"...Todo lo que hice fue por amor...un amor posesivo...un amor enfermo...un amor malvado..."

Rei cabalgaba con todas sus fuerzas hacia el palacio donde se encontraba Darien, no lo podía creer, lo que le comentaba su princesa era una tierra de oro, hermoso, y bello, ahora todo estaba reducido a ruinas, explosiones y sangre, su desesperación aumento al ver que del castillo salía humo, era realmente una mala señal, sin embargo, además de todo lo que estaba pasando, ¡no tenia nada con que defenderse! Solo un arco y flechas que había tomado por casualidad, recordando pobremente lo que le había explicado Serena

-si tan solo la hubiese escuchado...-suspiro algo divertida, al reconocer que a veces no la escuchaba, simplemente se dedicaba a suspirar para luego ver a Darien en los enfrentamientos simulados con sus compañeros a modo de entrenamiento-¡pero lo lograre!-se afirmo así misma, decidida para seguir el camino directamente a salvar a su hombre mas amado

Por otra parte, Darien luchaba contra su padre con todas sus fuerzas, la rabia, la ira salía a cada poro de su ser, la venganza su modo de seguir peleando, ¡era el maldito pasado! Su único impulsor, desgraciadamente gracias a eso no trato muy bien en un principio a su hermana menor, quien la creyó que tenia todo, sin embargo, también estaba sin amor en un paraíso de cristal, incluso dudo de su mismo esposo quien la trataba de maravilla, hasta que entendió que la joven doncella dorada era amada por el peli plateado

-¿Qué tanto piensas, imbécil?-pregunto Endymion, arrogante y cansado

-que soy afortunado

-¿afortunado dices?-pregunto con burla –no veo el motivo

-si lo hay-choco la espada contra él- mi hermana, mi cuñado y los muchos amigos que he hecho a lo largo de mi vida

-no me hagas reír – grito tratando de darles estocadas- son estupideces

-¿acaso nunca te has sentido amado, padre?-le pregunto nuevamente haciéndolo silenciar al instante ante aquella pregunta

-tu madre...-pronuncio, recordando las muchas veces que la hizo llorar, incluso cuando la separo de Darien, podía ver que la luz de sus ojos se apagaba lentamente hasta que nació Serena , aunque no fue la misma persona desde que la separo de su primogénito –yo la amaba

-¡mientes! ¡tu solo te amas a ti mismo!-Darien le ataco directamente -¡maldito!-le ataco con tanta fuerza que lo hizo caer hacia atrás soltando la espada lejos de él, dejándolo totalmente indefenso-es hora de mi venganza padre-pronuncio el peli negro, en ese momento Rei llegaba al lugar en donde se encontraba viendo la escena desde un balcón cercano

-no...-pronuncio ella al ver lo que se le aproximaba al peli negro -¡Darien!-le grito sin embargo no le escuchaba

-adelante mátame-dijo Endymion con orgullo -¿Qué le dirás a Serena cuando se entere?-sonrió con sarcasmo

-que hice justicia...-dijo alzando su espada para darle el golpe final, no imaginándose que tras de él, un hombre se aproximaba para atacarlo por la espalda -¡muere!

Bummm

-¿eh?-Darien volteo al sentir el viento rozar sus mejillas, para mirar tras de él, como el hombre cayó abatido gracias a una letal flecha que provenía de la joven desde el próximo balcón

-¡Darien!

-¿Rei?-pregunto sorprendido, al verla allí, mas aun ver el rostro de su padre quien podía ver la decepción de su plan fallido –eres un maldito-escupió hacia él-no vales nada, padre –alzo su espada finalmente para dejarlo atrapado entre sus prendas en el suelo sin tener la posibilidad de salir, ya que el lugar se estaba derrumbando- te dejare aquí, no me manchare las manos contigo, si vives bien si no, ni si quiera sentiré lastima por ti- sin mas tomo su capa para retirarse cerrando la puerta, no paso mucho tiempo donde se encontró con la joven doncella corriendo hacía él con todas sus fuerzas abrazándolo del mismo modo

-¡Darien! ¡que alegría!

