Capítulo 2: Donde habitan corazones oscuros
(En una dimensión vacía...)
Una masa oscura de sombra y frío se movía como si estuviera viva...
"¿Qué pasa?" preguntó una voz, "¿Por qué no puedo mover mi cuerpo?"
Hubo unos segundos de silencio en el cual el ente se movía sin forma.
"Ya veo... no tengo cuerpo..." dijo, "Esa maldita Nina... la subestimé..."
Volvió a hacerse silencio en el cual unos ojos amarillos brillaron entre las sombras. Era Malefor, pero... durante la última batalla contra Nina y sus amigos, había sido reducido a solo un espíritu errante, sin capacidad de hacer gran cosa contra un dragón de verdad.
"Todos mis lacayos me han fallado" volvió a decir, "Nadie tiene esa negatividad necesaria para destruir a Spyro o sus amigos..."
El silencio inundó el lugar por tercera vez. De repente, Malefor tuvo una idea:
"Tengo que ver en qué me equivoco..."
Un pequeño fragmento de nubes de sombra se separó del resto y empezó a girar en círculos hasta hacer una especie de pantalla. Luego, varias imágenes pasaron a través de ella. Una de ellas, mostraba a Cynder en su primera forma, luchando contra Spyro.
"Spyro ha demostrado ser un gran enemigo durante todo ese tiempo" dijo la oscuridad, "Cynder no pudo cargar el cuarto cristal a tiempo... ese fue un error..."
Luego, las imágenes volvieron a cambiar. Esta vez, se mostraba a Spyro luchando contra Galu, el rey Simio.
"Galu era leal al menos... Con ese poder oscuro, Spyro hubiera completado el trabajo... si no fuera por esa traidora de Cynder..."
La imagen volvió a cambiar. Ahora, mostraba el enfrentamiento final de la anterior Era: Cynder había sido corrompida por la oscuridad, pero Spyro logró salvarla. Luego, ambos se unieron y lucharon contra él, aprisionándolo de nuevo.
"Su unión los fortaleció. Pero esa forma de salvar a Cynder... me recuerda..."
Dicho esto, la imagen cambió súbitamente a otra similar: era la imagen de Nina, corrompida por la oscuridad, siendo salvada por un joven dragón de fuego.
"Por supuesto, ese dragón de fuego salvó a Nina de la misma forma que Spyro a Cynder... ¿Uh? ¿qué es esto?"
La imagen se había vuelto borrosa, como si un aura se dibujara dentro de las imágenes de los dragones: el de Nina era un violeta claro, y el de Drago era rojo claro; sin embargo, una pequeña parte de él era de color blanco puro.
"Esa especie de maná, no es como la de un dragón blanco... Es más bien como otra naturaleza... ¿Quién eres? Umm... tal vez es que viene de familia... ¿quiénes son tus padres?"
La imagen comenzó a girar y cambió a una dragona de hielo adulta. Dentro de ella, emanaba una mana de color celeste brillante.
"Edelweiss, la hija de Cyril y la guardiana del hielo de esta época... ella es la madre. Uh, no... no es de ella..."
La imagen volvió a cambiar: esta vez, se mostraba a un dragón de fuego adulto. A diferencia de Drago, este poseía la mitad de un aura rojo intenso y la otra mitad era de un blanco puro.
"Umm... Jhonny, discípulo de Ignitus, amigo de Spyro y el guardián del fuego de esta época. Él fue él que ayudó a Spyro a vencer a Simian... es el que emana esa luz de otra naturaleza... ¿quién o qué eres tú?"
La imagen cambió: ahora, vio a una criatura de dos piernas que cruzó un portal. Luego, los antepasados dragón lo convirtieron en uno de su especie.
"Ya veo, no eras un dragón toda tu vida, ¿qué clase de criatura eres...?"
Y luego, la imagen se adentró en sus recuerdos. Al principio, solo vio desolación vacío y tristeza en el interior de esa criatura, pero también vio cosas que había visto y aprendido (aunque no necesariamente lo haya vivido): robos, guerras, destrucción, muertes...
"Vaya, vaya, ¿tantas emociones negativas?" se rió Malefor, "Es interesante, una especie que ha creado tanto, así como ha destruido tanto... Sin embargo, estas emociones no se han vivido, solo se han contemplado. Él es diferente a los suyos. Aunque, me ha dado una idea..."
Una sombra cambió la imagen y en eso se materializó el mundo: el reino de los humanos. Estos fueron unos de los pensamientos que leyó:
{¡Maldita sea! ¡Mira ese trasero!}
{Odio mi trabajo.}
{¡El gilipollas me cortó!}
{¡Dinero!}
{¿Por qué me casé con esta mujer?}
"Muchos pensamientos negativos... esa negatividad se puede comparar a los cristales oscuros" se dijo Malefor, "Creo que ellos pueden ayudarme..."
(En el reino de los humanos...)
Un ladrón acababa de robar un bolso a una mujer y estaba huyendo a gran velocidad. A su espalda, se escuchaba el sonido de la policía que lo perseguía. Sin más remedio, se escapó por un callejón.
"Maldita sea, no hay salida..." se dijo al ver una pared en medio.
Sin embargo, en la pared, un portal negro se abrió de la nada. El ladrón, al ver eso, se asustó.
"¿Qué es...?" preguntó. Pero, antes de que pudiera decir nada más, el portal se lanzó hacia él y se lo tragó.
