"La Inocencia Viste De Determinación"

NOTAS: Últimos capítulos...

Y aquí llegando con el capítulo número treinta y uno, que solamente trae más cosas y más dramas...

Finalmente, antes de comenzar a leer, debo decir un pequeño aviso. En caso de que llegaran a leer esta o alguna otra de mis historias en otro lado, es muy seguramente un plagio. Yo siempre uso el seudónimo "RozenDark" y únicamente público en Amor Yaoi, Wattpad, Fanfiction.Net y AO3. También otorgue el permiso para una traducción al chino y solamente se encuentra en la plataforma/app "LOFTER"...

https://aichidongxidepangfengye.lofter.com/

Esto lo digo, debido a los recientes fallos de Wattpad y que esta misma plataforma tiene una página espejo donde lucran con las historias. Por lo que cualquier cosa, les estaré agradecida si me lo hacen saber. De cualquier manera, en caso de algún otro cambio, les daré el aviso correspondiente :3

En fin, los personajes de One Piece son propiedad de Eiichiro Oda. Las imágenes utilizadas a lo largo del fic son hechas por su servidora.

Y sin más que decir, les invito a leer (^3-)/

~°ɞ°~~°ɞ°~


Luffy había cumplido catorce años hacía poco, pero francamente, no tenía muchas ganas de estar en la cabaña de Dadan como cada año, desde que Ace y Sabo lo iniciaron, hace ya tanto tiempo.

Por alguna razón, sentía que debía estar en el bosque y aunque no tenía idea del porqué, decidió que lo mejor para descubrirlo, era entrenar...

Llevaba entrenando desde que su abuelo llegó aquel día y le explicó a medias las razones que había tenido para llevarse a Ace. Había entrenado demasiado para ser más fuerte y poder protegerse sin necesidad de que su hermano lo hiciera. Después de todo, ella también quería proteger a Ace.

De cierta manera, se enorgullece de sus logros. Cuando antes no podía dar en el blanco, ahora todos los ladrones de Gray Terminal le temían y lo pensaban dos veces antes de meterse con ella. También había defendido perfectamente la villa Foosha cuando unos asaltantes habían intentado hacerle daño a Makino y al resto de los habitantes de la villa.

Ella ya no era más aquella niña llorona que perseguía a sus hermanos en busca de protección. Aun así, los extrañaba demasiado que hasta dolía...

"Oye imbécil, será mejor que nos entregues esas katanas o morirás tan dolorosamente que terminaras llorando por tu madre".

Luffy se había aburrido de entrenar en solitario y como vio que no había pasado nada, decidió buscar algunas cosas en Gray Terminal para la casa del árbol. Claro que se sorprendió de ver a un muchacho que jamás había visto y que aparentemente se había metido en problemas.

"Así que eso es lo que piensan".

A Luffy le brillaron los ojos con admiración al ver como aquel sujeto, acabó con esos cuatro asaltantes de manera rápida y certera. Apenas y pudo verlo mover con agilidad sus tres katanas y cuando lo hizo, rápidamente supo que quería un espadachín en su equipo.

"Parece ser que en este lugar no me dirán lo que quiero oír".

El espadachín llevaba un buen rato en esa isla. Primero había terminado en un lugar lleno de petulantes nobles y sin que se diera cuenta, había terminado en ese basurero. Seguramente era otra de esas islas que se mueven y terminan por confundirlo.

"Hola, soy Luffy y quiero ser el rey de los piratas".

El espadachín se sorprendió de ver a una chica justo frente a él y que además, no pareciera afectada por lo que había hecho. Aunque lo dejó de lado, solamente para devolver el saludo de manera tosca y directa.

"Roronoa Zoro".

Luffy asintió con ojos brillantes. "Bien Zoro, lo he decidido al verte pelear y serás mi primer compañero de tripulación".

Zoro levantó una ceja en señal de confusión. "Mocosa, veo que no me conoces, pero te lo diré para que entiendas. Soy un cazador de recompensas y no tengo intención de ser un pirata", respondió directo. "Ahora si me disculpas, iré de regreso a ese lugar lleno de nobles presumidos, para que me den indicaciones para conseguir un nuevo bote".

Luffy simplemente lo ignoró, mientras reía completamente divertida. Su nuevo y primer nakama era gracioso y aparentemente tenía nulo sentido de la orientación.

