Realidad

Mu no podía concebir la idea de que Shaka podía dañarlo, por mucho de que los tigres le dijeran lo contrario afirmando y asegurando que era así, jamás lo creería. Lamentablemente sus recuerdos no eran de mucha ayuda, porque solo habían llegado en pequeños fragmentos que solo causaban más confusión que otra cosa.

Podía recordar la noche que lloro la partida del príncipe, o suponía que era así, también del como su padre lo encontró transformado bajo el hechizo. Había un salto de tiempo e imágenes que no podía asociar a la historia narrada así como tampoco a las personas asignadas a cada recuerdo.

Princesa? — luna de día llamo la atención del lemuriano que se encontraba en algún recuerdo lejano —

Soy Mu, llámame así — pidió a la tigresa. No quería seguir con el hilo de pensamientos que tenía hace unos instantes porque eso solo lograría confundirlo más y ya con el constante recordatorio de los felinos era suficiente —

Pero... — la tigresa quiso replicar —

Mu, puedes recordar? Recordarnos — sol de noche interrumpió a su hermana y con esperanza se acercó al guardián de Aries —

Pues yo... — sus verdes ojos se fijaron en los del tigre — solo un poco — asintió y pudo presenciar la felicidad del animal —

No importa si no quieres volver a la vida que una vez tuviste, o si no quieres tus recuerdos de vuelta, solo no me olvides ­— pidió el tigre con devoción, logrando que algo dentro de su mente se removiera, recordando que alguien alguna vez le pidió lo mismo —

***M***

Shaka se sentía como león enjaulado, gran ironía si se ponía a pensar que su signo distaba mucho del león dorado, sin embargo así era como se sentía en esos momentos. Él era muy consiente de todas y cada una de sus vidas pasadas, así que no había manera de que se hiciera el tonto y pudiera librarse fácilmente de las responsabilidad que tenía, ya que tenía en su poder el hablar y aclara todo frente todos y ayudar a Mu, pues este era el más afectado . Lo malo de todo eso era que, Shaka no quería intervenir, no queriendo que Mu tomara sus decisiones solo, sin influencias que pudieran afectar estas. Quería que Mu fuera libre de decir por el mismo, pero era allí el problema pues su conciencia no le permitía simplemente dejar las cosas tal y como estaban — y si Mu se equivocaba? Podría vivir con ello y aún más aceptar las consecuencias —

Shaka ­— el rubio dejo salir un leve suspiro y agradeció por primera vez la interrupción a su meditación no queriendo continuar con esos pensamientos tormentosos —

Caballero de sagitario — acepto la visita del castaño mayor, llevándolo a la pequeña sala de su templo. Aioros era de los pocos caballeros a los que recibía con cortesía, después de todo el sagitario siempre iba por una buena razón y no hacerle perder el tiempo —

Solo dime Aioros, Shaka — con su eterna amabilidad el castaño pidió al rubio, pareciéndole un tanto raro que se trataran así conociéndose ya mucho tiempo, prácticamente se habían criado como hermanos todos los dorados —

Que es lo que te trae a virgo, Aioros? — cuestiono con calma, haciendo sonreír al noveno guardián por la formalidad de sus palabras. Sería difícil hacer que Shaka dejara sus modales tan arraigados —

No quiero que esto suene sospechoso o como una acusación — el de sagitario se puso serio de repente, provocando que el de la india le pusiera toda su atención — pero me gustaría saber porque siendo tu consiente de tus vidas pasadas, no nos has hablado nunca de esto? — Expreso refiriéndose al asunto de los tigres y Mu — Es verdad todo? — cuestiono con leve incredulidad, era obvio que el sagitario también se negaba a aceptar toda esa historia como una realidad absoluta. El rubio sonrió levemente, ahora entendía una vez más porque Shion había elegido al griego como su sucesor, el castaño era más de lo que dejaba ver a simple vista. No le sorprendía mucho que Aioros le preguntara directamente sobre el asunto —

Si pudieras, Aioros, redimirte de tus actos pasados y vivir en paz por la ignorancia de las personas que te rodean, qué harías? — la pregunta del guardián de la sexta casa sorprendieron al griego — yo he tenido que pensar en ello todas mis vidas, y no creo haberlo consultado alguna vez con alguien — miro directamente al mayor — qué harías tú, Aioros? — volvió a preguntar —

***M***

Encontraste algo? — Shura dejo el libro que había empezado a leer hace un minuto, para masajearse la vista la cual se encontraba cansada al ser sometida por mucho tiempo a lectura de escritos antiguos, escritos que por los años que llevaban sin uso estaban cubiertos de polvo y eran poco legibles —

No, no hay registro alguno, en ningún documento, diario personal o algo parecido que mencione sobre algún tipo de relación, que no se una amistad, entre Aries y leo de las generaciones pasadas — respondió el francés con molestia y cansancio pues el al igual que el capricornio llevaban más de 6 horas seguidas en ese lugar — es como si jamás hubiera existido algo más que compañerismo entre ellos dos, al igual que con todos los demás caballeros — murmuro pensativo —

Has revisado los registros que han dejado escorpio, piscis y cáncer? — cuestiono el español para asegurarse de descartarlos de su futura búsqueda —

Porque tendría que haberlo hecho? — Parpadeo un par de veces, Camus, al no entender porque tendría que revisar los archivos de los caballeros que no estaban involucrados en el asunto. Si solo revisando los de Aries y leo se había pasado más de dos días imagínense de los demás —

No has notado que siempre están tan bien informados esos caballeros? — Shura entrecerró los ojos, a veces Camus era muy tonto a pesar de ser alguien muy listo — si ellos son así... — pensó en lo cotillas que podían ser sus amigos —

Puede haber la posibilidad de que sus yo anteriores... — el acuario se golpeó mentalmente por no haber pensado en ello. Tal vez Aries y leo jamás escribieron sobre su romance, pero tal vez sus compañeros sí, y que mejor fuente de información que los antiguos piscis, escorpio y cáncer —

Iré por algo con azúcar — aviso el español antes de dejar la biblioteca del santuario, necesitarían mucha energía para continuar con su búsqueda de información y que mayor fuente de energía que algo dulce —

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