Hola, Mi nombre es Malica Homoro, cumplí los 22 años de edad hace un mes, Trabajo en este negocio familiar, una posada y antigua casa de mis abuelos a quienes les agradaba tanto como para, en su testamento, dejarla a mi nombre, con su muerte (la cual aun lamento) esta vieja casa de numerosas habitaciones fue ocupada por mi padre, Tormin, mis hermanas, Suni y Muru gemelas de 16 años y yo.

La idea de una posada fue propuesta por mi padre quien con entusiasmo veía el potencial que podía alcanzar y la necesidad de los viajeros por un lugar de descanso.

Actualmente mis hermanas y este hogar son lo único que tengo, eso y los vagos recuerdos de las veces que reía con mi padre. El no siempre estaba conmigo.

Prometí a mi padre cuidar de ellas cuando el no estuviera en casa y ahora que ha muerto esa promesa es un contrato.

Soy consiente del camino que esta tomando mi historia y lamento contarles algo tan deprimente, pero esto no es una carga para mi, esto es lo que me motiva a continuar. (No toleraría perder a alguien mas).

Continuare.

La posada, que hasta el momento tenia una estable autosustentable cayo abrupta mente con la muerte de mi padre, ahí fue cuando note mas que nunca cuanto lo necesitaba y como sus cortas visitas mantenían el barco a flote.

No podía seguir así, En mas de una ocasión pensé en vender esta casa, pero eso significaba que tenia que buscar otro trabajo, el dinero que ganaría no duraría por siempre y en este pequeño pueblo no encontraría una paga con la cual subsistir. Entre otra de mis opciones estaba pagar la entrada a ciudad Vereshin pero tras ver el monstruoso precio descarte esa idea, podría viajar a Schocop un pueblo fronterizo como este que con el tiempo creció lo suficiente para ser llamado ciudad.

Ninguna opción me parecía suficiente, el menor error y terminaríamos en la calle, un asalto en el camino, no encontrar trabajo, y la toma de poder sobre Schocop por parte de Vershin eran algunas de las inquietudes que me asaltaban esa tarde, atareada con planes, haciendo preparaciones y reducir presupuesto, decidí tomar un descanso, seguir significaba auto destruirme.

Arrastre mi silla a la tersara para contemplar el paisaje de Querhuas, era imposible no quedar maravillado con esta imagen: Publicito de rusticas casas de madera y piedra, paredes reclamadas por las enredaderas y el puente en cruz que unía las cuatro esquinas del lago central.

"Aun me sorprendes, vasta verte una vez para no querer dejarte, una calma que dice: "Todo esta bien"..."

"Muru y Suni solían jugar en ese puente... Es bueno que ellas tengan una vida tranquila, aunque me preocupa no poder ocultares la desastrosa situación."

Ella son muy parecidas, su extraño cabello naranja al igual que sus ojos en tono mas oscuro no es su único parecido, a ambas les gusta escaparse para hacer travesuras, son muy energéticas y siempre se les ve animadas.

Esa tarde luchaba por retener recuerdos felices, pero el destino es cruel, el me había torturado hasta ahora y no toleraba verme así.

Al bajar mi cabeza vi caminar hacia la puerta a Suni en muy mal estado, luchaba por cargar a Muru que tenia la ropa quemadas sucias y desgarradas, graves heridas en su rodillas, en los codos y dedos, moretones en todo su rostro y sangre mezclado con tierra en todo su cuerpo, como si esto no bastara, estaba completamente pálida y en su cuello una herida mostraba tenebrosas ramificaciones en negro.

Que idiota había sido, ¿como deje que esto pasara?.

Baje tan rápido como pude y tome a Muru en mis manos. Mientras atravesaba los largos pasillos sujetándola no pude evitar que mi mano toco su cuello, este no tenia pulso.

Entre pateando la puerta de la clínica, encontrándome dentro el sanador de la posada, al verme plancho la camilla con su mano ajorando algunos libros al suelo, la baje en ella  mientras pedía su ayuda.

Nos dijo que esperáramos fuera, lo que provoco que solo aumentara mi preocupación, caminaba de esquina a esquina peguntando que había pasado a Suni, Ella lloraba, cuando intento contestar solo balbuceaba, haciendo casi imposible entenderla.

Entre sus lagrimas, balbuceos y disculpas entendí : 

Ellas habían ido a jugar al bosque prohibido cuando fueron atacadas por un Sukura venenoso. Esta es una bestia demoníaca acorazada de muchas patas y con un aguijón en la punta de la cola, a pesar de no poder producir fuego, se siente muy atraído por el, seguramente se apodero de la fogata que hicieron y las ataco con ella, explicaría sus quemaduras.

Tres horas habían pasado, el sanador abrió la puerta señalándome que entrara, Suni, que marchaba detrás de mi fue detenida.

Al verla sonreír, sentada sobre la camilla, alzando brazo, por un momento todas mis preocupaciones desaparecieron, Con lagrimas corrí a abrazarla y afirmar así que era real. Quería decir algo, quería preguntarle tantas cosas, pero me fue imposible, solo pondría mas carga en ella.

