Hubo un tiempo en el que estaba dispuesta a darlo todo por amor, mi vida no siempre ha sido tranquila, cuando tenía 10 años mi madre murió de cáncer de huesos. No tengo padre, bueno eso digo, ya que ese tipo y mamá nunca se casaron, tengo una hermana mayor, ella me lleva aproximadamente 15 años, cuando mamá murió ese tipo se fue, mi hermana se casó antes de eso por lo que mis abuelos se hicieron cargo de mí.

Pero por desgracia mi abuela murió cuando tenía 18 años un 19 de abril, en ese tiempo Cristal y yo éramos amantes, si se pudiera decir así. Nos conocimos cuando entré a la secundaria, siempre estuvo conmigo, sin embargo, esa vez no lo estuvo y se convirtió en una fecha que nunca podré olvidar.

Después de que nos separamos nos volvimos a encontrar cuando tenía 22, estudiábamos en la misma universidad, aunque no en la misma facultad, yo estudiaba fotografía y ella administración de empresas.

En cuestiones de dinero nunca estuve mal, ya que mis abuelos tenían dinero y pudieron apoyarme cuando empecé la universidad, pude terminar mi carrera y abrir mi estudio de fotografía, desde entonces me está yendo bastante bien, tengo un trabajo que me gusta y montaré una empresa más grande en el futuro.

Cristal es la vicepresidenta de la compañía de su padre por lo que tiene un futuro realmente prometedor ya que es la heredera de la famosa compañía Sallow, y pronto se casará con un heredero segunda generación de una gran empresa extranjera.

Las cosas van muy bien, no tengo de qué preocuparme, aunque mi abuelo siempre me repite que quiere verme casada antes de morir no creo que eso llegue a suceder. Mis preferencias no importan en realidad, cuando era una adolescente estuve con Cristal y hasta ahora he salido con hombres y mujeres, aunque ninguna relación es duradera, Cristal y yo somos amigas de nuevo, aunque con sexo de por medio, no sé si mis sentimientos hacia ella se fueron por completo, pero ella se casará pronto, supongo que ella y yo no estamos destinadas a estar juntas después de todo.

La verdad es que no me gusta dormir sola, a mis 27 años aún siento miedo, la oscuridad y soledad me atormentan, tengo recuerdos borrosos de mi infancia, no creo que sean demasiado importantes, pero sí que tienen gran influencia en mi débil mente, no me dejan ser feliz del todo, siempre tengo pesadillas y la ansiedad se apodera de mi cuerpo, necesito dormir junto a alguien, quien sea, solo necesito sentir calidez en mi cuerpo.

Cristal está dormida, es cálida.

Ella es hermosa, quito un mechón de cabello de su cara y recorro sus labios con mi dedo, supongo que en el fondo me gustaría hacer lo que ella dijo, pero ella tiene un mejor futuro por delante, ella está bien, yo también lo estoy, no necesito atarla a mí de nuevo, nuestros hilos se rompieron hace mucho, no se pueden volver a unir, ella no pertenece estar a mi lado.

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A la mañana siguiente me levanté temprano para hacer el desayuno, son pocas las veces que lo hago, solo suelo tomar café y partir a mi trabajo, hoy que está Cristal aquí al menos le haré el desayuno.

Siento unos labios posarse en mi cuello y sonrío.

-Buenos días -susurra Cristal en mi oído.

-Buenos días bella durmiente, ¿acaso tienes resaca? -digo poniendo un pan tostado en mi boca.

-Agg maldita resaca, hace que sienta que mi cabeza se cae -rezonga sentándose en un taburete de la isla.

Le echo un vistazo a su atuendo y solo viste una bata, y claro que sus bragas en la única prenda que viste bajo la bata blanca semitransparente.

-Siempre dura poco tiempo, toma café, pronto estará el desayuno.

-¿Tienes que ir a trabajar hoy? Podríamos pasar el día juntas, quizá ir al teatro o al centro comercial.

-No se puede, tengo la agenda llena, tengo que estar allá antes de las 7 -respondo sirviendo la comida.

