Capítulo 25: ¿Apagaste Tu Humanidad?
Mientras tanto en la mansión Mikaelson... Rebekah estaba sentada en uno de los sillones mirando una revista mientras que Elijah, Hayley y Camille se encontraban en algún lugar de la mansión.
El sonido de un portazo la hizo levantar la vista de la revista, era Klaus que acababa de entrar furioso por la puerta de entrada. Rebekah no entendía que le pasaba a su hermano.
Klaus: me clavó el visto
Dijo el híbrido con mala cara, luego gritó.
Klaus: ¡me clavó el visto!
Su hermana lo miró muy confundida.
Rebekah: ¿de qué hablas?
Klaus se puso de pie delante de ella, su mirada daba miedo.
Klaus: ¡de mi hija! ¡¿de qué otro tema podría estar hablando?!
Dijo extendiendo los brazos exasperado, Rebekah se puso de pie alarmada.
Rebekah: ¡¿qué pasó con Hope?!
En el momento en que gritó eso los demás miembros de la familia aparecieron a velocidad vampírica en el living, Hayley le preguntó preocupada a Klaus.
Hayley: ¿qué pasó con nuestra hija Klaus?
Rebekah: cuéntanos Nik
Exigió Rebekah desesperada por información.
Rebekah: ¿por qué estás tan enojado? ¿qué pasó con tu hija?
Klaus la fulminó con la mirada, luego dijo con una falsa sonrisa.
Klaus: ¿no es obvio?
Para luego gritar furioso.
Klaus: ¡escapó! ¡¿acaso la ves aquí conmigo?!
Rebekah: n... no... pero...
Klaus la interrumpió.
Klaus: ¡es la segunda vez que me hace esto! ¡no lo puedo creer! ¡está más rebelde que nunca!
Hayley estaba en shock, por eso no había dicho nada hasta el momento, Elijah le rodeó los hombros con su brazo. La lobita reaccionó y preguntó preocupada.
Hayley: ¿por qué nos hace esto? no lo entiendo
Klaus: no lo sé pero puede despedirse del colegio
Dijo Klaus enojado, luego les explicó mejor lo sucedido.
Klaus: resulta que la fui a buscar, no la encontré, pasé 15 minutos buscándola por todo el colegio, como no aparecía le mandé mensajes preguntándole en donde estaba y me clavó el visto
Rebekah: ah
Dijo Rebekah comprendiendo.
Rebekah: ahora entiendo porque entraste gritando que te había clavado el visto
Hayley preguntó sorprendida con una ceja levantada.
Hayley: ¿de verdad ella hizo eso?
Klaus: si y no es todo, le advertí que me dijera donde estaba si quería seguir yendo al colegio luego de esto, le di una última oportunidad y aún así me volvió a clavar el visto
Hayley se enfureció.
Hayley: ¡pero!... ¡¿qué le pasa?! ¡no podemos permitir esto Klaus!
Klaus sonrió maliciosamente.
Klaus: oh no, claro que no, no pasaré por alto lo que pasó, le dije que no le convenía desafiarme y aún así no me hizo caso, apenas la encuentre...
Sonrió más y dijo.
Klaus: cumpliré con mi palabra aunque me ruegue
Luego dijo con seriedad.
Klaus: no volverá al colegio, es la única forma de que aprenda, no permitiré que me desobedezca de esa manera, fue tres días al colegio desde que llegamos a New Orleans y escapó dos, es demasiada rebeldía para mi gusto, entiendo que es una adolescente que se quiere divertir pero no toleraré su actitud, no soporto no saber donde está, sabe que es muy difícil para mi, lo sabe perfectamente y aún así escapa de nuevo
Hayley: es muy difícil para todos
Aclaró Hayley.
Klaus: exacto
Elijah preguntó sorprendido.
Elijah: pero ¿qué le pasa a mi sobrina?
Camille se encogió de hombros y dijo.
Camille: la adolescencia, eso le pasa
Klaus: si algo te puedo asegurar
Dijo Klaus mirando a Camille.
Klaus: es que mi hija no será como los adolescentes rebeldes de hoy en día y si para conseguirlo tengo que ser estricto, lo seré
Sentenció Klaus serio, Hayley asintió.
