Aria estaba desconcertada ¿qué hacía Elena Gilbert allí? aunque no podía quejarse, era la excusa perfecta para huir. Damon estaba distraído por la repentina aparición de la castaña así que aprovecharía para irse.

La verdad era que estaba aterrada, Damon acababa de darle un beso ardiente y no sabía como sentirse al respecto. El muy maldito la había atrapado desprevenida, Aria nunca se imaginó que pudiera besarla de esa manera.

El sólo recordar el beso hacía que se le pusiera la piel de gallina y el corazón le latiera deprisa. Miró rápidamente a Damon y luego a Elena. Efectivamente estaban mirándose entre ellos así que ésa era su oportunidad para huir.

Sin pensarlo dos veces, Aria escapó usando la velocidad vampírica. Al principio tuvo miedo de que alguno de los dos la siguiera pero por suerte eso no sucedió.

Se detuvo frente a la mansión y soltó un suspiro de alivio, aunque ese alivio duró poco, se esfumó sin previo aviso. Aria abrió grandes los ojos al ver a su padre de pie a unos metros de ella observándola fijamente. Klaus se encontraba de brazos cruzados y su mirada era seria.

Aria pensó "¡oh no! ¡Klaus me descubrió! ¡sabe que le desobedecí y me fui de casa! ¡maldito Damon! ¡te odio por obligarme a salir! ¡ahora yo tengo que enfrentar a Klaus mientras tú estás conversando tranquilamente con Elena! ¡juro que me vengaré! ¡de esta no te salvas Salvatore!".

Aria dejó de divagar en sus pensamientos cuando notó que Klaus estaba caminando hacia ella. Soltó una risita nerviosa.

Aria: papá

Miró los alrededores y luego miró a Klaus que estaba aún más cerca de ella, la mirada de su padre le indicaba que estaba en problemas.

Aria retrocedió unos cuantos pasos que no le sirvieron de nada puesto que Klaus siguió acercándose a ella con esa mirada seria, los nervios se apoderaron de Aria.

Aria: adiós

Fue lo único que se le ocurrió decir en ese momento y trató de escaparse de su padre a velocidad vampírica, Aria pensó "llaménme cobarde pero no quiero enfrentar a Klaus, joder... me castigará hasta el año que viene" de repente Aria se detuvo abruptamente. Klaus se había aparecido delante de ella, a Aria no le pareció raro, su padre era mucho más veloz que ella y lo sabía.

Aún así quiso huir hacia otra dirección pero antes de que pudiera moverse, Klaus la atrapó y la colocó encima de su hombro. Aria se sintió derrotada y pensó "game over Aria, bien hecho".

Klaus: 10 minutos, me voy 10 minutos y ya me estás desobedeciendo

Comentó Klaus con frustración y enojo, Aria tragó saliva.

Klaus: te prohibí salir de la mansión hasta que atrapara a Aurora

Aria: lo sé...

Dijo Aria un hilo de voz.

Klaus: y no me hiciste caso

Aria: eh...

Aria ya no sabía que más decir, ni loca le decía a su padre que había estado con Damon. Eso lo pondría más furioso aún.

Klaus: no te molestes en tratar de justificarte, ya me imaginé que podrías desobedecerme, tenía un extraño presentimiento, por eso les pedí a Elijah, Rebekah y Camille que siguieran buscando a Aurora mientras yo volvía a la mansión para vigilarte pero cuando llegué no estabas allí, al final tenía razón

Aria tragó saliva con nerviosismo, nunca se imaginó que Klaus pudiera regresar, menos a los 10 minutos de haber partido.

Klaus: estuve a punto de hipnotizar a Emily para que me dijera a donde habías ido pero no fue necesario, escuché tus pasos por lo que bajé rápidamente y te esperé afuera

Aria sintió un gran alivio, si Klaus hubiera hipnotizado a Emily habría descubierto que se había ido con Damon y su castigo hubiera sido muchísimo peor. Su padre odiaba a Damon, aún así... estaba en problemas.

