Capítulo Treinta y Cuatro
Capítulo treinta y cuatro.
A veces intento entender la forma en la que esta banda se ha vuelto un gran motor para la vida de mi hijo, especialmente Andrew.
Pensaría que Arthur estaba en una fase, que cambiaría de favorito, pero siempre ha sido Andrew, siempre él.
Y esa tiene que ser la razón por la que me encuentro viendo durante demasiado tiempo su rostro en la revista y leyendo una breve entrevista. Siento que en parte lo conozco a través de todo lo que Arthur comparte conmigo, pero también quisiera conocerlo. Quisiera sentarme a tener una conversación en dónde me explique cómo hace para componer canciones que se quedan tan hondo en el corazón de mi pequeño, cómo transmite tanto con sus sonrisas en las fotos o a través de los pocos vídeos que he visto.
—Quisiera conocerlo —Me encuentro murmurando.
— ¿A quién? —Me sorprende la voz de papá detrás de mí— ¿Qué haces despierta?
—Tomo un té, no podía dormir —respondo— y quiero conocerlo a él.
—Andrew Wood —Lee—. ¿No es éste uno de los candidatos de Arthur para que te cases?
—Haríamos buena pareja —Bromeo poniéndome la revista con su rostro a un lado del mío—. Pelinegra de ojos azules con rubio de ojos mieles, bebés adorables y todo.
Todo lo que hace es reír yendo un por un vaso de agua. Dejo la revista de nuevo sobre el mesón y lo veo.
—Creo que sería lindo conocerlo y tener una conversación con él, se ve cómo una buena persona.
—Avísame si lo conoces y se cansa —Se ríe saliendo de la cocina.
— ¡Lo haré! —grito a su espalda antes de llevarme una mano a la boca recordando que todos duermen.
»Andrew Wood —digo viendo la revista— ¿Cómo consiguió un nombre de súper estrella? —Me rio finalmente pasando la página.
8 de abril, 2016.
Veo el reflejo de Andrew detrás de mí través del espejo del baño que me trae calientes recuerdos sobre la manera en la que empujaba dentro de mí aquella mañana y por la manera en la que me ve y sonríe, intuyo que él piensa en lo mismo.
Devolviéndole la sonrisa, termino de recogerme el cabello en una coleta baja de lado. Siento su mano deslizarse por mi espalda hasta la curva de mi trasero en donde la deja descansar mientras su otra mano viaja entre mis pechos hasta llegar a mi abdomen y extender sus dedos. Me estremezco.
Su toque en mi abdomen es dulce y de nuevo no puedo evitar maravillarme por la forma en la que Andrew ha reaccionado a este embarazo. Creía en él, pero si hubiese tenido alguna duda, todo esto ha terminado de aplastarlo. Él de verdad esperaba y quiere a este bebé, es feliz, está emocionado y creo que eso es lo bonito de haber planificado este embarazo.
Por supuesto que amé y amo a Arthur con todo mi corazón, pero no puedo fingir que los primeros meses de embarazos, casi todos, me sentí angustiada y era difícil vivir plenamente la felicidad cuando me sentía tan pérdida, sola y asustada porque no quería ser mamá. Mi niño fue y siempre será especial, pero eso no quita el hecho de que me sienta agradecida de poder vivir esta experiencia en donde me sentía preparada para la posibilidad y todo ha sido alegría desde el primer instante, en donde el papá de mi bebé comparte mi emoción y está aquí, a mi lado, imaginando de la misma manera en la que yo lo hago cómo podría lucir, cómo será.
No me menosprecio, resto valor o me rebajo, pero tengo que admitir que es muy difícil no preguntarme ¿Qué hice para merecerlo? Porque él... Él es una persona entre millones que me han robado el corazón, los suspiros y pensamientos. Es más de lo que esperaba.
Me tomo el tiempo de evaluar nuestro reflejo. La manera en la que mi piel un poco más pálida hace contraste con la suya, su cabello rubio miel tan diferente a mi melena oscura, ojos mieles diferentes a los míos azules. El cómo es más alto que yo, lo fuerte que es, su cuerpo tonificado sobre el mío más delgado y estoy maravillada con estas diferencias físicas entre nosotros.
—Te ves hermosa.
Solo estoy vistiendo un simple jean negro con una camisa azul cielo ajustada cuyas mangas cortas caen por mi hombros dejando la piel expuesta y aprovechando que estaremos en la calefacción de la casa, traigo sandalias bajas y sencillas que dejan al descubierto lo bonitas que están pintadas mis uñas.
