con tu hermana" Ahora lo entendía, en un mundo sangriento y tan oscuro cual poso sin fondo como la Port Mafia, donde hasta el más fino rayo de luz era aniquilado, Akutagawa solo quería ver a su hermana sonreír

La noción del tiempo se perdió para los cuatro, y el frió de la noche no perdona a nadie, y su primera victima fue nuestro pequeño tigre, quien comenzaba a tiritar y a exhalar aire congelado de su boca con cada respiro, se abrazo a si mismo y miro las estrellas tratando de olvidar el frió, que de por si, aun seguía empapado por culpa del mafioso

Pero repentinamente, el frió en su cuerpo desapareció al sentir algo grueso y acogedor rodear sus hombros, era la garbandina del azabache

―¿Po-Porque...? -Pregunto Atsushi sorprendido-

―Fue un error mojarte así, y odio quedar en deudas -Respondió Akutagawa molesto- 

―Gracias -Sonrió con las mejillas rojas por el frió y por aquel gesto- Esa estrella... -Menciono mirando al cielo- Es muy bonita

―¿Cual?

―Esa, la que parece un conejo pequeño con cola esponjada

―Mfh, que imaginación -Se burlo- ¿Vez esas dos? Parecen dos leones matándose por un trozo de carne

―¿Y yo soy el que tiene imaginación? -Pregunto Atsushi con una sonrisa-

Una sonrisa tan encantadora que dejo sorprendido e incluso algo ruborizado al mafioso, pero lo mejor, era toda y sola para él

Y así ambos chicos pasaron la noche, nombrando estrellas hasta que las palabras comenzaron a sobrar, en un tranquilo silencio la mirada tornasol y grisácea se perdieron en la constelación que les otorgaba esa noche, y sin darse cuenta, protestar o incomodarse, el agente cayo dormido encima del hombro del mafioso 

||...||

―Pero que cara traes Atsushi-Kun -Se burlo Dazai, pues veía como Atsushi cabeceaba mientras escribía torpemente en su computadora-

―¿Ah? ¿Que?... 

―No durmió bien anoche -Dijo Kyoka, tenía en claro la hora en que llegaron los gemelos-

―A diferencia de Atsuni-Chan que... -Decía Yosano mirando a la albina de reojo, quien escribía en la computadora con la mano derecha y con la izquierda rellenaba unos archivos- Está fresca como una lechuga

―Atsuni-Chan es increíble -Dijo Kenji alegre-

―S-Se nota que viene del gobierno... -Menciono Tanizaki sin habla-

―Atsuni -Le llamo Kunikida dejándole una pila de documentos- Ve al cuarto de archivos y guarda estos en el cajón 4-B

―Claro ¿Que son?

―Casos viejos -Menciono el rubio- Están ordenados alfabéticamente y por favor, no los dejes caer

―¡Hai! -Atsuni accedió y se dirigió al cuarto dando saltitos alegres con los papeles en brazos-

―¡Vamos Atsushi-Kuuuun! -Dijo Dazai picando la mejilla de Atsushi- Necesito que también hagas mi trabajooo~

―EL MOCOSO NO HARÁ TU TRABAJO DAZAI -Grito Kunikida golpeando la castaño- 

―¡Oigaaan! -Les llamo Ranpo- Tenemos visitas -Con sus dedos hizo la forma de una pistola y fingió disparar a la puerta-

Y en eso la puerta se abrió estruendosamente de golpe, dejando ver al causante, un pelirrojo atractivo junto a un grupo de personas ¿Quienes eran? Nada más y nada menos que...

―Us-Ustedes... -Menciono Naomi asustada-

―¿Que hace el Gremio aquí? -Menciono Dazai sonriente-

―Solo pasamos por aquí a platicar -Dijo Mark con una sonrisa-

―A platicar mangos -Dijo Yosano mientras sacaba una cierra eléctrica- ¿Que quieren?

―Calma calma, no hay porque recurrir a la violencia -Menciono Francis quien se colocaba en frente de todos- Solo quiero hablar con su presidente

―¡Kunikida-San! -Se oyó la voz de Atsuni entrando- ¿Quieres que también guard...? ¡KYAAA!

