CAPITULO 23: PREPARACIONES Y LA CITA
Con las peleas por los ganadores se reunieron frente a la estatua gigante de las manos, el Hokage y los jounins estaban allí cuando se realizó la parte final. Todos obtendrían un número aleatorio para la próxima ronda de peleas.
"Muy bien, felicidades por pasar a la última etapa, ahora esta etapa se realizará en un mes, esto con el fin de que se preparen y estén en óptimas condiciones, además de que perfeccionen o creen sus Jutsus, también es para que los Feudales y de más personas lleguen sin problemas" explico El Hokage con calma. "Ahora, Anko, por favor.
Claro "Lord-Hokage" dijo Anko con respeto y con una caja en sus manos. "Muy bien gusanos, yo pasare con ustedes y tomaran un papel, solo uno – dijo empezando a caminar a los candidatos, mientras le regalaba una sonrisa de orgullo a Naruto que lo acariciaba una mejilla de forma muy cariñosa con su mano mientras él solo la recibía con una sonrisa de ternura.
Uno por uno, los genins subieron y tomaron una pelota verde con un número.
"Ahora de izquierda a derecha, me dirán el número que les toco de forma clara" Ordeno Ibiki con una pizarra en sus manos.
Temari 7, Naruto 1, Kankuro 5, Gaara 3, Sasuke 4, Shino 6, Neji 2, Dosu 8 y Shikamaru 9
Muy bien, Ibiki, por favor muestrales con quien peleara cada uno – dijo Hokage.
Los primeros partidos finales serían Naruto vs Neji, Gaara vs Sasuke, Kankuro vs Shino, finalmente Shikamaru vs Dosu y Temari como segundo combate el que gane el ultimo encuentro.
Después de que el Hokage los despidió, los equipos se estaban llenando del área. Se daría un camino seguro a los equipos para la salida más rápida del bosque, pero Kurenai tenía otras cosas que hacer en este momento. Hasta ahora tuvo que seguir a sus dos estudiantes para la ronda final. Había estado pensando en esto, cada estudiante necesitaría ser entrenado individualmente para ganar e incluso sobrevivir. Por otra parte, a Kurenai no le gustaba que ese tal Neji, había dejado a Hinata en un mal estado que casi la mata. En cualquier caso, no sería capaz de dividir su atención entre Naruto o Shino y aun así prepararlos.
"Vamos Kurenai piensa, no puedes entrenar a los dos al mismo tiempo" se decía ella misma en sus pensamientos. "Vamos... piensa, piensa..." Sus pensamientos fueron interrumpidos. Por alguien.
"Kurenai, ¿puedo hablar contigo?" Preguntó Anko mientras se acercaba a su amiga.
"Claro, ¿qué es?"
"Yo me encargare de Naruto por un mes", le dijo Anko. "Tengo un nuevo entrenamiento para él y necesitará aprenderlos. Además, no creo puedas entrenar a Naruto y ha Shino al mismo tiempo, así que te are ese favor, ¿Te parece bien?
Kurenai se sorprendió por esto y se sintió feliz de haberle quitado un problema. Naruto realmente necesitaría algo de entrenamiento para sobrevivir a una pelea con él Hyuga. Además, quien sería mejor encargase de Naruto que su propia madre.
"Gracias por el apoyo te lo devolveré algún día... y por cierto" dijo Kurenai mientras se acercaba a ella. "¿Que hay entre tú y kakashi hee?" esto ultimo lo dijo con una voz picara asiendo que Anko se ponga con los ojos en blanco y algo ruborizada por el comentario.
"¡Qué! No... no sé de qué estás hablando" respondió Anko evitando su mirada algo apenada.
"Oh vamos últimamente has estado algo extraña" Kurenai quería sacarle la información como sea. "Vamos tienen algo entre ustedes o qué?"
Anko ahora si ya estaba sumamente roja. No sabía si contarle a Kurenai, pero era su amiga después de todo ya era bastante malo no haberle contado su mayor secreto y creo que con esto no afectaría mucho. "Bue... bueno... el ... me invito a salir" ahora si lo dijo algo roja.
Hubo un silencio incomodo por unos segundos, Kurenai se quedó estática con los ojos parpadeando por ese último comentario que la dejo seca. "Te... ¡¿Te invito a una cita?!"
Hospital de la Hoja
La Torre tenía su propia área médica dado que este lugar estaba diseñado para celebrar batallas. A cada persona se le dio su propia habitación para que cada una sanara en paz. Una vez que se estabilizaran, serían trasladados al hospital principal de la aldea para recibir más atención. En este momento Naruto estaba parado afuera de la habitación para Hinata, había estado esperando unos minutos para que los médicos le dijeran que podía visitarla, pero solo por una hora. Necesitaba descansar después de que la hubieran arreglado.
Naruto también vio a Lee y Tenten que estaban en habitaciones diferentes pero sus estados estaban muy mal aun peor su amigo Lee, después de lo que le hizo Gaara, Gai quien apareció a su costado le dio un pulgar arriba para hacerle entender que no se preocupara por sus amigos ellos de alguna manera saldrán bien de esto. Naruto suspiró cuando camino de vuelta a la habitación donde estaba Hinata, entró y suavemente fue a la cama individual en la pequeña habitación. Hinata estaba acostada en la cama. Sintió que sus mejillas se calentaban mientras la miraba, ella tenía algunas vendas aquí y allá, pero se veía así de pacífica. Incluso un poco, hermosa.
Se sacudió a sí mismo mientras trataba de pensar en otra cosa.
"¿Naruto?" La voz de Hinata lo llamó. Miró para ver que sus ojos estaban abiertos al mirarlo. Cuando sus ojos se encontraron, de repente apartó la vista, casi avergonzada. "No puedo creer que haya perdido".
"Pensé que ya te dije que estaba orgulloso de lo feroz que peleaste?" Dijo Naruto mientras tomaba asiento al lado de su cama.
"Lo sé, pero aun así ... pensé que era mejor que eso". Hinata suspiró, no se sentiría así si solo lo hubiera hecho mejor. No tenía nada de malo perder, pero perder eso había herido su orgullo como ninja.
Naruto sabía lo frágil que era ella, su ambición era reconocida por su padre después de todo. No estaba seguro de qué decir, no era tan bueno cuando se trataba de cosas personales. "Hinata, todos pensamos que hiciste lo mejor que pudiste y todos estamos orgullosos. Lo único que puedes hacer ahora es aprender de ello y fortalecerte".
Hinata miró hacia el techo mientras pensaba en eso, era cierto que podía aprender algo de esto. Necesitaba encontrar una forma de sortear ese agujero en su técnica.
"¿Como te sientes?" Él soltó su mano y acercó la silla a ella.
"Mejor ... supongo ..." Se miró las manos vendadas y agarró ligeramente las sábanas.
