- † Reencuentro †
La mirada de kazuma era una que no entendía, las chicas que recordaba como un sueño.
A las que pensaba ver luego de mucho esfuerzo y posiblemente amenazar a todas las naciones.
Sus voces eran tales como las recordaba, recordándole que solo pasaron poco más de 3 meses.
Un momento de inconciencia que creyó fue provocado por el golpe que logró conectar su cabeza.
Su mente paralizada entró en razón cuando detectar enemigos le advirtió de que seguía en una pelea.
El reforzamiento mágico había hecho su propio efecto al ver que no cayó inconciente, si fuera él de antes bien pudo ser así. Por más que Mirsurugi sea un cliché, era un clase caballero con stads altos. Su fuerza podría estar cerca de la Darkness y un simple golpe de inocencia era algo que podria festejar.
Viendo al aún en el suelo, intentando detener el sangrado, Mirsurugi le dedicó una mirada de puro terror.
Hasta él momento había enfrentado muchas adversidades, pero siempre había tenido la opción de defenderse y atacar. Su superioridad era algo que él veía como natural.
El público se quedó en silencio sabiendo él destino del afamado héroe de Belzerg, Kyoya Mirsurugi
Su espada Graham clavada en el suelo, a una distancia que su mano no llegaría antes de lo que haría kazuma.
Sin ninguna sonrisa o expresión, Kazuma solo entendió que esté sería otro obstáculo que superar, un problema simple que resolver.
Sus pasos empezaron, caminando con ligereza en lo que fue el terror de Mirsurugi. Ese extraño le había cortado su mano dominante, su espada Estaba fuera de su alcance, no dejaba de perder sangre en lo que su cuerpo perdía fuerzas por la anemia.
Un solo pensamiento empezó en su mente.
"Voy a morir"
Este pensamiento no sería tan grabe, Él sabía que Aqua estaba ahí, pero su instinto se negaba a ese curso de ideas.
Antes había muerto, pero eran muertes rápidas, esté extraño no le daría algo tan fácil. Ni siquiera estaba corriendo, caminaba lento. Como si quisiera disfrutar del momento
Una vista diabólica en lo que encontraba que su instito de supervivencia lo dominaba. El instinto de querer alejarse del peligro, del dolor. El mismo sentimiento que siente un niño al quedarse en la oscuridad
Tenía sus piernas, con su mano izquierda intentando detener el sangrando corrió, corrió fuera del ring. Fuera de esa figura que lo era un villano, no era un monstruo.
Si fuera él primero podría encontrar el valor, valor para luchar. Si fuera un monstruo podría luchar contra su instituto de huida.
Lo que era, no era ninguno. Era como ver a un ollo profundo al cual no puedes luchar. solo caer y ser absorbido por una oscuridad.
Kazuma: sabes?.. me alegré de ver un viejo conocido.
Su tono fue suave en lo que fue imagen bizarra.
En lo que fue un instante su mente trabajo a su máximo nivel, Sacándolo de esa fantasía de héroes y dragones.
Mirsurugi: ¿K-kazuma?...
Su voz salió más débil de lo que tenía pensado, aunque esto pareció no importarle a kazuma, solo dedicando una pequeña sonrisa en lo que ofrecía su mano.
Ese acto le hizo instintivamente contestar, solo tomándose con su ahora muñón.
Kazuma: si, sólo suelta la bandera, nunca pudiste hacerme frente. Ahora no es diferente
El tono de kazuma fue amable en lo que solo añadía más extrañeza, un tipo de horror que estaba dirigido sólo al aspirante a héroe.
Mirsurugi solo hizo lo que le dijo, su mente solo queriendo que esto acabe.
Su única mano restante soltó el muñón, levantando su brazo en lo que para todos fue suficiente para saber que significaba.
Nadie pudo escuchar esté pequeño intercambio, pero él hacer rendir al popular Héroe de la espada maldita con sólo palabras, y hacerlo correr antes. Fue reconocido por todos
No con admiración como sería su lo hubiera vencido de la forma normal, el estilo de Kazuma no era uno voluminoso y heroico.