Me encargué de organizar esta cena sencilla en la casa de mi hermana Eva, quien no tuvo problemas en ello y decidió salir con Allan para darme espacio a que libere la noticia para los miembros de BG.5. Sé que Andrew hace esto para mi diversión, porque él no hubiese tenido problemas en decirlo de manera casual cómo lo hizo con sus papás, pero yo quise darle algo de chispa y dramatismo y él se unió a ello. Así que vino hace unas cuantas horas a ayudarme con el pedido de comida de un restaurante supuestamente prestigioso, ordenó la mesa y luego estuvimos hablando hasta que comencé a arreglarme. Él incluso me dio toda su atención mientras me maquillaba.
—La cita con mi ginecólogo es después de la boda —Le hago saber encontrándome con su mirada en el espejo—. Estoy nerviosa.
—Todo saldrá bien —Me sonríe—, pero es norma lo de los nervios.
—También estoy emocionada. Esta experiencia es nueva en cierta forma. Esto de tenerte a mi lado, ir a consultas, estar feliz desde el momento en el que vi la prueba, dar la noticia y celebrar...Es mi primera vez.
—También la mía.
—Bueno, gracias por confirmar que no tienes hijos perdidos —Le digo haciéndolo reír.
Bajando el rostro me deja un beso en el cuello que me hace suspirar y recargar la espalda contra su cuerpo, puedo sentir cómo ese mínimo gesto obtiene una reacción de mi cuerpo ya adicto al suyo.
Sus labios viajan por mi mejilla antes de desplazarse a mi boca en donde lo espero gustosa. Recibo un beso lento en donde su lengua me seduce y pide entrada a mi boca, un pequeño gemido se me escapa mientras lo dejo besarme a su antojo.
—Podríamos... —Comienza a susurrar contra mis labios, pero el timbre de la casa suena—. No podríamos.
La manera en la que lo concluye con una mueca de disgusto me hace reír por lo bajo antes de girarme y plantarle un beso en la barbilla.
—Después —aseguro—. Puede que ya tengamos al bebé, pero aun seguiremos haciéndolo mucho ¿Sabes por qué?
—No —Me sonríe deslizando sus manos a mi trasero y dándome un firme apretón.
—Porque solo me basta con verte para querer estar todo el tiempo desnuda sobre ti, debajo de ti, de cualquier forma en la que quieras follarme.
—Dulces palabras —Se ríe antes de darme otro beso y un apretón un poco más fuerte.
Me muerdo el labio inferior para sacar fuerzas y poderme alejar, saliendo del baño y luego de la habitación, lo escucho seguirme mientras me dirijo para recibir a los primeros invitados en llegar.
Cuando abro la puerta, me encuentro con Harry y Kaethennis que parecían tener una conversación en susurros, pero que se detienen apenas se dan cuenta de que estamos aquí. Ambos plantan una sonrisa medio sospechosa y me fijo en la manera protectora en la que ella tiene una mano sobre su vientre crecido. Los fanáticos aun enloquecen con la noticia de que ellos tendrán otro bebé, yo todavía me maravillo cada vez que la veo mucho más avanzada.
—Trajimos dos botellas de vivo —Harry alza las botellas que se ven bastante caras.
Por alguna razón tengo este presentimiento de que Harry siempre va por las cosas caras, ejemplo su casa. Es de las casas más hermosas y deslumbrantes que he visto en mi vida y el anillo de compromiso junto a la argolla de matrimonio de Kaethennis podría sacarte un ojo de un puñetazo.
Andrew extiende las manos tomando las botellas mientras saludo a los recién llegados. Ya deseo decirle a Kaethennis que estoy embarazada y compartir experiencias, no sé qué tan emocionante o loco pueda llegar a ser estar embarazada al mismo tiempo que una de las chicas BG.5.
—Parece que ahora está creciendo muy rápido —Le digo.
—Siento lo mismo. Cumpliré siete meses esta semana y se mueve un montón.
—Pareces dueño de una casa ajena actuando de anfitrión —Se burla Harry de Andrew mientras lo sigue a la cocina y yo guío a Kaethennis a la sala.
Me siento a su lado, pero no hago nada cómo tocarle el estómago o invadir su espacio porque sé que somos sobreprotectoras durante el embarazo y a algunas nos disgusta que nos manoseen el vientre. Recuerdo que era odiosa cuando conocidos querían tocarme la panza, pero cuando se trataba de mis hermanas y mi papá, no tenía ninguna queja.
— ¿Ya saben el sexo?
