Cara a Cara
Frente a frente y viéndose a los ojos, estaban Shun y Hades, el más pequeño asustado e intrigado, el mayor con rostro tranquilo pero en su interior impresionado. Ninguno de los dos podía creer lo que veía frente a sí mismo, ninguno se atrevía a hacer algo.
- ¿Cómo es posible que estás...?- rompió el silencio el menor con un tono preocupado- Pensamos que habías muerto.
- Pensaron- interrumpió rápido el rey del Inframundo- Pero no saben lo equivocados que estaban al pensar que me iban a vencer tan facil- terminó de decir con una sonrisa sádica en su rostro.
Shun quería atacarlo en ese momento, quería darle un buen golpe, sin embargo, su cuerpo no se lo permitía, estaba en shock, casi paralizado, no podía hacer nada más que verlo a los ojos, esos ojos que parecían ver más allá de su alma, tan hermosos como tenebrosos, lo paralizaban completamente, los cuales en ese momento lo veían de arriba a abajo como si estuviera escaneando lo, sentía enojo con ésto, pero nada podía hacer.
Hades al ver que no era atacado, solo de limitaba a ver a ese chico, como anteriormente había sentido que algo en su propio interior le pedía no atacarlo, por lo que se limitaba a solo observar al pequeño caballero.
- ¿No harás nada para detenerme?- preguntó con su imponente voz mientras lo veía- ¿O prefieres seguir admirandome con tus ojos?- ahora habló con un tono de burla al darse cuenta de que tampoco él despegaba sus ojos de los suyos.
Al escuchar eso, Shun sintió como la furia incrementaba dentro de él, ¿Acaso estaba jugando con él en ese momento?
En ese instante sintió como recuperaba su movilidad, como su cosmo se encendía de un momento a otro, por lo que se lanzó a atacar con un fuerte puñetazo lleno con toda su fuerza directo a Hades para dañarlo, sin embargo tal ataque fue detenido por la mano del dios, quién solo se limitó a tomarlo de la muñeca con fuerza para detenerlo ahí.
-¿Eso es lo único que tienes,niño? Y yo que quería divertirme contigo un rato- dijo burlándose de nuevo del caballero, quién se llenó de más furia con solo escucharlo.
- ¡Apenas estoy comenzando!- gritó con algo de dolor, pues su contrincante en ese momento le lastimaba la mano, a quien rápidamente le lanzó una fuerte patada para poder liberarse de su agarre.
Hades recibió el golpe directo en la rodilla, no lo lastimó, sin embargo si lo molestó, así que lanzó a Shun hacia el suelo, golpeándolo contra éste.
El pequeño Caballero se levantó con rapidez y se alejó a una pequeña distancia del contrario, en ese momento analizaba que hacer, pues no era un cualquier rival el que tenía, era el mismísimo Hades, a quien ni el mismo Seiya podía vencer solo. Sabía que tenía las de perder si peleaba, además de que no había llevado su armadura consigo en ese momento, y su rival si llevaba una, poco o nada podía hacer contra él.
Pero tampoco iba a correr o darse por vencido, no dejaría que ese ser tan malvado se fuera tranquilo para destruir el mundo que tanto amaba, no, no dejaría que eso pasara, era un caballero de Athena y si era necesario pelear hasta la muerte, así lo haría.
Shun se armó de valor de nuevo y decidió volver a atacar, activando su cosmo y siendo aún más veloz. Ésto lo notó Hades, por lo que decidió atacar también, a puño limpio.
Ambos puños chocaron en ese momento, haciendo que ambos dieran un paso para atrás.
Luego de ello volvieron a lanzarse uno contra el otro a golpes. Hades solo detenía con sus manos cada ataque del caballero de Andrómeda, mientras él lanzaba sus puños contra él, dándole de lleno en su rostro y su cuerpo. A pesar de ello, Shun no se dejaba ganar, seguía peleando aunque solo unos cuantos golpes suyos llegaran a lastimar al rey oscuro.
Pasaron un corto rato así, hasta que uno de los dos golpeó al otro en el rostro, con toda su fuerza y todo su cosmo contenido, haciendo que el contrario cayera al suelo.
Y para la sorpresa de ambos, fue Shun quién tiró a Hades al suelo, y el enojo del dios no se hizo esperar.
- ¡Humano insolente, acabas de cavar tu tumba!- con toda su furia se levantó, y en un parpadeo estaba frente a Shun, a quien tomó del cuello con rapidez y fuerza, levantando lo del suelo- Te crees listo por hacerme frente ¿Verdad? ¡Pues déjame decirte que eres todo lo contrario!