"Hinata, ¿por qué no me hablaste que podías usar mi estilo de pelea?"
"Oh ... bueno ... cuando Neji iba a darme ese golpe al rostro... pude recordar por un segundo tu pelea con Orochimaru..., así que pensé que podría usar el mismo estilo de tu familia ..." Miró hacia abajo con tristeza, pero volvió a mirar hacia arriba cuando Naruto agarró suavemente sus dos manos entre las suyas.
"¿Estás bromeando? ¡Pateaste totalmente el trasero de Neji, fuiste increíble! ¡No deberías tener miedo de alardear un poco!" Él sonrió.
Se sonrojó, pero su rostro palideció cuando un gruñido bajo salió de su estómago y Naruto se echó a reír.
"No has comido, ¿verdad?"
Ella sacudió la cabeza cuando el color volvió a su rostro.
Naruto tomó uno de los cuencos de ramen y lo puso en su regazo. "Aquí tienes." Le entregó un par de palillos.
"Gracias Naruto". Ella sonrió.
"No hay problema. ¡Vamos a comer!"
Mientras en otra parte.
Kurenai caminaba a lado de Shino a dirección del hospital para ver a Hinata. Kurenai aun estaba algo pensativa por lo que le dijo Anko sobre su cita con el enmascarado, nunca pensó que ella querría experimentas esos tipos de cosas menos con Kakashi. Pero algo si había notado ella que últimamente lo había ignorado por completo.
Últimamente Anko era.... Diferente, muy diferente desde que la conoció desde niñas. Además, desde que fue marcada por el sello maldito de parte de su ex sensei, ella había perdido el brillo de sus ojos como si ya no tuviera alma ahí dentro, claro aún tenía su vieja y típica actitud alocada, aunque eso era para ocultar su dolor que tenía, pero desde que tuvo a Naruto, ese brillo en sus ojos volvió a tener vida, ¿será que por fin encontró lo que siempre ella ha querido, una familia... al igual que Naruto?.
"Kurenai sensei, ¿está todo bien?" Pregunto Shino sacándola de su pensamiento. "Últimamente ha estado bastante pensativa..."
"Bueno, es solo que estoy preocupada por Hinata" dijo ella con una sonrisa leve. "Además me intriga mucho la forma como Naruto dejo a Kiba en ese combate".
"Lose, Naruto se ha vuelto muy fuerte desde que fuimos en el país de las Olas" Dijo Shino dando un asentimiento de parte de ella. "He visto pelear la madre de Naruto en el bosque de la muerte... pero aun así dudo mucho que ese sea toda su fuerza..."
"eh? ... que quieres decir Shino?"
"Quiero decir... si Naruto es así de fuerte... me pregunto... ¿Qué tan fuerte será Anko sensei?" Finalizo Shino.
Kurenai abrió un poco los ojos sobre ese ultimo comentario, ya que sus palabras eran ciertas si Naruto es así de fuerte... eso quiere decir que Anko debe ser aún más fuerte que él y lo confirma aun mas ya que ella pudo enfrentarse al mismo Sannin.
"Me pregunto... ¿qué tan lejos llegaras Anko?" dijo ella en sus pensamientos.
Hospital de Hojas.
"¿T-hiciste qué?" Hinata miró a Naruto en estado de shock.
"¡Sí, juré vencer a Neji y maldita sea, lo haré!"
"¿Con ... m-mi sangre?"
"Sí."
"¿Por qué?"
"Porque lo estoy haciendo por ti".
Sus ojos estaban muy abiertos y llorosos y sus mejillas se sonrojaron mientras sus manos agarraban el cuenco de ramen vacío.
"No puede salir impune con lo que te hizo. Tengo que pegarle al menos una vez. Le diste algunos buenos moretones, pero se merece algo más. Créelo".
"Lo siento, no pude acercarme lo suficiente a él ..." Bajó la cabeza decepcionada.
"¡No! ¡No quise decir eso así!" Casi saltó de la cama. Tomando su cuenco y poniéndolo sobre la mesa junto a él, se sentó junto a ella y entrelazó sus dedos con los de ella una vez más.
Ella levantó la vista lentamente y se sonrojó cuando él bajó la cabeza sobre la de ella frotando suavemente su frente contra la de ella. Su corazón se aceleró diez veces. Estaba tan cerca que podía sentir su cálido aliento en su rostro, lo que la hacía sonrojarse aún más.
"Cuando te estaba viendo pelear ... cada vez que te golpeaba ... cada vez que te hacía sangrar ... cada vez que te lastimaba ... me dolía aún más ..." Casi susurró con los ojos cerrados, su frente aún sobre la de ella. "Fue difícil de ver porque usualmente hago todo lo posible para no dejar que te lastimes, la idea de no poder evitar que te lastime ... no poder protegerte, aunque sé que eres increíblemente fuerte y que puede cuidarse a sí mismo ".
"Sabes ..." susurró. "Te has vuelto bastante sobre protector hacia mí".
Él levantó la cabeza, pero lo suficiente como para mirar directamente a sus orbes plateados y le dio una pequeña sonrisa. "Protejo todo lo que quiero".
Su corazón se detuvo.
Pero solo por un momento antes de que continuara corriendo más rápido que nunca.
Estaban perdidos en los ojos del otro. Se apartó un poco para ver su rostro, que se ponía más rojo por segundos.
"¿Llll-quiero?" Apenas logró ahogar esa palabra ... Esa palabra ... una de esas palabras que aparecían frente a sus ojos cada vez que lo veía ... cada vez que él le sonreía. Las tres palabras que ella nunca podría decirle ... las palabras que estaban permanentemente en su corazón pero que nunca salieron de sus labios.
Ni siquiera podía parpadear, pero a pesar de que le dolían los ojos por no parpadear, podía ver claramente los ojos de Naruto cerrarse y su rostro lentamente acercándose cada vez más... Hasta que sus labios iban a tocar suavemente los de ella... pero justo alguien abre su puerta de la habitación.
"¿Interrumpimos algo?" dijo Shino quien habría la puerta seguido de Kurenai quien miraba toda la situación.
El cuello de Naruto y Hinata se volvió hacia ellos como un equipo oxidado mientras sus bocas se habrían y cerraban un par de veces, pero no salió nada.
"Por favor... no se detengan" Dijo Kurenai con una sonrisa pícara y una ceja levantada.
"¡NO, NO, NO, ¡NOSOTROS SOLO ESTABAMOS!" ellos gritaron tratando de explicar la situación mientras tenían la cara sumamente roja.
"Me podrán explicar después, primero tengo algo muy importante que decirles muchachos" Dijo ella atrayendo la atención de los tres. "Muchachos... no puedo entrenarlos a los dos, así que entrenare a Shino...".
"¡¿QUÉ?! ¡¿ME VA DEJAR AL AIRE?!" Grito el rubio un poco molesto.
