El bar se encontraba lleno de ninjas en descanso como siempre, todos conversando y riendo de las anécdotas sucedidas en las misiones, para un ninja  regresar de una misión era un día más de vida, ajeno a todo el ambiente se encontraba Naruto bebiendo en el mismo lugar que utilizaba permanentemente Anko, frente a el un platillo con sake y una botella vacía, de repente un grupo de hombres ingresaron al bar muy animados, el encargado del bar miró en dirección de Naruto y después al grupo que se aceró a la barra.

-"Quiero el mejor sake que tengas"- pidió uno de los hombres, Naruto bebió lo que quedaba de su bebida y se acercó al grupo tomando asiento a una distancia prudente.

-"Así que al final fue verdad?"- Naruto prestó atención a lo que conversaban.

-"hasta la duda ofende amigo, te lo digo, era virgen y fue una de las mejores noches que he tenido en mucho tiempo"- comentó uno de los hombres.

-"Anko Mitarashi la puta serpiente, ahora le queda muy bien"- eso fue todo para Naruto que se levantó y comenzó a caminar balanceándose como si estuviera ebrio, cuando paso junto al grupo tropezó y empujó a los hombres que le miraron de mala manera.

-"lo siento señoritas"- murmuró el pelirrubio ignorando la mirada molesta de los hombres.

-"Ey imbécil porqué no te fijas por donde caminas?"- gritó uno de los hombres, Naruto les miró como si tratara de enfocarlos pero le restó la importancia y siguió su camino.

-"Maricas"- murmuró el pelirrubio caminando tratando de mantener el equilibrio.

-"Qué dijiste?"- preguntó el que reconoció haber abusado de la pelimorada.

-"dije que son maricas puto, acaso te gusta que te lo digan?"- preguntó Naruto con cara de molesto.

-"Maldito"- se acercó a Naruto para tomarlo de su ropa ignorando el uniforme que llevaba este.

-"Si van a pelear, se marchan de aquí"- gritó el dueño del bar, Naruto estaba por hablar pero comenzó a ser llevado por quien quería agredirlo y escoltado por los compañeros de este que también le miraban molestos.

-"Nos vemos viejo"- gritó Naruto despidiéndose con una gran sonrisa en el rostro, el dueño del bar le quedó mirando y asintió.

-"púdranse malditos"- pensó el dueño del bar.

El grupo junto a Naruto se dirigieron al callejón a un costado del bar, cuando no estuvieron a la vista de la gente, quien tiraba de naruto lo empujó para que este cayera pero no salió como quedaba, se supone que el pelirrubio estaba ebrio pero Naruto recuperó el equilibrio rápidamente y la sonrisa de su rostro desapareció.

-"Ustedes conocen a Anko Mitarashi?"- preguntó Naruto de forma clara con una mirada fría, llamando la atención de los hombres.

-"y que si la conocemos?"- respondió  uno de los hombres sacando un kunai.

-"Respondan"- exigió Naruto caminando cerca de unas bolsas de basura.

-"Acaso esa perra es tu amiga o tu novia? por que si es así, jajaja tienes buen gusto para las putas"- respondió quien reconoció haber abusado de la pelimorada.

-"Ya veo"-  respondió Naruto recogiendo algo, cuando los hombres miraron con más atención notaron que se trataba de una espada corta -"En ese caso me temo que debo matarlos"- comentó Naruto girándose para mirar a los hombre que le miraban aún mas molestos pero todos notaron el cambio en la mirada del pelirrubio, si antes era una mirada seria, ahora sus ojos no expresaban nada, el sonido de algo aterrizando detrás de ellos los hizo girarse para encontrarse con clones del pelirrubio, todos armados con espadas cortas.

-"no sé que es lo que tienes en mente niño pero te advierto que nosotros somos amigos de personas poderosas que te harás desaparecer rápidamente"- advirtió uno de los hombres.

-"y quienes son ellos? me podrías dar sus nombres?"- preguntó Naruto acercándose a ellos al igual que sus clones.

-"Ayud"- uno de los hombres estaba por gritar pero fue silenciado rápidamente, los demás buscaron al responsable pero notaron que en el cielo habían más clones aún.