Aria: perdón papá

Dijo con el mejor tono de culpa que consiguió pronunciar con el objetivo de ablandar a su padre, Klaus suspiró.

Klaus: acepto tus disculpas hija

Luego agregó con firmeza.

Klaus: aún así estarás castigada y no sólo eso, te hipnotizaré para que no puedas salir de la mansión hasta nuevo aviso, no confío en ti

Aria gritó sorprendida y horrorizada.

Aria: ¡¿qué?!

Klaus: lo que escuchaste

Respondió su padre con vehemencia y determinación, Aria no podía permitirlo. Se rehusaba a seguir encerrada en esa mansión.

Trató de escapar de Klaus poniendo todo su empeño pero su padre la sujetó con más firmeza y acto seguido soltó una risa victoriosa.

Klaus: de esta no escaparás bebé

Dijo con alegría, Aria bufó. Empezó a patalear y a pegarle a Klaus en la espalda con sus manos.

Aria: ¡no! ¡suéltame! ¡no puedes hacerme eso Klaus! ¡es injusto! ¡te aprovechas de tus habilidades de híbrido original!

Gritó Aria sumamente indignada. Klaus no pudo contenerse, rió divertido y comentó con melancolía.

Klaus: extrañaba esto

Aria se quedó repentinamente quieta y preguntó confundida.

Aria: ¿a qué te refieres?

Klaus: me refiero a que extrañaba nuestras discusiones, hacía tiempo que no te cargaba en brazos a la fuerza y escuchaba tus quejas por ello

Aria rodó los ojos y dijo con un exceso de sinceridad.

Aria: pues porque estaba en ese horrible calabozo

Klaus hizo una mueca.

Klaus: no me recuerdes esas épocas oscuras, esa etapa ya pasó

Aria: para mi no porque seguiré encerrada

Comentó Aria con molestia.

Klaus: lo lamento hija pero todo sea por tu seguridad

Dijo Klaus empezando a caminar hacia la mansión, Aria soltó un gritito de frustración y luego insultó a su padre.

Aria: ¡vete al infierno!

Klaus rió a carcajadas, Aria sintió que le hervía la sangre ¡maldito Klaus! se estaba divirtiendo con sus berrinches.

Klaus: ¿eso es todo lo que tienes?

Preguntó divertido, claramente provocando a su hija esperando a ver con que insulto iba a salir esa vez. Aria empezó a patalear otra vez y a golpear la espalda de su padre con sus manos.

Aria: ¡joder! ¡no te soporto cuando te pones así!

Klaus soltó otra carcajada, cuando logró parar de reír comentó con sinceridad.

Klaus: en cambio a mi me encanta cuando te pones así, es muy divertido

Aria frunció el ceño, no le parecía raro.

Aria: ¡maldito híbrido!

Klaus: ése estuvo mejor que el anterior

Reconoció Klaus con una sonrisa de suficiencia, Aria rodó los ojos. Lo mejor era quedarse callada ya que con cada insulto que decía, Klaus más reía y se divertía, una actitud típica de él.

Finalmente su padre llegó a la mansión y abrió la puerta principal con una mano mientras que con el otro brazo cargaba a Aria. Apenas Klaus entró y cerró la puerta tras él, se escucharon los gritos de Hayley.

Hayley: ¡Hope!

Aria tragó saliva, ahora se venía el regaño de su madre sin embargo antes de que Hayley pudiera decir algo más, Klaus habló.

Klaus: espera lobita, no la regañes todavía, primero tengo que hacer algo

Klaus depositó a su hija en el suelo, luego le sujetó los brazos y se acercó a ella para poder hipnotizarla.

Klaus: no saldrás de la mansión hasta que yo te diga lo contrario

Aria vio como las pupilas de su padre se dilataban y luego se contraían. Una vez que Klaus dijo eso, soltó a su hija y la observó con una sonrisa. Aria pestañeó y luego puso cara de tristeza.