"Por allá solamente irás a un acantilado" mencionó entre risas, mientras señalaba el camino por donde el espadachín se dirigía. "Pero si gustas, puedo llevarte a la villa, porque los nobles no ayudan a nadie más que a sus bolsillos".

Zoro rápidamente detuvo sus pasos para mirar a la chica con asombro. "¿Cómo lo sabes? Estoy completamente seguro de que los caminos de esa isla se mueven".

"¿En serio? Si no me lo dices vivo engañada", respondió con asombro. "Aunque también puede ser que te pierdas, a mí también me pasa a veces".

Zoro soltó un suspiro cansado. "Olvidemos el tema, dijiste que me podrías llevar a una villa".

Luffy asintió. "Si, Villa Foosha. Allí son amables y Makino tiene un bar donde sirven buena comida", mencionó con hambre de solo imaginar la comida.

Zoro sonrió al escuchar sobre el bar. "Pues te sigo".

Luffy sonrió encantada, mientras se aseguraba que su nuevo amigo la siguiera. Era un gran tramo de Gray Terminal a Villa Foosha y ella estaba completamente determinada a lograr que Zoro aceptará que ya era parte de su futura tripulación.

Ella no lo sabía, pero algo le decía que Zoro sin duda alguna, era el indicado para el puesto de primer oficial y el segundo al mando en la tripulación. Algo le decía que debía insistir, porque Zoro era sin duda, alguien demasiado leal y honorable para ser parte de una gran historia...

"Entonces Zoro... ¿Cuál es tu sueño?"

Zoro sonrió con una expresión seria. "Ser el mejor espadachín y para lograrlo, debo derrotar a cierto hombre".

Luffy asintió con una mirada determinada. "Un sueño digno para alguien que formará parte de la tripulación del futuro rey pirata".

Y Zoro por alguna razón sintió cierta conexión con esa chica...

Tal vez y solo tal vez, esa mirada llena de determinación lograría convencerlo...

"La Inocencia Viste De Determinación"

Ace daba crédito extra al alcaide de Impel Down por saber defenderse a la perfección de dos completos lunáticos como lo eran su hermano y él, claro, por algo era un almirante encargado de la prisión conocida como 'impenetrable'. Aun así, Ace sabía que tanto él como Sabo estaban completamente determinados a rescatar a Luffy y llevarla a un lugar donde pudiera estar completamente a salvo.

O eso es lo que habían pensado hacer, hasta que el alcaide se rió en sus caras, mientras les decía la cruel realidad...

"Monkey D. Lucy ya ha sido trasladada a Marineford, personalmente por el héroe de la Marina: El vicealmirante Monkey D. Garp".

Uno supondría que Ace siendo el hermano explosivo, comenzaría a golpear a diestra y siniestra mientras literalmente escupía fuego e insultos dirigidos al alcaide Magellan. Pero por alguna razón, la noticia le había caído como un balde de agua fría...

Mientras que Sabo, siendo el hermano más inteligente, metódico, estratega y con demasiada paciencia, había parado sus ataques por un breve instante, hasta que furioso comenzó a golpear con fuerza a Magellan...

Los años habían pasado, ellos habían crecido completamente ignorantes y alejados uno del otro y por supuesto, alejados y ajenos de la existencia de Luffy. Por ende, ambos crecieron y fueron instruidos por diferentes personas y ambientes.

A Ace le habían enseñado a mantener la calma ante una batalla que solo dejaría problemas. No importaba si era un comandante de la tripulación del hombre más fuerte de los mares y de eso se había encargado personalmente Marco.

A Sabo le habían enseñado de igual manera, pero desde un punto de vista un tanto diferente. Y si bien, Dragon le enseñó personalmente, Sabo tenía sus propias opiniones con respecto al mundo que lo rodeaba...

Y en estos momentos, Ace olvidó por completo todo lo que había aprendido, más bien, se había quedado completamente en blanco con la noticia y en su cabeza solamente resonaba que Luffy ya no se encontraba en Impel Down y él ni siquiera se había dado cuenta del momento exacto en el que se la llevaron.

En cuanto a Sabo, la furia rebosaba completamente hirviente al haber visto las injusticias del mundo. Sabía que isla Dawn estaba en problemas y escuchar que los altos mandos de la Marina habían obligado a Garp a cometer la atrocidad de llevar personalmente a Luffy hacía su ejecución, se lo había recordado. En esos momentos, Sabo no estaba dispuesto a perdonar la vida de alguien que llevará con orgullo ese maldito signo en sus uniformes.