-"Shhhhhh no queremos que hayan visitas inesperadas verdad"- comentó Naruto -"Ahora quisiera que me cuenten que fue lo que le hicieron a Anko Mitarashi"- pidió el pelirrubio, los hombres al verse rodeados fueron perdiendo el poco valor que les quedaba.

Al otro día.

-"Hiruzen"- fue el grito que se escuchó en la  oficina del Hokage, en su interior se encontraba este escuchando los reclamos de sus consejeros sobre todo de Homura, al parecer alguien la noche anterior le dio muerte a su sobrino y a otros hombres a un costado de un bar, era una noticia terrible sobre todo si el asesino se movía al interior de la aldea o era un ninja infiltrado, pero no es como si el conociera al responsable.

-"Lo siento Homura pero no había nada que nos pudiera indicar quien o quienes fueron los responsables de la muerte de aquellos hombres"- respondió Hiruzen pero esto no convenció al consejero.

-"Hiruzen, debes entender lo peligroso de esto ya que si un ninja enemigo se infiltró no podemos tomarlo a la ligera"- comentó Koharu notando como su compañero estaba perdiendo el control de sus emociones.

-"Si ese fuese el caso, creo que deberé aumentar el número de ninjas que están investigando lo sucedido, pero por ahora debo seguir trabajando así que"- pero todo fue interrumpido por el toque en la puerta, seguidamente esta fue abierta por Naruto que ingresó a la oficina sin saludar a nadie.

-"Hokage, hoy saldré nuevamente con Mito de la aldea"- comentó como si nada.

-"Pero que es esta insolencia"- se quejó Homura ya bastante molesto.

-"ya veo, Homura, Koharu, debo conversar con Naruto así que retírense"- pidió Hiruzen mirando al pelirrubio que ignoraba a los consejeros.

-"Pero Hiruzen"- casi gritó el consejero siendo tomado del brazo por Koharu, el anciano miró en dirección de la mujer pero esta solo negó, Homura se soltó y se retiró sin despedirse, lo mismo sucedió con la mujer dejando la oficina en silencio, Hiruzen suspiró y se recostó en su sillón, tomó su pipa y le agregó algo de tabaco.

-"Así que el tema de Anko quedó solucionado?"- preguntó el sandaime Hokage encendiendo su pipa, miró el rostro de Naruto para buscar alguna señal que le indicara que fue el quien mató a aquellos hombres.

-"No sé de que habla Hiruzen san, anoche me quedé en casa de Mito cuidando que nada le sucediera, por extraño que parezca sentí muchas presencias rodeando su casa"- Hiruzen inhaló profundo y exhaló una gran cantidad de humo, al parecer no sería tan fácil poder sacar información del pelirrubio.

-"ya veo, de cualquier forma no tenemos pistas de un asesino que anda suelto al interior de la aldea; en cuanto a lo relacionado con Mito, puedes llevarla pero debes procurar que nada le suceda, yo me encargaré de que nadie ronde su casa por las noches"- Naruto asintió y se giró para retirarse -"Naruto quiero pedirte otro favor"- habló Hiruzen deteniendo el avance del pelirrubio, Naruto suspiró y miró al anciano.

Dos años después.

-"No se quienes sean pero tampoco me importa, no son mis alumnos hasta que superen la prueba que tengo planificada para evaluarlos, pueden salir lastimados o morir pero bueno son supuestos ninjas así que vamos"- fue la presentación del jounin sensei del equipo siete conformado por Sasuke Uchiha el único sobreviviente del clan Uchiha y novato del año de la última generación de graduados, la siguiente es Sakura Haruno quien fue el segundo mejor promedio de la academia y una fan a toda prueba del Uchiha, ambos miraban a su sensei como si le hubiera crecido una segunda cabeza por su poco disimulada intención de intimidarlos ya que ninguno creía en las palabras sobre matarlos, en cuanto a la tercera miembro del equipo, Mito solo sonreía a la actitud de su sensei, el era así y no cambiaría por nada del mundo, quizás se encontraría con otra de sus personas favoritas, la autodenominada novia y prometida de su sensei, en cuanto a Naruto solo caminaba al frente de sus alumnos con las manos en los bolsillos recordando lo sucedido en estos dos años, la verdad no había sucedido mucho con excepción de convertirse en victima de los constantes acosos de una pelimorada amante de los dangos y las serpientes, suspiró de solo recordar lo que sucedió después que Anko salió del hospital días después de la muerte de sus violadores.

flash back dos años antes.