—Sí —Me responde con una sonrisa—. ¿No apostaste?
—No supe de la apuesta, pero aún estoy a tiempo ¿Verdad?
—Pensamos revelar el sexo hoy —dice—, pero tienes aun un par de horas para hacerlo.
Y debe ser un asunto serio porque saca su teléfono y abre una aplicación que parece un pizarrón, escribe mi nombre y espera a la expectativa sobre qué sexo creo que tendrá su bebé. No soy cómo esas personas que hacen largos análisis sobre cómo luce la mamá o el vientre, simplemente hago una elección rápida esperando no perder cincuenta libras que no quiero regalar a personas millonarias.
—Niña —digo y ella de verdad es increíble porque no me da ninguna reacción que me haga intuir si acerté o no, simplemente anota.
—Estás junto Doug, Ashton, Ethan, Dexter y Elanese. Hil, Katherine, Grace y Andrew dicen que es niño, pero creo que es porque tienen miedo de que traiga a otra Halle —Se ríe de esto último.
— ¿En dónde dejaste a tus lindos hijos?
—Con Hannah, ellos aman pasar tiempo con sus abuelos —Ve alrededor—. Está hermosa la decoración de esta casa o al menos lo que he visto.
—Gracias, mi hermana tuvo buen gusto.
Ni pensar que casi vende esta casa para vivir con Elliot tras casarse, en ese tiempo el cerebro e Eva estaba defectuoso, no hay que juzgarla.
—Tengo que admitir que estamos sorprendidos de esta cena, es decir, de que ustedes sean anfitriones —Voltea a verme— y debido a los rumores que corren...
— ¿Qué rumores?
—Bueno, ellos dijeron que Andrew dijo que buscaban un bebé, que lo dijeron en un ensayo o algo así.
El timbre suena nuevamente, pero escucho a Andrew y a Harry dirigirse a la puerta mientras ríen de algo, parece que ahora son los dueños de la casa. Un ladrido suena y el murmullo de una conversación antes de que Grace aparezca llevando la correa de un perro hermoso con un pelaje marrón, negro y blanco mejor que mi cabello.
—Buenas noches —Sonríe—. Ethan trajo varios dulces de postres y están súper ricos. Trajimos a Brise porque su niñera no podía cuidarla y nos daba pena dejarla sola, nos hizo carita de ruego y ¿Cómo dejarla sola?
Se acerca y cuando se sienta frente a mí, en uno de los sofás individuales, Brise viene a nosotras pasando su hocico por mis piernas y siendo súper juguetona. Es preciosa, me es inevitable no rascar detrás de su oreja lo que parece encantarle porque se postra para que siga haciéndolo.
—Ahora no solo quieres conquistar a mi novia, también quieres quitarme a mi Brise —Escucho a Ethan detrás de mí, el timbre suena de nuevo.
—Me alegra que pudieras llegar, tengo un regalo para ti, Ethan —Le doy una amplia sonrisa y me ve con desconfianza.
—No me gusta tu tono, hay algo detrás de esas palabras.
—Es un regalo muy, pero muy especial. Lo mejor para ti.
Aun viéndome con desconfianza camina hasta agacharse y quitar la correa de Brise que ladra en aprobación mientras se echa a sus pies cuando él se sienta a mi lado y le acaricia el lomo sonriendo.
—Ella no hará desastres en esta casa, sabe comportarse. Soy bueno educándola.
—No esperaba menos de ti —aseguro.
—Chocholate en cambio podría ser un buen perro, pero vive huyendo de Halle aunque se aman —Se ríe Kaethennis.
—Oh, hola, Hottie, casi no te vi con ese balón que traes en el estómago —Se ríe Ethan y ella rueda los ojos.
—Idiota —Le dice.
— ¡Braiiseeee! —grita una voz infantil.
Y gracias al cielo no me pierdo el momento adorable en donde un pequeño rubio vistiendo un enterizo morado, camisa mangas largas blanca y gorrito de lana lila viene corriendo hacia Brise. Cuando la alcanza, la abraza por el cuello mientras ríe enseñando sus pequeños dientes y cerrando los ojos, cuando los abre no borra su sonrisa y ladea la cabeza a un lado cómo si posara para una foto.
—Hola, Jeff —Lo saluda Ethan—, Brise parece feliz de verte.
— ¡Titi E! —Libera a Brise para trepar por el sofá, sin ayuda de Ethan, y sentarse en su regazo.
—Parece que te pusiste muy cómodo cuando no te invité —Es lo que él le dice, pero le está sonriendo.