"Déjame terminar, por el amor de dios" dijo Kurenai. "Antes de que decidiera a quien iba entrenar para las finales, tu madre se acercó a mi para decirme que se encargara de tu entrenamiento por este mes"
"¿Mi mamá?" pregunto dando un asentimiento de ella. "Oh bueno... supongo que eso está bien" En eso escuchan abrir la puerta solo para ver a una niña con ojos perlados al igual que Hinata.
"Ho... hola interrumpo algo?" pregunto la niña.
"Hola Hanabi, pasa por favor". Dijo el rubio. "Supongo que viniste a ver a Hinata" dando un asentimiento de parte de ella.
Naruto ya conocía Hanabi por parte de Hinata. Ala vez él le presento a Konohamaro después, ya que ella no tenía muchos amigos.
"Hinata, como te sientes" pregunto su hermana.
"Estoy mejor ahora" respondió ella. "Hanabi, ¿dónde este papá?"
"El vendrá en cualquier momento" respondió ella. "Está preocupado por tu estado"
"Oh... ya veo"
"Bueno en fin" dijo Kurenai. "Me dijeron los médicos que en tres días te darán de alta... peleaste muy bien Hinata estoy orgullosa de ti, pero ahora necesitas descansar".
"Si... muchas gracias Kurenai sensei" respondió ella con una leve sonrisa.
"Bueno será mejor irme, seguramente mi mamá me debe estar esperando en casa" dijo Naruto rascando la nuca.
"Nosotros también nos retiramos" dijo Shino dando un asentimiento de parte de Kurenai.
"Yo me quedare a cuidar a mi hermana" dijo Hanabi.
Todos salieron de la habitación a excepción de Hanabi y Hinata, pero antes Naruto volvió a ver Hinata. "Te veo luego, ¿De acuerdo?" Él le sonrió. Ella le devolvió la sonrisa levemente y asintió con la cabeza y con eso salió y cerró la puerta detrás de él.
"Entonces..." dijo Hanabi atrayendo la mirada de Hinata. "Que como vas con tu noviesito hee?"
Hinata se puso roja por ese comentario "¡No... no, él y yo solo somos... amigos!" ella trataba de explicar.
"A mí no me engañas, él te gusta ¿verdad?" pregunto con burla. Ahora si Hinata no sabia que decir porque su hermana la conoce muy bien y sabe ella se pone así cuando esta con el rubio.
En la ciudad de la aldea
Naruto se separo de su equipo para irse derecho a su casa, pero estaba bastante pensativo mas aun por la situación. "Rayos que voy hacer. Lee, Tenten... y Hinata están en el Hospital me gustaría poder ayudarlos... ¿eh?" Vio una serpiente pequeña que iba pasando por su costado, solo para mirar mas adelante que estaba una pequeña rana que estaba ahí al frente. Rápidamente le vino la idea que esa serpiente iba devorárselo.
La serpiente estaba a milímetros para comérselo, pero en eso el rubio lo agarra desde su cuello para neutralizarla. "Lo siento amiguita, pero tendrás que buscar otro tipo de alimento". Deja a la serpiente en un árbol para que dejara en paz a la ranita mientras le veía como se iba saltando hacia llegar a una pequeña cascada.
Naruto no sabia porque lo hizo, a él siempre le gustaba las serpientes todo eso, pero por dentro sentía una atracción por las ranas. "Ahora que lo pienso". Empieza a sacar de su bolsillo solo para ver su monedero de sapo. Fue un regalo de Anko que le dio en su sexto cumpleaños , ya que siempre que paseaba con ella en las tiendas, siempre veía ese monedero en forma de rana. Y era especial para él, ya que era su primer regalo de cumpleaños.
"En fin será mejor que siga mi cami... arhg" Sintió que alguien le cayera encima, solo para después caer de cara al piso. Naruto trato de levantarse, pero el peso aun estaba en su espalda, voltea solo para alguien familiar sentado en forma de loto encima de él. "¡Mamá!"
"¿Dónde rayos estabas enano?" dijo Anko mientras se levantaba al igual que Naruto.
"Solo fui a visitar a mis amigos que estaban en el hospital" Respondió el mientras se limpiaba la ropa. "Es cierto que me vas entrenar durante un mes?... ¿pero que hay de tu trabajo?".
"No te preocupes por eso. Pedí permiso para poder ocuparme de ti" Dijo Anko. "Tengo un nuevo jutsu que quiero mostrarte"
"¡Enserio mamá!" dijo el con entusiasmo. "¡Muy bien entonces que estamos esperando!"
"Lo siento será para mañana" respondió ella asiendo que Naruto se le balla los ánimos. "Por ahora será mejor que descanse ¿de acuerdo?" Naruto solamente obedeció, pero con pucheros, ya que quería entrenar de una buena vez, pero Anko tenía razón su cuerpo necesitaba un descanso.
Una vez que llegaron a la torre del bosque Naruto se fue a darse un aseo porque no se había cambiado después de los preliminares. Salió de la ducha se cambió y se dirigió a la sala, solo para ver que ya estaba servido su comida favorita en la mesa por parte de Anko.
Ambos se sentaron en la mesa y comieron, mientras comían Anko noto que el niño no estaba comiendo como lo habitual. De hecho, estaba comiendo muy lento. "Naruto, ¿sucede algo?"
"ah... si mamá, es solo que estoy últimamente muy pensativo" Respondió un poco decaído.
"Si es por tus amigos te prometo que todo saldrá bien" dijo ella recibiendo un asentimiento de Naruto ya un poco mejor. "Hablando de amigos... que no tenías una cita con Hinata?"
"¡¿Qué? ¿Como supiste de nuestra...?!" dijo el con nervios.
"Oh vamos, soy tu madre se todo lo que está pasando últimamente" respondió ella. "Y como fue así que te decidiste invitarla?"
"B.... bueno no fue fácil" dijo el apenado mientras se levantaba de la silla y caminaba hacia la puerta. "La verdad es que, con ella me siento muy bien se siente muy calido cuando estoy con ella...y la verdad... ella es..."
"Ella que Naruto?"
"Pero ahora ella está en hospital" dijo el un poco triste. "Por ahora solo me queda esperar a que se recupere de aquí tres días"
"Bueno tengo fe de ella que estara bien" dijo ella mientras se acercaba a él. "Ella es fuerte, al igual que tu". finalizo dándole un beso en la frente.
"Gracias mamá" dijo el mientras la abrazaba.
"Bueno será mejor que descanses, mañana empezara tu entrenamiento" ella se dirigió a la mesa para llevarse los platos y lavarlos.
"He... mamá, ¿puedo hacerte una pregunta?" Pregunto el con la mirada en el suelo.
