Cuando dejó de sentir que el viento le azotaba la cara sintió como su pulso se aceleraba debido a los nervios. Abrió lentamente los ojos, temerosa de enfrentar a Klaus. Su padre la bajó y la miró con seriedad, Aria tragó saliva.

Klaus: antes de que entremos quiero hablar contigo a solas para dejar unas cosas claras

Aria se puso más nerviosa de lo que ya estaba, pensó "ahora se viene el regaño y luego la penitencia" otra voz le dijo "tú te lo buscaste al apagar el celular ¿qué esperabas? dijiste que luego te atendrías a las consecuencias, ahora no te quejes" la otra voz le dijo "lo sé pero en estos momentos quiero que me trague la tierra" Klaus la sacó de sus pensamientos ya que la había sujetado de los brazos y la miraba serio, Aria tragó saliva de nuevo.

Klaus: deja de divagar y mírame, necesito que me prestes atención

Aria nuevamente volvió a tragar saliva nerviosa, la mirada de Klaus era muy seria.

Klaus: ¿sabes cuánto tiempo me dediqué a buscarte hoy?

Aria: eh...

Klaus: ¿tienes alguna idea de las horas que estuve corriendo de un lugar a otro?

Aria no pudo soportar más la mirada de su padre y desvió la vista, Klaus le dijo con seriedad.

Klaus: te dije que me miraras

Aria lo volvió a mirar a regañadientes.

Klaus: creo que ya te estás imaginando que te busqué durante toda la tarde

Aria: s... si...

Klaus: bien

Y le dijo más seriamente todavía si eso era posible.

Klaus: vuelve a hacer algo parecido y no volverás a ir al colegio

Aria gritó con horror.

Aria: ¡¿qué?! ¡no!

Klaus: te advierto que lo cumpliré, no egresarás, te despedirás de tu último año

Aria: ¡no puedes ser tan estricto!

Klaus: si que puedo, soy tu padre

Aria: ¡pero yo sólo quería divertirme un poco! ¡tener un poco de libertad!

Gritó la primera excusa que se le vino a la cabeza para justificarse. En realidad eso no era cierto, nunca fue la intención de Aria desaparecer de Klaus. Fue un accidente.

Perdió la noción del tiempo hablando con Stefan pero Klaus no podía saberlo, no se imaginaba que podía pasar si lo descubría. Siguió con su actuación.

Aria: ¡soy una adolescente! ¡todos los adolescentes se escapan del colegio alguna vez!

Klaus rió divertido, sin embargo a los pocos segundos se volvió a poner serio y le dijo.

Klaus: no fomentaré la rebeldía, puedes irte olvidando de esas ideas que tienes de los adolescentes, no serás como ellos, tu te portarás bien aunque no te guste y aunque los demás no lo hagan

Aria soltó un sollozo, se sentía impotente. Recordó las veces que se había escapado del colegio con Thomas y Emily y nunca había tenido tantos problemas luego.

Eran incontables las veces que habían escapado, obviamente los habían retado pero... Klaus era diferente, no la dejaba hacer literalmente nada y lo peor de todo era que sus castigos eran excesivos.

La última vez que escapó pasó dos semanas sin poder salir de la mansión, odiaba que su padre fuera así. Si con sus padres adoptivos se podía fugar del colegio y soportar sus castigos luego, con Klaus podía despedirse para siempre de eso. Nada volvería a ser como era antes, ya ni siquiera podía escaparse del colegio.

Aria: ¡no te soporto Klaus! ¡suéltame!

Aria trató de zafarse de su agarre pero no lo consiguió, su padre la zarandeó ligeramente para que lo mirara. Aria dejó de forcejear y lo miró, tragó saliva otra vez.

Klaus: ¿sabes por qué soy tan estricto?

Aria negó lentamente con la cabeza y preguntó.

Aria: ¿por... por qué?

Klaus: el haberte perdido cuando eras bebé me dejó marcado por siempre, me traumó por lo que cada vez que no te encuentro me desespero, no soporto no saber en donde estás

Aria: Klaus...

Klaus: y lo que me pone furioso es que sabías perfectamente que no soportaría volver a perderte porque te lo dije varias veces y aún así no te importó desaparecerte todo el día, no te importó apagar el celular para evitar comunicarte conmigo, para que no te pudiera encontrar

Aria tragó saliva.

Aria: yo...

Klaus: habla

Le ordenó con firmeza.

Aria: es cierto pero...

Y soltó otro sollozo, miró el suelo mientras sentía como las lágrimas resbalaban por sus mejillas. Otra vez se había largado a llorar, pensó "que débil soy".

Aria: sólo quería divertirme

Klaus le soltó los brazos para sujetarle la cara con delicadeza y hacer que su hija lo mirara ya que ella estaba mirando el piso.

Klaus: no lo volverás a hacer

Le dijo serio, Aria lo miró.