El sanador se recostó en su sofá declarando cuanto le había costado, respiraba agitado pero aun así hizo un esfuerzo mas para hablar.

""

[Tuvo mucha suerte... Un "Shukura" no es algo a tomar en broma... su hermana reacciono rápido... hasta le quito la mayor parte del veneno... Increíble.]

El estaba al tanto de la situación, seguro Muru se lo dijo, eso o identifico el veneno. Tomando  fuerzas pregunte:

[¿Estará bien señor?]

[Tranquila, esta bien, solo hay que tomar medidas... Si las ramificaciones aparecen nuevamente, Tendrás que dejarla inconsciente rápidamente, en esta parte el veneno esta paralizado con la sangre y suprimido con mana, no afecta en su salud en este estado pero... Si las ramificaciones aparecen, déjela inconsciente hará que su sangre circule lentamente, luego dale estos.]

El me entro entrego un frasco de vidrio, dentro tenia muchas esferas blancas y celestes.

[Dos cada mañana, una antes de dormir, tres si tienes que dejarla inconsciente y si necesitas mas habla conmigo.]

[Si... ¿A que te refieres con dejarla inconsciente?, ¿Como?]

[Tendrá que golpearla, concentra tu maná en tu mano, luego golpea el origen de las ramificaciones, Este punto.] Dijo señalando el cuello de Muru.

[Golpearla... No puedo hacer eso.]

[Estamos hablando de su salud señorita Homoro.]

...

[Dile a su hermana que pase, seguro esta ansiosa hacerlo.- Dijo sonriendo y mirando hacia la puerta.]

al escuchar esto, Suni corrió a abrazarla, nunca me había dado cuenta de que nos estaba escuchando.

[¿Es...Estas bien hermana? dijo aun en sus brazos.]

[hehe...Como si no hubiera pasado...hermana...]

""

Nos retiramos a su habitación sin dejar de agradecer a quien la había salvado. En el momento no pude entender bien sus palabras, pero mas tarde me percate de algo, Suni había a retirado el veneno, era algo sin dudas excepcional, intente que me hablara de ello pero solo respondía " Yo solo sentí el veneno y lo saque" no pregunte mas, pues hablar de eso no le gustaba.

No se que vio ese día pero su rostro ante las preguntas mostraba una cruel mueca de amargura.

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Varios días habían pasado, vecinos y amigos del pequeño pueblo quería saber de ellas, insistían cada vez que me veían, no podía seguir negándome, ellas ya estaban bien. Como escusa, decidí hacer una fiesta para celebrar su recuperación, quizás esta seria la ultima en esta posada.

Que bonito ambiente, música, risas y pólvora el pueblo se estaba divirtiendo,  los comentarios sobre la carne que preparaba en la cocina que daba al patio me llenaban de entusiasmo, ya era la tercera vez que pedían mas.

 Por la ventana vi a Suni y Muru alardear de su ultimo trofeo, a la vista de todos en sus manos sostenían un pergamino extendido, me acerque mas para ver de que se trataba.

Que extraño era, Como titulo tenia tallado "Fusión Temporal" y debajo unas intrusiones de uso, que incluían extrañas poses.

[¿No estarán pensando hacerlo verdad?]

[Claro que si.] Respondieron al unisono.

[->Suspiro< ¿Nunca aprenden verdad?.]

Prestando poca atención a mi comentario empezaron a imitar las poses ante todos, No pudieron dejar escapar una carcajada por las extrañas poses yo igual lo hice

Seguían sonriendo Mientras las hacían,"Se están divirtiendo" pensé y regrese a lo que estaba haciendo.

Me alarme cuando una luz me cegó, segundos después el sonido de una explosión me hizo saltar.

Corrí a toda velocidad a la ventana y pregunte:

[¿Que fue eso?...}me sorprendí con lo que vi respondí. {No es posible...¿Funciono?...]

Debajo de la ventana se encontraba una niña de 12 años, su ropa era como la de mis hermanas, Un falda rallada color rojo claro y negro que llegaba a las rodillas y una blusa de color gris, sobre esta estaba una chaqueta oscura, Supe que pasaba cuando vi en su cuello esa cicatriz.

Al reaccionar miro al publico, su rostro estaba pálido, estaba muy asustada. Intento sonar valiente diciendo: [¿Qué pasa? ¿Tengo algo en el rostro?] pero su voz era extremadamente infantil. A cada segundo la notaba mas preocupada, no pude contenerme, dije:

[¿Estas bien?, Estas algo pálida,]

Se puso de pie y me miro fijamente, que hermoso es su rostro, que extraño el miedo en ella párese desaparecer, pero su piel sigue pálida.

...

La estoy mirando demasiado. Ella aparta la mirada y se concentra en su reflejo. Una vez mas llegue tarde a la situación, esas monstruosas ramificaciones se habían aferrado a su cuello.

Comencé a recargar mana en mis manos, perdonarme para dejarla inconsciente, pero a solo segundos de hacerlo dijo: [¿Por qué soy una niña?], No me detuve por lo extraño de la frase, seguí con la misión.

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