"Claro... que sucede"
"Quisiera saber..." dijo el rubio. "Que significa ser fuerte"
El ambiente se puso un poco tenso por alguna razón Naruto quería saber que significaba ser fuerte, ya se siente algo impotente por la situación de sus amigos aun mas peor por le que paso a su amigo Lee ya que a pesar de haberlo salvado de la arena no pudo hacerlo a tiempo.
Anko por otra parte no sabia que responderla o tal vez sí, pero quizás no sea la respuesta correcta. "Ser fuerte he..." dijo ella recibiendo la atención del niño. "Eso es algo que debes averiguarlo por ti mismo... descansa Naruto" se fue a la cocina dejando Naruto en el la sala.
Naruto solamente suspiro, pensó que su madre tendría la respuesta, pero al parecer no, pero tenía razón en algo. El debería averiguarlo por si mismo, de una manera u otra. Se dirigió a su cuarto para poder dormir ya que mañana empieza su entrenamiento con Anko.
Al siguiente día
Naruto se encontraba en el bosque con Anko para empezar con su entrenamiento.
"Muy bien Naruto espero que estés listo con esto" dijo ella.
"Sobre eso mamá quisiera saber si me podrías ayudar en este nuevo jutsu, lo tengo anotado en un pergamino". dijo mientras se dirigía de nuevo a la torre.
"Haaa... te refieres a esto" Ella saco un pergamino de su bolsillo.
"¡Si, ese es!" se sorprendió Naruto que ella lo tuviera. "Pero ¿Cómo?, ¿Cuándo?"
"Hace tiempo lo encontré mientras limpiaba tu cuarto mientras estabas en el país de las Olas" respondió ella con simpleza mientras habría el pergamino. "Es el jutsu el dios del trueno volador (Hiraishin no jutsu) lo anotaste cuando robaste el pergamino del sello... o me equivoco?"
"B... bueno si... jeje" ahora si estaba nervioso. "Es genial no mamá?, me podrías ayudar a perfeccionar ese jutsu"
"¡Olvídalo!"
"¡¿Qué?! Pero ¿por qué?" pregunto Naruto un poco disgustado.
"En primer lugar este un Jutsu que se necesita un buen control de Chakra y el tuyo esta algo inestable" dijo ella con seriedad. "Y este es un Jutsu del cuarto Hokage"
"¡¿Enserio?!" ahora estaba más asombrado el niño.
"Si, pero hay algo que debes saber" respondió ahora un poco mas calmada. "El cuarto hokage tenía muchos enemigos en el pasado en la tercera guerra ninja. Si tu empieza a utilizar este jutsu en el último examen o en una misión, muchos pensaran que eres un familiar del cuarto Hokage y el rumor se esparcirá por todas partes"
"Oh vamos esa es una ridiculez ¿Por qué pensarían que soy familiar del cuarto?" pregunto algo fastidiado.
Anko solamente suspiro. Sabía que no debería rebelar más allá. "Tú tienes un enorme parecido al cuarto Hokage por ese cabello rubio y esos ojos azules que tienes, y como te dije antes el cuarto tenía muchos enemigos y es muy probable que te confunda con él o que piense que eres su pariente y tomen venganza y no voy arriesgarme que seas perseguido constantemente, ¿Te quedo claro?"
"Hay mamá... enserio eres muy sobre protectora conmigo" dijo con resignación.
"No estoy prohibiendo que nunca lo aprendas" dijo ella llamando la atención al Niño. "Solamente que es muy temprano para usar ese jutsu. Tal vez te ayude a usarlo más adelante, pero por ahora nos concentraremos en otras áreas" finalizo ella mientras guardaba el pergamino.
"Bueno... está bien" dijo asiendo un puchero.
"Muy bien empecemos" dijo ella poniéndose en pose de pelea seguido de Naruto.
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Han paso 4 días desde que Naruto comenzó a entrenar, como Anko le dijo, Naruto fue puesto a trabajar como saco de boxeo, ya que siempre caía en las trampas que Anko le ponía al frente y no lograba acertarle, aunque sea un golpe. Naruto sabia que su madre era fuerte, pero esto ya era el colmo para él.
Horas después
"86...87...88... 89" se escuchaba a Naruto, el cual estaba colgando de un árbol, y contaba cada abdominal que hacía.
"Vamos Gusano pon un poco más de esfuerzo. *ñam*" hablaba Anko sin ver a Naruto y comía un malvavisco.
Respondió ella mientras se comía otro malvavisco. "Uag, este se me quemo".
Durante esos días había visitado a sus amigos que estaban en el hospital. Tenten fue dada de alta en el tercer día al igual que Hinata, pero Lee aún estaba internado. Según los médicos dijeron que necesitaba estar en descanso, pero tiene suerte ya que gracias a la intervención del rubio y su sensei sus heridas no pasaron más haya de ruptura de huesos y desgarre de músculos y tendones así que estará en movimiento en por lo menos 4 a 6 meses.
Mientras Anko miraba como Naruto seguía con su entrenamiento ve que aparece un perro a su costado. Sostenía una carta en su hocico y al parecer era para ella toma el pergamino y el perro desaparece en una bola de humo. Anko debió imaginarse de quien era la invocación. Inmediatamente ella abre la carta.
"Hola Anko espero que no estés ocupada, solo te avisaba que tengo el día libre mañana y talvez podríamos retomar la cita que te prometí, je... te veré mañana en la noche en tu casa, dile a Naruto que le deseo buena suerte en su entrenamiento y que tendrá todo mi apoyo, saludos" ATTE: Kakashi.
Anko termino de leer la carta solo para sentir un pequeño rubor en su rostro. Luego noto que el rubio se acercaba a ella.
"Mamá, ¿puedo pedirte un favor?" pregunto él.
"Si, ¿claro que sucede?" dijo mientras guardaba la carta.
"Yo... quería pedir permiso si mañana me dejas el día libre" dijo el rubio mientras se rascaba el cabeza un poco apenado. "La verdad es que le prometí a Hinata que después de que saliera del Hospital la invitaría a salir a una cita... y que iba a pasar por ella mañana eso de las 4 pm. Así que... Me darías permiso ir a mi cita... por favor".
Anko miraba como el niño le pedía con suplica. Ella solamente sonrió, sabia que Naruto ya tenia que experimentar nuevas cosas y bueno estaba creciendo y no podía creer que su niño se estaba volviendo poco a poco un hombre. "Claro que puedes ir... solo espero que no la vallas a regar durante tu cita jaja"
"Gracias por los ánimos mamá" dijo un poco preocupado, ahora si sentía la presión.
Ambos se fueron derecho a su hogar para después cenar y e irse a dormir cada uno. Naruto ahora si sentía la presión ya que no podía descansar, mañana seria su cita con Hinata y tenia miedo de que podría malograrla durante la cita, pero por dentro se sentía entusiasmado ya que seria su primera cita, aun mas que saldrá con la chica que le gusta.