Atacaba a las articulaciones y hasta ahora mostró que la superioridad física era inútil com él.
Un estilo que buscaba sólo terminar de forma rápida, cortar las muñecas, el cuello. Los tendones
Dejando indefenso a su anterior oponente, que solo podía sentir la impotencia, la imagen apática era lo peor.
Ver gozo o satisfacción dejaría que entiendan, esa apatía implantaba una idea que los hacia sentir pequeños.
"No significas nada". Tus palabras, rogar. Luchar, no significan nada.
Para los civiles que nunca había visto la guerra o sangre, la imagen de la muerte. Siendo sólo la muerte, sin gloria, sin llanto. Sin emociones, una muerte que te abrazaba como la oscuridad
Las tres chicas solo vieron raro el comportamiento de su compañero de equipo.
En esté tiempo habían tenido que unirse que Mirsurugi para poder llevar misiones. Y no ser inútiles como lo llamaría Kazuma
Aunque para sorpresa de todos, solo una voz contenta rompió el silencio que había invadido a todos.
Alys: ¡Kazuma me aburro!
Fue algo tan tonto que saco una sonrisa en el nombrado.
Levantando su espada con simpleza, quito esa mirada apática, la pequeña sonrisa que lucía espeluznante cambiando a una relajada que recordaba mejor al aventurero castaño.
Kazuma: ¡tranquila amor! ¡Creo que ya no habrán más idiotas!
Dándole la espalda a Mitsurugi enfundó su espada, el héroe de la espada maldita soltando un suspiro que no sabía que contenía.
Pero aún peor estaban un trio de chicas que al fin distinguieron a su amigo. Todos lo habían dado por muerto, pero lo que más destrozó al equipo era la idea de no poder recuperar su cuerpo.
Fueron tres meses duros con el invierno Repentino y la princesa pidiendo la ayuda de Darkness que por ende a las otras dos.
Aunque intentaron mantener su imagen, Darkness sé lamentaba cada noche, cuando las distracciones del día no estaban para alejarla de sus pensamientos.
De como su amigo se sacrificó por todas, en lo que debió ser ella. De cualquier forma ella disfrutaría lo que seguro fue una tortura Antes de morir para su amigo y interes romántico.
Megumin resentia a Yunyun en lo que fue su primer trago, Con Darkenss demasiado deprimida para evitar que bebiera.
Aqua solo se encontraba vacía, en los que fue su primera pérdida, en toda su existencia inmortal esté grupo había sido lo más cercano a la familia que tendría.
Sabía que ellos morirían, pero podría sonreír al saber que vivirían vidas largas y plenas. Y que podría disfrutar con ellos
Seguir pidiendo visitarlos en el cielo, o en cualquier reencarnación.
La primera en romper esté momento, no pudo ser más que quien tenía una relación más especial que las otras dos con él aventurero.
Megumin: ...kazuma
Una palabra que igual que una gota de agua advirtiendo la avalancha de olas que terminarían en un tsunami que consumiría todo.
Pero para sorpresa de las tres, la primera en moverse y actuar fue una princesa que llevaba demasiado tiempo estresada por preocupaciones que una niña de su edad no debería tener.
Dando un salto desde el balcón donde observaba todo con la propia realeza Draconica en lo que debió ser una visita política.
Su pequeña figura cayendo sin ninguna dificultad en el suelo de al arena, corriendo a una velocidad que hizo palidecer a cualquier leopardo del mundo de Kazuma.
Como una esperanza, no lo pensó mucho en lo que solo buscaba encontrarse por la Persona que podría resolver todo. Que seguro podría concebir un plan para que todo termine bien.
Y aún más, la persona más importante en su corazón. Con ligeros matices que prefería ignorar por el momento
Kazuma sintió como auto esquivó se estaba actuando, volteando antes para observar esa figura nostálgica de una niña rubia, sus ojos azules cristalinos observándolo.
Y para mayor sorpresa de todos, el ahora conocido como kazuma recibió con los brazos abiertos lo que fue un derribo que lo hizo caer, teniendo la pequeña niña de rizos dorados encima.