El menor no pudo moverse en ese momento. Un segundo después sintió como era estampado contra un árbol aún sostenido por Hades. Su cuerpo comenzaba a sentirse débil, el aire comenzaba a faltarle gracias al agarre del mayor, que solo lo veía con furia y una sonrisa malvada.
- Un poco más y estarás en el Inframundo también...- le susurró casi al oido, sintiendo el miedo de Shun con solo verle a los ojos.
- Los demás no dejarán que le hagas daño al mundo...- fue lo único que pudo decir con una voz casi inaudible.
Ésto solo logró encender más el enojo de Hades, lo cual hizo que desenfundara su espada y la levantara contra Shun.
- Ya estás delirando, ¡Mejor acabo con tu vida de una vez- Levantó su espada contra el caballero y la dirigió para acabar con él de una vez, pero se detuvo un segundo antes de hacerle daño, cuando sus ojos pudieron ver algo en el caballero.
El dios del Inframundo vio detenidamente algo que colgaba del cuello de Shun; aquel collar que le había dado a Pandora, el que debía usar para encontrar a quien sería el cuerpo que él tomaría para regresar a ese mundo, aquel que tenía la inscripción "YOURS EVER".
- ¿Por qué tienes eso aún?- interrogó el mayor aflojando un poco la mano con la que tenía a Shun, solo para que éste le respondiera.
- Eso no te interesa- dijo a cuestas con una voz ronca debido al aire que le faltaba- Lo único que diré es que no puedo separarme de eso...
Hades veía con curiosidad al chico y al collar, después de escucharlo lo único que hizo fue soltarlo y dejarlo en el suelo.
- ¿Recuerdas que te fue dado por mi, verdad?- vio a otro lado mientras preguntaba, con una voz baja pero aún amenazante.
- Claro que lo sé- dijo recuperando el aliento y tocando su cuello- Pero hay algo que no me deja que me separe de eso, de seguro porque siempre lo tuve conmigo...
El rey Hades solo lo vio con intriga al escuchar sus palabras, sabía que había algo más allá de ello. Mientras pensaba en eso, se perdió un largo momento en sus pensamientos.
Shun se levantó suavemente de el suelo suspirando con fuerza y viendo a Hades, lo notó pensativo, por lo que decidió aprovechar esa oportunidad y atacarlo.
Concentró su cosmo de nuevo y lanzó un fuerte golpe nuevamente al rostro de Hades, pero éste con rapidez lo esquivo y golpeó a Shun en la nuca con un tanto de fuerza.
Todo comenzó a oscurecer en pocos segundos para el caballero de bronce, el golpe había hecho que perdiera el conocimiento de una vez, haciendo que quedara tirado.
-¿Sabes algo?- habló al cuerpo que yacía inconsciente- lo he pensado mejor, y tengo una idea para acabar con tu mundo y con Athena, y tú mi pequeño niño, me serás de mucha utilidad en eso.
Dicho eso, Hades tomó a Shun como si fuera un costal, cargandolo sobre su hombro, se aseguró de que estuviese "dormido" y en un abrir y cerrar de ojos, despareció del pequeño bosque junto con el caballero de bronce, dejando ningún rastro de que estuvieron ahí...
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Mansión Kido
La noche ya había caído sobre Japón, la espesa oscuridad ya tomaba los cielos y las estrellas ya brillaban con fuerza junto con una hermosa luna casi llena.
Ya a esas horas regresaban Saori, Seiya, Shiryu, Hyoga e Ikki del Santuario por los deberes a los que habían tenido que acudir ese día. Los cinco regresaban ya cansados y listos para dormir el tiempo que pudieran.
-¡Vaya día tan cansado!- dijo con un bostezo bastante audible, el caballero de Pegaso, Seiya- Ya me muero de hambre, ojalá haya algo de comer.
- Tú siempre pensando en solo comida, ¿No habrá algo más en esa cabeza tuya?- le respondió un tanto enojado el caballero Ikki.
- Yo creo que solo por eso pelea, para que Saori le dé comida- murmuró divertido el joven caballero Hyoga.
Todos excepto Seiya soltaron una fuerte risa.
- ¡Eso no es verdad, Hyoga! Yo peleo para defender a Athena.- le respondió Seiya, ahora lleno de orgullo.
-Asi se habla Seiya- se escuchó entre todos la voz más dulce, la de Saori- Sin ninguna ustedes, mis caballeros son los mejores que hay...- Todos se quedaron con la boca abierta al escuchar las lindas palabras de su diosa.
- ¡G-Gracias Saori!- respondieron todos al mismo tiempo aún con la boca abierta.
-¿Y Por que me ven de esa manera tan extraña?
- Es que es extraño que tú nos digas esas cosas- La pena invadía al caballero Shiryu al decir tal cosa.