Hayley: bien dicho, estoy de acuerdo
Rebekah: todos lo estamos
Klaus esbozó una sonrisa maliciosa.
Klaus: bueno, creo que es hora de buscarla, nos dividamos, tarde o temprano la encontraremos, no puede esconderse para siempre
Hayley dijo seria.
Hayley: si, no puede escapar de nosotros
Elijah: a buscarla
Todos asintieron y desaparecieron de la mansión a velocidad vampírica.
⚜️⚜️⚜️⚜️
Ya había anochecido, Aria había matado a demasiadas personas bebiendo su sangre así que se dirigió a un bar. Ahora tenía sed de alcohol, entró y se encaminó a la barra.
Había un chico sentado en un asiento, justo el asiento en el que ella quería sentarse a pesar de que habían otras sillas libres frente a la barra pero ella quería ésa.
Carraspeó para llamar la atención del chico, cuando el chico la miró Aria lo señaló.
Aria: quiero ese lugar
El chico le sonrió.
Chico: hola preciosa
Era realmente lindo pero a Aria no le importó, sólo quería que se apartara de ese asiento. Se cruzó de brazos y dijo con desprecio.
Aria: muévete, me quiero sentar ahí
El chico la miró repentinamente confundido.
Chico: ¿por qué? hay más lugares libres
Dijo señalando los otros asientos, justo un camarero joven y apuesto se acercó y preguntó.
Camarero: ¿pasa algo?
Aria lo miró fugazmente y luego miró al chico, esbozó una sonrisa maliciosa.
Aria: de hecho...
A velocidad vampírica se puso detrás de ese chico, le sujetó rápidamente la cabeza con las manos y acto seguido le quebró el cuello. Lanzó el cadáver al piso y de un salto se sentó en el asiento frente a la barra.
Todo el bar estalló en gritos, la gente empezó a huir corriendo. Aria señaló al camarero antes de que pudiera escapar, el camarero tembló.
Aria: tú, quita este cuerpo de mi presencia
Dijo señalando ahora al chico, luego dijo con mala cara.
Aria: entorpece mi visual del bar
El camarero se puso pálido, Aria lo miró sonriendo.
Aria: cuando termines con eso traéme una botella de tequila
Como el camarero no respondía por el shock y la impresión Aria lo fulminó con la mirada, el camarero sintió un escalofrío.
Aria: ¿entendiste o no?
El camarero rápidamente asintió.
Camarero: si señorita
Aria: bueno... ¡muévete!
El camarero salió corriendo de detrás de la barra, se colocó al lado de Aria, se agachó. Alzó el cadáver y salió afuera, Aria vio que el camarero dejaba el cuerpo en el pasto y corría. Huía lejos del bar, sonrió.
Aria: idiota
A velocidad vampírica se puso delante de él en un segundo, el camarero frenó en seco. Aria lo observó con una sonrisa malévola.
Aria: creo haberte dicho que me trajeras una botella de tequila cuando terminaras con el cadáver
El camarero empezó a temblar, Aria le agarró rápidamente la mano y la giró quebrándole de esta manera la muñeca. El camarero soltó un grito, Aria rió y le soltó la mano.
Aria: espero que esto te sirva de advertencia, la próxima vez que me desobedezcas te mataré en un abrir y cerrar de ojos, ahora...
Señaló el bar.
Aria: vuelve adentro y traéme una botella de tequila con tu mano sana
El camarero que estaba llorando y se sujetaba la mano herida con su otra mano asintió rápidamente y entró corriendo al bar.
Aria lo siguió caminando con las manos detrás de la espalda y tarareando una canción, cuando entró se sentó de nuevo pero esta vez en el asiento de al lado.
Aria: ahora me gusta más este lugar
Dijo riendo, el bar había quedado vacío. Sólo estaban ella y el camarero.
Camarero: aquí tiene
Le puso la botella de tequila en la mesa, Aria la agarró y la miró unos momentos. Luego lo miró a él con ojos entrecerrados, el camarero se puso excesivamente nervioso.
Aria: espero que esté a una temperatura adecuada, el frío exacto que a mi me gusta de lo contrario te quebraré la otra muñeca o mejor...