"Eres fuerte, pero no esperaba menos del jefe de personal de los revolucionarios".

Ace tardó en reaccionar al escuchar a Magellan. Él ni siquiera se había dado la tarea de averiguar qué posición tenía su hermano en los revolucionarios o que tan fuerte era, pero al juzgar las heridas de Magellan y el aura asesina de Sabo, supo que no había hecho algo que valiera la pena como hermano.

Repentinamente recordó todo lo que había hecho con Luffy y más culpa creciendo más y más...

"¡No es momento de que sientas odio por ti mismo, Ace!"

Ace miró a Sabo completamente aterrado. Pudo verlo mirar con determinación al alcaide de la prisión y con su pipa lista para seguir arremetiendo a Magellan. Aun así, había algo en la voz de Sabo, que le dijo que escuchara y prestara completa atención a lo que iba a decirle, casi como si en verdad necesitará escuchar esas palabras...

"No eres el único que le falló a Luffy..." Pudo ver a Ace tratando de hablar, seguramente para decir alguna tontería referente a él mismo. "Yo también le falle. Decidí tomar la forma más fácil de huir y rompí la promesa que hicimos. Debí ir a buscarlos y huir con ustedes para que los tres estuviéramos juntos, pero no lo hice y pagué las consecuencias... No, ustedes las pagaron conmigo, creyeron que había muerto y te dí una labor que los dos debíamos tener... Yo también le fallé a Luffy..."

Ace admitió que de alguna manera se sintió bien no estar solo en ese tema, pero también sabía que había sido su culpa haber pasado la relación de hermandad a otro nivel. Ese no había sido Sabo y sentía que Sabo jamás lo hubiera hecho, así que la culpa de que Luffy hubiera terminado herida, embarazada y prisionera era completamente de él.

"Pero..."

"¡Ya basta, Ace!" Gritó Sabo, mientras esquivaba un ataque del alcaide. "Ya he dicho lo que pienso y en un momento que no es el indicado. Así que deja de sentir odio hacia ti mismo y concéntrate de pelear con todo, para que salgamos lo más rápido posible de esta horrible prisión y salvar a Luffy de esa maldita ejecución".

Ace se quedó en blanco nuevamente, pero con las últimas palabras de su hermano, repentinamente esa chispa llena de determinación, comenzó a emanar nuevamente. Él tenía que dejar de lado la autocompasión, para salir de Impel Down y llegar a tiempo a Marineford...

"¡Puño de fuego!"

Y aprovechando que Magellan estaba lo suficientemente ocupado para no morir a manos de Sabo, Ace dio un golpe certero que mandó al alcaide completamente lejos de donde se encontraban...

"Juro que me preocupé por un momento y ya hasta podía verme cargando tu trasero, para sacarnos a ambos de este lugar".

Ace sonrió apenas. "Si no fuera por lo que dijiste, seguramente esa posibilidad sería una realidad", respondió apenas. "Te agradezco tus palabras".

Sabo asintió con una calmada sonrisa. "No hay de qué. Después de todo, somos hermanos".

Y Ace no pudo estar más de acuerdo con eso. Aún había esperanza y si Luffy ya estaba en Marineford, al menos su capitán y sus otros hermanos, harían lo imposible por salvarla lo antes posible...

~..~

Ivankov ya tenía un buen plan de escape, sus fieles seguidores incluso estaban poniendo todo de sí, para que el plan resultará ser todo un éxito y también estaba el grupo de Buggy que ya había causado demasiado desastre en los primeros tres niveles. Eso sin contar que entre su equipo tenían gente fuerte y que daban cierto miedo entre los guardias.

"¿Qué clase de destrucción están causando esos dos?"

Ivankov sabía que Sabo podía llegar a ser demasiado destructivo durante las misiones y eso sería grandioso si tan solo no estuvieran a un nivel de llegar al nivel cuatro y evitar ser aplastados por los enormes escombros que la pelea en el nivel superior estaba tirando.

"Dragon-boy creó un verdadero monstruo".

"Pero al menos están dejando fuera del camino al peor de todos en esta prisión" mencionó Jinbe, mientras quitaba del camino a uno de esos monstruos que cuidaban la prisión. "Y seguramente Ace no se queda atrás, el después de todo, puede causar tanto desastre a su paso".