Aria: joder...

Se quejó en voz baja, Klaus soltó una risita y miró a Hayley con una ceja enarcada.

Klaus: listo, ahora regañala todo lo que quieras

Dijo Klaus con una sonrisa de suficiencia, Aria lo fulminó con la mirada y luego se cruzó de brazos molesta.

La rubia tomó valor y se dio vuelta para enfrentar a su madre, la mirada de Hayley no auguraba nada bueno. Aria pensó "demonios, estoy en problemas".

Luego miró a Emily que se encontraba también en el living, la expresión de su amiga era de pena y culpa y como no, ella la había motivado a que se fuera con Damon y ahora estaría castigada por ello. Aria resopló con cansancio.

Hayley: no lo puedo creer Hope, realmente no lo puedo creer

Empezó Hayley con el tono de voz elevado, Aria fijó su mirada en el suelo.

Hayley: después de la angustia que pasó toda la familia el día de hoy debido a tu secuestro... a ti se te ocurre salir de noche y sola

Aria en parte se sintió aliviada porque sus padres no sospechaban que había estado con alguien más, y que ese alguien más era nada más y nada menos que Damon, el vampiro que su padre aborrece.

Aria escuchó los pasos de Hayley, su madre estaba caminando hacia ella. Cuando Hayley estuvo delante de su hija se cruzó de brazos y ordenó con seriedad.

Hayley: mírame

Aria levantó la mirada a regañadientes. Últimamente no sabía quien era peor, quien era más estricto, si ella o Klaus.

Hayley: con tu padre entendemos que estés cansada y harta de estar encerrada y que quieras tomar un poco de aire pero...

Klaus se paró al lado de su hija, la miró con seriedad y completó la frase que estaba diciendo Hayley.

Klaus: si te lo prohibimos es por tu bien y para que nos hagas caso, cuando te damos una orden debes cumplirla

Aria no fue capaz de sostener la mirada de su padre por más tiempo y la desvió.

Klaus: ¿entendiste hija?

Aria asintió aún sin mirarlo.

Klaus: bien, de todas maneras estoy tranquilo porque estás bajo los efectos de mi compulsión, no podrás escapar aunque te lo propongas

Aria miró a Klaus y preguntó con timidez.

Aria: ¿cuál será mi castigo papá?

Quería que la terminaran de regañar cuanto antes y encerrarse en su habitación, en primer lugar odiaba cuando la retaban y en segundo, necesitaba hablar con Emily urgentemente sobre el beso que le había dado Damon.

A Aria ya se le había ocurrido una idea para que sus padres no la escucharan. Les iba a mentir que tomaría una ducha y una vez que estuviera encerrada en el baño con su mejor amiga, abriría las canillas de agua, de esa manera Klaus y Hayley no podrían escuchar su conversación.

Aria pensó que si les decía que se quería duchar le creerían ya que su remera estaba manchada de sangre, todo gracias a la psicópata de Aurora que la había apuñalado con una estaca. Klaus habló sacándola de sus pensamientos.

Klaus: tu castigo será permanecer encerrada hasta que encontremos a Aurora más otra semana de encierro por haber escapado

Comentó con determinación, Aria lo miró horrorizada.

Aria: ¡¿qué?! ¡no!

Klaus se cruzó de brazos y sonrió.

Klaus: ése será tu castigo

Luego cambió su expresión sonriente a una seria.

Klaus: y no lo modificaré

Su hija lo miró anonadada y luego empezó a hacer berrinches.

Aria: ¡no papá! ¡no seas malo! ¡sabes perfectamente que estoy cansada de estar encerrada! ¡¿una semana más?! ¡¿en serio?! ¡es demasiado tiempo!

Klaus se encogió de hombros y dijo con tranquilidad.

Klaus: los castigos no son divertidos, son para que aprendas la lección

Aria empezó a lanzar maldiciones.