Klaus: quiero que me digas que no volverá a pasar

Su hija suspiró.

Aria: de acuerdo, no volverá a pasar

Dijo con sinceridad, la verdad es que no se animaba a desafiar otra vez a Klaus. Si se iba a poner así cada vez que desapareciera de la faz de la tierra prefería no hacerlo, Klaus sonrió y besó su frente.

Klaus: así me gusta bebé

Aria por un momento se sintió más tranquila pensando que Klaus ya no le iba a decir más nada pero su tranquilidad duró poco, la siguiente pregunta que le hizo su padre la tomó desprevenida y sintió como si le hubiera caído un balde de agua helada encima.

Klaus: ¿qué hiciste todo el día si no estabas en el colegio? ¿dónde estuviste?

Preguntó de brazos cruzados y con la mirada seria. Aria tragó saliva preocupada, no le quería contar que había estado con Stefan por dos razones.

La primera... Klaus había reaccionado muy mal en el bar cuando la vio con Damon. Si se llegaba a enterar que también había estado con su hermano, que había pasado el día con él, que era su compañero de colegio.
Se enojaría mucho, es más, capaz que la cambiaba de colegio o peor.

No iba a ir más al colegio y la segunda... había hablado con Stefan de su pasado, eso incluía a Klaus. Aria era consciente de que a su padre no le iba a caer nada bien saber que ella ya sabía gran parte de lo que había pasado entre él y Stefan.

Aria pensó "meteré a Stefan en problemas si Klaus se entera que hablé con él de lo que pasó entre ellos, a duras penas me quiso contar lo de la maldición que rompió para convertirse en híbrido, si descubre que ahora sé lo que pasó luego de eso, las cosas que hizo no... no quiero imaginarlo" como Aria se estaba demorando mucho en contestar, Klaus le sujetó la cara con sus manos y le preguntó.

Klaus: ¿quieres que te hipnotice para que me lo digas?

Aria palideció, eso sería catastrófico. Rápidamente corrió la cara para zafarse de su agarre y retrocedió un paso asustada, escondió las manos detrás de la espalda y negó con la cabeza.

Aria: no... no será necesario

Klaus le sonrió con malicia.

Klaus: a mi me parece que si

Dio un paso más hacia su hija, Aria asustada y nerviosa retrocedió.

Aria: espera Klaus

Dijo extendiendo las manos para que no se siguiera acercando, Klaus se quedó quieto y enarcó una ceja. Aria pensó "este es mi momento, debo demostrar mis dotes de actriz".

Aria: está bien, yo... no quería decírtelo pero...

Klaus: ¿pero qué?

Preguntó Klaus mientras la miraba expectante, Aria suspiró.

Aria: rayos... no quiero decirlo porque meteré a alguien en problemas...

Klaus se cruzó de brazos y la interrumpió con impaciencia.

Klaus: dilo de una vez porque te hipnotizaré, esta vez no te lo preguntaré

Aria retrocedió un paso más y negó con sus manos.

Aria: ¡no! ¡espera!

Tomó aire.

Aria: te... te lo diré

Suspiró.

Aria: hoy me hice amiga de una compañera que se llama Susan

Aria dijo el primer nombre que le vino a la mente, justamente esa chica era la que la había tratado mal el día anterior pero por supuesto que Klaus no lo sabía.

Aria: ella es muy rebelde, me convenció para que nos escaparamos, yo acepté sin dudarlo porque quería divertirme como ya te dije

Klaus: entiendo pero ¿dónde estuviste? ¿a dónde fueron?

Preguntó con seriedad, Aria inventó lo primero que se le ocurrió.

Aria: nos fuimos al cine, vimos una película

Aria rogó que Klaus le creyera y que no la hubiera buscado en el cine, sería el colmo sino. Su padre se quedó mirándola fijamente durante unos segundos, segundos que para su hija fueron eternos.

Klaus: ¿y por qué ella no estaba en el bar dónde te encontré? ¿qué hacías con Damon Salvatore, uno de mis enemigos, ahí?

Dijo Klaus molesto, Aria se puso nerviosa. Se le estaban acabando las ideas, si se seguía demorando en contestar Klaus se iba a dar cuenta que le estaba mintiendo así que habló sin pensar, guiándose por su instinto.

Aria: ella me dijo que se hacía tarde, que debía volver a su casa, yo en cambio no quise hacerlo porque tenía miedo de enfrentarte Klaus, no me animaba a volver, sabía que ibas a estar molesto conmigo por lo que hice, quise hacer el mayor tiempo posible...

Klaus: muy mala elección, al hacer eso me hiciste enojar más, con cada minuto que pasaba más me desesperaba

Dijo Klaus acercándose a ella, Aria volvió a retroceder. Klaus impidió que se alejara más ya que la sujetó de los brazos y la acercó a él, Aria lo miró unos segundos. Tragó saliva y luego desvió la mirada.