"Si lo que Dragon-boy me contó antes de tomar la decisión de escapar, entonces el alcaide Magellan no será un problema verdadero".

Jimbe se sorprendió al escuchar el nivel de confianza que el okama le tenía a ese chico. "¿Es tan fuerte ese chico?"

Crocodile se deshizo rápidamente de la multitud que tenían enfrente y les estorbaban el camino de las escaleras. "Ese maldito revolucionario me quitó mi poder y prestigio él solo y en tan solo unas breves horas. Sus compañeros solamente verificaron el estado de las personas, mientras él se hacía cargo de dejar a mis hombres y a mí, a merced de la Marina", Crocodile no perdonaría a ese mocoso revolucionario por todo lo que le había quitado. Aun así, no podía hacer nada al respecto, debido a que Ivankov lo tenía vigilado.

"¿Tan fuerte es?" Preguntó Jinbe completamente sorprendido.

Ivankov sonrió orgulloso. "Sabo-boy es el segundo al mando de los revolucionarios, podría decirse que es el hijo de Dragon-boy o que incluso, el chico que Dragon-boy hubiera querido como pareja de su hija, pero esa cabeza hueca de Puño de fuego tuvo que embarazar a Lucy-girl".

Jimbe soltó un largo suspiró al escuchar nuevamente lo que Ace había hecho. Pobre amigo suyo, se notaba que entre los revolucionarios no era alguien que quisieran tolerar y francamente, hasta el mismo pensaba reprocharle cuando estuvieran a salvo.

No tuvo la oportunidad de responderle al okama, cuando por fin lograron llegar al nivel cuatro. Jinbe sabía cuán destructivo podría llegar a ser Ace y por lo que había escuchado sobre aquel joven revolucionario, también había podido imaginar, pero era obvio ahora que sí separados eran un problema, juntos eran un riesgo a temer.

"¡Ace!"

Ambos hermanos miraron completamente sorprendidos a la multitud de prisioneros, pero Ace se sorprendió y al mismo tiempo, se preocupó de ver a su amigo Jinbe entre esa multitud.

Lo bueno del asunto, es que Magellan no sería un problema por un rato y si lo que habían escuchado de los niveles superiores era verdad, probablemente tenían a su favor la situación.

"Diría que me alegro de verte, pero no es el mejor momento y tampoco el lugar adecuado, Jinbe", mencionó Ace con una cansada sonrisa.

"Debemos apresurarnos y salir. Se llevaron a Luffy directo a Marineford", agregó Sabo con preocupación.

"Por lo menos se dieron cuenta de ese hecho".

Tanto Ace como Sabo miraron completamente avergonzados a Inazuma, quien simplemente bebía pacíficamente de la copa que llevaba a todos lados. Ahora que habían derrotado al mayor problema de Impel Down y que no tenían nada de aire en sus cabezas, ambos se daban cuenta de lo idiotas que habían sido por actuar tan impulsivamente.

"¡Dejemos los reproches para después, ahora debemos salir!"

Y como si fuera el momento oportuno, Buggy había llegado con su séquito de fans y el señor tres. Por supuesto, siendo perseguidos por varios guardias y bestias...

"Podemos aprovechar el barco en el que llegamos, y allí está el Striker", Ace rápidamente comenzó a quitar de su camino a esos molestos guardias que solamente estorbaban en su camino.

"Y hablando del barco, al parecer, los marines babosos que nos creyeron parte de su equipo, han comenzado a tomar parte en la pelea", mencionó Sabo con aburrimiento al ver a los marines llegar al nivel cuatro.

"Nosotros también debemos tomar parte en la pelea y salir cuanto antes" Jinbe decidió unirse a la pelea para apresurar las cosas.

"No puedo creer lo que veo... El capitán Buggy logró hacer que el comandante de la segunda división de la tripulación de Barbablanca, los revolucionarios e incluso Jinbe el príncipe del mar pelearan por su causa".

Y aunque la mayoría quiso argumentar algo ante el último comentario, sabían que no había tiempo para hacer que unos idiotas entren en razón...

Así que lo más sensato en esos momentos, fue trabajar en equipo y comenzar a correr para lograr subir al nivel principal y conseguir el barco que lograría sacarlos a salvo de esa maldita prisión.

