Siento que el capítulo anterior quedó muy corto, por lo que he complementado con este.

Mi cabeza da vueltas, es más, siento que no puedo abrir los ojos ¿estarán pegados?, o es que no tengo fuerzas para abrirlos.

Un aroma delicioso inunda mi nariz, ¿es sopa de pollo?, huele exactamente como la que hacía mi abuela, no recuerdo cuando fue la última vez que la comí.

Poco a poco abro los ojos. Los rayos del sol iluminan mi habitación bañándolo de un color dorado. Pareciera que está atardeciendo. Pero eso es posible, acababa de despertar, lo último que recuerdo es el sabor de mi bilis... Un momento, si eso es lo último que recuerdo ¿por qué estoy acostada en mi cama?

Salto literalmente de la cama, fue un grave error, si mi cabeza daba vueltas ahora mismo siento que se desprenderá de mi cuerpo.

-¿Se encuentra bien?, no debería haber saltado de la cama así, señorita June -una delicada pero preocupada voz proveniente de la puerta de la habitación.

Es ella, Elena.

-¿Qué sucede? , ¿Qué haces aquí? –Cuestiono, porque realmente estoy muy sorprendida.

-Lamento haberla asustado señorita June –se disculpa poniendo una bandeja con platillos humeantes en mi mesilla de noche.

-lo que sucede es que esta mañana se desmayó cuando estábamos en el baño, entonces la traje hasta acá ya que pasó todo el día inconsciente, enserio me asusté muchísimo señorita.

-No sabía qué hacer, entonces llamé a la señorita cristal y ella vino con un médico.

-Momento, momento. Paso a paso por favor –replico levantando las manos.

-¿Dices que pasé todo el día inconsciente? Y como si fuera poco pasó todo ese escándalo...

-Así es, creo que no era una simple resaca señorita, por poco y sufre de intoxicación. Por suerte ahora está mejor, el doctor dejó medicamentos.

-Qué vergüenza hacer este escándalo a mi edad. Me apena mucho haberlas preocupado –me disculpo tratando de ponerme de pie.

-No, no se levante, coma algo de sopa, no puede tomar el medicamento con el estómago vacío.

-De acuerdo –respondo y vuelvo a recostarme en la cama cuando de pronto recuerdo

-Dios... ¿no me digas que pasaste todo el día cuidándome? ¿Qué pasó con tus trabajos? –pregunto con preocupación.

-No se preocupe por eso, ya arreglé lo de mis trabajos, pedí permiso para asistir hasta mañana.

-¿No puedo creer que hayas hecho eso?, causarte tantas molestias, te prometo que te lo compensaré de alguna manera.

-No tiene por qué hacerlo, la verdad me asustó mucho esta mañana, pero me alegra que esté mejor –dice con una sonrisa cálida.

La verdad me cuesta trabajo creer que hiciera eso por mí, la verdad cuando la vi aquí sentí un poco de desconfianza pero no creo que tenga malas intenciones, estoy agradecida con ella. La verdad me aterroriza pensar que pude haber muerto ahogada con mi propio vómito, no quiero si quiera imaginarlo. Por eso estoy agradecida con ella.

Aunque mencionó que Cristal estuvo aquí, se reirá de mi cuando la vea, o aún peor puede que me regañe.

-¿Qué pasa?, ¿por qué no come?

Tan tonta, estaba hundida en mis pensamientos que casi me derramo la sopa encima –sonrío con un poco de vergüenza y me animo a probar la sopa.

Tal como lo imaginé, está deliciosa.

-Está muy buena ¿la hiciste tú? –me animo a preguntar.

-¡Sí!, cuando estaba pequeña veía que mi madre se la preparaba a mi padre cuando tenía resaca, entonces eventualmente aprendí a prepararla, me alegra que le guste.

Sigo degustando la deliciosa sopa cuando una duda me surge de pronto.

-Por cierto, ¿tú me cambiaste de ropa? –Porque estoy más que segura que no vestía esto antes de desmayarme, -pregunto viendo mi vestimenta, que prácticamente es una camiseta larga y unos shorts.

-Ahhh eso, si, sucede que su ropa estaba empapada de vómito, entonces la vestí antes de que llegara el doctor y la señorita cristal, lamento mi osadía al revisar su armario, pero no podía dejarla así –se disculpa juntando las manos exageradamente.

-No te disculpes, gracias por eso –replico, aunque la verdad me hace sentir un poco incómoda, ya que no sé si al pedazo de tela que llevaba puesto se le puede llamar vestido, además de que lo único que vestía además de eso era mis bragas. Genial, este probablemente ha sido el día más vergonzoso que he tenido.

Ella solo asiente evitando el contacto visual conmigo.

JAJAJA creo que se ha sonrojado, bueno creo que es normal, además de que creo que ahora estamos a mano con eso.

-Entonces si ya se encuentra mejor será mejor que me vaya, cuando termine de comer por favor tome su medicina –dice poniendo una caja de medicamento en la mesilla junto a la sopa y un vaso con agua.

-¿Tienes cómo llegar a tu casa o llamo un taxi?

-No se preocupe, iré caminando –responde con una sonrisa ¿es falsa o así sonríe siempre? – ¿por qué siento que es totalmente distinta a la chica que he fotografiado? No puedo asegurar nada pero siento que es realmente distinta.

-Pero ya anocheció, ¿irás a tu trabajo de entregas?

-Ehhh hace un rato llamé al gerente para decirle que mañana me presentaría ya que no sabía a qué hora despertaría, la señorita Cristal me pidió hacerme cargo de usted, parece que ella tenía que salir de la ciudad.

-Si es así, ¿por qué no te quedas?, la verdad me preocupa un poco que andes por ahí cuando está oscuro, puedes irte mañana temprano.

-¿No es una molestia para usted? –pregunta estrujando sus manos.

-Si hablamos de molestias esa soy yo, por mi culpa no asististe a tu trabajo, me sentiría más tranquila si te quedas –respondo con sinceridad

-Muchas gracias, está bien –responde tímida, al menos tendré compañía esta noche, aunque me duele demasiado la cabeza.