Esbozó una sonrisa maliciosa.
Aria: una pierna así no te dejo inválido, necesito que me traigas varias botellas esta noche, como que no quiero ir a buscarlas yo, para eso estás tú
Luego agregó con desprecio y se cruzó de brazos.
Aria: humano inútil
Después de decir eso le dijo.
Aria: vete al fondo, no quiero verte la cara, cuando te necesite te llamaré de nuevo
El camarero rápidamente le hizo caso, Aria destapó la botella y bebió un sorbo. Dudó unos segundos, luego gritó.
Aria: ¡ven aquí!
El camarero volvió horrorizado, Aria lo miró con una ceja levantada.
Aria: te salvaste, me gusta la temperatura que tiene el tequila
El camarero suspiró aliviado, Aria sonrió con malicia.
Aria: veremos si tienes la misma suerte con la próxima botella que me traigas
El camarero empezó a temblar, Aria dijo con mala cara.
Aria: es todo
Luego hizo una seña con su mano para que se fuera.
Aria: lárgate
Luego de unos minutos Aria se dio cuenta que el bar era aburridísimo.
Aria: ¡camarero!
El camarero volvió corriendo y preguntó agitado.
Camarero: s... ¿si señorita?
Aria: pon algo de música, tu apestoso bar me aburre
El camarero asintió, antes de que se fuera Aria lo volvió a llamar.
Aria: espera ¿tienes música rock?
El camarero asintió otra vez.
Aria: bien, pon eso, es todo, piérdete
El camarero corrió y encendió el equipo de música, empezó a sonar Blame de Calvin Harris.
Aria: esto es electropop pero...
Se encogió de hombros y sonrió.
Aria: me gusta
Aria empezó a bailar ligeramente mientras bebía su botella de tequila, luego de haber escuchado el estribillo de la canción ya se lo sabía así que cuando volvió a sonar el estribillo lo cantó de memoria.
Aria: so blame it on the night, don't blame it on me, don't blame it on me, blame it on the night, don't blame it on me, don't blame it on me
Luego cantó más fuerte.
Aria: ¡blame it on the night! ¡don't blame it on me! ¡don't blame it on me!
Una voz la hizo callar.
Klaus: te diría que cantas espectacular pero estoy muy furioso contigo
Aria soltó una carcajada, cuando paró de reír miró a su padre. Estaba de pie muy cerca de ella inclinado sobre la barra, apoyando los codos en ésta y mirándola con atención.
No mentía cuando decía que estaba muy furioso, en otros tiempos a Aria le hubiera dado miedo verlo así pero ahora... sólo le causaba gracia. Aria enarcó una ceja y sonrió.
Aria: me preguntaba cuando me encontrarías, te llevó más tiempo del que pensé, ya es de noche
Klaus inmediatamente se dio cuenta que algo andaba mal, la respuesta de su hija lo descolocó. Estaba actuando muy raro, ella nunca hubiera sido capaz de decirle algo así. Le sujetó la cara con las manos y le dijo.
Klaus: mírame
Cuando Aria lo miró notó algo diferente en ella, le preguntó repentinamente preocupado.
Klaus: ¿qué te pasa hija?
Aria apartó rápidamente la cara zafándose de su agarre, le dirigió a Klaus una mala mirada y levantó un dedo al tiempo que decía.
Aria: en primera... no me toques
Luego levantó otro dedo.
Aria: y en segunda... que te importa
Acto seguido bebió de la botella de alcohol, Klaus no le hizo caso. Cuando su hija dejó de beber le volvió a sujetar la cara con las manos, Aria lo fulminó con la mirada.
Klaus: dime ya mismo que te ocurre
Ordenó con autoridad, luego dijo preocupado.
Klaus: estás rara
Aria rió a carcajadas, Klaus la miró sorprendido. Cuando dejó de reír volvió a apartar la cara para soltarse del agarre de su padre y se secó una lágrima al tiempo que sonreía.
Aria: no estoy rara, ésta es la verdadera yo
De repente Klaus entendió que estaba pasando. No lo podía creer, su bebé, su hija... no, no podía ser.