Lo siguiente que paso fue rápido, Atsuni traía otra pila de archivos los cuales se balanceaban de un lado al otro por la cantidad excesiva, la albina se enredo con sus pies y choco con Mark haciendo que ambos cayeran al suelo con la albina encima del pelirrojo y las hojas flotando al alrededor

―¡Agh! -Se quejo Mark- ¡Fíjate por donde caminas!

―L-Lo si-siento -Menciono Atsuni nerviosa- ¿Estas bien, te lastime?

―Obvio no -Dijo Mark molesto y miro mejor a quien tenía enfrente, sus ojos se ampliaron en grande y sus mejillas se tiñeron de un color rojizo- ¿Ch-Chico tigre eres tú....?

―¿Chico tigre? -Pregunto Atsuni confundida y al instante el resto del Gremio tenían la misma expresión de Mark-

―¿Po-Porque vistes así? -Preguntaron Francis y Alcott-

―Incluso s-su voz... -Menciono Jhon-

―S-Su cabello -Dijo Margaret-

―Disculpen ¿Nos conocemos? -Volvió a preguntar realmente confundida, y de repente todos "desviaron" la mirada hacia el busto de la albina-

―Las tiene enorm_-Hablo Lovecratf pero fue callado por la mano de cierto ministro-

―Ni lo menciones -Dijo Nathaniel serio-

―¿Porque eres una chic_? -Pregunto Poe pero fue interrumpido por...-

―¡Dazai-San! -La voz de Atsushi al fondo de la sala- Encontré su manual del suicidio

―¡¿HAY DOS CHICOS TIGRES?! -Grito el Gremio con la barbilla en el suelo-

―¿Eh? -Atsushi reacciono asustado- ¿Qu-Que hace el Gremio aq-quí?

―¿Que rayos está pasando? -Se escucho la voz gruesa y molesta de Fukuzawa saliendo de su oficina, y lo que vio le dejo sorprendido-

―Ha-Hay dos chicos ti-tigres... -Volvió a repetir el Gremio-

―Creo que es hora de un cuento -Menciono Ranpo sonriente-

Y si, como lo dijo el mejor detective del mundo, él se encargo de contar, explicar y aclarar cualquier duda que tenían las visitas sobre los gemelos, como se separaron y como se re-encontraron, ni más ni menos, las partes personales entre el orfanato y la vida de Atsuni sin Atsushi vendrá para mucho más tarde, eso si, la Agencia y especialmente Atsushi prefirieron ocultarle a Atsuni las atrocidades que el Gremio hizo contra la ciudad y el albino, era mejor eso o que la albina explotara de ira y terminara con desmembrar a cada integrante americano que se encontraba en la sala

―Si que te mantuvieron bien oculta entonces -Menciono Francis-

―Mi papi es un don preocupon -Dijo Atsuni-

―¿Quien es tu padre? -Pregunto Mark curioso-

―Que te importa -Dijo Atsushi serio cruzado de brazos- ¿Podrías alejarte de MI hermana? Por favor

El pelirrojo reacciono algo sorprendido por la actitud del albino y supo porque, pues si, Mark y Atsuni aun seguían en la misma posición

―Tranquilo chico tigre -Sonrió y le guiño el ojo- No le haría nada de lo que piensas a tu querida herma-

Atsushi ya harto cargo a Atsuni como saco de papas al arrebatarla de los brazos de Marck, eso sorprendió a todos a excepción de Ranpo

―¿At-Atsushi? -Le llamo Atsuni sin entender la situación- 

―Aléjate de Atsuni -Hablo el albino fulminando al pelirrojo con la mirada, y este sintió un escalofrió correr por su espalda-

―Ahora entiendo porque no querías que Atsuni-Chan y yo durmiéramos juntos, Atsushi-Kun -Canturreo Dazai burlón y el albino le afilo más la mirada-  

―Dazai-San...

