Después del abrazo, mi madre y yo desayunamos

Fui a cambiarme de ropa y mi madre a limpiar un poco la casa (ya que con su varita tardaba unos minutos). Me puse unos jeans, un jersey azul marino con la frase "never grow up" y unas vans azules. Y, sí. Mi ropa es muggle. Hay que admitir que se siente mil veces mejor llevar unos vaqueros con camiseta que una túnica de colores extravagantes. Bajé y fuí al salón con mamá.

Adler: ¿Puedes traer los polvos flu? Nos vamos ya a casa de Remus para ir después al callejón diagon a comprar lo que os faltan a ti y a Sabrina.

___: ¡Claro!- mi entusiasmo era notable. Vería a mi mejor amiga y a mis tios.Entré en la chimenea ya con los polvos flu en la mano y pronuncié alto y claro-: ¡Casa Lupin!- A l instante sentí los típicos sintomas de viajar por red flu, para ser asfixiada segundos después por los brazos de mi BFF.

Bri:(es el mote de Sabrina) ¡¡___!! ¡Cuanto tiempo sin verte!- dijo asfixiandome, mientras yo la asfixiaba a ella de vuelta.
R
emus: Claro, como solo os habeis visto hace cuatro dias...-dijo entrando al salón.

___: Yo también me alegro de verte lunático- dije sonriendole, para seguidamente (despues de soltarme de Bri), darle un abrazo y un beso en la mejilla.
Adler: ¿Me echabais de menos?- dijo mi madre saliendo de la chimenea de los Lupin.

Tonks: Adler, ¿como estas?- preguntó entrando en la sala- Hola ___, me alegra ver que mi hija no te ha asfixiado- dijo riendo y dandome un abrazo.

___: No, no lo ha hecho... Bueno, solo un poquito- dije ya riendo.

Despues del encuentro, nos fuimos al caldero chorreante, donde mi madre y los Lupin se pararon para saludar a un semi-gigante que acompañaba a un niño con gafas que se me hacia familiar.

Adler: Hola Hagrid, ¿qué tal estas?

Hagrid: Bien, acompañando al joven Potter en sus compras- al decir eso los cinco nos quedamos como en shock.

___: ¿Eres Harry Potter?- pregunté sin poder aguantar la curiosidad-

Harry: Si, soy yo. ¿Tu como te llamas?

___: Me llamo ___ Bla...Fox. Ella es mi madre, Adler Fox y ellos son mis tios: Remus Lupin y Nymphadora Tonks, y ella es su hija Sabrina Lupin- dije presentando a todos. Prefiero no decir mi primer apellido, dado a que Harry no conoce la verdadera historia de lo que pasó, puede pensar mal de mi en cuanto se entere por mentirosos- ¿Vas al callejón Diagon?

Harry: Supongo que sí...-

Remus: ¡Bueno! Me parece que tenemos que irnos a comprar las cosas, Hagrid. Un placer volver a verte, y un placer tambien haberte conocido Harry- dijo apresuradamente.

Despues de eso nos fuimos al callejón, concretamente, a Ollivanders, para comprar nuestras varitas.

Ollivander: ¡Ah! Las estaba esperando señoritas... A ver, ¿Quien va primero?

Bri: ¡Yo!- despues de probar como cinco varitas, encontró la suya: roble, pelo de unicornio, 27 cm.

Ollivander: Pues ahora veamos señorita Black, pruebe esta- dijo entregandome una varita, algo fea en mi opinion. La agité, y unos libros calleron de un estante-

Ollivander: ¡No! ¡Esa no!-así uimos con casi 8 varitas hasta que me tendió una que me llamó mucho al atención, y también la de mis parientes adultos. Era de un material color madera claro, con unos dibujos que se arrastraban por toda la superfície de la varita. La agarré y al instante sentí una coeriente eléctrica recorrerme todo el cuerpo.

Ollivander: ¡Aja! ¡Esa es! ¿Sabe que es lo mas interesante?

___: No.

Ollivander: Que esa varita, de madera alpina, pelo de unicornio, 28,5 cm, porta casualmente el mismo pelo de unicornio que la de su padre, y también las mismas inscripciones en la superfície.- me sorprendí bastante, y miré a mi madre, quien solo asintió con la cabeza con una sonrisa en la cara.

Ya terminadas las compras, cada cual se fué a su casa. Estaba en mi cuarto, cuando entra mi madre para hablar conmigo, ya que en la cena casi no habíamos hablado.

Adler: Cariño, quiero hablar contigo- dijo sentandose a mi lado. Yo estaba leyendo un libro muggle, Los juegos del hambre, (es mi libro muggle favorito).

___: ¿Qué pasa mami?

Adler: Quiero que de momento, no le digas nada a Harry en Hogwarts sobre que soy su madrina, tu su prima y menos que tu padre es su padrino... Tampoco le digas nada sobre Remus y Tonks, ya que si eso ya les diran ellos a Sabrina si puede decir algo.

___: Vale, lo entiendo. Él todavia no podría entender nuestra situacion.

Adler: Exacto- dijo ya sonriendo- si quieres, baja un rato con tu libro y luego sube a dormir.

___: Vale- dije ya levantandome, pero de repente todo era mas alto de lo normal, estaba en mi cama, pero ahora, era un perro negro.

Adler: ¡¡___!!¡Merlín! ¡¡Eres animaga!!- dijo impresionada.- Concentrate en tu forma humana-

Eso hice, y me volví a transformar en humana.

___: ¡¡Wow!! ¿¿Como es posible??

Adler: Supongo que lo heredaste de tu padre... El es animago-

___: ¡Genial!- dije feliz. Me encantaba parecerme a mi padre, cuanto más, mejor.