-El único día que estoy libre y tú estás ocupada, esto es una mierda -dice levantándose del taburete, siempre ha sido así.

-No es mi culpa, dime con anticipación la otra vez y me tomaré el día.

-De acuerdo, quizá pueda el otro mes, pero aún así vendré de vez en cuando, amo tu departamento, es cómodo, más que la casa de mi padre, me siento atrapada allá.

-Disfruta tu desayuno, me voy -digo tomando mi bolso.

-Maldición ¿no desayunarás conmigo? -grita desde la cocina.

-No olvides apagar las luces -grito desde la puerta y me voy.

Parece que el ascensor aún está en reparación, tendré que bajar las escaleras, aunque hoy si calzo zapatos deportivos -pienso feliz.

Me dirijo hacia mi trabajo.

La semana pasó con normalidad, siempre es lo mismo todos los días. Hoy quedé en verme con un hombre en un bar, entonces iré a casa antes de cambiarme, me despido de mis empleados y salgo de la recepción del estudio.

Me pregunto qué debería ponerme, quizá algo sexi o algo normal, lo que si sé es que me lo tengo que llevar a mi apartamento hoy.

Mis pensamientos se ven interrumpidos con el roce de la mano de alguien en mi hombro.

Parece que es la chica de la otra vez.

Hoy se ve diferente a la otra vez, no carga ningún abrigo solo viste unos jeans y una blusa de tirantes, es tan hermosa como lo recordaba.

-Señorita Garner. Buenas tardes, lamento venir sin previo aviso. He venido para cancelar la factura de la sesión de fotos.

Ah por supuesto que venía a eso, pero ya que no está registrada la base de datos tendrá que pagarme a mí y no a mi secretaria.

-Está bien, pasa a mi oficina.

Entramos y al llegar cierro la puerta.

-Es una niña hermosa, dice señalando a la bebé que cargo en brazos en una de las fotografías de mi escritorio.

-Si, es mi sobrina -respondo viendo su rostro, está curioseando todo a su alrededor, no la interrumpo y sigo viendo sus expresiones.

Al notar que la estoy observando se sonroja y carraspea. -Entonces aquí está el dinero en efectivo, puede contarlo para verificar que todo esté bien -dice entregándome un sobre de papel.

Mientras lo hago decido sacar un tema de conversación ya que parece un poco tensa.

-Toma asiento, le ofrezco -Parece que te fue bien, ¿le gustaron las fotografías a tu jefe? -pregunto

-Si, todo salió bien, de hecho, quería pedirle otra sesión, esta vez sí pagaré el mismo día -dice de inmediato.

-Ahh claro, no te preocupes, puedes agendarla con mi secretaria, parece que todo está en orden, si me disculpas tengo que retirarme -digo levantándome de mi escritorio.

-Disculpe, señorita Garner, ¿usted hará la sesión o la hará otra persona? -pregunta estrujando sus manos con nerviosismo.

-Depende el día y la hora en que la agenden.

-Si no es mucho pedir, me gustaría que usted la hiciera, como la vez pasada, verá me sentiría muy incómoda si alguien más ve o la hace, por favor.

Pienso, ¿está avergonzada? Pero si sube esas fotos a internet las verán muchas personas.

-Por favor, es que esta vez será un poco más atrevidas, para ser sincera son fotos al desnudo -dice con la mirada baja.

Vaaya, para ser una chica tímida es atrevida.

- ¿Para cuándo necesitas las fotos? -pregunto recostándome en el escritorio enfrente de ella.

-Ehhh la otra semana -responde de inmediato.

-Pues sería después de horario normal entonces, pero no estoy segura de que día quedaría bien.

-Le puedo dar mi número de teléfono, cuando usted crea conveniente me llama para venir, no se si usted tiene inconvenientes.

-No, está bien así.

Apunta su número de teléfono en una notita, se despide y se va.

Será interesante la sesión entonces, me pregunto el motivo de porqué lo hace, digo se ve demasiado tímida, casi como si lo hiciera por obligación.

Alejo esos pensamientos de mi mente y me dirijo casi corriendo a mi apartamento.