Klaus: no... no puede... ser
Una sola vez aparte de ésa Aria había escuchado a su padre tartamudear, era evidente que estaba sorprendido.
Klaus: ¿apagaste tu humanidad?
Preguntó con incredulidad y excesiva preocupación, Aria al ver su cara volvió a reír.
Aria: te sacaría una foto para tener un recuerdo de tu cara en estos momentos, luces patético
Klaus trató de no desmoronarse, el enterarse de que su hija había apagado su humanidad lo golpeó pero trató de aparentar tranquilidad.
Tenía que averiguar que había pasado, por qué lo había hecho. Que motivo la había llevado a tomar tal decisión.
Klaus: sólo dime una cosa
Luego la miró con atención, Aria en cambio lo miró con indiferencia y tomó otro trago de su botella. Klaus se contuvo para no arrancársela de la mano, quería ir por las buenas. Primero quería descubrir por qué su hija había hecho lo que hizo.
Klaus: ¿por qué lo hiciste?
Aria sonrió y dijo para provocarlo.
Aria: como que no tengo ganas de contarte en estos momentos el motivo, quizás después lo haga pero...
Dio otro trago a su botella de tequila.
Aria: no te prometo nada
Klaus no aguantó más, no le gustaba verla tomar de esa forma. Le quitó rápidamente la botella de la mano y la lanzó contra la pared, miró a su hija de brazos cruzados.
Klaus: deja de beber
Le ordenó, Aria lo fulminó con la mirada y simplemente dijo.
Aria: no me digas que hacer y que no hacer porque no te haré caso, no te obedeceré, no me interesan tus ordenes
Dirigió su mirada al frente.
Aria: ¡camarero!
El camarero vino corriendo al escuchar que lo había vuelto a llamar.
Camarero: ¿si señorita?
Aria: traéme otra botella pero esta vez de bourbon
Luego aclaró con mala cara.
Aria: y apúrate si no quieres que te rompa el cuello
El camarero asintió y salió corriendo de nuevo, en el corto tiempo que estuvo allí Klaus notó que tenía la muñeca quebrada.
Dado que Aria no lo miraba estiró la mano apoyándola en una de sus mejillas y le movió con suavidad la cara para que lo viera, Aria lo volvió a fulminar con la mirada. Apartó su mano de un manotazo.
Aria: ¡déjame de molestar!
Klaus rió.
Klaus: eso jamás, soy tu padre, no puedes hacer de cuenta que no existo
Luego le preguntó con seriedad.
Klaus: ¿tú le quebraste la muñeca?
Dijo refiriéndose al camarero, Aria levantó una ceja divertida y señaló la dirección por la que se había ido el susodicho.
Aria: ¿al humano idiota aquél?
Acto seguido se encogió de hombros.
Aria: pues si, me desobedeció una orden que le di
El camarero volvió con la botella de bourbon, se la quiso dar a Aria pero Klaus la tomó antes. Aria lo miró con mala cara, estiró la mano para quitarle la botella pero Klaus la levantó. Aria se puso de pie de un salto y dio saltitos para alcanzarla, Klaus rió.
Aria: ¡dámela imbécil! ¡quiero beber!
Klaus lanzó la botella contra la pared y rápidamente sujetó la cara de Aria con sus manos, se acercó a ella. Aria entendió que era lo que su padre planeaba. Estaba por hipnotizarla para encender su humanidad.
Decidió actuar para darle una sorpresa. Le sujetó las manos y trató de sacárselas de la cara, Klaus sonrió.
Klaus: ya fue suficiente hija, no soporto verte sin humanidad, es hora de que la recuperes
Aria fingió mirarlo con horror.
Aria: ¡no Klaus! ¡no me obligues a encenderla! ¡no lo hagas! ¡te lo pido por favor!
Klaus rió.
Klaus: que bien, sientes miedo, eso es una buena señal, aún sientes algo pero no te preocupes, ahora mismo recuperarás todos tus sentimientos
Aria lo miró asustada, usó toda la fuerza que tenía para conseguir que Klaus la soltara pero su padre era más fuerte. Klaus la miró con tristeza.