El trabajo no fue del todo sencillo con todos los guardias, bestias y marines que les dificultaban el camino. También se habían unido los carceleros jefes y los jefes de los guardias, junto con el molesto vicealcaide en la única apertura que les permitía salir...

"Aun si salimos, está el problema de la puerta. Esta solo se abre y cierra desde adentro".

Casi se habían olvidado de ese importantísimo detalle y solamente por la mención demasiado oportuna de Ivankov, fue que hasta Sabo se dio cuenta de que en verdad había estado completamente fuera de sí para no haber recordado aquella verdad.

"Yo me quedaré... Ace tu ve y busca a Luffy".

Ace no respondió a la tontería que su hermano le había dicho, en su lugar comenzó a golpear a todos los que estuvieran en su camino. Por supuesto, el resto del numeroso grupo comenzó a dar apoyo, pero eso no era lo que le preocupaba a Sabo en esos momentos.

"¡No voy a huir!"

Sabo lo miro con enojo. "¡No seas estúpido Ace! Ella no sabe de mí y tú tienes la oportunidad de enmendar las tonterías que cometiste y me dices esa molesta frase que tanto odio".

"Y por esa misma razón es que debes irte y buscarla. Sabo, ella te extraña y sé qué harás lo imposible por rescatarla", respondió Ace igual de enojado.

"Pensaremos después sobre ese asunto..."

Ace y Sabo no pudieron hacer nada al respecto cuando fueron cargados por Jinbe, quien sin mediar palabras comenzó a correr con ambos hermanos ahora peleando con él.

"Ace-boy, mencionaste tu bote y si lo que los periódicos dicen es cierto, entonces podrías lograr salir justo antes de que la puerta se cierre".

Sabo recordó aquel detalle. "Fue lo suficientemente rápido para que pudiéramos encontrar marines incompetentes. ¿Crees poder salir a tiempo?" Le preguntó con preocupación a su necio hermano.

Ace negó. "No sabría que responderte..."

Sabo sabía bien que no tenía caso seguir discutiendo con el necio de Ace. Tal vez lo había olvidado, pero en lo que podía ver desde que recuperó la memoria, es que algunas cosas no habían cambiado y en este caso, la necedad de su hermano, nunca lo abandonaría.

Así que miró a Ivankov e Inazuma con el ceño fruncido y la mirada llena de decisión.

"Váyanse ustedes" dijo. "Yo me haré cargo de que el testarudo de mi hermano y yo, logremos salir de esta horrible prisión".

Para los que conocían a Sabo, era completamente difícil confiar en que aquel descabellado plan pudiera salir tal cual lo tenían previsto, pero por lo mismo, que lo conocían y sabían perfectamente que, si él decía que cumpliría una misión, esa misión no fallaría...

"Más te vale lograr salir Sabo-boy o de lo contrario, yo mismo te castigaré..."

Sabo asintió con una sonrisa nerviosa al tener una idea de ese castigo. "Definitivamente hay algo más que los 'puños de amor' del viejo que pueden asustarme".

Ace quería preguntar por ese otro miedo, porque definitivamente no había algo que pudiera dar más miedo que esos malditos 'puños de amor'. Aun así, no dijo nada al respecto.

Buggy por su parte, no estaba del todo de acuerdo con ese plan, en especial si ese plan implicaba dejar al hijo de su difunto capitán. "No podemos irnos sin el hijo de mi capitán. ¡Yo me niego a dejarlo!" Gritó para dejar en claro su desacuerdo con ese absurdo plan.

Ace le dio una mirada llena de dureza y un brillo determinado. "Si en verdad quieres ayudarme, entonces sube a ese maldito barco y espérame. Si no llegó a salir, entonces ayuda en el rescate de Luffy".

Buggy no quería hacerlo, pero tampoco deseaba dejar a la deriva al nieto de su difunto capitán. Optó por confiar en Ace y esa mirada determinada que compartía con Roger.

Así que, sin mirar hacia atrás, comenzó a correr directamente al barco...

"Como era de esperarse del capitán Buggy... Quiere quedarse, pero es tan honorable que respeta la decisión del hijo de su difunto capitán" corearon los prisioneros con lágrimas en los ojos.

"Sí que son idiotas", murmuró en respuesta el resto.

El numeroso grupo de escapistas decidió dejar de lado las despedidas que se habían alargado demasiado y comenzar a subir al barco que Ace y Sabo habían señalado. Claro está, dejaron el Striker listo para el escape apresurado que ambos hermanos harían...

