Capítulo 29: La derrota del pasado
El campo de batalla seguía siendo un caos total entre exhalaciones de elementos, explosiones y caídas. Si bien los dragones obtenían bastantes victorias individuales, el número de enemigos era descomunal. Por otra parte, el clima continuaba siendo nublado con nubes oscuras. Spyro y Jhonny volaban a través de los enemigos despejando el camino hacia el gran cristal oscuro para detenerlo antes de que Malefor resucitara.
"¡Dragón ardiente!" gritó Jhonny contra al menos una veintena de enemigos.
"¡Furia Ether!" también ataco Spyro a una cantidad mayor.
Los ataques no solo dieron en el blanco, sino que además barrió con todos los enemigos que estaba cerca de ellos. Empezaban a abrirse camino, pero luego otro centenar de soldados oscuros les hicieron detenerse.
"Parece que no aprenden la lección..." comentó Spyro.
"Pues debemos cargarnos a estos para continuar..." sugirió Jhonny.
(Mientras tanto, más adelante...)
Nina, Drago, Aurora y Sam estaba frente a frente del Oscuro llamado Dahaak.
"No te tenemos miedo" le dijo Nina.
"Ja, niños... no son ni siquiera adultos para enfrentarme" les dijo, "Como dije antes, solo espero que ustedes me sean de utilidad"
"No nos trates como niños, somo bastante fuertes" preguntó Aurora desconcertada, "Y no creas que podrás utilizarnos"
"Así es, no nos rendimos" contestó Drago.
"Venceremos hasta el último esbirro de Malefor" dijo Nina.
"Y traeremos la paz al mundo" les apoyó Sam.
"Sí que son persistentes como las cucarachas, en fin, si eso quieren..." dijo mientras su cuerpo se cargaba de energía oscura, "¡Fantasma apocalíptico!
La sombra que cubría su cuerpo se separó de él y tomó la forma de un dragón monstruoso que se abalanzaba sobre ellos. Sam no tuvo mucho tiempo de reaccionar y, poniéndose en frente, generó un escudo de luz, pero... el ataque superó sus pensamientos: al impactar con los jóvenes dragones, causó una enorme explosión que dejó un agujero en la tierra. En el centro, quedaron los cuatro dragones heridos, pero milagrosamente vivos.
"Eso... dolió..." dijo Sam, tratando de levantarse.
"¿Ahora comprenden?" les dijo el dragón negro, "Ustedes no pueden contra mí..."
Dahaak exhaló una bola oscura de su boca hacia los caídos, pero justo en el momento que impactó, otra energía, una de fuego, llegó a su encuentro explotando ambas en el aire.
El enemigo buscó al autor de la interrupción hasta encontrarlo: el guardián del fuego descendió hacia donde estaba el grupo de jóvenes dragones herido.
"¡Papá!" gritó Aurora.
Hubo un pequeño temblor en el dragón oscuro, pero parece que Jhonny no lo percibió, pues se había girado para entregarle una pequeña bolsa de cristales rojos a Aurora.
"Drago, Aurora, tomen estos cristales y recupérense" les dijo, "Luego, apártense y vayan con sus demás amigos, yo me haré cargo de esta batalla"
"Pero, podemos ayudarte..." le intentó decir Drago.
"Drago, por lo que se ve, este sujeto no es nada sencillo. Así que déjamelo a mí, su responsabilidad es mantener a salvo a tus amigos en esta batalla. Confía en mí..."
"Drago" le dijo Nina, poniéndole una pata en el hombro de su amigo, "Tiene razón. No somos rivales para ese sujeto. Será mejor reagruparnos"
Un poco de mala gana, Drago tuvo que admitirlo. Entonces, una vez repuestos, se levantaron y se alejaron un poco de ese lugar. Por su parte, el dragón oscuro no hizo ningún movimiento mientras sus primeros objetivos se le escapaban, solo miraba fijamente al guardián.
"Ya podemos empezar" le amenazó Jhonny a su oponente.
"Nunca pensé que te vería ti en esa forma o a tus hijos..." le contestó Dahaak, "Es bastante coincidencia cómo estas cosas pasan..."
"¿Te conozco?" le preguntó Jhonny desconcertado pero atento en que lo estuviera engañando.
El dragón oscuro hizo una leve risa y luego mencionó:
"Hay, mi muchacho... Tu madre siempre creyó que eres especial..."
"¿Qué sabes de mi madre?"
"Muchas cosas. Después de todo, te llevó a verme una última vez antes de que nos separáramos..."
