Leo cargaba a Sayen mientras estaba leyendo denuevo la carta

-No dice como derrotar a la lola o que le haria daño-dijo Leo mientras ponia a Sayen en la mesa descuidandola un poco

Leo reyelo la carta unas 12 veces para saber que hacer para derrotar a la lola

-Parece que tendre que hacerlo por mi cuenta-desvia la mirada a la mesa-¡¿SAYEN?!-dijo Leo mientras veia que Sayen no estaba en la mesa

Leo dejo la carta a un lado y empezo a buscar desesperadamente a Sayen

Mientras tanto la bebé de apenas unos meses gateaba por la casa, subiendo y bajando por los muebles hasta que vio una sombra de un charro y unos ojos de color rojo. Sayen subio a un mueble y lo intento tocar

-Sayen Leonora San Juan de Atacama-susurro mientras le daba un collar con una piedra blanca-shhhhh-dijo aquella sombra empezo a desvanecerse

Sayen se sento en el mueble y agarro la piedra que empezo a brillar

-¡Sayen!-la agarra y carga-pequeña demonio casi te vas con tu abuela-dijo Leo abrazandola agitado

Leo noto aquel collar con esa piedra blanca, se le hacia EXTRAÑAMENTE CONOCIDA

-¿Y esa piedra?-dijo Leo inspeccionandola

Era esa piedra blanca que una vez consiguio en el tiro al blanco con Rupertino en "la feria negra"

-¿Donde la conseguiste?-pregunto Leo

Sayen apunto a la pared, en ella habia unas manchas de color negro que olian a tequila. Leo llevo a Sayen a su cuarto y la acosto en la cama durmiendola

-Vino por ella-guarda el collar-el desgraciado vino por ella-dijo para si mismo