Capítulo 10

Ha pasado dos semanas desde lo sucedido, el compromiso entre Diane y John fue lo más viral en las redes sociales, hubo muchos comentarios buenos, aunque algunos fueron malos por criticar a John siendo ex criminal, pero no se prestaba atención.

John ahora estaba viviendo con Diane en su casa, ya que prefirieron empezar a vivir juntos antes de casarse, y desde que empezaron a vivir juntos, John y Diane han estado más unidos, en el trabajo, actúan profesionalmente, pero en ocasiones Diane le da unos besos y algunos coqueteos.

Cuando salen del trabajo, Diane siempre abraza el brazo de John hacia su casa, y eso se hizo parte de su nueva rutina.

Un día, John empieza a escuchar que alguien toca la puerta, revisa quien es, pero la visita fue totalmente inesperada, llegó un hombre con traje formal y le pregunta.

John: ¿Le puedo ayudar en algo?

Hombre formal: ¿Es usted John Vázquez?

John: ¿Sí?

Hombre formal: Encontré esta caja en la casa de la señorita Gabriela, estaba oculta por varios años, intentamos buscar a ese John que tanto habla, hasta que pudimos localizarlo, así que tómalo.

John toma la caja con impacto y sorpresa, porque nunca había visto esa caja cuando estaba con Gabriela, quien lo cuidó por varios años, pero falleció hace tiempo y no volvió a esa casa.

Entonces el hombre formal se va y John entra a la casa, revisa la caja y cuando la abre, tenía un collar y una carta, John recordó el collar, una vez Gabriela le dijo que ese collar fue un regalo de su padre cuando se fuera de la casa, comienza a abrir la carta y leerla.

"Querido John,

Si estás leyendo esto, es porque encontraste el regalo que te iba a dar en la graduación, lamento no poder estar siempre contigo, pero solo quiero decirte que fuiste lo mejor que me ha pasado en la vida, siempre creí que estaría sola, pero desde el día que te encontré, supe que serías quien me haría feliz, desde el primer día, tú has cambiado todo, siempre estaré orgullosa de ti, porque sé que eres una persona de buen corazón, puede que la vida te dé momentos en las que te quieras rendir, pero recuerda solo esto, a pesar de que no esté contigo en físico, mientras no me olvides, siempre estaré a tu lado dándote consejos, eso lo verás mientras tengas el collar que te daré a ti, asegúrate de que vivas una gran vida feliz siendo una mejor persona para quienes estén contigo, gracias por ser mi hijo.

Te quiere,

Tu madre Gabriela."

John comenzó a llorar, recordando todo lo que Gabriela le dio en su vida, hasta que Diane lo ve y lo abraza.

Diane: ¿Qué ocurre John?

Entonces John deja la carta y le dice.

John: Nada, solo... recordando algo del pasado, Diane, quiero que vayamos a algún lado.

Diane estaba algo confundida, pero asintió con la cabeza y se fueron en auto hacia un lugar que sería importante para John, era el cementerio, porque ahí estaba la tumba de Gabriela y donde la vio por última vez antes de que la enterraran.

Al llegar a la tumba, John solo se queda viendo la tumba y comienza a hablar.

John: Hola Gabriela, ha... pasado mucho tiempo desde que te visité, sé que no me estés escuchando lo que te voy a decir, pero quiero decirte que...

John respira y dice.

John: Gracias, por ser la persona quien me dio una oportunidad de ser querido, de ser una mejor persona, puede que si haya cometido errores en los que no me siento orgulloso, pero abandoné todo por una mejor vida, con mi futura esposa Diane, y tienes razón, la vida me dio momentos en los que me iba a rendir, pero tú me ayudaste con tus consejos y prometo que los daré a mis futuros hijos, a pesar de que los padres que me abandonaron sean biológicamente míos, tú fuiste y siempre serás mi madre, me has dado más cosas de lo que no pudieron darme, te lo agradezco por todo, y no te preocupes, te visitaré y te contaré algunas cosas que me he hecho, adiós mamá.

John deja su mano en la tumba por un momento y comienza a llorar, entonces Diane lo abraza, y eso lo pone feliz, porque ahora tiene quien amar y con quien estar, entonces Diane le dice.

Diane: Vamos a casa.

John: Claro.

Entonces se fueron, pero antes John le dice a Diane.

John: Diane, quiero que ocupes esto.

John le da el collar de Gabriela, y Diane se sorprende.

Diane: Pero John...

John: Los collares no son lo mío, y, además quiero que tú ocupes el collar que significará, "estoy contigo pase lo que pase".

Diane le da un beso en los labios, John correspondió y se separan por un momento, para irse a casa.

Pasaron los años, John y Diane se casaron, Diane ha quedado reelegida como gobernadora de California, y ahora los dos tienen dos hijos, un hijo zorro llamado Aarón y una hija humana llamada Gabriela, John se ha dedicado a ser entrenador de artes marciales fundando su propia escuela.