Al día siguiente.
Naruto estaba muy nervioso, no había estado tan nervioso desde su primer día en la escuela. Hoy fue su primera cita real y con Hinata no menos. Tenía que admitir que antes nunca hubiera pensado que trataría de salir con su mejor y más vieja amiga, pero últimamente sus puntos de vista sobre ella habían cambiado. Vio que era una chica bonita que él conocía muy bien y con quien le gustaba estar cerca. Pero en este momento estaba preocupado ya que nunca antes había tenido una cita.
De los libros de Kakashi sabía cómo coquetear y algunas otras cosas que hacer con las chicas, pero las citas nunca estuvieron en esos libros. Si alguna vez encontraba al tipo que escribió esos libros, tendría que decirle que agregara cosas como esas. Pensar en las partes de los libros que los personajes masculinos y femeninos hicieron juntos hizo que Naruto pensara en Hinata y en sí mismo en esos lugares. Él se sonrojó al pensar en la sensación de su piel o en cómo sabían sus labios pasaron por su mente.
En cualquier caso, solo esperaba que las ideas que obtuvo de su madre ayer funcionaran. Después de que Hinata dijo que sí a la cita, se fue a casa y esperó a que su madre apareciera y le preguntara qué tipo de cosas podía hacer en una cita.
De todos modos, Anko pronto le dijo a su hijo algunos ejemplos de qué hacer en una cita y con eso hizo sus propios planes. Sería más tarde esa noche y todo lo que Naruto sabía era que Anko estaba saliendo, no era como si quisiera ocultarle cosas a su hijo, era solo que Naruto parecía tener suficiente en su mente de todos modos.
Al otro lado de la aldea, Hinata estaba más nerviosa de lo que recordaba haber estado, había pasado toda la mañana tratando de descubrir qué ponerse para su primera cita y qué debía hacer durante ella. Suspiró ante el hecho de que no tenía mucha ropa para las citas. Debería acudir a sus amigos en busca de ayuda poco después de esta fecha para obtener más consejos. Además, Ino y Sakura eran buenas con la moda para poder ayudarla a elegir ropa nueva, pero en este momento estaba preocupada por lo que acababa de tener.
No quería parecer demasiado elegante si iban a un lugar normal como el bar de ramen, pero no quería usar su ropa habitual en caso de que fueran a un lugar especial. Ella también tuvo que tomar el calor que todavía estaba alrededor y después de mucho debate, ella eligió. Principalmente era una falda que llevaba en los meses de verano, pero hacía bastante calor. También llevaba una camisa de manga corta y una de sus chaquetas, esta chaqueta era menos voluminosa que la normal, ya que los brazos habían desaparecido.
En este momento deseaba que su madre todavía estuviera viva en este momento, realmente podría haber usado su consejo para esto, miró la foto que tenía de su madre que siempre tuvo a la vista. Hinata lo recogió y miró a su madre, todavía la recordaba como una mujer hermosa que siempre fue amable. Le dolía el corazón por el toque de su madre una vez más, pero sabía que eso no era posible. Mientras continuaba preparándose, su cita era sin saberlo, llegando a la puerta principal.
Naruto ya había logrado entrar al complejo Hyuga sin problemas, como siempre. Un miembro de la familia de la rama ya se dirigía a informarle a Hinata que Naruto estaba aquí para verla mientras esperaba. No estaba seguro de si Hinata estaba lista, así que estaba contento por la espera, estaba esperando afuera a las afueras de la casa principal.
Desafortunada mente, fue solo su suerte que Hanabi se preguntara cerca de él, vio a la familiar rubio, pero tomó nota de la ropa que llevaba puesta. Era diferente a su ropa normal y tenía que preguntarse qué estaba pasando. Se acercó a Naruto, que estaba tan concentrado que no oyó a Hanabi.
"Naruto, no sabía que ibas a aparecer hoy", le dijo Hanabi y se alegró un poco de cómo el rubio había saltado de la sorpresa.
"¡Maldición, no me sigas así sigilosamente!" Le gritó Naruto.
"Lo siento", dijo, aunque por dentro estaba sonriendo "De todos modos, ¿estás visitando a mi hermana este día?"
Naruto parecía un poco nervioso por esto, había esperado no encontrarse con nadie como su primo Neji que era su primera pelea en el examen, o peor, el padre de Hinata. Podía mentir, pero Hinata aparecería muy pronto y eventualmente lo descubriría.
"Bueno ... la cuestión es que tengo una cita con Hinata ahora mismo", dijo Naruto rascándose nerviosamente la parte posterior de la cabeza.
Hanabi parpadeó un par de veces sin estar seguro de haber escuchado bien, sabía que Hinata sentía algo por él, probablemente la mayoría de la aldea lo sabía, pero en realidad nunca pensó que Naruto la invitaría a salir. En primer lugar, como miembro principal de la rama y heredero, se esperaría que Hinata fuera cortejada por otros miembros de la casa principal y que Naruto fuera un extraño complicaría las cosas.
Pero, de nuevo, Hinata sería feliz y Hanabi se preocupaba por la felicidad de su hermana. Dicho esto, miro hacia los costados de Naruto como si estuviera buscando algo.
"Hanabi, que estás buscando?" pregunto él.
"Bueno la verdad es que como te vi pensé que Konohamaru vendría contigo", le dijo Hanabi
Naruto lo pensó, no había visto al nieto del Viejo desde que los Exámenes Chunins. El chico era como un hermano pequeño para él y no le importaría volver a verlo. Luego tuvo una sonrisa maliciosa en su rostro cuando una idea apareció en su cabeza.
"Oh, ¿entonces vamos a ver a Konohamaru entonces? ¿No sabía que te gustaban los chicos?, hombre, realmente trabajas rápido, Hanabi "
Hanabi parecía mortificada y avergonzada. "¡Y-tengo solo ocho años! ¡No me gustan los niños así, es mi único amigo fuera del clan!"
Naruto se echó a reír al ver la expresión de su rostro que no tenía precio. "Está bien, lo siento, lo siento".
Hanabi retrocedió un poco, "De todos modos, les deseo lo mejor a ambos".
"Oh, sí, no hay problema", le dijo Naruto.
Pasaron cinco minutos de espera antes de que él levantara la vista para ver a Hinata dirigiéndose hacia él. Él miró su ropa y se alegró de que ella no estuviera demasiado vestida. Quería que fuera una cita simple y agradable, ya que no tenía tiempo suficiente para planificar realmente las cosas.
"H-hola Naruto", Hinata se sonrojó un poco como de costumbre.
"Hola Hinata, te ves bien". Él le sonrió y notó que el sonrojo aumentaba un poco. Ahora que descubrió por qué ella se sonrojó, tuvo que admitir que se veía realmente linda sonrojada así. "Bueno, ¿entonces quieres empezar las cosas?"