Naruto se encontraba entrenando con Mito en el valle del fin, ambos se encontraban meditando cuando debajo del pelirrubio desde el suelo emergió una serpiente que trató de enrollarlo pero no pudo cumplir su propósito ya que Naruto la tomó del cuello y la decapitó.

-"Oye, eso no es justo"- de unos matorrales apareció Anko molesta o eso parecía.

-"Hola Anko"- saludó Naruto como si nada, en cuanto a Mito se puso de pie y se ubicó al lado de su sensei observando con cuidado a la nueva visitante, cosa que notó Anko.

-"hola pequeña gaki, tranquila yo soy Anko sama"- se presentó Anko con una sonrisa confiada.

-"Que quieres Anko?"- preguntó Naruto seriamente.

-"quería agradecerte por lo que hiciste"- comentó Anko de manera más tranquila.

-"No sé de lo que hablas pero te pediré que te marches ya que estamos ocupados"- pidió Naruto mirando a su alumna impuesta.

-"ya veo"- murmuró algo decaída la pelimorada, de alguna forma no podía hablar con el pelirrubio como lo haría con las demás personas.

-"Espera"- habló Naruto deteniendo a la pelimorada, Anko miró al pelirrubio -"Quiero que te enfrentes a Mito"- ordenó Naruto sin cambiar su expresión seria pero sorprendiendo a ambas féminas.

-"Qué?"-  preguntó Anko, en cuanto a Mito, simplemente asintió, si su sensei se lo pedía no tenía más opción que aceptar.

-"Eres débil"- tan directo como siempre Naruto habló sin tacto alguno, Anko bajó la mirada -"Pero creo que puedes mejorar"- comentó Naruto tomando distancia de ambas.

-"No"- murmuró Anko temblando en su lugar, Naruto le miró con una ceja levantada -"No soy débil"- habló Anko un poco más fuerte.

-"los hechos hablan por si solos"- fue todo lo que dijo Naruto pero debió bloquear un corte dirigido a su cuello por parte de Anko que le miraba molesta pero con los ojos húmedos -"no sabes controlarte, eres impulsiva, presa fácil hasta para el ninja más débil de todos, conocí a tus amigos, todos eran meros civiles con armas ninjas"- Anko dejó caer su kunai recordando partes de lo que sucedió ese día -"ayudame y yo te ayudaré"- propuso Naruto.

-"No sabes cuanto te extrañé, soñaba con volver a encontrarte pero "- Anko fue interrumpida por Naruto.

-"Yo tenía otras expectativas contigo, nada es como esperamos Anko, solo queda arreglar lo que haya que arreglar y enfrentar los que venga con lo que tengas"- a lo que terminó de hablar Naruto miró a la pelimorada que al parecer estaba más triste que antes, por lo que miró al cielo -"Si me ayudas te invito unos dangos"- Anko levantó la mirada y vió al pelirrubio.

-"una cita?"- preguntó sorprendida, en cuanto a Mito estaba en la misma situación pero sobre todo por que conociera a alguien más en la aldea además de Jiraiya sama, lo de la cita ya era algo de otro mundo y finalmente Naruto miró confundido a la pelimorada, no era ni cerca lo que tenía planeado, solo le compraría unos dangos como agradecimiento pero si con eso dejaba esa actitud deprimente, bien valía el precio.

-"si lo que sea"- terminó Naruto para ser abrazado por Anko que sonreía feliz por lo que significaba.

End flash back

El avance de Mito estaba de acuerdo a lo que tenía planificado logrando que la Uzumaki pudiera pelear sin problemas contra un chunin, pero bueno eso era historia para otro momento por ahora debía llevarle juguetes a Anko.