No me esperaba tanto apego de su parte a Jeff y debe notarse en mi expresión porque él se ríe.
—Jeff y yo tenemos un lazo único. Ayudé a Doug cuando lo cuidaba y luego casi lo ahogamos con jugo de sandía.
—Encantador —Es lo que digo.
Él niño cierra los ojos y frunce la nariz de manera adorable haciendo su pequeña boca una trompita que hace reír a Ethan, bueno, a todos. Jeff es la viva imagen de la tentación de tener hijos. Nos da una sonrisa y saludo con la mano mientras balancea sus pies y juega con el reloj de su titi E.
—Ah, veo que ya estás con tu tío Ethan —dice Doug a Jeff antes de vernos a los demás—. Bueno, pero si la sala está llena de mujeres hermosas y una perra pretenciosa y en esto último no me refiero a la perra refinada de Brise.
»Rayito ¿Saludaste ya al bebé no nacido en la panza de tía Kae?
— ¡No! —Se baja de las piernas de Ethan y corre a Kaethennis dándole un besito en la barriga—. Hola, bebé.
Luego el pequeño se gira hacia mí con una sonrisa y me apunta el estómago.
— ¿Hola, bebé?
Me paralizo y Doug se ríe mientras Hilary aparece.
—Jeff, ya mami te explico que solo la tía Kae trae un bebé en la panza —Le dice Hilary con dulzura y él va hacia ella pidiéndole que lo alce, lo cual ella hace—. Hola, bebé —Le dice cuando él recarga su frente de la suya.
—Hola, mami —canturrea y Doug suspira de manera teatral.
— ¿Cómo no me sigo enamorando si todos los días de mi vida presencio escenas cómo esas? —Se lleva una mano al corazón—. Se me acelera tanto el corazón ante la imagen que hasta miedo me da.
La casa comienza a llenarse de conversaciones en lo que Harry y Andrew vuelven a la sala, parece que todos hablan con todos, además de los ladridos ocasionales de Brise. En algún punto, Dexter y Elanese llegan, asegurando que Skylie también se encuentra con Hannah y Carter Jefferson. Sin embargo a Jeff no le importa ser el único niño, él se divierte jugando con Brise o pasando de brazo en brazo, también es coqueto, continuamente nos hace ojitos a todas y tiene sonrisitas demasiado lindas y difíciles de ignorar.
—Tengo hambre —Se queja Kaethennis sobándose el estómago—. Bebé en camino también tiene hambre. ¿Falta mucho para que Max llegue?
—Papi Max no vendrá —dice Doug sonriendo.
—Esa es una jodida verdad.
— ¿Y ustedes cómo saben eso? —pregunta Harry.
—Contactos —responden ambos al mismo tiempo antes de reír.
— ¿Qué contactos? —pregunta Andrew.
—Uno muy confiable —dice Doug, que sostiene a Jeff en sus brazos mientras éste le acaricia el cabello—. Pero no diremos nada más hasta tener actualizaciones.
—Pero este contacto es uno demasiado fiable ¡Joder! Es lo más confiable que tendremos para seguirle la pista a papi Max.
—Me da miedo preguntar —murmura Hilary—. Lucen demasiado satisfechos.
—Y están demasiado en sintonía con lo que dicen, eso significa peligro —asegura Harry.
Dexter y Doug comparten una mirada antes de reír y asentirse hacia ellos, eso desde luego genera una curiosidad colectiva, pero es una de esas veces en la que mágicamente deciden guardarse la información.
—Siendo así, entonces estamos todos, pasemos a comer —digo al ponerme de pie y ya con el cosquilleo de la emoción.
Cuando le iba a dar la noticia a mi familia me sentía feliz y al dársela a la familia de Andrew me sentía nerviosa, pero ahora la emoción es de otro tipo, una llena de expectativa, ya quiero ver sus reacciones. Me tanteo el bolsillo trasero del pantalón para garantizar que tengo la hoja doblada.
Compartiendo una mirada con Andrew, nos dirigimos a la enorme mesa, nunca entenderé por qué mi hermana compró tal monstruosidad y tomamos asiento. Adrede me siento frente a Ethan y entre Andrew y Kaethennis. La mesa se ve espectacular, lo que hace que Dexter tome una foto que dice compartirá en sus redes.
— ¿Quién cocinó? —pregunta Ethan viendo la comida con mucha atención antes de servirse en su plato.
—Un chef muy reconocido —responde Andrew—. Está delicioso, lo prometo.
