— ¡El Kaiju No.9 a aparecido! Repito. ¡Kaiju No.9 a aparecido!

La información rápidamente se extendió por los medios de comunicación. La preocupación del escuadrón se hizo evidente cuando los jadeos de miedo sonaron en todos lados.

Kafka había oído la nueva información pero la presencia del poder de su hija que sintió minutos atras le hizo saber que su intuición no era incorrecta. No pudo evitar pensar con enojo el nombre de su hija, Kamui desobedeció sus órdenes, eso le molestaba y preocupaba al mismo tiempo.

Lo siguiente que escuchó, fueron los detalles sobre la batalla que se desató entre su hija con otros Kaijus. La preocupación se hizo más grande, quiso moverse de su lugar para ir a salvarla pero también, se encontró en un dilema. Era salvarla y exponerse o confiar en ella y esperar los resultados de su batalla, claro que sí hacia el primero, el riesgo no solo es que él fuese descubierto, sino también su hija.

Kikoru una vez les había advertido: "Serán convertidos en armas".

Kafka esa vez imaginó el escenario de su hija sufriendo por los experimentos de las Fuerzas de Defensa en sus laboratorios, imaginó a su hija convertida en un arma de larga distancia y a Mina haciendo uso de ella.

Kafka sintió terror y ese mismo día al anochecer no se separó de su pequeña en ningún momento. Y es que Kafka es una madre como también un padre, es capaz de sentir el miedo en ambas posiciones.

De hecho, la preocupación de Reno no fue muy diferente. Ichikawa no quería que ninguno de los dos fuese convertidos en armas ya que para él, padre e hija eran importantes. En especial porque Kafka era su héroe y lo había salvado una vez, le debía la vida, también es su amigo. Con Kamui se había encariñado lo suficiente para soportar que fuese llamado "mamá" aún le disgustaba pero lo soportaba.

Kamui es consciente de que Reno no es su "mami". Conforme se desarrollo su conocimiento sobre los humanos, entendió quién era Reno y lo que era, así como entendía porque Kafka era su "papi".

Ella es una Kaiju, nacida del deseo y curiosidad de Kafka. Había nacido como una masa de carne fea con la forma de un bebé humano, el día de su nacimiento, Hibino la recibió entre sus brazos con terror y sin creer que de él había nacido esa cosa. Pensó en muchas formas para deshacerse de ella, incluso pensó que matándola sería la solución más fácil, sin embargo, el llanto desgarrador que vino del feto, le hizo saber que era una vida.

Una vida.

Vida que él mismo había traído al mundo y la razón por la que Kamui siguió existiendo. Pensando en esto, Kafka logra entender al menos un poco a aquellas mujeres que abortan los fetos no deseados, no puede evitar sentirse asqueado de si mismo, es tan inhumano.

Viéndose ahora, Kafka cree que no podría vivir una vida sin su pequeña Kamui. Puede que al principio no la quisiera, temía que Kamui se convirtiera en un monstruo al que debía deshacerse de él en el futuro o que incluso matara a los humanos en secreto. Muchos escenarios se había imaginado Kafka, más nunca creyó que la masa de carne fea se convertiría en un mini Kafka adorable.

Simplemente le robo el corazón a Kafka.

Kafka suelta un suspiro largo, cierra sus ojos tratando de concentrarse en sentir el centro de vida que comparte con su hija. Ella vive aún, se mantiene en pie peleando contra sus enemigos, Kamui se esfuerza y protege a Reno para que no reciba daño alguno.

Más tarde, Kamui acaba con ellos y se va. Kafka puede sentirla acercarse, sabe que se dirige hasta el Kaiju No.11. No duda en qué su hija es como él, impulsivo y suicida, no le importa su propia vida mientras el resto este bien.

De repente, no puede evitar sentirse orgulloso de su hija.

Kamui no es humana pero es su hija, él desea que ella siga siendo su hija por mucho tiempo o al menos hasta que él muera.

No sabe cómo será la vida de Kamui en el futuro, pero quiere y desea que esté a su lado siempre.

Kafka abre sus ojos y se da cuenta que la presencia de su hija a desaparecido, no está.

— ¡Kaiju No.11 ha absorbido a Kaiju No.9!

El miedo se apodera de Kafka y de inmediato corre con todas sus fuerzas.

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¡Hola! Gracias a todos y a todas por leer este nuevo capítulo. Espero les haya gustado y lo hayan disfrutado.

Nos vemos en la próxima actualización.