Algunos estaban lo suficientemente preocupados al ver que Magellan ya se había recuperado, pero tal y como lo habían pedido los dos hermanos, pusieron a navegar el barco con Jinbe encargándose del timón.

"Hay que darles el tiempo suficiente... Esperar que estén lo suficientemente cerca de la puerta para cerrarla y destruir el controlador".

Ace estuvo de acuerdo con el plan. "¿Qué tal una apuesta?" Preguntó con ambos puños en llamas. "Apuesto a que puedo acabar con más guardias que tú..."

Sabo sonrió, mientras alistaba su pipa. "Ya quisieras hermano".

Una feroz batalla dio inicio. Y era lo suficientemente destructiva como para dejar los otros barcos completamente destruidos como para considerarlos inservibles.

Los que se encontraban en el barco huyendo, podían distinguir la batalla. En el caso de algunos, querían intervenir, pero no podían hacerlo, si con eso arriesgaban el plan.

Jinbe decidió poner un poco de su parte, cuando divisó cercana la entrada y llamó algunas ballenas para que ayudarán en el escape. Solo había una oportunidad y no podían darse el lujo de desperdiciarla.

"¡Apresúrense ustedes dos!"

Al escuchar el grito de Jinbe, Ace y Sabo se miraron. Ellos vieron que el barco había logrado salir...

"Sabo, sube al Striker".

Sabo por supuesto, iba a protestar, pero bien sabía que sin Ace no podría mover el bote y su hermano por muy necio que fuera, no lo dejaría en Impel Down. Así que rápidamente se acomodó en el bote y espero a ver lo que su hermano tenía planeado.

Un muro de fuego dejó a los guardias completamente alejados y cuando Ace vio que Magellan iba a atacar, él sonrió, mientras dejaba salir una potente ráfaga de haki del conquistador. Y fue lo suficientemente potente como para dejar inconscientes a los más débiles y mantener quietos a los que no cedían con facilidad a su voluntad.

"Lo siento, pero debemos llegar a una guerra".

Y rápidamente usó el controlador para que las puertas se cierren. Y solo cuando vio que así era, destruyó todas las maquinarias del lugar...

No había tiempo que perder, así que rápidamente echó a andar el Striker a toda velocidad...

Ahora no le importaba si se le gastan las energías. Él debía lograr llegar a tiempo a esa maldita puerta...

"¡No van a conseguirlo!" Gritó con histeria Buggy al ver que algunos de los guardias lanzaban proyectiles para que Ace no pudiera mantener el ritmo al esquivar los ataques.

"Si lo harán" Jinbe rápidamente llamó a las ballenas para que ayudarán a los hermanos a aumentar su velocidad.

"¡Sujetate fuerte Sabo!" Gritó Ace al divisar a dos ballenas detrás de ellos, entendiendo el plan de Jinbe.

"No tienes que decírmelo a mí... Yo sí puedo nadar".

Y tal como ambos hermanos previeron, las ballenas saltaron al mismo tiempo, logrando hacer una gran ola que logró darles más impulso. Impulso que por supuesto, Ace aprovechó para aumentar las llamas del Striker para salir justo a tiempo de aquel lugar...

Claro que hubo un sacrificio y ese fue el final del Striker de Ace, que acabó por partirse con el golpe de ola de las ballenas y la ola de la puerta recién cerrada...

Ace estaba hundiéndose y juraba que había escuchado una voz despidiéndose, pero aquello era completamente imposible si estaba en el agua...

"Supongo que esto de alguna manera es un karma por todas las veces que te burlaba de Luffy por ser un ancla", mencionó Sabo completamente agitado. Le tomó un poco, pero logró sacar a Ace de una muerte tan patética si contaba que acababa de escapar de la prisión de máxima seguridad de la Marina.

"¿El Striker está...?"

Sabo asintió con una sonrisa triste. "Puedo ver que ese bote era especial para ti, así que lo siento hermano..."

Ace asintió melancólico. "Construí el Striker con ayuda de Deuce, el hombre que se volvió mi primer oficial durante el año que fui capitán de mi propia tripulación. Siempre me sacó de apuros, incluso desde el momento en el que lo construí, así que si era demasiado especial y juro que escuché una voz despidiéndose y agradeciendo... Había escuchado leyendas como esas, pero no que fueran conectadas a los botes, más bien a los barcos que estaban en sus últimas ".