-¿Qué haces aquí, Rei?

-¿Qué hago aquí? ¡quería salvar al hombre que amo!-le grito -¿acaso es poco?

-¿me amas?

-¡claro!-dijo ruborizada-yo...bueno...eso-ambos se miraron por unos segundos para juntar sus labios de manera desesperada, uniéndolos de una manera pasional e intima, olvidándose por unos instantes que se encontraban en medio de una batalla

-yo también te amo, Rei-ella sonrió dulcemente

-si sobrevivimos quiero casarme contigo –dijo la doncella, mientras que él, solo beso sus manos en aprobación

-es una promesa-contesto-hay que rescatar a mi hermana

-si

Mientras tanto...

Serena descansaba sobre el lecho nupcial, su embarazo se había complicado mas de la cuenta, sumándose a la travesía que tuvo que hacer para llegar a salvo al ducado, había sido un milagro que aun seguía con fuerzas antes de caer inconsciente hasta el momento, abriendo sus ojos ligeramente para ver a ambos soldados de confianza que tenia en su habitación enviados por su marido, solo que no se imaginaba que Nicolas sacada un puñal y le diera una estocada letal a Andrew quien no pudo si quiera defenderse ¡era un traidor!, presa del susto y el miedo, fingió seguir dormida, para ver como ser adelantaba hacia la puerta de la habitación dejando entrar al hombre quien le causo mas daño en la vida de su esposo, Artemis y Beryl, fue allí su reacción mas rápida para huir hacia el balcón, sintiéndose acorralada

-¡Diamante! ¡Diamante! ¡auch!-grito lo ultimo cuando es jalada del cabello por Beryl, dejándola caer sobre la cama nuevamente, mientras que Serena trataba de no golpearse en el vientre a toda costa, ahora si la rubia sentía un miedo inmensurable, sabia lo que era capaz de hacer aquel hombre quien compartía la sangre con su marido, aunque eso no lo definía como persona, este le miraba con ojos profundos, oscuros y aterradores

-con que tu eres el corazón de mi hijo, vaya, vaya...-pronuncio el peli blanco sin apartar la mirada de encima

-haz lo que quieras con ella, se lo merece-pronuncio Beryl-no me importa si pierde el bastardo que lleva en su vientre

-¿estas embarazada?- pregunto Artemis-eso es nuevo-lo que no se esperaban es que Serena en un impulso le lanzo un florero de cristal directamente al rostro de Beryl, cortándole la piel al instante y gracias al impacto la dejo inconsciente

-¡maldita estúpida! ¡Beryl!

-eso me gusta, las chicas fuertes –el hombre se cruzo de brazos -¿sabes quien soy?

-claro que lo se-pronuncio desafiante-el padre de Diam y no solo eso, el poco hombre que envió a violar y matar a su madre ¡maldito!-la atrapo del cuello soltando un leve quejido

-escúchame bien niña, no me interesa si estas embarazada o no, tu sabes lo que soy capaz de hacer, hay un gran ejercito fuera de esta habitación para hacerte abortar con todo lo que te van hacer, todo eso depende de mi humor

-in...infeliz...-pronuncio con dificultad, alzando la mano amenazándola con propinarle una cachetada, solo que se detuvo a milímetros de propinársela al ver sus ojos

-¿Qué...esos ojos...-la soltó levemente, cuando ella tosió con fuerza para recuperar el aliento, alejándose de ella lentamente-¡no puede ser! ¡tu estas muerta! ¡muerta!

-¿Qué...-pronuncio ella sin entender lo que pasaba, sin embargo, Artemis podía ver a Luna en lugar de Serena

...no te perdonare...

...te odio...

...jamás te he amado...

-¡Luna! ¡Luna! ¡por favor perdóname! Por favor...necesito que me perdones...

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¡CHICAS ESTAMOS A DOS CAPITULOS DEL FINAL! jijijiiij ¿seran felices? ¿sera un final triste?, todo puede pasar, gracias por acompañarme a esta hermosa historia, mil abrazos!!!

proximamente............................Capitulo 32 Enfrentamiento...