Ya en el mundo mágico Iris se emocionó mucho de volver, sentía una gran alegría, pero a la ves temor de enfrentar a su familia pero tendría que hacerlo para salvar al mundo mágico dé la destrucción.

Iris: -¿En donde estamos?

Garfio: -Nunca Jamás no es, debemos estar en unos de los bosques de aquí.

Rink: -El portal no siempre te lleva a donde quieres.

Iris: -Esta bien caminaremos haber que encontramos.

Garfio: -Esta bien.

Rink: -Si vamos.

Iris, Garfio y Rink comenzaron a caminar por el bosque, luego de muchos minutos caminando Iris sintió que alguien se hacercaba lentamente y se puso alerta.

Iris: -Esperen.

Garfio: -¿Qué sucede?

Iris: -Siento que alguien se hacerca sigilosamente.

Es de pronto que Iría empuja a Garfio y detiene una flecha que era para Garfio, es entonces que una muchacha de cabello rojo aparece y les apunta con su arco.

Iris: -Tranquila no somos ladrones.

Muchacha de cabello rojo: -Tu no por tu gran vestido pero el si, lo conozco me robó.

Garfio: -Mérida dije que te pagaría en cuanto pudiera.

Mérida: -Cierra la boca maldito pirata ahora mismo me las pagarás.

Es en ese momento que Mérida tira una flecha hacia Garfio.

Pero Iris velozmente logra atraparla.

Mérida: -¿Qué eres?

Iris: -Soy la reina blanca, niña lo que el te deba te lo daré pero no intentes matarlo por favor, no quiero dañarte.

Mérida: -¿Dañarme tu? No me hagas reír, soy la peleadora más experta que haz visto ven te lo mostare con gusto.

Mérida se colocó en posición de pelea e Iris sólo la observó.

Mérida: -Vamos o ¿acaso tienes miedo?

Iris sonrio e hizo que su gran vestido se transformará en ropa de pirata con la que se sentía más cómoda.

Iris: -Lista ahora si, conste que te dije que no quería dañarte.

Mérida lanzó el primer golpe pero Iris logró esquivarlo con éxito, luego una epica pelea cuerpo a cuerpo se desató entre ambas mujeres, Iris sabía que le haría daño si se descontrolaba su magia podría salir en cualquier momento y dañar a la muchacha, así que decidió noquearla así son más.

Mérida cayó al suelo inconciente, e Iris arrepentida la despertó con su magia haciendo que la joven de asustara un poco.

Iris: -Perdóname Mérida mi intención no es dañar a nadie.

Mérida sólo la observó por unos minutos y luego hablo.

Mérida: -Pensamos que nunca llegarías, al fin estas aquí.

Iris: -¿Me conoces?

Mérida: -No, pero oímos de ti, te he esperado todo este tiempo, Maléfica hizo que los pueblos vikingos lucharán entre si y que un Rey al fin gobernará todo, me expulsaron junto con mi hermano que fue el único que sobrevivió a la matanza.

Iris: -¿Quien es el Rey?

Mérida: -El Rey Arturo.

Iris: -¿El Rey Arturo? Pero crei que era de los buenos.

Mérida: -Nunca lo fue y nunca lo será, el siempre quiso gobernar los reinos vikingos incluyendo el de mi padre y lo ha conseguido.

Iris: -No, te ayudare a recuperar tu reino.

Mérida abrazó a Iris y ella hizo lo mismo, luego se separaron e Iris hablo nuevamente.

Iris: -El camino hacia tu reino ¿es muy lejos?

Mérida: -Si tendremos que llegar por mar.

Iris: -Será impocible no tenemos barco.

Mérida: -Conseguiremos uno, conozco a alguien que posee uno pero no se confíen es un ladrón como el.

Garfio: -Vamos preciosa dije que te pagaría cuando pudiese.

Mérida: -Si no quiere que te de una lección no vuelvas a llamarme preciosa.

Garfio: -Esta bien, Iris dejame que yo sea el capitán.

Iris lo miro con enojo y asintió, luego sólo se volteó y siguió su camino, Garfio quedó confundido por la reacción de Iris pero cuando Rink tocó su hombre y negó con la cabeza, el comprendió por que Iris reaccionó así.

Luego de dos horas caminando, al fin habían llegado al puerto, situado en la playa, Mérida guio a Iris hacia una taberna donde encontraría al sujeto que poseeia un barco, Garfio entró con Iris a la taberna, mientras Rink y Mérida esperaban afuera.

Garfio: -Hermosa no te enfades sólo lo dije para molestarla.

Iris: -Sólo olvidalo Garfio, haz de cuenta que no sucedió nada.

Llegaron a donde el sujeto y al verlo a Garfio el se levantó con brusquedad de la mesa y sacó su arco apuntando hacia Garfio.

Iris: -Garfio ¿a cuantas personas les debes dinero?

Garfio: -Al el no le debo nada.

Sujeto: -Debería asesinarte, maldito ven dame un abrazo hermano.

Garfio dudo un poco pero abrazo al sujeto, por otro lado Iris quedó muy confundida y sorprendida a la ves.

Iris: -¿Alguien aquí puede decime que esta sucediendo?

Garfio y el sujeto se separaron y respondieron a la pregunta que hizo.

Garfio: -Iris el es... Robin Hood mi hermano.

Iris: -¿Tu eres Robin Hood?

Robin Hood: -Si así es.