" Entonces significa que en verdad te apreciaba ese bote", mencionó Sabo con calma. "Como diría Luffy seguramente... El Striker también era un nakama y uno muy valioso".

Y Ace sonrió con esas palabras, porque precisamente, él también creía que Luffy diría algo así, después de todo, sabía que ella había estado preocupada por el barco que tenía en el East Blue...

"Por ahora, será mejor que se mantengan alejados de las prisiones impenetrables".

Cuando menos se dieron cuenta, ambos hermanos ya estaban en el barco que Jinbe personalmente dirigía hacia Marineford...

Ace y Sabo tomarían un breve descanso para llegar a la verdadera batalla. Lo sucedido en Impel Down, solamente había sido un complicado calentamiento...

Luffy solamente debía aguantar un poco más...

~..~

Sengoku estaba completamente horrorizado y al mismo tiempo, furioso con la llamada que le habían hecho tan solo unos minutos antes.

Puño de fuego Ace y el segundo al mando del ejército revolucionario habían entrado a Impel Down. Lo peor, que habían hecho, fue causar una fuga masiva de numerosos prisioneros dirigiéndose justo a su posición actual...

En esos momentos maldecía el haber pensado que ese mocoso no se atrevería a ir por la chica.

Pero ahora, lo mejor para conservar su posición era no decir nada con respecto a lo que sabía acerca del verdadero linaje de Portgas D. Ace.

En lo que a Sengoku y el gobierno mundial respecta, era que ese chico había ido a por orden de Barbablanca. Era lo más conveniente revelar que la chica había estado con los piratas de Barbablanca que revelar que había ayudado a ocultar a los hijos de criminales mundialmente buscados...

Al menos, los Shichibukais y los cuatro almirantes principales se encontraban en sus puestos. Lo que, de alguna manera, agradecía, pero ahora le preocupaba lo que esa guerra podría traer consigo...

Pero lo mejor que podía hacer ahora, era llegar y anunciar a Garp sobre lo que estaba a punto de iniciar.

"¡Se ha adelantado la ejecución!"

Garp había escuchado de aquella información gracias a Bogard y aunque no era inesperada, sí que lo golpeaba demasiado. El solo hecho de ver a esos dos guardias llevarse a su nieta a ese maldito patíbulo, se sentía asqueado por completo.

Así que aun con las ganas de golpear a todos esos imbéciles llenos de hipocresía, tenía que soportar por toda la gente que estaba en peligro en isla Dawn.

Tuvo que soportar ver como su nieta caminaba con lentitud hacía ese maldito patíbulo y ver como la obligaban a sentarse y la esposaban al suelo. Al menos podía sentirse agradecido de que tuvieran algo de piedad con ella, considerando su estado...

Si no fuera porque sabía que eso era una ejecución, Garp juraba que parecía que entregaba a su nieta en matrimonio, lo cual, también lo enojaba, considerando el hecho de que el malnacido que había perdido ese derecho y además la había dejado embarazada y a merced del peligro en la que ahora estaba...

"El día de hoy, se dará fin a una era llena de problemas" Sengoku se situó justo al lado de la chica del sombrero de paja para comenzar a hablar ante los marines y la audiencia mundial a través de los Den Den Mushis. "Aquellos que van en contra del gobierno mundial deberán pagar y el día de hoy, la descendencia de Dragon el revolucionario será una lección para aquellos que van en contra del gobierno mundial".

Luffy simplemente miró hacía el frente, sin siquiera parecer perturbada. Amaba el aire marino en su rostro, siempre ha amado la sensación del aire salado acariciarla.

Sintió un pequeño golpe provenir de su vientre y aunque tenía unas infinitas ganas de acariciar a su bebé, las esposas le impedían la acción. Se sintió frustrada por eso, así que solamente frunció el ceño y trató de mantenerse en calma para calmar a su bebé...

"No puedo creer que esté tomando parte en esta maldita guerra..." Boa Hancock estaba renuente a participar. En especial con los rumores que habían circulado y que quedaron confirmados apenas llegó a Marineford, pero sabía que por su isla debía participar, por más disgusto que sintiera.

