Al día siguiente Aria se despertó por la alarma que había puesto en el celular pero tenía tanto sueño que la apagó sin darse cuenta.

Luego de un rato despertó porque algo la encandilaba, abrió perezosamente los ojos y se dio cuenta que era la luz del sol que entraba a través de las puertas porque la cortina estaba corrida, confundida dijo.

Aria: pero... ¿qué?

Estaba segura que la noche anterior las había cerrado, de repente vio a Klaus. Se había puesto de pie delante de ella con los brazos cruzados y la miraba divertido.

Aria: ¿qué quieres Klaus?

Aria miró su reloj, eran las 7:30 de la mañana. Klaus rió.

Klaus: tienes que ir al colegio ¿lo olvidas?

Aria rápidamente se sentó en la cama.

Aria: ¡cierto!

Se puso de pie y corrió hacia el armario, sacó su uniforme. Miró a Klaus con una sonrisa y le preguntó.

Aria: ¿esta vez me prestarás el auto para que vaya sola?

Klaus enarcó una ceja.

Klaus: ya quisieras

Aria bufó y lo miró suplicante.

Aria: por favor Klaus, por favor

Klaus: no, yo te llevaré

Aria: ¿por qué no me dejas ir sola?

Klaus se acercó a velocidad vampírica a ella y le acarició la mejilla con su mano mientras le sonreía.

Klaus: me gusta llevarte, pasar tiempo contigo hija, ahora que vas al colegio te veo menos

Aria no quiso discutir.

Aria: de acuerdo

Apartó la cara y le dijo.

Aria: voy a llegar tarde, por favor vete y prepara el desayuno así gano tiempo

Klaus rió.

Klaus: de acuerdo bebé

Le dio un beso en la mejilla y salió del cuarto cerrando la puerta, Aria rápidamente se puso el uniforme y bajó corriendo la escalera.

Cuando llegó al living corrió hacia la mesa, agarró un vaso de jugo. Se lo tomó atragantándose ante la mirada incrédula de Klaus, lo dejó en la mesa y se dispuso a salir pero su padre se apareció delante de ella.

Aria: ¿qué haces? nos tenemos que ir

Klaus le dijo serio.

Klaus: no hasta que desayunes como corresponde

Aria rodó los ojos.

Aria: deja de molestar, llegaré tarde

Klaus la siguió mirando seriamente, tenía los brazos detrás de la espalda.

Klaus: no me importa si llegas tarde, tu salud es lo más importante para mi, últimamente comes muy poco, casi siempre te tengo que obligar a comer

Aria: no exageres

Aria miró a Rebekah en busca de ayuda.

Aria: tía Bekah dile a tu hermano que no es así, no como poco

Rebekah la miró unos segundos y suspiró.

Rebekah: perdón sobrinita pero tu padre tiene razón, estás muy flaca

Aria la miró ofendida, se cruzó de brazos y dijo molesta.

Aria: hey, te deberías poner de mi lado traidora

Rebekah: no siempre me pondré de tu lado Hope

Le dijo su tía con una sonrisa, Aria la fulminó con la mirada. De repente sintió que Klaus le hablaba al oído.

Klaus: siéntate y desayuna como es debido

Aria se alejó rápidamente de él y corrió hacia la puerta.

Aria: ¡no tengo tiempo! ¡llegaré tarde! ¡prometo comer bien después... ah!

Se frenó en seco porque casi choca contra Klaus, su padre se había aparecido delante de ella tan repentinamente que apenas tuvo tiempo de detenerse. Klaus le sujetó la cara con sus manos, se acercó más a ella y le dijo.

Klaus: te sentarás en la mesa y desayunarás como corresponde

Mientras se lo decía Aria veía como sus pupilas se dilataban y luego se contraían, una vez que Klaus la terminó de hipnotizar la soltó. Aria pestañeó y miró a su padre furiosa.

Aria: ¡maldito seas Klaus! ¡me las pagarás!

Klaus rió a carcajadas.

Klaus: no me eches la culpa Hope, si llegas tarde al colegio no es porque te obligué a desayunar sino porque no te levantaste a tiempo

Dijo divertido, Aria lo fulminó con la mirada y se sentó en la mesa.

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Luego de desayunar Klaus se puso de pie y se acercó a Aria.

Aria: ¿qué?

Klaus: ¿quieres que te lleve usando mi velocidad vampírica? en el auto llegarás mas tarde

Aria suspiró, no le gustaba que la trasladaran a esa velocidad. Siempre tenía que cerrar los ojos sino se mareaba y para colmo se despeinaba.

Pensó "Stefan me verá con el pelo revuelto como si hubiera ido al colegio en moto sin casco" luego se abofeteó mentalmente y pensó "¿en serio pensaste eso Aria? ¿te preocupa el como te vea Stefan?" otra voz le dijo "no, no me importa estar linda delante de él" pero luego dudó "¿o si? ya basta Aria" Klaus la sacó de sus pensamientos. La miraba enarcando una ceja.