Klaus: te creo pero no quiero que vuelvas a hacer algo así

Dijo Klaus con autoridad.

Aria: no... no lo haré

Aria se animó a mirarlo, se sentía más confiada, Klaus había creído su mentira. Pensó orgullosa"yo, Aria Benson, merezco un Oscar por esto".

Aria: ya te lo dije

Klaus: ¿puedo confiar en ti? no es la primera vez que escapas

Aria se zafó de su agarre y dijo despreocupadamente.

Aria: por supuesto, esta vez es diferente a cuando vivía en Nashville, cuando estaba allí escapé la primera vez porque me acababa de enterar que eres mi padre y que tenía que vivir en la mansión, obviamente no lo quería aceptar, quise volver con mi familia, la segunda vez que escapé fue porque me dijiste que tenía que venir a vivir a New Orleans, por supuesto que tampoco lo quería aceptar pero esta tercera vez... fue un motivo tan tonto, simplemente me quería divertir con una nueva amiga, vivir las aventuras que viven los adolescentes normales por un día, no volverá a pasar, además ya te dije que acepto vivir en New Orleans, comprendí que no me queda otra opción

Klaus rió a carcajadas, Aria se sorprendió por la reacción de su padre. Sorpresivamente, sin previo aviso, Klaus la abrazó.

Klaus: tienes razón hija

Dijo al tiempo que le acariciaba el pelo y seguía sonriendo.

Klaus: decidiré creerte, espero por tu bien que no vuelvas a escapar porque sino puedes despedirte del colegio

Aria tragó saliva nerviosa sin embargo dijo con firmeza.

Aria: no lo haré de nuevo Klaus, ya te lo dije, no volveré a escapar así que quédate tranquilo

Klaus: bien, así me gusta pero aún no me contaste que hacías con Damon en el bar

Aria suspiró.

Aria: nada, sólo estaba tomando...

Klaus se separó de ella y la sujetó de los hombros mirándola repentinamente molesto, Aria tragó saliva. Se acordó que Klaus la había visto en el bar con la botella de tequila en la mano, se abofeteó mentalmente por recordárselo.

Klaus: cierto que te vi con una botella de alcohol en la mano cuando te encontré, quisiste que no me diera cuenta y la lanzaste detrás de la barra

Aria tragó saliva, Klaus sonrió con malicia.

Klaus: pero te descubrí

Aria: prometo que no tomé mucho, sólo dos vasitos...

Klaus la miró serio, Aria hizo silencio por la intensidad de su mirada.

Klaus: no tienes permiso para tomar, tienes 17 años

Aria abrió los ojos sorprendida y luego rió a carcajadas.

Aria: por favor, no seas exagerado

Klaus no rió, al contrario, siguió mirándola serio. Aria borró la sonrisa que tenía.

Klaus: te estoy hablando en serio, no quiero que tomes

Aria se separó bruscamente de él.

Aria: ni que fuera una borracha

Dijo ofendida y enojada, Klaus rió. Aria enarcó una ceja.

Klaus: no digo que lo seas bebé sólo que no me gusta que tomes, aún eres muy joven

Aria: de acuerdo

Dijo Aria, no quería discutir más, sin embargo pensó "seguro que no voy a tomar, en tus sueños Klaus" su padre volvió a sacar el tema de Damon.

Klaus: ¿qué hacías con Damon Salvatore?

Aria rodó los ojos, estaba perdiendo la paciencia.

Aria: que pesado eres Klaus, yo nada, él vino a conversar conmigo sin embargo no pude hablar mucho porque entraste al bar

Klaus asintió.

Klaus: de acuerdo, más le vale que no se acerque a ti

Aria volvió a rodar los ojos. Klaus se acercó a ella y rodeó sus hombros con su brazo, la dirigió a la mansión.

Klaus: vamos adentro, en un rato tendrás que enfrentar a tu madre, a Elijah y a Rebekah, Camille no creo que te reclame nada, es la más buena de todos, tengo que llamarlos para avisarles que te encontré, ellos también te estuvieron buscando toda la tarde

Aria suspiró cansada y dijo en un susurro.

Aria: vida dame paciencia

Klaus la escuchó y soltó una carcajada, cuando entraron a la mansión Aria se sentó en un sillón y se puso a jugar con sus dedos mientras Klaus hablaba a los demás.

Ahora tenía que soportar los regaños del resto de su familia pero por lo menos ya había escuchado los de su padre, eso era un gran paso. Además Klaus había creído su mentira, algo que la hacía sentir mucho más aliviada.

No iba a meter a Stefan en problemas y no iba a meterse ella en problemas peores, Klaus la sacó de sus pensamientos. Estaba de pie delante de ella con los brazos cruzados y la mirada divertida.

Klaus: préparate hija, tu madre y tus tíos están en camino

Aria tragó saliva.