El corazón de Jhonny se paralizó al oír eso y su mente empezó a recordar a la vez que veía los ojos del dragón.
"Tú... eres..." dijo.
(Flashback)
Un niño de seis años estaba apoyado contra la pared de un pasadizo afuera de una habitación. Mientras esperaba, estaba golpeando con su pie el suelo temiendo porque todo se arreglaría. De adentro de la habitación, se escuchaba unas voces muy altas:
"Necesito ese dinero para educarlo" decía la voz de una mujer, "También es tu hijo. Y tampoco has estado tanto tiempo con él"
"No tengo tiempo para ello, trabajo muy duro y ¿aún no te alcanza?" decía otra voz, la de un hombre.
"¡No tuvieras que dividirlo si no tuvieras tantas mujeres!"
"¡No me juzgues de mi forma de vivir! ¡Yo salgo con quien yo quiera!"
Eso le daba tristeza al niño, pues estaba entendiendo que nada de eso saldría bien. Hubo un minuto de silencio, hasta que finalmente la mujer habló:
"Me voy"
"Bien, hasta nunca. Si eso es lo que quieres..."
"Es lo mejor para él. Pues, aunque tengas uno o varios hijos con otras mujeres, te aseguro que Jonathan es especial..."
La puerta se abrió y la mujer encontró al niño con algunas lágrimas en los ojos. El padre, sentado arreglando algo en la mesa, solo le dirigió una última mirada mientras la madre se lo llevaba.
(Fin del flashback)
"De modo que eres tú... padre..." musitó Jhonny, "No puedo creer lo bajo que has caído esta vez"
"Esa no es la forma de hablarle así a tu padre, Jonathan" le recalcó el Oscuro.
"¡Deja de decirme eso!" le reclamó el guardián furioso, "¡No me tomaste importancia, no volví a verte en años! y ahora... ¡¿te conviertes en un Oscuro, atacas a inocentes y colaboras en una guerra que destruyó la paz de este mundo?! A alguien así jamás llamaré padre"
Dahaak solo se limitó en ver en la dirección donde se fueron los jóvenes dragones.
"Cuatro" dijo, "Parece que tenemos algo en común con las mujeres..."
"En primer lugar, solo dos ellos son mis hijos" le contestó Jhonny sabiendo a lo que se refería, "En segundo lugar, yo realmente valoro y amo a una sola: su madre. Y, en tercer lugar, yo nunca seré como tú"
"Siendo tu padre, hay algo que debo enseñarte: debes comprender que así era el día a día de las personas, ¿no es por eso que ahora estás aquí? ¿acaso no renegaste de tu propio mundo para venir a uno al que todas las cosas fueran mejores? Aquí no tiene que preocuparse por el dinero o por la supervivencia: un paraíso para un niño"
Jhonny sintió que en ese punto tenía razón: no había forma de negar que el sentía algo de pena y dolor por la vida anterior. Sin embargo, esos pensamientos debilitaron su atención:
"¡Serpientes Espectrales!"
Una serie de columnas de humo se lanzaron sobre él. Estas, a su vez, se dividieron en otras más delgadas y finalmente tomaron forma de serpientes que mordieron el cuello, las alas, el pecho y una pata del dragón. Jhonny rugió de dolor y, pocos segundos de ser mordido calló semi paralizado.
"Tranquilízate" le dijo Dahaak, "El veneno no es mortal, pero produce dolor es insoportable"
"Me engañaste..." musitó Jhonny, "Me quisiste distraer..."
"Eres tú el que llegó a tener dudas debido a sus decisiones. En la vida tienes que ser firme para tomarlas, incluso si eso implica dejar a alguien atrás..."
Jhonny se levantó haciendo un gran esfuerzo y le lanzó una llamarada llena de ira. Por un minuto, Dahaak se tambaleó y pareció ceder. El guardián aprovechó y puso sus garras sobre su cuello.
"No me hables de cómo permitiste de que mi madre se fuera y tú lo permitiste..." dijo furioso.
"No hablo solo de eso... ¿no te parece irónico que tú me lo digas? Después de todo, tú también lo hiciste..." le dijo su padre.
Jhonny quedó aún más paralizado: no era el veneno, sino que...
"Decidiste abandonarla para tener tu propia vida..." volvió a decir su padre, "Después de tanto que hizo por ti, ¿así es como le agradeces? ¿Perderte e irte a un mundo en el que no sucumbirías a todas las derrotas y fracasos que un humano podría tener?"