"Je, yo podría haber encontrado a esa chica y disfrutar los rostros de esos malditos cuando vieran mi descendencia", El actual rey de Dressrosa, Doflamingo tenía rencor hacía los malditos Dragones Celestiales. Hubiera aprovechado tener la descendencia con una vulgar mujer 'D' y de paso, formar un digno heredero para su eterno reinado.

"Mientras la Marina me de lo que quiero, a mí no me molesta en lo absoluto tener que cooperar", Gecko Moria miró con interés a ese imperturbable ojo de halcón. "No pareces del todo cómodo en este lugar..."

"Eso es porque tengo honor" Mihawk esperaba en serio que ese tonto pelirrojo logrará llegar a tiempo o tendría que escuchar sus molestos llantos de arrepentimiento.

Lo que tenía completamente confundidos a los cuatro Shichibukais presentes era no ver a Bartholomew Kuma por ningún lado, aunque sabían bien que Crocodile había perdido el puesto y Jinbe había sido castigado al ser el único con valor suficiente para negarse a ayudar en aquella guerra...

Por desgracia, no podían preguntar al respecto y vaya que quien sabía de ello era la misma Boa Hancock, quien en un principio se había negado a participar, siendo amenazada con la pérdida de su puesto y la erradicación de su isla y gente.

"Al menos espero que este espectáculo valga la pena. Quiero que el maldito de Dragon pague por todos los esclavos que nos hizo perder".

Y la razón verdadera por la que los que aún conservaban una pizca de honor, entendían la negación de Jinbe. La Marina y el gobierno mundial se sentían con el ego lo suficientemente en alto como para dejar que esa familia de molestos, Dragones Celestiales estuvieran en primera fila y bajo la protección especial de algunos miembros del CP0 y los almirantes, viendo la ejecución de la descendencia de Dragon el revolucionario.

Particularmente era complicado para Mihawk y Boa Hancock por distintas razones. Aunque en casos especiales o, mejor dicho: El rencor, Doflamingo se aguantaba demasiado para no hacer algo a esas escorias que tanto aborrecía por lo que le habían arrebatado y por como lo habían tratado...

"Oh, querido padre, al menos nos dará el entretenimiento suficiente el solo hecho de castigarla por todo lo que su molesto padre nos ha quitado..." Santa Shalria sintió emoción al pensar en su nueva adquisición.

"Por supuesto que sí cariño" San Rosward lanzó una risa divertida, por la emoción de su adorada hija.

Luffy miró con desdén a esos extraños tipos, en especial al tipejo que había tenido la osadía de acercarse a ella como si estuviera divirtiéndose de lo que le estaba pasando. Ella sentía en ese hombre lo mismo que sentía del traidor de Teach...

"Niña, parece ser que se hizo justicia por lo que hiciste hace unos meses..." San Charlos definitivamente se divertiría torturando a esa molesta chica. "Hace unos meses, casualmente pase a una subasta en donde se rumoreaba la llegada de una sirena. Sirena que tu ayudaste a liberar..."

Garp estuvo a punto de intervenir, pero la determinación en la mirada de su nieta jamás titubeó. Y casi como si Lucy hubiera hecho una clase de predicción, del mar emergió un gran y conocido barco...

Y aunque se lo esperaba, Garp no podía creer que hubieran sido tan oportunos para elegir justo ese momento...

"Sengoku... Si quieres guerra, la tendrás, pero no solamente pelearán contra los revolucionarios..."

Luffy había escuchado de Jinbe e incluso sabía que Ace había ido a buscarla a Impel Down, pero, aun así, no podía creer que la tripulación de Barbablanca hubiera llegado a salvarla...

"Hola, capitán Pops..."

Y por alguna razón, ella había comenzado a sonreír de oreja a oreja. Incluso podía sentir que su bebé confiaba en que las cosas estarían bien de alguna manera...

Solo esperaba que fuera así...

Continuará...

~°ɞ°~~°ɞ°~

NOTAS: Y eso ha sido todo por este capítulo. Si les gustó, les agradecería que me lo hicieran saber con sus lindos comentarios :3

Al menos ese par de babosos ya logró salir de Impel Down, pero mientras tanto, la guerra ya dio inicio y de paso, Luffy tiene que aguantar a ese odioso Dragon Celestial, pero no desesperen, que pronto habrá justicia de la buena >:D

Próximo capítulo: "La Inocencia Viste De Desastre", donde Luffy no puede soportar más tiempo, sin hacer algo...

En fin, nos leemos pronto...

Chau chau (^3-)/

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top