Hinata asintió mientras caminaba rápidamente a su lado mientras salían del complejo. Poco sabían que no estaban solos, ya que en los arbustos cuatro pares de ojos se clavaron en ellos. Hanabi había ido a la casa de Konohamaru y le había dado la noticia, y él había sugerido que los espiaran y vieran cómo iban las cosas. A Hanabi le gustó la idea y habían estado esperando a que Naruto apareciera, tan pronto como Hanabi los vio tener una ventaja suficiente, ambos se colaron silenciosamente como pudieron detrás de ellos.
Los dos jóvenes adolescentes caminaron y hablaron, bueno, Naruto habló principalmente mientras Hinata escuchaba como siempre. En realidad, no era diferente de lo que normalmente pasaban, pero en lugar del puesto de ramen para almorzar, la llevó a un lindo lugar al aire libre. Tenía una bonita vista del parque y tenía buenos recuerdos de ese parque.
"Ahí es donde nos conocimos", dijo Naruto mirando a un lugar en el parque. "Recuerdo que me acerque a ti porque te veía triste y me dijiste que si quería ser tu amigo".
"N-Naruto", dijo Hinata avergonzada por eso, aunque fue un recuerdo feliz para ella el día que conoció a su primer amigo.
"¿Recuerdas ese lugar donde solíamos jugar a las escondidas en los arbustos?" Él le preguntó y ella asintió. "Nos ensuciamos tanto que tuvimos que irnos a nuestras casas para bañarnos".
Hinata se río de ese recuerdo, nunca antes había vuelto a casa en un estado tan lamentable y había pensado que su madre iba a ser hecha, pero tenía esta pequeña sonrisa todo el tiempo.
"E-esos fueron tiempos felices", dijo Hinata suavemente.
Naruto asintió después de conocer a Hinata, su vida se había vuelto mucho más feliz. "Sí, no estoy seguro si alguna vez dije esto, pero me alegro de haber conocido a Hinata".
Hinata se sonrojó mientras sonreía, "Me alegro de que nos hayamos conocido también".
Al otro lado de la calle, Hanabi y Konohamaru los estaban espiando.
"Desearía escuchar lo que están diciendo". Konohamaru se enfurruñó. "Tal vez si nos acercamos".
"Con lo que nos verían". Ella le dijo.
"Obtuve mi hoja de cubierta ninja que podemos dejar en el fondo", sonrió tirando de la hoja que tenía el aspecto de un panel de madera, pero en la dirección equivocada. Hanabi le dirigió una mirada que decía todo eso.
"¿Qué?" Preguntó.
"Realmente necesitas trabajar en tu equipo ninja", dijo Hanabi volviendo a ver la situación.
"¿Que se supone que significa eso?" se quejó.
Naruto y Hinata continuaron con su cita, después del almuerzo caminaron por el parque mientras sonreían ante todos los viejos recuerdos que este lugar les guardaba. No habían estado aquí en mucho tiempo juntos y fue agradable. Vieron a un artista usando títeres para contar la historia del Primer Hokage en el Valle del Fin contra Madara Uchiha. Ambos se detuvieron para verlo, ya que era muy divertido y los niños estaban animando al Primero.
Naruto y Hinata siguieron caminando, se detuvieron para tomar un helado mientras se sentaban en un banco para comer. Hinata se río al ver la mordida en su nariz. Entonces Naruto lo miró con los ojos cruzados y Hinata no pudo detener la risa, se veía tan lindo y divertido así. Naruto sonrió y tomó un poco de su propio helado y se colocó un poco en su propia nariz.
Hinata se sorprendió, pero al ver la cara sonriente la perdió y ambas terminaron riéndose de nuevo.
Cerca de Hanabi y Konohamaru ambos estaban perplejos por esto. ¿Poner helado en la cara del otro era normal en una cita? Ambos niños no tenían idea, pero continuaron observando.
Al final de la fecha, Naruto estaba caminando con Hinata a su casa cuando la detuvo antes de que vieran las puertas. No quería que los guardias de la puerta vieran lo que esperaba hacer en este momento. Había estado pensando en esto durante la última hora y era ahora o nunca para él.
"Hi... Hinata hoy fue muy divertido contigo". Le dijo Naruto.
"A mí también me gustó Naruto", le sonrió Hinata, de hecho, había sido el mejor día de su vida. Finalmente había ido a una cita con su amor de mucho tiempo.
Naruto se rascó nerviosamente la parte posterior de la cabeza, "Sí ... así que eh, bueno, ¿quieres salir de nuevo?"
Hinata se sonrojó ante la idea, pero asintió con la cabeza. Una cita era más de lo que ella había pensado, pero ahora él quería otra cita.
"Genial y será genial. Solo necesito prepararlo", Naruto tuvo que planear lo que quería hacer a continuación, pero no podía esperar. La cita con Hinata había sido muy divertida y descubrió que realmente le gustaba salir con ella más que solo una amiga.
"Hay una cosa más que quería darte, quería que fuera una cita especial, pero no estaba segura de cómo hacerlo. Pero creo que se me ocurrió algo", le dijo mientras se preguntaba qué lo tenía en mente.
Luego, para su sorpresa, se sonrojó cuando él comenzó a inclinarse más cerca de ella cuando sus ojos se abrieron y su pulso aumentó.
" No va a hacer lo que creo que va a hacer, ¿verdad?" Hinata pensó mientras él se mudaba, aunque en secreto esperaba que lo fuera.
Naruto había pensado qué darle y, aunque lo habían hecho antes, había sido un accidente. Esta vez quería asegurarse de sus sentimientos por ella, era muy directo hacia él, pero una vez más, el tacto nunca fue su punto fuerte de todos modos. Aprendió lentamente a darle la oportunidad de alejarlo, pero ella nunca lo hizo.
Su rostro llegó al de ella y suavemente besó sus labios.
Fue un beso de persecución, pero para ambos sintieron algo allí. Hinata se obligó a sí misma con todas sus fuerzas a no desmayarse, quería tanto esto. Ella cerró los ojos cuando se inclinó ligeramente y presionó sus propios labios contra los de él. Naruto se sorprendió de lo suaves que eran sus labios y pronto una de sus manos encontró la de ella mientras permanecían así por un minuto antes de que él se retirara.
Ambos jóvenes ninja se sonrojaron fuertemente.
"Entonces te veré luego Hinata", dijo Naruto mientras se alejaba. Hinata asintió, pero no pudo decir nada mientras caminaba aturdida. Naruto acababa de besarla, un beso real en los labios. Para Hinata, si todo esto era solo un sueño, ella nunca quiso despertarse.
En un árbol, dos niños pequeños habían visto todo.
"Ewww, ¿acaban de besarse?" Hanabi preguntó encogiéndose ante eso.