- Pues de vez en cuando no hace mal, y ahora, por ser los mejor caballeros hoy, les daré una cena muy deliciosa.
-¡Gracias Saori!- gritó Seiya casi cargando a la chica por la emoción.
Todos soltaron una fuerte risa con la acción de Seiya, por supuesto, sin que él entendiera que pasaba.
- Aunque, de seguro Shun ya ha de haber preparado un rica cena- Seiya veía al cielo imaginando cualquier platillo delicioso.
- No lo creo, estoy seguro de que ya está dormido a esta hora- decía pensativo Shiryu.
- ¡Para nada! No se duerme sin que Ikki le cuente una historia para dormir como todo un bebé- volvió a decir Hyoga, quién segundos después recibiría un golpe en la cabeza de parte del Ave fénix.
Y entre risas y bromas, caminaron para entrar a la mansión Kido, donde los esperaba el fiel mayordomo de Saori, Tatsumi.
-Buenas noches señorita Saori- saludó de manera amable al verlos, pero su cara paso de ser a una calmada a una que mostraba preocupación.
- Discúlpeme señorita Kido, pero ¿No iba Shun con ustedes?
- Hhmm No para nada- respondió algo extrañada la jovencita- Te dijimos que él se iba a quedar hoy porque se veía muy cansado.
- Es cierto- de metió Seiya rápidamente a la conversación- cuando nos fuimos estaba dormido.
-¿Por qué la pregunta Tatsumi?
- Porque pensé que él se había ido al santuario junto con ustedes un rato después, ya que lo Vi salir de aquí e irse y pues ya no ha vuelto...
Tatsumi bajó la voz poco a poco al ver que Ikki comenzaba a matarlo con la mirada con solo escucharlo.
-¡Para Nada! Él no estaba con nosotros- Saori comenzaba a preocuparse junto con los demás.
- Ahora que lo mencionan, no siento su cosmo...- Shiryu logro hacer que la preocupación de todos aumentara al decir tal cosa.
Ikki no se lo pensó más y corrió a buscarlo por todas partes de la mansión, rogando que nada le hubiera pasado.
Todos decidieron ir con Ikki y buscar al pequeño caballero de Andrómeda por todas partes, pero por más que buscaban, él no aparecía por ninguna parte.
Después de un largo rato todos regresaron a la sala principal, decepcionados de no haber hallado ni una pista del pequeño caballero.
- Shun no esta ni en su habitación, ni en la de ninguno- suspiró Hyoga sintiéndose triste.
- No está ni en el jardín, ni en la cocina...- hablaba cabizbajo Seiya.
- Y lo peor de todo- agregó Saori- su armadura está aquí... No se la llevó a donde quiera que haya ido.
El miedo los invadía cada vez más a todos al pensar que algo le haya podido pasar, no podían ni imaginar que algo le pasará al chico que todos querían como un hermano menor, como un gran amigo y compañero.
-¡No! Sé que Shun está bien, debe estar en algún lugar- Ikki trataba de mantenerse tranquilo después de todo, aunque por dentro temía que su hermanito menor estuviera en peligro o algo parecido- Él no es débil ni tonto, así que no pudo perderse o morir en algún lugar.
- Si salió debemos buscar por la ciudad y sus alrededores- agregó Hyoga dando una idea con ésto.
- O a lo mejor fue al santuario y no nos dimos cuenta- Seiya también se veía pensativo con ello.
- Es mejor ir mañana...- agregó Saori- A era hora es peligroso que vayamos a salir.
- Es cierto, de todas formas, Shun es fuerte, es seguro que está bien aunque esté solo- Shiryu trató de calmarlos diciendo eso.
Todos asintieron y planearon salir a primera hora del día a buscar señales de Shun, luego se dirigieron a sus habitaciones para estar descansados en la mañana.
Excepto Ikki. Él se quedó en un balcón, viendo hacia las estrellas, tratando de mantenerse calmado
-Shun, hermano, sé que estarás bien, donde quiera que estés, prometo que te voy a encontrar....- algo en el corazón del caballero de fénix le decía que Shun no estaba cerca y que algo extraño estaba pasando.
Lo que Ikki no tenía ni idea, era que su pequeño hermano y todos ellos corrían peligro en ese momento, pues el rey del Inframundo planeaba volver a atacar, y por supuesto, pensaba usar al caballero de Andrómeda para ello....
Continuará...
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¡Holi!
Por fin les traigo su capítulo semanal de esta linda historia que poco a poco está comenzando.
¡Espero les haya gustado! Porque ya saben que le pongo todo mi amor a este fic💜💜
Nos vemos la próxima semana 🙋
Por cierto, mañana es cumpleaños de Shion de Aries!!! 💛💛💛
No se les vaya a olvidar nwn
Ahora sí, adiosito💘
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