Klaus: no sé que te llevó a apagar tu humanidad en primer lugar
Luego la observó con seriedad.
Klaus: pero la recuperarás aunque no quieras
Aria gritó.
Aria: ¡no!
Klaus la acercó más a él y dijo.
Klaus: enciéndela
Aria vio como sus pupilas se dilataban y luego se contraían, pestañeó. Klaus la miró con atención, Aria mentalmente rió a carcajadas. Decidió alargar un poco más el teatro, sólo por diversión.
Inmediatamente derramó unas lágrimas falsas, Klaus le ofreció una sonrisa consoladora. Le acarició las mejillas con sus manos.
Klaus: tranquila bebé, ya pasó
Aria soltó un sollozo, Klaus rápidamente la abrazó. Le acarició la espalda con su mano y le dijo.
Klaus: shh... no llores amor, va a estar todo bien
Le dio un beso en la cabeza y la abrazó con más fuerza.
Klaus: te lo prometo hija
Aria sonrió maliciosamente, pensó que había llevado demasiado lejos la farsa. Era hora de darle a Klaus una sorpresita, empezó a reír. Su padre preguntó desconcertado.
Klaus: ¿Hope?
Aria repentinamente lo empujó, Klaus la miró confundido. Su hija esbozó una sonrisa maliciosa y a velocidad vampírica se puso detrás de la barra.
Agarró al camarero, que no se había marchado, y le quebró el cuello matándolo. Klaus la miró impactado, Aria empujó el cadáver arrojándolo al suelo y rió a carcajadas.
Aria: ¡sorpresa!
Dijo con una sonrisa radiante al tiempo que extendía los brazos.
Aria: no puedes hipnotizarme Klaus
Luego se encogió de hombros, escondió los brazos detrás de la espalda y dijo con una sonrisa malévola.
Aria: soy inmune a tu compulsión
Su padre la seguía mirando shockeado, no podía creerlo ¿qué estaba pasando? Aria se secó las lágrimas y comentó divertida.
Aria: joder, si que soy buena actriz, me salieron lágrimas de verdad ¿se me corrió el rímel?
Klaus volvió en si, preguntó sumamente anonadado.
Klaus: ¿por qué no funcionó?
Aria bostezó, se tapó la boca con la mano y luego dijo con una sonrisa.
Aria: hay un motivo pero tampoco tengo ganas de contártelo
Klaus la miró serio.
Klaus: dímelo ya mismo
Aria rió.
Aria: bueno, sólo porque me das lástima
Luego puso una expresión pensativa.
Aria: en realidad... no, no me das lástima
Volvió a reír.
Aria: no siento nada
Klaus se puso a velocidad vampírica delante de ella, le sujetó los brazos y la acercó a él de un tirón. La miró muy serio.
Klaus: dime ya mismo por qué no puedo hipnotizarte
Aria le dijo con mala cara.
Aria: ¿y si no quiero qué?
Klaus le soltó los brazos para sujetarle las mejillas.
Klaus: dímelo, por favor
Rogó desesperado, Aria rió a carcajadas.
Aria: okay, te daré una pista
Dijo divertida.
Aria: no puedes hipnotizarme porque tomé las medidas necesarias para evitar que lo hicieras, no soy estúpida, era más que obvio que cuando descubrieras que había apagado mi humanidad me ibas a hipnotizar para obligarme a encenderla
Klaus la miró más serio todavía.
Klaus: ¿qué clase de medidas?
Aria se zafó de su agarre y lo miró con mala cara.
Aria: suficiente información, no te diré más nada, no te daré detalles, sigue participando
Klaus sin previo aviso la atrapó y la colocó sobre su hombro, Aria no lo vio venir. Empezó a patalear y le golpeó la espalda con sus manos, Klaus dijo con seriedad.
Klaus: iremos ya mismo a la mansión y me contarás todo lo que pasó el día de hoy quieras o no
Aria gritó mientras lo seguía golpeando.
Aria: ¡bájame! ¡me estaba divirtiendo hasta que llegaste! ¡¿por qué tienes que ser tan malditamente aguafiestas?!
Klaus no le contestó, en lugar de eso desapareció a velocidad vampírica de allí con Aria en brazos.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top