Un día, John estaba viendo a sus estudiantes entrenar la defensa, pero ve que uno tenía miedo, así que va hacia él, y le pregunta.

John: ¿Qué ocurre?

Niño: No puedo lograrlo, es difícil, quisiera no tener miedo.

John: No te preocupes, estás aprendiendo, solo recuerda, no puedes dejar de tener miedo, pero puedes resistirlo y verás de lo que eres capaz, inténtalo.

Entonces John ve que el niño le sigue el consejo, solo respira y logró hacer una patada que hizo que el niño se tambaleara, todos se quedan sorprendidos y elogian al niño, John sonríe y entonces dice a todos sus alumnos.

John: Bien chicos, es hora de salir, recuerden prepararse para el torneo que será en unas semanas.

Niños: Sí maestro.

Todos los niños se van con sus padres, John limpia su puesto y lo cierra para irse a casa con su familia. Al llegar, sus hijos fueron con él, Gabriela estaba reclamando que su hermano la estaba molestando, pero Aarón lo niega, John solo ríe un poco y dice.

John: Chicos, dejen de pelear, recuerden que la familia se quiere, Aarón discúlpate con Gabriela.

Aarón suspira diciendo.

Aarón: Lo siento Gabriela.

John: Bien, y Gabriela, ¿Cómo se dice?

Gabriela: Gracias, disculpa aceptada.

John: Perfecto.

Empezaron a escuchar desde la cocina a Diane.

Diane: Chicos, es hora de comer.

John: Ya oyeron, es hora de comer.

Aarón y Gabriela empezaron a correr rápidamente hacia la cocina, mientras John solo camina feliz, después de comer, comienzan a jugar todos, Gabriela era muy hábil con la pelota porque siempre anotaba goles e incluso corría a una buena velocidad, por esa razón se unió al equipo de futbol de la escuela, mientras Aarón, era muy inteligente con la tecnología, en ocasiones gustaba presumir sus creaciones que eran pequeños robots que aún no estaban perfeccionados, algunos salían chispas y fallaban, pero Aarón no se rendía.

En la noche, Aarón y Gabriela quisieron preguntar a su padre.

Aarón: Papá, ¿Cómo fue que conociste a mamá?

Gabriela: Sí, nunca nos han dicho.

John se sorprende, aunque ríe un poco, entonces dice.

John: Bueno, solo diré que su padre ha tenido una oportunidad de salir adelante gracias a su madre.

Gabriela: Vamos, ¿Cómo pasó?, dinos.

John: De acuerdo, se los diré, pero después se van a dormir.

Aarón y Gabriela: Lo prometemos.

John: Bien, hace tiempo, he tenido una vida difícil, reflexionando por lo que ha hecho, eso lo ponía triste, hasta que un día, conoció a una chica especial que lo ha apoyado y lo ayudó a ser una mejor persona, conforme ha pasado el tiempo, han empezado a conocerse más y se enamoraron, hasta que un día, se convirtió en su esposa y madre de unos preciosos niños.

Gabriela: Es romántico papa.

Aarón: Yo pensé que pelearon juntos en una batalla con algún tipo de villano.

John rio un poco, entonces les dice.

John: Saben, a veces las historias pueden ser diferentes a su imaginación. Bueno, vamos a dormir que mañana tienen escuela.

Aarón: Pero no tengo sueño.

Gabriela: Ni yo.

John: Bueno, veamos... la tele un rato.

Aarón y Gabriela se emocionaron para ver que había en la televisión, pero pasaron solo cinco minutos y se durmieron, entonces John los lleva a sus camas, les da un beso en la frente y se va a su cama con su esposa Diane, ella estaba leyendo un libro y le pregunta.

Diane: ¿Ya se durmieron?

John: Sí.

Diane: ¿Les contaste la historia?

John rio un poco.

John: Algo así, prefiero omitir algunas partes.

Ambos rieron y John se pone a reflexionar preguntando a Diane.

John: Diane, ¿Esta fue la vida que querías, de ser ladrona, a ser madre?

Diane: No... es mejor, porque me diste una mejor vida.

Diane besa a John y con una sonrisa dice.

Diane: Te amo John.

John: Y yo a ti Diane.

Diane y John comenzaron a besarse, no pudieron evitar desvestirse, hasta que empezaron a tener relaciones, solo que hicieron el menor ruido posible para no despertar a los niños.

Al día siguiente, John regresa del trabajo y comienza a sentarse un momento afuera, ve a sus hijos correr y jugar, a Diane trabajando con la computadora, eso lo pone feliz y dice.

John: Diane, tú también me diste una mejor vida de lo que nunca esperaba, eres siempre la ladrona de mi corazón, y sé que voy a hacer todo lo que pueda para darles a ti y a los niños una mejor vida de lo que no pude lograr.

Entonces Diane lo ve desde la ventana y sonríe diciendo que venga, John sonríe y comienza a entrar a su casa, con su familia feliz.

Fin de la historia.

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