Diciendo ello, le golpeó con su cola. Cuando cayó, la circulación hizo que el doloroso veneno corra por sus venas.
"Sin embargo, eso nos hace iguales" continuó, "Somos unos cobardes: decidimos huir de los problemas a enfrentarlos. Y, ¿si este mundo no fuera real? ¿Si solo es un largo sueño de que en cualquier momento despertarás?"
"No... estoy seguro de que esto es real..." musitó Jhonny tratando de levantarse.
"Vamos, despierta ya..." le contestó, golpeándole la cara con la cola, "Deja de vivir una fantasía y se un hombre..."
El veneno estaba haciendo a Jhonny marearse y no podía escuchar casi nada más. De repente, una onda de calor surgió de algún lado y se dirigió a Dahaak.
"¡Dragón ardiente!"
Un gran dragón de fuego y lava se aproximó a gran velocidad. Dahaak, al verlo aproximarse también contraatacó.
"¡Fantasma apocalíptico!"
El ataque oscuro bloqueó al de fuego y ambos se neutralizaron. Al segundo siguiente, Drago aterrizó junto a Jhonny trayendo un par de gemas rojas.
"¡Papá!" dijo tratando de curarlo, "¿estás bien?"
"Drago..." le respondió Jhonny tratando de levantarse, "No deberías estar aquí, es muy peligroso..."
"Lo sé, pero..."
"Ese fue un buen ataque, Drago" les interrumpió Dahaak, "Veo que todo viene de familia"
"No te burles de mi padre" le reclamó Drago.
"Oh, para nada me burlo de él. Después de todo, todos nosotros somos familia..."
Drago también pareció dudar de esas palabras, pero rápidamente se repuso.
"No creas que no escuché lo que hablaron" contestó, "Pero no pienso considerarte mi abuelo. Y te diré por qué: en comparación de mi padre, él nunca nos abandonó y siempre nos mostró afecto a mí, mi hermana y mi madre. Tal vez le digas que lo que vive es una ilusión, pero nuestros corazones están unidos por ese lazo familiar y eso no es ilusión"
Jhonny, aún dolido por el veneno, escuchó esas palabras mientras veía a su hijo con orgullo. No obstante, su momento fue interrumpido cuando Dahaak atacó súbitamente a Drago con sus serpientes. El joven dragón al ser mordido, también gritó de dolor y se sintió desfallecer, pero se intentó mantener en sus cuatro patas para continuar luchando.
"Parece que aún tienes energías..." dijo Dahaak, "De acuerdo, quizá con otra dosis..."
Volvió a atacar, pero antes de que las serpientes lleguen a él, un fuego abrasador las incineró hasta reducirlas a cenizas. Jhonny se había levantado y defendía a Drago.
"Drago" le dijo, "Muchas gracias. Si en algo te pareces a Edel, es que siempre me llena de esperanzas"
Luego, se volvió hacia Dahaak.
"Tal vez antes eras mi padre" le dijo, "Y puede ser que todo lo que digas es verdad. Pero mi corazón está donde debo estar y mi madre me apoyó en eso cuando tomé la decisión. Dolió haberme separado de ella, pero también quiso que encontrara la felicidad... una que no pienso perderla, ¡ni siquiera por ti o mi pasado!"
Su maná empezaba a emanar de su cuerpo, formándose en una capa de fuego que podía quemar el suelo de su alrededor.
"Sí que eres testarudo..." le dijo Dahaak, "Los humanos como nosotros nunca tenemos un final feliz"
El fuego de Jhonny ardió con más fuerza aún.
"Pues entonces reescribire el destino de uno: el mío. Hay cosas que debes saber" le dijo guardián, "Primero, la familia no viene de la sangre, sino de los sentimientos que compartes con ellos. Segundo, lo real no siempre es lo que se puede ver o tocar, sino lo que realmente crees que es verdad. Y tercero..."
El maná de fuego creció en enormes brasas que cubrían su cuerpo escamoso.
"... ya no soy el niño de cinco años que abandonaste... yo, ¡soy el guardián del fuego! ¡y no dejaré que le arrebaten la paz a este mundo! ¡Puede que el de los humanos no sea tranquilo, pero no es para llevar la oscuridad a mundos que sí lo son!"
El fuego estaba creciendo tan aceleradamente que Dahaak emanó una gran oscuridad que causaba una gran ventisca que movía varios restos de la tierra, para preparase de la técnica que ya había visto. Pero Jhonny tenía otro plan...