—Esto parece una representación de la última cena —Se ríe Grace— ¿Qué bomba caerá aquí?
—Tengo que admitir que hay un aire sospechoso esta noche —comenta Hilary—. Me siento tensa y nerviosa a la espera de que alguien diga algo.
—Hoy además revelaremos el sexo de bebé en camino —Menciona Andrew sonriendo hacia Kaethennis.
—Es niña —dice Dexter.
—Niño —Asegura Grace.
—Bueno, hoy salimos de una apuesta y entramos en otra —Nos hace saber Doug dándole comida a Jeff que hace un sonido de deleite—. La apuesta por el nombre es la siguiente, he estado elaborando mi teoría sobre nombres por la hache.
—También tengo unos buenos nombres que podrían ser los correctos —dice Andrew antes de llevarse comida a la boca.
—Pero no sean unos malditos tramposos cómo con Halle, bastardo de ojos azules, rebuscaron nombres que sabían que jodidamente no íbamos a acertar.
—Claro, porque escogimos el nombre de nuestra hija con base a llevarle la contraria a todos ustedes —Rueda los ojos Harry.
Con conversaciones que cambian constantemente, la cena se lleva a cabo y la verdad que es difícil comer cuando te encuentras riendo de cada ocurrencia que se discute en la mesa, el ambiente es increíble y me doy cuenta de verdad de cuán afortunada soy de ser incluida en este círculo familiar. De tanto en tanto, Dexter y Elanese no lanzan miraditas y me preocupa que mi hermana ceda ante la tensión del ambiente y grite la noticia o que Dexter se canse de esperar, son un peligro con tal información en su poder.
Por suerte para todos, no nos toca escuchar a Ethan quejarse de la comida, porque está muy buena, él la aprueba. Dexter y Doug se mantienen conversando en voz baja cuando creen que nadie los ve y se ríen de una forma tan sospechosa, que me hace pensar: pobre Max ¿En qué lo habrán involucrado?
Cuando se pone en la mesa todos esos postres que Ethan trajo, creo que esto ya se ha postergado lo suficiente y tengo demasiada energía acumulada, así que una vez Andrew vuelve a tomar asiento, me inclino para que escuche mi susurro.
— ¿Podemos ya soltar la bomba?
—Pareces demasiado emocionada al respecto —Sonríe y luego suspira dándome un suave beso en la boca—. Hazlo, si se le baja la azúcar o la presión al menos hay una Coca-Cola en la mesa.
Sonriendo vuelvo a mi asiento y me encuentro de frente con la mirada de sospecha de Ethan. Dándole una sonrisa alentadora, que lo tiene enarcando una ceja, me pongo de pie y poco a poco todos se dan cuenta hasta que van guardando silencio, incluso Jeff me ve mientras se lleva un brownie a la boca.
No suelo ser dramática ni desesperada por la atención, pero admito que disfruto de este momento porque me parece demasiado divertido. Qué bueno ha sido tener diferentes experiencias a la hora de dar la noticia de éste bebé.
Me inclino hacia la mesa tomando mi copa vacía y la botella de Coca-Cola, sirviendo lo suficiente antes de enderezarme de nuevo para hablar.
—Gracias a todos por venir a cenar, la verdad nunca he sido anfitriona de una cena cómo esta, pero quería hacer algo especial para ustedes, en especial para Ethan.
— ¿Para mí? —frunce el ceño.
—Sí, para ti. Hemos estado preparándote un regalo y queríamos compartirlo con todos ustedes.
—No sé de qué se trata esto, pero voy a grabarlo.
—Sí, graba, Rubia —Se ríe Dexter poniéndose cómodo en la silla.
—Podría dar un enorme discurso, pero es que yo prefiero solo dejarlo caer —prosigo—. Te queremos mucho, Ethan.
Andrew sacude la cabeza riendo por lo bajo mientras retira mi silla para que pueda salir y rodear la mesa, dirigiéndome hacia Ethan.
— ¿Hay alguna broma colectiva de la que no sé? Porque les advierto que incluso haciendo el ridículo me veo bien.
—No sé de ninguna broma —dice Harry apoyando un brazo en el respaldo de la silla en donde se encuentra Kaethennis—, pero estoy intrigado, aunque tengo sospechas.
—Eres así de inteligente —Le dice Andrew haciéndolo sonreír.
Me detengo frente a Ethan y primero le entrego la copa que acepta dudoso, lo que me hace fruncir de inmediato el ceño.