"Sí", dijo Konohamaru con la misma cara de asco. "No veo por qué los niños mayores y los adultos hacen eso".
Hanabi asintió, segura de que fue divertido ver a su hermana salir con Naruto y que le gustaba, pero no quería ver a su hermana mayor besando a los niños.
"Bueno, creo que los shows terminaron", suspiró Konohamaru. "¿Quieres ver si Moegi y Udon están haciendo algo?"
Hanabi se encogió de hombros, era mejor que nada, aunque se preguntó por qué su hermana tenía esa extraña expresión en su rostro. ¿Besar a los chicos era realmente tan bueno? Ella no lo creía, además, no es como si alguna vez la pillaran besando a un niño.
Más tarde esa noche
Anko se estaba preparando para su propia cita, principalmente tenía una falda que le llegaba hasta las rodillas, pero con una hendidura, largas botas negras que también le llegaban hasta las piernas. Con un cinturón con tachuelas y una camiseta oscura puesta, también se pintó su labios con un labial morado y la sombra de ojos a juego lucían.
Cuando Naruto llegó a casa después de su cita, tuvo que sonreír ante la expresión de la cara de su hijo. El niño no solo la pasó muy bien, sino que parecía estar enamorado de la joven Hyuga. Todo lo que había hecho era hablar sobre Hinata y cosas como cuán linda se veía en este punto y en ese punto.
Naruto estaba en su habitación cuando sonó el timbre de la puerta, se levantó y abrió la puerta y allí estaba Kakashi. Lo primero que notó fue su nueva apariencia, pantalones negros con una camisa a juego, llevaba una máscara especial que no le llegaba tan abajo como la normal. La camisa ligera estaba abotonada con los dos primeros desabrochados. En lugar de su protector para la frente, tenía un simple parche en el ojo para cubrir su ojo Sharingan. No podía usar eso mucho y había pasado casi veinte minutos tratando de encontrar la maldita cosa porque no podía recordar dónde la había puesto.
Ella solo sonrió con esa gran sonrisa suya.
"Bien, así que esto es lo que ves fuera del equipo ninja", le dijo a ella, aunque un poco decepcionado de que tuviera la máscara. "Nos vas a piratear porque creo que para un ninja es un pecado capital".
"Pensé que la banda para la cabeza era un poco demasiado, además creo que me da un aspecto genial", respondió Kakashi sonriendo.
"¡Bueno, entonces vamos a cada uno porque me muero de hambre!" Anko lo agarró del brazo y lo apartó tan rápido que casi no pudo cerrar la puerta.
Caminaron por el pueblo para detenerse en un lugar decente para comer, era agradable salir como personas normales de vez en cuando. Anko y Kakashi se relajaron y hablaron de las cosas, ella notó que él podía comer con esa maldita máscara puesta, sinceramente, había suficientes mujeres que lo consideraban interesante. No había necesidad de ganar más competencia mostrando a las mujeres en todas partes la cara debajo de esa máscara.
La cena resultó ser entretenida ya que Kakashi le contó sobre las misiones con su equipo con detalle y Anko tuvo que admitir que deseaba haber estado allí para ello. Parecía algo emocionante y había sido mucho más emocionante que las últimas que tuvo. Continuaron hablando, fue una cena muy cómoda y Anko y Kakashi jugaron algunos juegos con sus conversaciones. A veces se lanzaba una pequeña insinuación o se burlaba ligeramente del otro.
La comida también fue bastante buena y Anko tomó nota mental del lugar. Después de que los dos se fueron a caminar, era de noche cuando se fueron y no tenían un destino real en mente, ambos estaban muy cómodos el uno con el otro en el momento en que realmente no les importaba.
"Oh, escuché de esto de algunos de los otros", dijo Anko mientras sus ojos se iluminaban. Ella estaba mirando un bar que estaban pasando. "Es un excelente lugar para pasar el rato después entrañar a mi niño y está abierto hasta tarde, además escuché que las bebidas no son tan malas y no están aguadas".
Kakashi lo pensó y pensó que deberían intentarlo. Cuando entraron, el lugar tenía poca luz y parecía haber un nivel principal y otro que estaba un poco más arriba del suelo. El área más alta tenía mesas y cabinas y parecía ser para comidas pequeñas y para beber. Había un bar al final del lugar contra la pared. Kakashi también notó que también había algunas mesas de juego. Principalmente piscina parece. En las paredes notó tableros de destino, una pareja parecía ser para dardos, pero otras dos eran un poco más grandes sin el marco de metal.
Se dio cuenta de kunai y shuriken en los titulares cerca de él, era una variación en el juego de los oscuros, solo que esto era más adecuado para ninja o aquellos que fingieron ser al menos.
"Vamos a tomar una copa y luego podemos divertirnos un poco", le sonrió Anko.
Anko lo sorprendió oliendo, le había regalado este perfume a Kurenai antes de la fecha. Aunque hizo algo con un precio, Kurenai la hizo jurar contar toda la historia después de que terminara.
Fue más tarde esa noche cuando Kakashi y Anko estaban caminando hacia la torre del bosque. Bueno, al menos él lo estaba, ella estaba caminando por el borde de una pequeña repisa equilibrándose.
"Sabes que, estando borracha, no haría eso si fuera tú, te vas a caer", le dijo Kakashi, aunque él también sentía el zumbido.
"No estoy borracha", le dijo Anko mientras continuaba con su acto de equilibrio. "De todos modos, es solo una pared de tres pies de alto y si estuviera borracha me habría caído simplemente caminando".
"Está bien, entonces estás destrozada, no borracha".
"Uh uh", Anko sonrió, "Si me destrozaran, no podría moverme ni hablar. Hay niveles sutiles para beber y ... ¿dónde estaba?" Anko perdió el hilo de sus pensamientos.
"Algo sobre los niveles de bebida", dijo Kakashi, aunque no estaba muy seguro de sí mismo. Había estado demasiado ocupado mirando sus piernas y su trasero, ya que estaban bastante a la altura de los ojos.
"Ah, claro", Anko comenzó de nuevo, "Borracha es que la pasaste bien, la basura se está volviendo loca, desperdiciada es que te desmayas, el zumbido es solo después de un par de tragos. Así que estoy en algún lugar justo después de zumbido ".
Para probar su punto, saltó de la pequeña repisa con un ligero tirón y aterrizó, tuvo un pequeño tropiezo, pero no se cayó cuando se contuvo rápidamente. Kakashi tuvo que admitir que tenía un gran equilibrio para lograrlo después de unos tragos. Se quedó mirando para dar un ligero aplauso y ella le hizo una reverencia teatral sonriendo. Aunque no quería volver a intentarlo, su cabeza comenzaba a nadar por el resbalón y la proa de repente.