Klaus: ¿y bien?

Aria: está bien pero déjame a una cuadra

Klaus rió a carcajadas, Aria lo miró confundida.

Klaus: no

Aria: ¿por qué no?

Preguntó Aria molesta.

Klaus: quiero que superes la vergüenza tonta esa que tienes, no te tiene que dar vergüenza que tus padres te lleven al colegio

Aria lo miró sorprendida.

Aria: ¿qué dices...? ¡claro que si!

Klaus negó divertido.

Klaus: claro que no

Aria volvió a suspirar.

Aria: esta vez no te queda otra que dejarme a una cuadra, sino mis compañeros sospecharán, te verán aparecer de la nada conmigo en brazos

Luego se puso a pensar que era peor que la vieran en brazos de Klaus a que descubrieran que su padre es un ser sobrenatural.

Aria: peor aún, me parece más vergonzoso que me vean en tus brazos a que se enteren que tienes súper poderes

Dijo Aria con un exceso de sinceridad, Klaus la miró y fingió estar ofendido.

Klaus: me ofendes amor

Aria: si seguro

Dijo Aria escéptica, Klaus rió a carcajadas.

Klaus: bueno, la verdad es que no me ofendes para nada

Luego se encogió de hombros.

Klaus: me importa poco y nada lo que piensen esos humanos

Aria: a mi si me importa, por favor Klaus, hazlo por mi

Dijo juntando sus manos como implorando y poniendo cara inocente, Klaus la miró sin decir nada.

Aria: por favor papá

Klaus sonrió, se arrodilló delante de ella y apoyó las manos en las mejillas de su hija.

Klaus: sólo porque me dijiste papá y hace varios días que no te escucho llamarme así

Le dio un beso en la frente y la soltó, le volvió a sonreír.

Klaus: aunque sé que sólo lo dices para convencerme me gusta escucharlo, me encantaría que me dijeras papá más seguido

Aria rió.

Aria: algún día, sigue esperando

Klaus esbozó una sonrisa maliciosa.

Klaus: quiero que me vuelvas a decir así

Aria lo miró con timidez.

Aria: pe... pero... ya te lo acabo de decir

Klaus: quiero escucharlo de nuevo

Dijo Klaus despreocupadamente, Aria sintió que sus mejillas se sonrojaban.

Aria: papá

Dijo en un susurro, Klaus la había escuchado perfectamente gracias a su oído vampírico pero aún así le exigió que lo dijera una vez más porque quería escucharlo más alto.

Klaus: ¿qué dijiste?

Preguntó divertido.

Klaus: no te escuché

Aria lo miró molesta.

Aria: si me escuchaste Klaus, tienes súper oído

Klaus rió.

Klaus: es cierto pero quiero escucharlo más fuerte

Aria: eso no es justo, ya te lo dije dos veces

Klaus: dilo una tercera sino no irás al colegio hoy

Dijo con diversión, Aria se quejó.

Aria: ¡eso no es justo!

Klaus: okay, supongo que no quieres ir entonces

Se dispuso a ponerse de pie pero Aria le agarró la muñeca para que no se levantara, Klaus la miró.

Aria: espera, lo diré

Y le soltó la muñeca, Klaus la miró con una gran sonrisa.

Aria: papá

Dijo más fuerte sin embargo sus mejillas se sonrojaron, Klaus rió y le acarició una mejilla con su mano.

Klaus: muchas gracias hija, eres tan tierna, te pones tímida por cualquier cosa

Aria soltó una risa nerviosa y apartó la cara para zafarse del agarre de Klaus, miró su reloj y abrió grandes los ojos. Luego miró a su padre preocupada.

Aria: ¡ya es muy tarde Klaus! ¡debemos irnos!

Klaus se puso rápidamente de pie, agarró a Aria. La alzó como si fuera una princesa y desapareció a velocidad vampírica de la mansión.

Aria cerró los ojos porque todo se movía a súper velocidad, se mareaba con facilidad. Sintió como el viento le golpeara la cara, luego de unos segundos lo dejó de sentir. Dedujo que ya habían llegado.

Abrió los ojos y efectivamente habían llegado pero no se encontraba a una cuadra del colegio, estaba en la entrada del mismo. Furiosa golpeó a Klaus en el pecho, su padre rió.

Aria: ¡Klaus! ¡me hiciste una emboscada!

Klaus: ¿de qué hablas bebé?

Preguntó tratando de contener la risa, Aria lo fulminó con la mirada.

Aria: te dije 3 veces papá

Luego se abofeteó mentalmente.

Aria: joder, ahora 4 veces

Klaus la miró divertido enarcando una ceja.

Aria: por nada

Concluyó Aria molesta, Klaus volvió a reír.

Klaus: si te sirve de consuelo me hiciste feliz llamándome así

Aria tragó saliva.

Aria: eh... yo... me alegro entonces

Klaus le dio un beso en la frente, Aria lo apartó de un manotazo.