—Me viste servirla, no le eché veneno. Eres mi enemigo por el corazón de Andrew y Grace, pero también eres mi amigo.
—Qué privilegiada eres por ello —dice relajando su entrecejo.
—Súper privilegiada —digo sacándome la hoja doblada del bolsillo y dándosela —. Toma, tu regalo.
Queriendo estar sentada cuando la lea, a paso apresurado vuelvo a mi asiento y apoyo una mano en el muslo de Andrew a la expectativa.
—Ábrela —pide Doug—. No te des tanto tiempo y ábrela.
—Sí, ábrela —apoya Grace.
—Chismosos —Le dice—. Podría abrirla en la comodidad de mi casa.
—No seas así, Ethan, por algo te la dieron frente a nosotros —Se queja Hilary.
—Sí, no seas una perra —Lo abuchea Dexter.
—Están haciéndose presión social, Ethan —comenta Harry— y no me opondré a ello. Ábrela...Por favor.
— ¡Qué la abra! ¡Qué la abra! ¡Qué la abra! —comienza a cantar Doug y Jeff cómo buen hijo, aplaude al ritmo del canto de su papá.
—Bien, lo abriré.
Dejando la copa sobre la mesa, se dispone a abrir la hoja y sonrío a la expectativa sabiendo lo que encontrará. Una copia de mi examen de laboratorio en donde al final le escribí y rodeé de corazones las palabras: Felicidades, tío Ethan, ya quiero conocerte. Mami y papi dijeron que estarías muy feliz. Nos vemos pronto.
Veo sus ojos moverse a través de la hoja, Grace se inclina disimuladamente y sus ojos se van abriendo a medida que lee. Ethan mantiene los ojos igual, pero los pómulos se le sonrojan y hay un leve fruncimiento entre sus cejas. Sé cuándo termina porque deja ir una profunda respiración.
— ¿Qué dice? ¡¿Qué dice?! —pregunta Doug y Elanese se ríe, lo que hace que el rubio voltee a verla.
—Lo siento, pero tu desesperación es graciosa.
—Entre chismosos se entienden —dice Harry con diversión y Elanese abre la boca ofendida.
—Pero ¿Qué dice? —pregunta Hilary y Grace solo tiene los ojos abiertos viendo a Ethan, esperando.
Él suspira, se pasa las manos por el rostro luego por el cabello, por último toma la copa con la Coca-Cola y se la bebe de un solo trago. Se pone de pie, saca su teléfono y se aclara la garganta tras manipular algo en el.
—Pero ¿Qué hace? —pregunta Kaethennis.
— ¿Va a leer? —pregunta mi hermana.
—Eso parece —dice Andrew incorporándose más recto en la silla—. Él va a leer.
—Cuando inicié mi camino en BG.5 conocí a cinco hombres que sabía se convertirían en mis hermanos...
—Bueno ¡Mierda! Eso ha sido jodidamente dulce.
—Y también que se convertirían en mis dolores de cabeza, angustias y preocupaciones.
—Retiren la mierda que dije, eso no es dulce. Nada dulce.
—Y tenía razón, porque cómo si no les bastó con conseguir novias que me caían mal... —Sigue leyendo.
—También tuviste una novia medio pesada, no tengas memoria selectiva —Le dice Harry.
—Y ligues también ¿Alguien recuerda a Nanette? Era súper pesada —Agrega Doug.
—Tú saliste con Milla y nadie te dice nada —dice Andrew.
—Tú saliste con la peor —contraataca Doug— y Harry no habla porque no quiere que le saquemos a su ex.
—Mejor enfóquense en Dexter que estuvo con la estilista —señala Harry.
—Maldita traición la del bastardo de ojos azules. Duele.
—Tuve que vivir años con la carga que era Isla Mason —prosigue Ethan alzando la voz por sobre todos—, años. Años de querer desaparecerla y querer sacudir a Andrew. "Andrew es malo jugar con la basura" y nunca me escuchó.
—Si te caía bien al principio —Lo interrumpe Hilary—. Admite tu pasado oscuro.
—Así que cuando Isla parecía fuera de la ecuación, fui feliz, me sentía tranquilo, pero entonces Harry hizo lo impensable —Alza la vista y mira al mencionado—. Dejó embarazada a su novia, abriendo la puerta de fuerzas misteriosas que traerían muchos bebés a mi entorno.
»Dan, Adam, Halle, Zoey, Nathan, Jeff, Skylie, Mackenzie, otro bebé Karry ¿Cuánto más? ¿Cuánto más debo oler pañales apestosos? ¿Cuánto más debo ver a mis amigos ser idiotas? ¿Cuánto más me harán cargar bebés?