Klaus: el vocabulario amor

Dijo Klaus con una ceja levantada, Aria extendió los brazos exasperada.

Aria: ¡vete al infierno! ¡no quiero escucharte más!

Dicho eso se dirigió a la escalera con pasos firmes, de repente Klaus se apareció delante de ella y antes de que Aria pudiera alejarse de él, su padre la abrazó.

Aria: ¡suéltame Klaus! ¡no quiero verte ni en figurita!

Klaus preguntó ofendido.

Klaus: ¿Klaus? ¿cómo que Klaus? me estabas diciendo papá

Aria rodó los ojos.

Aria: a veces se me escapa, es la costumbre

Comentó con sinceridad, Klaus sonrió y dijo aliviado.

Klaus: me quedo más tranquilo entonces

Aria empezó a moverse para tratar de soltarse de su agarre.

Aria: ¡que me sueltes!

Klaus lejos de soltarla, afianzó el agarre. Aria decidió rendirse, era inútil batallar con Klaus. La rubia se quedó quieta esperando que su padre hablara. Sin embargo no le correspondió el abrazo, estaba molesta con él.

Pensó con tristeza y frustración "¡¿una semana de castigo?! ¡¿más el tiempo que les lleve encontrar a Aurora?! ya puedo ir despidiéndome de mis recorridos por la ciudad con Emily" su padre habló sacándola otra vez de sus pensamientos.

Klaus: no te enojes bebé, sabes que tengo razón en castigarte

A Aria no le quedó otra que darle la razón, había sido una imprudente y una inconsciente luego de lo ocurrido ese día. Tenía que reconocerlo.

Ella en un primer momento no quiso salir, no quiso desobedecer a su padre. Toda la culpa la tenía el insistente y pesado de Damon y en parte Emily que la alentó a escapar. Aria soltó un suspiro.

Aria: si, tienes razón

Dijo con sinceridad, Klaus la soltó y la miró impresionado debido a que su hija en vez de seguir discutiendo estaba reconociendo su error. Su padre esbozó una sonrisa victoriosa.

Klaus: me alegro que lo entiendas

Aria dejó de mirar a Klaus y miró a su madre que se había colocado al lado de su padre.

Hayley: yo también me alegro Hope y espero que aprendas la lección de una vez

Dijo Hayley con seriedad, Aria fijó su mirada en el suelo y luego asintió. Pasados unos segundos miró a sus padres.

Aria: iré a tomar una ducha

Se miró su camiseta manchada en sangre y luego volvió a mirar a Klaus y a Hayley.

Aria: ustedes entienden

Dijo señalándose la camiseta, sus padres asintieron. Aria miró hacia el costado en dirección a Emily que se encontraba de pie a unos pasos de ellos sin emitir palabra.

Aria: vamos Emily

Su amiga asintió aún avergonzada, se sentía culpable porque habían castigado a Aria y en parte era gracias a ella. Emily se acercó a Klaus, Hayley y Aria y se puso de pie al lado de su amiga. Aria miró a sus padres.

Aria: permiso

Exigió con un poco de impaciencia ya que ellos estaban de pie delante de la escalera obstruyéndoles el paso. Klaus y Hayley se apartaron dejándolas pasar. Una vez que Aria y Emily estuvieron en el cuarto de Aria, la rubia cerró la puerta y Emily aprovechó para disculparse.

Emily: Aria lo siento...

Sin embargo guardó silencio cuando Aria la tomó del brazo y la dirigió al baño. Una vez allí su amiga cerró la puerta, abrió las canillas de la ducha y del lavatorio y se giró hacia Emily con una expresión seria y asustada.

Emily: ¿qué te ocurre?

Preguntó Emily sorprendida y preocupada, Aria tragó saliva y dijo en un susurro.

Aria: Damon me besó y...

En seguida habló con un tono de voz aún más bajo mientras fijaba su mirada en el suelo.

Aria: me gustó