(En otra parte...)
Un hombre de negocios acababa de amenazar a todo un pueblo aborigen de correrlos de sus tierras, más concretamente de su terreno. Su esposa, su secretaria, estaba bastante molesta por ello.
"¿No puedes darles una oportunidad?" le dijo, "Tienen niños entre ellos. Si los hechas, ellos..."
"Negocios son negocios" le respondió sin ningún remordimiento, "No me importa lo que les pase, ese lugar es perfecto para la extracción de petróleo, no puedo desperdiciarlo y, como es mío, no debo pagarles nada"
La mujer se levantó de la silla y se encaminó a la salida sabiendo que era imposible discutir con él. Antes de irse, le dijo sin voltear a verlo:
"Ojalá algún día alguien te de tu merecido..."
Y se retiró sin decir nada más.
"Sí, claro..." se rió el tipo, regresando a sus papeles, "Eso es una pequeñez. Ahora, quisiera saber si hay alguna otra zona que explotar"
Unos gritos se escucharon detrás de él. Al girarse, se dio cuenta de que dos de sus hombres de mayor confianza habían desaparecido y, frente a él, un portal oscuro se había abierto. Antes de que pudiera gritar, el portal se lanzó hacia él y se lo tragó.
(En otro lugar...)
Un hombre gritaba y golpeaba a su hijo sin escrúpulos y no había nadie más que lo defendiera, pues no tenía más familiares. El niño, tan solo lloraba y gritaba de dolor con cada latigazo que este mal hombre le propinaba.
Sin embargo, antes de que aquel hombre pudiera continuar, un portal oscuro se abrió frente el hombre y se lo tragó, desapareciendo al segundo siguiente.
(Desde otro lado...)
Un hombre masacraba a golpes a otro. Este primero estaba bajo los efectos de una droga que se administraba dos a tres veces al día. El segundo era solo un pobre conocido de este al cual le exigía que le diera dinero desesperadamente.
"Solo dame el maldito dinero o si no..."
Sin embargo, antes de que pueda dar el siguiente golpe, un portal oscuro se abrió a su costado. El hombre que estaba golpeándolo, se detuvo y lo contempló tan hipnotizado que no se dio cuenta de que su víctima se había logrado escapar por un momento y se alejaba del lugar.
Y, como era de esperarse, el portal lo atravesó y se lo tragó.
*Serán 13 enemigos, pero no resumiré sus historias, tómenlos como sucesos de la vida real en donde el corazón de las personas es más oscuro*
(De vuelta, en la dimensión oscura...)
Trece humanos aparecieron en una isla flotante, todos se miraron los unos a los otros antes de gritar todos juntos. Sin embargo, un frío aire les calló; una silueta con forma de dragón apareció frente a ellos al principio, los seis hombres se asustaron, pero este les habló:
"No tengan miedo, humanos" dijo Malefor, "He visto su corazón y necesito vuestra ayuda para poder renacer. Si me ayudan, los devolveré a vuestro mundo y les daré todo esto..."
Unas sombras sobresalieron de la silueta y generaron un montículo enorme. Cuando de despejaron, quedó en su lugar una pila enorme de monedas de oro, joyas rojas y azules y espadas de acero (en realidad, eran los tesoros de los piratas que fueron absorbidos junto a estos en la batalla en la montaña de Malefor).
Los trece hombres parecían haber cambiado de opinión al solo ver la cantidad de oro, pero, aun así, parecían desconfiar si era un sueño, una pesadilla o algo real. El hombre de negocios habló primero:
"Es una generosa cantidad, pero dígame, ¿Quién es usted?" preguntó.
"Mi nombre es Malefor" respondió este, "Como dije, quiero que me ayuden a renacer"
"Y, ¿cómo demonios hacemos eso?" preguntó el adicto.
"Les daré poder... el poder de la oscuridad... Necesito que generen una enorme cantidad de oscuridad y me traigan una fuerte cantidad de maná guardián elemental"
"¿Maná?" preguntó otro.
"Es una energía que da poderes a los dragones, es como fuerza vital"
"¿Dragones?" preguntó el sujeto que maltrataba al niño, "¿Eso es lo que quieres enfrentar? ¡Es una tontería! Nos reducirán a cenizas"
"No teman, les daré poder... su oscuridad es suficiente para que puedan poseerlos"
Al instante, las sombras cubrieron a los individuos. Una vez cubiertos totalmente, se escucharon gritos de quejas, dolor, y ahogamiento. Sin embargo, una vez que se despejó las sombras, seis dragones más negros que la noche misma, con brillantes ojos rojos de sangre.
"¿Cómo se sienten?" preguntó Malefor con un tono de felicidad por sus nuevos generales.
"Como si pudiera destrozar las ciudades de los dragones..." dijo uno.
Malefor rió:
"Excelente, mi nuevo general. Tu nombre será Hyperion"
"Gracias, mi amo..." declaró el nuevo dragón oscuro, haciendo una reverencia.
"Y ahora..." continuó Malefor mirando a los demás, "El resto de mis nuevos generales oscuros: Rea, Tarvos, Balaam, Dahaak, Perses, Talvot, Akuma, Blagden, Golk, Zigbar, Vane y Xaldin... Es hora de que se tengan su primera misión..."
Dicho esto, varias sombras los rodearon y desde ellas salieron gárgolas del ejército oscuro.
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