Bueno, estoy impactada de que tuviera un discurso preparado. Quería sorprenderlo y la sorprendida soy yo.
— ¿Fui enviado a esta tierra para ser el tío rico, sexy y atractivo? ¿Por qué mis amigos me hacen esto? Me uní a una banda para hacer música y en el camino encontré a mi familia, pero nadie me dijo que habría tantos bebés. A veces cierro mis ojos y todo lo que escucho es "titi E" "Súper E" incluso me persiguen en mis sueños.
— ¡Titi E! —grita Jeff alzando los brazos llenos de chocolate y haciendo que le salpique a Ethan que suspira.
—Primero fue Harry luego fue Doug...
— ¡Dooouuuu!
—Le siguió Dexter y después Harry otra vez a eso súmale los bebés de nuestros amigos. Me dije "Me queda Andrew" "Aún somos nosotros dos" hasta ese inolvidable día en el que explotó una bomba: Andrew y Leslie, conocida como la roba amores, buscaban un bebé.
— ¿La roba amores? —Finjo indignación—. Algo tendré que no tienes tú.
—Tengo que admitir que todo parece muy bien narrado, es cautivador —Comenta Kaethennis a mi lado y cuando volteo está sonriendo.
—Pensé que era una broma, pero no, Andrew lo dejó muy claro. Estuve un tiempo preguntándome "¿Cuándo sería?". Viendo a Andrew e imaginándolo con un bebé, imaginándome a mí con otro bebé BG.5 destinado a obsesionarse conmigo porque todos lo hacen.
—Encontró la manera de alabarse a sí mismo en su discurso. Impresionante —dice Grace.
—Así que un día me senté a escribir esta nota para tener qué decir el día en que Leslie fuese malvada y me lo tirara en la cara porque tiene una perversa satisfacción en fastidiarme —Hace una pausa para darme una mirada, le sonrío— y ese día es hoy.
Bloquea el teléfono y se lo guarda en el bolsillo del pantalón, suspira de nuevo.
Esto es mejor de lo que esperaba incluso si no salió cómo quería.
—Qué bueno que estoy grabando esto —Se ríe Doug—. ¡Y mierda! Andrew y Leslie...
Ethan ve de Andrew a mí y se cruza de brazos a la altura del pecho.
—No van a dormir, tendrán vómito y mierda de bebé. Llorará un montón, nacerá feo y arrugado, hablarán cómo idiotas cómo si él los entendiese, el sexo será escaso.
—Eso es mentira —dice Harry y nos ve—. Conseguirán la manera de tenerlo, solo mírenos, dos hijos e hicimos más.
—Excelente aporte, bastardo de ojos azules.
—Y tendrán un pequeño tirano gobernándoles la vida con una sonrisa sin dientes y un montón de babas, un pequeño desgraciado que después preferirá a sus tíos que a ustedes o a sus abuelos. Mi perra Brise sufre porque tendrá otro bebé tirando de su cola...
—La parte buena ya debe de estar por llegar —Nos tranquiliza Grace.
—Miren, la verdad es que la vida le cambiará, nos cambiará —descruza los brazos y hace un gesto con las manos antes de llevársela a las caderas—, pero ya está, ya fue. Serán papás de un bebé que seguro será muy bonito luego de una semana y que los amará. A diferencia de los demás, ustedes al menos lo deseaban.
—Oye, amamos a Jeff —Se queja Doug.
—Awwww, me amo.
—Buscamos a bebé en camino —garantiza Kaethennis frunciendo el ceño hacia Ethan que los ignora.
—Así que en vista de que puedo intuir cuánto deseaban no dormir y tener al pequeño tirano, estoy feliz por ustedes y medio feliz por mí. O sea, tendré a otro niñito obsesionado con lo genial que soy, es demasiado peso ser el tío favorito y sé que a los demás les da celos.
—Él lo lleva a un maldito nivel nuevo —Escucho decir a Dexter.
—Así que si ustedes son felices, yo también. Al menos la mamá no es Isla —Se estremece— y la verdad es que doy fe de que eres una mamá excepcional, Leslie, por lo que sé que Andrew y tú lo harán muy bien, no traerán al mundo a un niño que no será amado o sufrirá y eso para mí ya es suficiente, porque sé la clase de padres que serán y me alegro por ese bebé.
»Pues nada, seguiré siendo el tío E —dice tomando ahora su copa de vino y dando un sorbo.