Esta era una de las cosas que a Kakashi le había gustado mucho de Anko a lo largo de los años, sabía cómo divertirse y soltarse. Kakashi recordó cómo era antes de la muerte de Obito y había tratado de transformarlo en algo totalmente diferente. Se tomó el tiempo para apreciar más las cosas y se relajó más, y tuvo que admitir que su vida era un poco menos estresante ahora debido a eso. Si no hubiera cambiado su forma de vida, probablemente ya habría tenido una úlcera.
Continuaron caminando, hablando y riendo todo el camino hasta su casa, no había tenido la intención de ir por este camino, pero la casa de Kakashi estaba lejos ahora. Anko miró su casa y notó todas las luces apagadas y pensó que Naruto ya estaba profundamente dormido.
Anko frunció el ceño un poco, estaba disfrutando y quería que las cosas siguieran.
Tenía que admitir que sus pies empezaban a dolerle después de bailar y caminar, y su lugar parecía estar muy lejos en este momento.
Fueron hacia la puerta principal para luego entrar y subir hasta llegar a la puerta de su casa principal. Anko lo probó y lo encontró cerrado, lo más probable es que Naruto lo hubiera cerrado antes de acostarse como Anko le había enseñado. Sacó su llave y abrió la puerta mientras miraba a Kakashi.
"Sabes, esta noche fue divertida". Kakashi le dijo.
Anko sonrió al hombre alto, "Sí, era ... así que ... ¿quieres hacer esto de nuevo?"
Podía sentir un sonrojo en sus mejillas y se alegraba por la oscuridad, también odiaba cómo sonaba como una adolescente tímida que le preguntaba a su enamorado secreto y odiaba cómo había sonado. ¿Dónde estaba el siempre confiada Anko?
Kakashi le sonrió, "Sabes, me gustaría eso. Yo ... bueno, realmente disfruto mi tiempo contigo".
"¿De Verdad?" Anko preguntó feliz de escuchar eso y lo vio asentir con la cabeza. Ella sonrió y quería hacer algo que había querido hacer desde hace mucho tiempo. Gentilmente alcanzó su máscara y la bajó. Ella casi contuvo el aliento al ver esa hermosa cara. Dios, él realmente era un hombre de aspecto perfecto para ella, incluso el ojo y la cicatriz solo parecían mejorarlo. Kakashi no estaba seguro de lo que estaba haciendo, pero no luchó, estaba demasiado ocupado mirándola a los ojos desde la luz de la puerta para preocuparse realmente. Ella realmente tenía ojos bonitos, tenían tanta travesura y vida que él había notado.
Anko levantó la vista hacia el hermoso rostro y no pudo evitarlo, mientras le rodeaba el cuello con los brazos, luego lo bajaba y lo besaba. Kakashi estaba un poco sorprendido por el movimiento, pero el sabor de sus labios pronto lo hizo olvidar su sorpresa y devolverle el beso. Al principio fue gentil, pero pronto Anko presionó un poco más y Kakashi estaba más que dispuesto a ayudar. Pronto los dos se perdieron en la pasión de todo, la atracción mutua que tenían el uno por el otro últimamente se había estado construyendo durante toda la noche, también la necesidad primordial de compañía también estaba allí.
Ambos habían estado sin esa necesidad, ya que para Anko nunca se había abierto realmente antes, pero con Kakashi sentía que podía hacerlo. Anko había estado tan concentrado en criar a Naruto que no tuvo tiempo de encontrar una relación real. Pero a Kakashi quería mucho a Naruto al igual que él, lo que había sido un problema importante ya que cualquiera que él eligiera tenía que llevarse bien con Naruto o de lo contrario no tenía sentido.
Pero también estaba el hecho de que ambos se sentían cómodos con el otro, cada uno de ellos tenía sus propios dolores de su pasado que dejaban cicatrices feas y, sin embargo, cada uno sentía que el otro no juzgaría ni le importaría.
Anko sintió que Kakashi le pasó la lengua por los labios cuando ella abrió la boca y pronto su lengua la apoyó. Ella gimió al sentir sus manos en sus caderas y tal vez era un poco de alcohol en su sistema, o el hecho de que Kakashi era un besador muy bueno, pero no quería detenerse. Ella le pasó las manos por el cuello hasta la parte delantera de la camisa.
Finalmente, tuvieron que tomar aire para respirar profundamente, pero también ambos queriendo más. Ninguno de los dos podía recordar la última vez que habían tenido un beso así. Había sido tan intenso y apasionado.
"Entonces ... ¿quieres entrar?" Anko le preguntó un poco preocupada de que el pudiera estar demasiado adelantado.
Kakashi no estaba seguro de terminarlo allí o continuar y sabía a dónde iría si continuaban. No habría vuelta atrás en este punto, pero él la deseaba, estaba sorprendido de cuánto la deseaba. Había pasado tanto tiempo desde que había sentido algo parecido a esto y, después de todo, seguía siendo humano.
Él abrió la puerta y suavemente la atrajo hacia ella sin decir una palabra, Anko sonrió mientras ella pateaba la puerta para cerrarla detrás de ella y casi salta sobre Kakashi cerrando los labios con los suyos nuevamente. Anko no estaba seguro de cómo, pero finalmente llegaron a su habitación sin mucho ruido, lo último que necesitaba era despertar a Naruto y que él lo viera. Anko se sintió eufórica e incluso un poco ansiosa, no esperaba que la fecha terminara de esta manera, pero estaría mintiendo si dijera que nunca pensó en esto últimamente.
"Anko", dijo Kakashi entre besos, "¿estás seguro de esto?"
Anko sabía que él le estaba dando una salida, pero ella no quería tomarlo, ambos eran adultos y sabía que, si lo hacían, las cosas cambiarían entre ellos. Pero esta cita le había demostrado que quería que las cosas cambiaran, realmente le gustaba y ¿por qué posponer algo que eventualmente sucedería? La vida era lo suficientemente corta cuando eras un ninja y quién sabía lo que traería el futuro.
"Sí", dijo en un tono ronco mientras mordisqueaba el lóbulo de su oreja haciéndolo estremecerse.
"¿Sin arrepentimientos?" Entonces ella le preguntó.
Kakashi sabía lo que quería decir, que ambos no se arrepentirían a la mañana siguiente. "Sin arrepentimientos."
Con eso, ambos comenzaron a quitarse la ropa al otro, las manos y los labios exploraron los cuerpos del otro. Anko soltó una carcajada complacida de una mujer que prometió una noche de placer cuando ambos adultos fueron a su cama para explorar una nueva apertura en su relación juntos.
OK FIN DEL CAPITULO... espero que hayan disfrutado hasta ahora como va esta historia... y si habrán notado algunas referencia locas xd y si me pase de vivo esta vez, solo era para ser parodia nada mas xd .En fin, eso fue todo gracias por perder su tiempo conmigo. bay
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