Iris: Onii-sama te extrañe mucho.
Su voz salió en lo que parecía desahogar lo que debió ser una semana difícil. Sintiendo un alivio muy notable por su expresión.
Kazuma: Yo también Iris, pero..
El castaño apartó su mirada de la niña sabiendo como podría verse esto para el público.
Iris: ¿Pero?
De forma animada la princesa solo siguió encima de él, sonriente como ningún otro día en lo que dejaba que la túnica Negra de Kazuma evitará que su vestido se ensuciara.
Kazuma: tenemos una audiencia viendo.
Esto hizo sonrojar a la princesa, pero tampoco abandonando la posición en la que estaban, decidida a nunca más perder a Kazuma.
Iris: no importa Onii-sama, s-solo, porfavor volvamos a casa.
Esas palabras calaron en la mente de kazuma como la pregunta más difícil, ¿Casa?. Donde sería eso, en esté preciso momento eso sería con Alys y Jaiden.
Pero mentiría si dijera que no extrañaba a las chicas.
Que es un hogar
La princesa siguió viéndolo, esperando su respuesta con una mirada suplicante. Una mirada que evitó que Kazuma pudiera decirle una verdad que no le gustaría.
Kazuma: Y-yo...no puedo.
Era la verdad, sin tener que darle los detalles que estaban ligado a ellas.
Iris: ¿Porque?
Interrumpiendo el momento, unas dos figuras propias cayeron de la misma forma que la princesa anteriormente.
Con simpleza de forma ágil, como si caer de 30 metros de lo alto de donde estaba el público no fuera nada.
Zahariel: Princesa, es un gusto.
Dando una reverencia Simple el enmascarado procedió a levantar a Kazuma, obligándola a levantarse.
Alys: ¿Algo que decirme?
Mientras que Alys le dio unas palmaditas a kazuma en lo que le dedicaba una sonrisa siniestra.
Kazuma: solo un reencuentro, amor.
La princesa no entendía bien que lo estaba pasando, quien era esa chica y extraño. Porque su Onii-sama la llamo de esa forma ¿Era su novia? Eso estuvo haciendo en lo que estaba desaparecido.
Iris: O-onii-sama, ¿Quienes son ellos?.
Su mirada Bagó de la chica a kazuma, sintiendo un sentimiento amargo al pensar que ella era la pareja. O la persona que lo mantuvo alejado de ella.
Zahariel: Le daría mi nombre, pero soy más conocido como él Mago más fuerte de esté mundo.
Alys: estoy segura que conoces a mi padre, lo suelen llamar Rey demonio. Muy atemorizante ¿no?
Ambos lucían confiados en lo que debió ser una vista atemorizante para cualquiera. Excepto La asesina de Dragones.
Iris: ¿Onii-sama?
Kazuma entro en un bucle mental, el plan inicial era usar su nombre y conseguir una audiencia con la Reina de éste Reino. El país Draconico era el mas afectado por la guerra contra el Rey demonio, y ser su primer aliado sería una buen paso político.
Que no le creyeran su identidad y terminará peleando con 2 idiotas, uno conocido. No estaba en su mente, o que ese trio de inútiles y peor, Iris estuvieran aquí.
Se había dejado llevar por su irritación, siendo brutal con los que realmente lo molestaron.
¿Que pensaría iris?, y ahora Zahariel y Alys habían revelado su identidad para lo que debió ser una misión de emisarios secreta.
Había demasiado público viendo.
Kazuma: tenemos mucho que hablar, pero porfavor. No en esté lugar Iris
Su voz fue algo que no ayuda para la confusion de la pequeña princesa, intentando acercarse a Kazuma.
Siendo bloqueado por una sonriente Alys, que le dirigió una mirada aguda.
Alys: Oye tranquila, no soy celosa pero tampoco me gusta que una niña se apegue a mi novio.
Zahariel: ... colega, es una niña.
Kazuma: ¡no te inventes nada idiota!
Alys: ignorando eso. Es un placer conocerte Belzerg.
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