—También serás cómo el padrastro —dice Andrew y por poco Ethan escupe, se atraganta y comienza a toser—, por lo que tendrás responsabilidades especiales.
— ¿Qué tendré qué? Así ya no me está gustando esto, cancelen mi discurso.
—En conclusión —dice Kaethennis a mi lado—. Habrá nuevo bebé BG.5.
Solo bastan esas palabras para que haya un estallido de energía de gritos de felicitaciones, risas y bromas incluso Jeff que no sabe de lo que hablamos se encuentra celebrando de pie en su silla aplaudiendo mientras Hilary se asegura de que no se caiga. Cuesta que todos vuelvan a sus asientos y que las voces se controlen.
— ¿Quién creen que hizo el bebé más rápido? —pregunta Ethan sirviéndose más vino y con una sonrisa llena de ironía— ¿Doug o Andrew?
—Oye, Ethan, no me metas en tus asuntos —Lo señala Hilary y él ríe.
—Depende —dice Kaethennis a Ethan—. Mi hijo vio a su tía ayudando a tío Doug con la boca en el cumpleaños de Adam, eso fue noviembre y Jeff nació en septiembre.
—Diciembre —Masculla Dexter—. Odio ser bueno en matemáticas, pero eso significa diciembre.
—Entonces gana Doug, le tomó un mes —Se ríe Grace. Harry y Dexter la miran—. ¿Qué? Yo no la embaracé.
—Ya hemos superado eso, además miren el hermoso sobrino que les dimos —Señala a Jeff que se encuentra con el rostro lleno de Brownie, pero que hace ojitos—. Siéntanse agradecidos.
—Felicidades de nuevo, Leslie —Me dice Kaethennis—. Ya quiero que nuestros bebés jueguen juntos.
—Dos chicas BG.5 embarazadas —Ethan se sirve más vino mientras sacude la cabeza en negación—. ¿Por qué a mí? ¿No les bastaba con enviármelas de una?
— ¿De qué te quejas? Al menos no fue Grace la que te dijo que estaba embarazada —Le dice Andrew sonriendo.
—Oye, a mí no me involucren —Alza las manos la mencionada—. Sigan en su ola que nosotros surfeamos en la nuestra.
— ¿Desde cuándo surfeas? —Se burla Doug.
—Es un decir. La ola de la vida.
Todos se ríen mientras comienzan a servirse de los postres, pero Ethan se aclara la garganta de nuevo y ve alrededor de la mesa con el ceño fruncido.
—Bueno ¿Y es niña o niño? —pregunta hacia Kaethennis.
—Es niño —Sonríe ella.
— ¡Perfecto! Aparte también pierdo cincuenta libras, la emboscada perfecta —dice bebiendo de su vino.
—Claro, Ethan, tendremos un niño para que pierdas la apuesta —suspira Harry.
—Nuevas apuestas desbloqueadas —anuncia Doug ahuecándose la boca con las manos para que su voz suene más fuerte—. Nombre de bebé Karry y sexo de bebé Landrew. Cien libras para ambas apuestas ¿Quiénes entran? Por favor diríjanse a mí, haré las anotaciones.
—No puedo creer que se estén apostando doscientas libras —murmuro y a mi lado Kaethennis ríe.
—No has visto nada, Leslie. Este es solo el principio, dile a Andrew que te cuenten cuán incivilizados se vuelven los cincos durante el embarazo.
Volteo a ver a Andrew que finge no haber escuchado mientras mira alrededor, entrecierro los ojos hacia él.
—Habrá que comprar otro cuaderno —dice Dexter.
— ¿Qué cuaderno? —pregunto.
—Sí, Dex, dile qué cuaderno —Lo pellizca Hilary haciéndolo quejarse.
Riendo por lo bajo recargo mi cabeza del hombro de Andrew mientras me llevo una mano en el vientre. Este bebé crecerá en este entorno tan especial y familiar, me encanta. Mi mirada se encuentra con la de Ethan y él alza la copa hacia mí, sonriendo. "Felicidades" gesticula y yo le devuelvo un "padrastro" que le hace borrar la sonrisa.
Quisiera comentar muchas cosas, pero tengo calor y sueño. Así que hasta aquí mi reporte, Joaquín.
Redes: Instagram: DarlisStefany / Twitter: Darlis_Steff / Páginas de facebook: Darlis Stefany y "Saga BG.5 de Darlis Stefany" /En vivos en YouNow: DarlisStefany / Tiktok: DarlisStefany
Espero les guste.
Un beso.
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