"No sé si esto funcionará" pensó Jhonny, "He visto este ataque una vez, pero nunca me atreví a usarlo porque pertenece a un usuario de agua: muy opuesto al fuego. Además, tiene que ejecutarse a la perfección o yo seré el destruido. Sin embargo, ¿qué opción me queda?"
"Siempre dudando de ti mismo..." la voz de Ignitus vino a su cabeza.
"Ignitus..."
"Así es. Siempre has dudado de tus capacidades como guardián, pero has desempeñado tu papel como tu corazón lo manda. No temas y podrás hacer de algo imposible tu propia arma..."
"Mi propia arma..."
"Lucha por tu familia y no tendrás miedo..."
"Gracias Ignitus, haré mi mejor esfuerzo"
Dahaak procedió a atacar.
"¡Fantasma Apocalíptico!"
El espectro surgió una vez más, pero más grande y fuerte que nunca. Jhonny no tenía opción.
"Arde espíritu guerrero..." musitó, "Vamos séptimo sentido... Dale fuerza a mi maná y permíteme copiar esa técnica..."
El maná de fuego se extendió como un gran remolino incendiario en un momento.
"¡Cien dragones Ígneos!"
De las llamas del remolino, surgieron cien cabezas de dragones en llamas y estos chocaron con el espectro del enemigo y lo destruyeron para luego impactar sobre Dahaak quien no pudo creer lo que estaba pasando. Cuando acabó, Jhonny cayó rendido al suelo.
"Como lo suponía... ese ataque es bastante poderoso y cuesta bastante..." musitó.
Estaba tremendamente agotado y hundió su garra en la tierra. Entonces, de entre las rocas, más abajo, vio una especie de luz. Escarbando un poco, encontró milagrosamente un par de gema verde y otra roja, con las cuales repuso sus energías. Luego, se acercó a Drago.
"Drago, ¿te encuentras bien?" le preguntó Jhonny.
"Sí, papá... estoy bien... un poco..." le dijo.
"Te advertí que participar en la guerra era extremamente doloroso..."
"Pero siempre quiero ayudar..."
Jhonny rió y dijo: "Bueno, en eso también nos parecemos..."
Luego, dejando a Drago reposar un momento, se encaminó hacia Dahaak, quien se estaba disolviendo en las sombras.
"Tu madre tenía razón... sí que eres especial..." le dijo el Oscuro, "Hiciste lo imposible, posible... y siempre se hará realidad..."
"Aprendí algo importante luego de que esto me sucedió" le dijo Jhonny, "Los humanos estamos mentalizados a igualar la realidad con la normalidad. ¿Qué es lo que se llama 'real'? ¿todo lo que se vive habitualmente o lo que percibimos?"
"Eso no tiene sentido..."
"Sí, al principio también lo pensé. Pero la gente vive de sus impresiones: lo que creen que es real, es solo su impresión, cuando la realidad es otra: cuando los sueños se hacen realidad, es la realidad la que se hace sueño. Este es mi sueño y mi realidad, y estoy feliz de vivirla"
"Ja, y supongo que debes odiarme..."
"A pesar del odio que te llevé por un largo tiempo, tengo que darte las gracias" contestó el dragón, "Si tengo algo de humano, es saber perdonar a los demás. Sin ti, yo nunca hubiera existido y te debo estar agradecido por eso"
"Ja... al menos... eso me hace sentir un poco como el padre que nunca fui..."
Empezaba a desvanecerse.
"Jonathan, tienes que saber algo importante: Malefor no solo usa a los oscuros para provocar la guerra y liderar a su ejército. Los usa como receptáculos"
"¿Receptáculos?"
"Mientras más luchan, más oscuridad se cierne dentro de ellos y cuando son eliminados... toda esa negatividad va directo hacia él para formar su cuerpo... deben detenerlo antes de que reúna suficiente..."
"¿Y tú supiste eso todo el tiempo y aun así lo aceptaste?"
"Planeaba ganar, pero nunca pensé encontrarme contigo y perder... aunque que fue bueno ver cuanto has crecido... ese hijo tuyo... y el otro que tienes... no cometas mis mismas estupideces..."
Ya solo le quedaba poco más del cuello. Jhonny se calmó y dijo:
"No lo haré..."
Y con ello, el dragón desapareció en las sombras.
Gracias a la idea de , por alguien del pasado de Jhonny. Como dije, el hermano parecía muy bueno en el primero que no creí posible que se convirtiera en Oscuro, pero luego estaba pensando en el capítulo cuando recordé algo de una película y una frase icónica del cine. Entonces, caí en la idea...
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