―Era b-broma -Se excuso el castaño sorprendido y algo temeroso por aquella mirada, ambas organizaciones quedaron en un leve silencio por aquella extraña escena de hermanos hasta que el celular de alguien sonó-

―¡Atsuni-Chan! -Le llamo Ranpo con una enorme sonrisa burlona y el celular en mano- Te llaman

Atsuni se libro del agarre de su hermano y fue a tomar su celular, reconoció aquel número a la perfección y al chocar miradas con Ranpo enrojeció como tomate

―¿Quien te llama? -Pregunto Fukuzawa y Atsuni salto del susto-

―Ammm pues pues... ES MI PAPI SI -Dijo mirando al mayor e ignorando las risas de Ranpo- De seguro está enojado por mi escapadita, ir-iré a contestar -Miro al Gremio- ¡Fue un gusto! Espero poder conocerlos mejor en otra ocasión~ -Y dicho aquella salio disparada como cohete hacia la salida-

―Es una chica completamente diferente -Menciono Margaret-

―Y muy linda -Expreso Marck con una sonrisa coqueta-

―Cállate mujeriego -Dijo Jhon molesto-

―Cálmense los dos -Les regaño Francis y fue con Fukuzawa- Hay algo que quiero discutir con usted

Fukuzawa suspiro― Bien ― 

Acepto sin más escándalos y dirigiéndose a su oficina solo con el Magnate, cerro con seguro, el resto del Gremio se dispuso esperar en la sala para clientes, lejos de los Detectives, pues aun existía aquella rivalidad y rencor que hubo en el pasado y aun sigue en ambas organizaciones, aunque claro, los únicos que ignoraban aquello eran Ranpo y Poe quienes conversaban tranquilamente en el escritorio del agente

Mientras tanto en el ascensor de la agencia que, misteriosamente estaba varado en medio de dos pisos, se encontraba la albina hablando entre susurro por teléfono

―Si si, no hay nadie que pueda verme o escucharme, ¿En-Enserio estas disponible? -Su voz se oía ansiosa y esperanzada- ¿Pero que hay de tus jefes? Eres importante para ellos aun si no tienes una habilidad sobrenatural... -La albina suspiro- No te preocupes por mi, los problemas de la Agencia no son comprados con los castigos Mafia... Bien, te veré allí en 20 minutos ¿Si? Sal sin que nadie te vea, lo menos que quiero es meterte en problemas

―[Lo mismo digo] -Dijo la voz al otro lado de la línea-

―Esta bien, adiós Gin-Chan 

―[Nos vemos Atsuni-San] -La llamada se corto-

Atsuni presiono aquel botón del ascensor para que este volviera a funcionar, suspiro aliviada al poder escaparse de la agencia sin levantar sospechas entre los detectives, sobre todo su gemelo, para poder encontrarse con aquella hermosa azabache de ojos grisáceos, pero ¿Fue buena idea? ¿Tal vez era un TERRIBLE error que una agente del GOBIERNO se reuniera con una MAFIOSA? Bahh, tonterías, fuera del trabajo, solo eran dos jóvenes que querían verse, solo eso, querían verse... 

Ding

Con ese pequeño ruido le saco de sus pensamientos y las puertas se abrieron lentamente indicando que ya estaba en la planta... Y fue un gran error ¿Porque? Pues en frente de aquellas puertas se encontraba

―Así que... Volverás a salir con Gin-San

Nuestro querido albino con media transformación de tigre, con una expresión tan seria que dejo congelada del miedo a Atsuni

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[Quiero aclarar algo, la historia ocurre 3 meses después de Canibalismo y Eco, pero no voy a incluir a Hunting Dogs o Teningosui, haré como que ese arco no existe ni existirá en el fic, quizás mencione a Fyodor por la llegada de cierto OCC mió, nada más, y por obras del destino los del Gremio volvieron a estar juntos sin ser una organización peligrosa, si no como turistas, a excepción de Lucy]

[Aunque no lo parezca, Atsushi puede ser como Tanizaki o incluso Akutagawa si se trata de proteger la seguridad de su hermana]

[Se preguntaran ¿Porque Atsuni anda insistente con Gin? Jujuju eso se revelara mucho más adelante después de...]

[¡Gracias por leer!]