Aria: ¡apártate!

Y miró a los alrededores nerviosa.

Aria: alguien puede estar mirando, me harán bulling después

Klaus volvió a reír.

Klaus: sólo para que quede claro, el motivo por el que te traje a la entrada del colegio y no a una cuadra no fue por una emboscada como crees sino porque a esta hora se supone que ya no hay ningún alumno ingresando a la escuela

Aria suspiró.

Aria: es cierto, bueno gracias Klaus

Klaus: de nada bebé

Aria: ahora bájame porque no quiero que los profesores me reten, cuanto más me demore en entrar peor

Klaus rió.

Klaus: yo tampoco

Bajó a Aria y la abrazó.

Klaus: adiós hija, nos vemos más tarde

Aria le correspondió el abrazo.

Aria: adiós Klaus

Klaus le dio un beso en la frente, luego deshizo el abrazo y desapareció de allí a velocidad vampírica. Aria abrió su bolso y sacó un pequeño espejo, se acomodó un poco el pelo.

Aria: así está mejor

Guardó el espejo, cerró el bolso y caminó hacia el colegio. Cuando entró escuchó una voz que la hizo saltar asustada.

Stefan: hola Aria

Rápidamente miró a la persona que había hablado. Era Stefan, estaba apoyado despreocupadamente en una comuna cercana muy cerca a la entrada.

Aria pensó "por Dios, se ve tan sexy..." otra voz le dijo "ése no es el punto Aria, pudo haber escuchado algo" Aria se puso nerviosa con esa posibilidad, Stefan le sonreía.

Aria: ho... hola Stefan

Se abofeteó mentalmente por tartamudear, Stefan se acercó a ella aún sonriendo. Sin embargo su sonrisa duró poco, de repente la miró serio y le preguntó.

Stefan: ¿eres la hija perdida de Klaus?

Aria: perdida no, encontrada

Stefan rió a carcajadas, Aria pensó "Stefan se está riendo por mi comentario, se ve tan sexy... ¡basta ya Aria! ¡contrólate! pero es tan sexy... ¡que te controles maldita sea!" Stefan la sacó de su ensimismamiento.

Stefan: ¿Aria?

Aria: ah... ¿qué?

Stefan rió a carcajadas otra vez, Aria lo miró sin entender que le pasaba.

Aria: ¿de qué te ríes?

Stefan se calmó y dijo con lágrimas en los ojos.

Stefan: nada, es que me dio gracia verte perdida en tus pensamientos, te ves tierna

Aria se sonrojó ligeramente, no sabía si porque la había llamado despistada o tierna.

Aria: me pasa bastante seguido

Luego le vino una duda a la cabeza.

Aria: un momento... ¿cómo conoces a Klaus?

Stefan la miró pícaramente.

Stefan: de acuerdo

Dijo con una sonrisa.

Stefan: hagamos un trato

Aria lo miró confundida.

Aria: ¿cuál?

Stefan: tu me cuentas tu historia a cambio de que yo te cuente mi historia

Aria abrió grandes los ojos sorprendida.

Aria: ¿tu tienes historia? ¿en serio?

Stefan fingió estar ofendido y dijo.

Stefan: claro que si

Aria rodó los ojos.

Aria: ¿y yo cómo lo iba a saber?

Sin embargo antes de que Stefan contestara Aria lo miró preocupada.

Aria: un momento... por esas casualidades de la vida... ¿viste todo lo que pasó recién?

Stefan: ¿te refieres a lo que hablaste con tu padre afuera?

Aria quiso que la tragara la tierra, Stefan había visto y escuchado todo. Se sonrojó y lo regañó.

Aria: no debiste haber escuchado Stefan, espiar está mal

Dijo cruzándose de brazos, Stefan volvió a reír a carcajadas.

Stefan: no tengas vergüenza, si quieres mi opinión yo pienso que Klaus realmente te quiere y es lógico que sea así, te buscó durante 17 años sin parar

Aria no entendía nada, Stefan conocía a Klaus. Stefan sabía que su padre la había buscado desde que nació pero... ¿cómo?

Aria: no entiendo nada... ¿cómo sabes todo eso?

Stefan le sonrió.

Stefan: ya te dije, yo tengo mi propia historia y tu no la conoces

Aria: quiero conocerla

Dijo Aria rápidamente, antes de que Stefan pudiera contestarle el director apareció y los retó.

Director: ¡Salvatore! ¡Benson!

Stefan y Aria lo miraron.

Director: ¿qué hacen en el pasillo a estas horas de la mañana? ¡vayan a clase de inmediato de lo contrario estarán castigados!

Aria y Stefan asintieron rápidamente.

Aria y Stefan: si director

Se dieron la vuelta y se encaminaron al salón de clase, Stefan le dijo a Aria.

Stefan: a la salida del colegio te cuento todo y tu me cuentas a mi todo

Aria lo miró y sonrió.

Aria: hecho

Stefan le devolvió la sonrisa.

Stefan: tenemos un trato