Misuk observó a Rashta con la mirada seria, la peli plateado se había declarado la amiga por cartas de Heinley y todos cuchicheaban sobre aquello.

Misuk sabía que en la siguente noche habría un enfrentamiento entre Sovieshu y su mejor amigo, así que pronto comenzó a planear algo para dejar en mal a Rashta y para hacer que Sovieshu le suplicara por una disculpa.

—Esa  maldita -dijo Laura a su lado, Navier la miro con reproche y Misuk solo solto una risa.

—Déjela desahogarse reina -sonrió Misuk— he de decir que yo también la maldigo en mi mente -Laura soltó una carcajada y Navier esboso una corta sonrisa.

—Creí que se llevaban bien -Misuk negó ante lo dicho por Laura.

—Debo de ser amable por educación, pero se metió con Navier y no dejaré que ella la pase mal por esa concubina mugrienta. - Laura asintió con determinación y se inclino ante ella.

—Bueno, tiene visita -dijo Laura abriendo la ventana, Reina entró y se tiro a la cama como de costumbre, Navier tomó la nota de su pata y Misuk se dedico a acariciar a su amigo.

—Qué lindo se ve así príncipe-susurro Misuk con una corta risa, Heinley le picoteo la mano y se acercó a Navier pasándose en su regazo.

Para el siguiente día Misuk recibió una invitación para tomar el té con el futuro Duque Trovi, emocionada envío una respuesta para asistir y se dedico todo el día a prepararse para la cena final.

—Ese vestido le queda muy lindo reina - Navier le regalo una sonrisa.

—Me sonrie más a mi que a Heinley, debo de presumir de ello -penso saliendo junto a ella.

—¡Hermana! - Rashta se posicionó enfrente de Navier— amiga -le sonrió a Misuk, Navier la ignoro y se dirigió a su lugar mientras que Misuk le dio una pequeña sonrisa y se sentó junto a Heinley.

Escucho a la princesa Circe hablar sobre Heinley y Rashta y se acercó al rubio para hablar.

—Tú actúa normal, yo me encargo- Heinley la vio sin entender pero asintió, sabía que su amiga tenía un plan pata todo.

—¡Príncipe Heinley esta siendo muy grosero! -la copa que sostenía Sovieshu hizo un fuerte ruido al ser puesta en la mesa.

—¿Que tiene de grosero marcar sus errores?  Ella dijo que fue ella la que recibió mis cartas, pero no parece haber leído ni la mitad. -Misuk los vio discutir por algunos minutos hasta que el Gran duque Kaufman ingreso al salón.

—Si me disculpa Lady Rashta, pero es malo mentirle a otras personas y aun peor haber leído las cartas que el príncipe Heinley me enviaba a mi, ¿me está vigilando acaso? - todos la vieron con sorpresa menos el duque Kaufman, Rashta comenzó a derramar lágrimas sin parar.

—No trate de encubrir al príncipe, princesa Misuk.

—Parece que el emperador solo cree en las palabras que salen de la boca de Lady Rashta -dijo Heinley.

—¡Esas cartas no eran de la princesa!-dijo Rashta con enojo, Misuk la miro con enojo.

—Suficiente-dijo Sovieshu y sacó sacó espada, Navier y Misuk se vieron y se acercaron a ambos.

—Gracias por venir, la cena acabó-mencionó Navier saliendo de el salón, Misuk salió junto a Circe y se posicionaron al lado de Navier.

—Gracias por venir  su majestad- Navier y Misuk se despidieron de Circe.

—¡Gracias por venir su majestad!- Rashta Imitó a Navier, Misuk la vio mal.- Mañana también nos veremos. ¿Que pasa hermana?- miro a Navier.— Gran duque Kaufman ¿vendrá vendrá banquete de mañana? - Misuk soltó un bufido.

Sabía que lo vendría sería el reclamo de Navier hacia Sovieshu y luego Navier y Heinley se irían juntos.

Escucho atenta las palabras de los tres y su vista se dirigió hacia Sovieshu, cada segundo que pasaba ahí odiaba más a ese hombre.

En el pasado al leer la historia de la emperatriz divorciada sintió lástima por Sovieshu puesto que este al morir Rashta había sufrido las consecuencias de haber dejado a Navier.

Pero ella quería hacer sufrir más a Rashta, ese final que tuvo no fue nada comparado con lo vivió Sovieshu luego de su muerte, ella haría que ambos sufrieran juntos.

—Princesa  -le llamó Sovieshu—¿me acompaña? - Rashta apretó sus puños y se fue refunfuñando de ahí.

—Bien -Murmuró viendo a Navier irse.

Caminaron hasta el hermoso jardín del palacio de la emperatriz, Misuk  suspiraba en cada paso que daban ambos.

—Alteza ¿Por que mintió?

—Emperador yo no mentí, hace días me llego una carta con una ave, empecé a mandarme cartas con esa persona e incluso hable de ello con las damas de la emperatriz, todos estábamos muy emocionadas - hizo una cara triste— Lady Rashta fue muy amable conmigo, aún no comprendo por que mintió, cuando supe que Heinley buscaba a su amiga de cartas supe que era yo... pero luego su amante salió a decir que era ella, ¿acaso me están espiando?

—Seguro una de las damas de la emperatriz...

—¿Las está acusando injustamente? - Misuk alzo una ceja y el negó.

—No, hablaré con Rashta.

—Quiero una disculpa.

—Lo siento...

—De parte de ella, soy una futura Emperatriz, no me puedo permitir esto, usted mejor que nadie sabe que si mi familia se entera de esta falta grave atacara su país, nuestros magos son muy poderosos - Sovieshu trago en seco.

—Lo se Alteza, hablaré con ella y le diré que se disculpe.

—Dígame Misuk - le sonrió alegre.

—Tengo una petición para usted - Misuk asintió —¿Podría no ir al banquete especial y darle ese lugar a Rashta? - Misuk lo miro fijamente.

—¿Se esta escuchando? - Misuk se levantó—  ¿me está pidiendo a mi una princesa darle el lugar a una amante? Que decepción su majestad, me retiro -solto un bufido y se alejo de el lugar.

Idiota, pensó acelerando el paso, el último banquete era en dos días, solo veinte invitados podrían asistir y ella era uno de esos, sabía que el le pediría eso a Navier, pero no sabía que a ella también.

—Qué idiota- refunfuño y tropezó con un fuerte pecho, al alzar la vista se encontró con el moreno de cabellos blancos.

—Yo opino lo mismo, es un idiota -Misuk lo miro.— Usted lo sabe ya princesa, sabe quien soy y sabe que leo mentes, yo se quien usted y se de donde viene.

—¿Cuál es el punto?

—¿Que es lo que haré en el futuro?- sabía a lo que se refería pero no quería revelar nada, utilizando lo aprendido previamente bloqueó sus pensamientos de el.

—No puedo interferir en esas cosas.

—¿Pero si puede interferir en el futuro de la amante?

—No se preocupe duque, su futuro es muy brillante, tal vez al principio no lo vea claro, pero lo verá cuando sea el momento.

—Confío en usted.

—Lo se guapo -le guiño un ojo y siguió su camino.

Apartir de aquí empieza la guerra jajajaj

Nuestra diosa Misuk puso en su lugar al  sovietico🤣

Disfruten ahora que estoy actualizando seguido, puede que me quede trabada de nuevo jajaj